lunes, noviembre 19, 2007
Educar y educarse bajo el punto de mira de un fusil
¿Se imagina alguien de ustedes que a pocos metros de la puerta de su casa haya un puesto de control militar y que cuando sus hijos vayan a la escuela los soldados los registren, retengan y humillen? ¿ Se imaginan a sus hijas de camino al instituto o la universidad teniendo que levantarse o quitarse la ropa ante los soldados para demostrar que no llevan explosivos pegados al cuerpo?. ¿Se lo imaginan un día tras otro, todos y cada uno de los días?
¿Se imagina algún vecino de cualquiera de nuestros pueblos o ciudades que después de que el municipio, con mucho esfuerzo, haya construido una escuela con los correspondientes permisos se publique una orden que lo revoque y llegue el ejército y la derribe?
Estas situaciones no son supuestas. La verdad es que se dan y se repiten desde hace muchos, demasiados años en la Palestina ocupada por Israel.
La Asociación para la Cooperación con el Sur, ACSUR-Las Segovias, inicia, conjuntamente con las Redes Palestinas Contra el Muro del Apartheid, una campaña de información que sirva para concienciar al público y exigir a la comunidad internacional un compromiso decidido y firme con el cumplimiento del Derecho Internacional y de las Resoluciones de las Naciones Unidas para que estas situaciones pasen de una vez por todas a la historia. En el momento en que escribo estas líneas, las autoridades israelíes de ocupación han impedido la salida del coordinador de la sección de juventud de Stop The Wall, Mohamed Othmann, por el puente de Allenby, única vía de entrada y salida a Cisjordania para los palestinos que viven en los Territorios Ocupados. Le acompañan dos estudiantes universitarias palestinas, Sama Afeef y Aghsan Barghouti, que han colaborado en la elaboración del informe Educación Bajo la Ocupación, del que en este momento estamos haciendo 4.000 copias. Esperemos que las gestiones de ACSUR ante las autoridades den sus frutos y podamos contar con los tres en Barcelona, Tarragona, Murcia, Valencia, Madrid y Baleares, para que puedan presentar la publicación de este magnifico informe que, con rigor y tesón, han elaborado estudiantes palestinos y palestinas de Cisjordania.
El Informe, dividido en tres capítulos, analiza y retrata el calamitoso efecto del Muro del Apartherid, asociado al plan de carreteras y asentamientos de colonos y la cantonización de Cisjordania en el sistema educativo, vulnerando derechos humanos básicos de la población palestina que vive la más larga ocupación en la historia.
Describe con testimonios la segregación racial a la se ven sometidos los estudiantes palestinos, ciudadanos ( de segunda) de Israel, dentro del estado judío. En el capítulo final, tras un análisis de cuatro décadas de lucha juvenil, propone y reformula formas de resistencia activa, a la vez que convoca a la solidaridad internacional. Desde ACSUR vamos a contribuir a que los actos de esta delegación juvenil sean una buena fuente de información y con ellos denunciaremos la situación de apartheid israelí contra la población palestina.
Así mismo nos comprometemos a hacerle llegar un ejemplar a nuestro Ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, así sabrá que su "apoyo absoluto y total" a Israel va unido a la ocupación israelí que viola derechos humanos tan elementales como el de la educación y protección de la infancia, por citar solo dos de una larga lista.
Carlos Sanchis es miembro de la Junta Directiva de Acsur-Catalunya
«Unión Penosa»
Lurdes Imaz
Estas vacaciones he madrugado más que nunca. Y no porque haya querido sacarme un dinero extra, sino porque decidí irme a Nicaragua, un país sumido en una grave crisis energética con cortes diarios de luz y de agua de hasta 12 horas.
Los recientes acontecimientos me han hecho recordar los madrugones para conseguir las últimas gotas de agua que salían de la «paja», las esperas para quitarme de encima las consecuencias de un sol atroz y la cocina invadida de recipientes con agua.
Pero sobre todo he recordado la impotencia de las mujeres que ya no pueden sacarse unos pesos lavando la ropa de sus vecinas, las que venden gaseosas en el mercado y han visto reducidos sus ínfimos ingresos por la subida del precio del hielo, la rabia de pagar las facturas de un servicio no recibido a 30 dólares mensuales en un país en el que el 80% de las familias sobrevive con menos de dos dólares al día, y un sinfín de desgracias diarias por la falta de las necesidades más básicas.
Hace siete años Unión Fenosa se hizo con la red de energía de Nicaragua a precio de ganga y en estos años ha subido la factura eléctrica en no menos de un 110%. Los beneficios de esta transnacional española han aumentado en un 39,8% en 2007 y tiene la desfachatez de dedicar su Día Solidario a convocar ayudas para proyectos sociales en Nicaragua. ¡Sinvergüenzas!
El partido de Lula relaciona la figura del Rey con el fascismo
El Plural
El partido de Lula que se ha mantenido, hasta el momento, relativamente alejado de la política populista de dirigentes como Chávez, adquiriendo una actitud más próxima a los principios del socialismo democrático, lanza ahora un guiño al presidente venezolano criticando al Rey del España y recordando que “la República española fue aplastada por un levantamiento fascista, que restauró la Monarquía”.
“Imposible oír callado”
El secretario de Relaciones Internacionales, Valter Pomar, es quien firma el artículo mencionado en el que, según publica El País, sostiene que "nadie está obligado a concordar con el estilo de Chávez, con la reforma constitucional o con el socialismo bolivariano, pero es imposible oír callado a cierta gente posando de demócrata, acusando al gobierno de Venezuela de ser dictatorial por estar proponiendo la reelección ilimitada o por haber cerrado un canal de comunicación”.
Enorme repercusión
El artículo de Valter Pomar sorprende porque la línea seguida por el partido de Lula ha coincidido, hasta ahora, más con la política de países como Chile o Argentina, pero sirve como muestra de la enorme –y, posiblemente, preocupante- repercusión que las palabras del Rey con el ya famoso “¿Por qué no te callas?” a Hugo Chávez han tenido en Iberoamérica.
Reacción indignada de los medios
En este sentido, cabe destacar también las palabras de Valter Pomar sobre el tratamiento del asunto en los medios de comunicación que según señala "en términos de espectáculo, nada se compara con la reacción indignada con que ciertos medios se hicieron eco de la frase que el Rey de España dirigió al presidente Chávez, durante la cumbre Iberoamericana".
Tras un levantamiento fascista
Pomar agrega en su artículo que, "para quien no se acuerde, la República española fue aplastada por un levantamiento fascista, que restauró la Monarquía. Después de la muerte de Franco, Juan Carlos fue coronado y desempeñó un papel, como mínimo, controvertido" en el proceso de democratización de España.
“El sueño de mucha gente”
La “inmensa repercusión” de la frase del Rey a Hugo Chávez –que considera “una bronca compuesta de cinco palabras"- la achaca a que “callar a Chávez es el sueño de mucha gente".
Aznar impulsa una campaña para sabotear la alianza de pueblos latinoamericanos
Este fin de semana, en Guatemala, rehusó hacer comentarios sobre las acusaciones del presidente venezolano de que fue cómplice en el golpe de Estado de 2002 en el país sudamericano.
El gobierno boliviano denunció hoy una campaña internacional impulsada por el ex presidente del gobierno español, José María Aznar, para sabotear la alianza integradora de los pueblos latinoamericanos.
Juan Ramón Quintana, ministro boliviano de la Presidencia, acusó a Aznar de conspirar contra los presidentes Evo Morales, de Bolivia; Hugo Chávez, de Venezuela, y Fidel Castro, de Cuba.
Quintana destacó reportes periodísticos, según los cuales José María Aznar afirma que usará la Fundación Análisis y Estudios Sociales, dirigida por él, para debilitar a los gobiernos contrarios a su línea política.
De acuerdo con dicha nota, publicada por el periódico español La Razón , la fundación pretende sabotear el auge de la izquierda en América Latina mediante la divulgación de sus tesis neoliberales.
Desde enero de 2006, la fundación de Aznar promovió encuentros, seminarios, becas, publicaciones y actos públicos, todos coordinados por el opositor Partido Popular (PP).
Esa fuerza política se negó a recibir al presidente Morales a principios de 2006, por considerarlo “elemento indigenista no deseado”, preludio de su complot contra la oposición boliviana, recientemente denunciado por Quintana.
Este acusó al PP de financiar la subversión interna en Bolivia, particularmente en los departamentos que ganaron el referéndum autonómico.
Quintana anunció que en los próximos días el gobierno boliviano divulgará los detalles sobre dicha confabulación, con pruebas irrefutables sobre el papel sedicioso de Aznar.
En este contexto ocurrió el viaje a España de los prefectos Rubén Costas, de Santa Cruz, y Mario Cossío, de Tarija, para reunirse con líderes conservadores de la nación ibérica.
Este fin de semana Aznar declinó en Guatemala referirse a Chávez, tras la denuncia que hizo el venezolano sobre la complicidad del ex presidente en el golpe de Estado de 2002 en Venezuela.
“No voy a dar alimento a aquellos que quieren hacer escándalo”, manifestó Aznar al matutino Prensa Libre, durante la visita que realizó al país para presentar en la Universidad Francisco Marroquín, de Guatemala, un análisis titulado América Latina: agenda de libertad .
Esta es la primera vez que Aznar alude al tema tras la Cumbre Iberoamericana, celebrada la semana pasada en Santiago, según el rotativo.
Para el ex mandatario español, América Latina corre el riesgo de ser envuelta por “ideas caducas” emanadas del “socialismo del siglo XXI”, que según Aznar es heredero del socialismo del siglo XX.
Durante la presentación, el ex mandatario exhortó a los partidos políticos de centro a unirse para defender los valores liberales.
Texto relacionado:
Aznar anuncia que utilizará su Fundación en España para combatir a Chávez, Castro y Evo Morales
Pascual Serrano
06-01-2006
Juan Carlos y el franquismo
El incidente ocurrido en la Cumbre Presidencial de Chile es insólito y desconcertante. Nunca antes un Jefe de Estado se atrevió a regañar a otro como si fuera un párvulo, con evidente descortesía y ordinariez. Fue una actitud de zafiedad, aspereza y chabacanería que a todos sorprendió. Hasta ahora Juan Carlos se había caracterizado por su actitud cordial, su buen humor, su afabilidad que trataba de limar enconos y buscar un clima de concordia en el campo diplomático. Súbitamente se le vio descontrolado, irascible, frenético. ¿Qué fue lo que desató su intemperancia?
El presidente Chávez acusó a Aznar de fascista, lo cual ha sido admitido hasta por el propio líder del Partido Popular, un legado histórico de la Falange Tradicionalista de Franco. Chávez no insultó a nadie, no le faltó el respeto a ninguno, simplemente realizó una definición realista y verdadera: Aznar es un fascista; eso lo saben todos. Al irritarse el Rey demostró su solidaridad con el franquismo y sus sucesores: Aznar y compañía.
El compromiso de Aznar con el gobierno de Bush, su envío de tropas a la bestial guerra neocolonial en Irak por el petróleo del Oriente Medio, contribuyó a su desprestigio. Aznar se empeñó en desconocer la voluntad del 90% de los españoles que desaprobaban su aventura guerrerista, su entrega al servilismo más indigno.
El vasallaje de Aznar a Bush lo llevó hasta a organizar giras de reclutamiento por México y Centroamérica para engrosar las tropas de ocupación yanqui en Irak y fomentar el sometimiento al imperio. Significativa fue la negativa de Aznar a responder la definición que le solicitaba el diputado Llamazares sobre su postura ante el franquismo y el alzamiento falangista de 1936. Tácitamente confesó su adhesión ideológica a la dictadura que ensangrentó España con un millón de cadáveres. Cuando el país gallego recibió la catástrofe ecológica de la marea negra con el naufragio del vapor Prestige, Aznar se desentendió del calamitoso desastre. Ni siquiera accedió a visitar de inmediato las áreas afectadas. La arrogancia nepotista de Aznar le llevó a postular a su mujer para un cargo público y esa misma soberbia insolente le condujo a celebrar la boda de su hija en la capilla real del palacio del Escorial, queriendo con ese gesto prepotente igualarse a la monarquía a la cual sirve. Juan Carlos tampoco está lejos del franquismo. Su padre, el pretendiente Don Juan, tras la Guerra Civil, se entrevistó en tres ocasiones con Franco. La primera, en 1948, fue para la vuelta del entonces príncipe Juan Carlos a España; la segunda, en 1954, para discutir los estudios militares, y la tercera, en 1960, para los estudios civiles del actual Rey. Franco designó a Juan Carlos como su sucesor y lo preparó ideológicamente para desempeñar ese papel. Juan Carlos, se percató que solamente una monarquía parlamentaria tendría posibilidades de sobrevivir en un país agotado tras tantos años de dictadura pero nunca se alejó de la base absolutista del falangismo.
Ahora el pueblo español está dando señales de creciente republicanismo. Los retratos del rey son quemados en las calles. La vida regalada de sus hijos es denigrada en caricaturas y chistes. Hasta se está produciendo una crisis familiar: su hija Elena de separa de su marido, el “souteneur” Marichalar. Es lógico que todo eso esté desestabilizando a Juan Carlos hasta hacerle perder los controles y atreverse a mandar a callar a un Jefe de Estado en una reunión internacional.
Lo más sorprendente es que la prensa española ha elogiado la incivil actitud del Rey y destacan la cumbre como un éxito de España, en lugar de analizar el descrédito en que se ha sumido la jefatura del Estado. Chávez ha logrado despertar las expectativas populares y ha acumulado votaciones extraordinarias en diez elecciones sucesivas que indican el inmenso respaldo con que cuentan sus proyectos revolucionarios y de beneficio social El poder del pueblo está consolidado. En nuestro continente prevalece una extendida simpatía hacia la república bolivariana, su pueblo y su gobierno. El gobierno español ha sido incapaz de comprender esto, como tampoco entiende el cambio radical que se está operando en América Latina y cree que sus antiguas colonias constituyen aún el traspatio servil de Estados Unidos.
Unidad contra el fascismo
Angeles Maestro
La masiva concentración que ha tenido lugar hoy en la Puerta del Sol de Madrid marca un hito en la construcción de un indispensable sujeto político antifascista, y también de clase, de la nueva clase obrera joven, precaria y solidaria.
Que algunos miles de personas, en su abrumadora mayoría jóvenes, hayamos conseguido superar el miedo, destruyendo con nuestra presencia el indecente discurso de la criminalización y hayamos impuesto el derecho de manifestación, impidiendo y reduciendo la presencia fascista a los pocos que no han conseguido manifestarse, supone un paso que puede ser decisivo en la constitución de la voluntad política antifascista y anticapitalista.
El asesinato de Carlos, vecino de Vallekas, y el apuñalamiento de Alejandro, vecino de Carabanchel, el posterior ensañamiento de la policía contra los jóvenes antifascistas, junto a la brutal criminalización del movimiento antifascista y de organizaciones de izquierda ejercido de forma indecente por todos los medios de comunicación del sistema, pretendía reducir el asesinato a un asunto de enfrentamiento entre bandas y legitimar la ley y el orden, impuesto por la "política antiterrorista".
Hoy todo eso se ha pulverizado, de la única forma posible, con miles de personas en la calle haciendo creíble y dando cuerpo con sus gargantas a los gritos de "No pasarán", "Madrid será la tumba del fascismo", "Nativa o extranjera, la misma clase obrera" y "Lo llaman democracia y no lo es".
La evidencia de la vinculación de las organizaciones fascistas a sectores de los aparatos del Estado, puesta de manifiesto por la pertenencia del asesino a un batallón, precisamente de la guardia real, plantea de forma descarnada la presencia de tramas nazis y de la extrema derecha en la policía, el ejército, la guardia civil, la judicatura y la administración, jamás depuradas, así como la vergüenza de un Transición que no tuvo nada de democrática.
La brutal represión en Barcelona de una manifestación antifascista, dirigida por Joan Saura, Consejero de Interior de la Generalitat de Catalunya, dirigente de Iniciativa per Catalunya, muestra de forma inequívoca el execrable papel de una "izquierda" que cumple el vergonzoso papel, impagable, o muy bien pagado, de ser ariete de la represión en defensa del orden establecido.
Para el pueblo de Madrid, la ocupación hoy de la Puerta del Sol por miles de personas, haciendo frente, tanto al riesgo de represión policial, como a la anunciada manifestación fascista de Alianza Nacional – que amenazaba aludiendo al asesinato de Carlos con la provocación "vinieron por lana, y salieron trasquilados - , es un emplazamiento de primer orden para acudir masivamente a la prohibida manifestación antifascista del próximo 24 de noviembre.
Nadie que sienta algo tan elemental como que al fascismo se le para luchando, que ninguna agresión debe quedar sin respuesta o que los fascistas son lo terroristas, debe quedarse en casa el 24 de noviembre.
Hay pueblo constituido, de forma autónoma e independiente, frente al fascismo , frente a las clases dominantes y frente a un gobierno del PSOE , representado por una execrable Delegación del Gobierno que es capaz de autorizar manifestaciones fascistas, mientras ilegaliza a quienes pretendemos denunciar los crímenes fascistas.
La dimensión de la respuesta popular, ayer en Vallekas y hoy en Sol, tiene también un importante componente de clase. El asesinato de Carlos y el apuñalamiento de Alejandro son crímenes contra chavales, hijos de la clase obrera de hoy. Ellos y sus compañeros no reconocen representación alguna en los sindicatos mayoritarios ni en la izquierda institucional, buscaban y buscan, como un pulso que golpea las tinieblas, una nueva forma de organización y de representación que aún no existe y que urge construir muy desde abajo. Vincular esa vanguardia de consciencia que hoy se ha manifestado el la Puerta del Sol, con propuestas de organización y formas de unidad que hundan sus raíces, contra el fascismo y en en el malestar social, cada vez más extenso, que late contra la carestía de la vida, la precariedad y por el derecho a la vivienda, es nuestra tarea inmediata.
¡Hoy más que nunca, todos en calle el 24 de noviembre!
¡Carlos, hermano, nosotros no olvidamos!
¡No pasarán!
«Asistimos a una declaración de independencia y dignidad de países latinoamericanos»
Ainara Lertxundi
Sus acciones de desobediencia civil le han valido más de una noche en prisión, pero a él eso nunca le ha importado. Su condición de jesuita tampoco le ha impedido participar en múltiples actos de denuncia contra la guerra de Vietnam, la Escuela de las Américas o la invasión de Irak.
«Estamos asistiendo a una declaración de independencia y dignidad de algunos países latinoamericanos contra la dominación histórica de Estados Unidos, que mantiene la misma política en Oriente Medio», afirma el jesuita estadounidense Joseph Mulligan al analizar los nuevos gobiernos y aires que corren por América Latina. Desde hace más de dos décadas reside en Nicaragua. La pasada semana visitó Donostia para participar en las VI Jornadas sobre Noviolencia Activa organizada por Bidea Helburu y hablar sobre su experiencia en actos de desobediencia civil.
¿Qué le ha empujado a la desobediencia civil?
Es una manera de denunciar una guerra, una política o una injusticia no sólo con palabras, que son muy baratas, sino con acciones simbólicas y hechos concretos. Se trata de mostrar la seriedad del problema y el compromiso de los grupos y también de aceptar las consecuencias que pueden ir desde una multa a pasar unos días o meses en prisión. Estas acciones están orientadas a cambiar la opinión pública, a tocar el corazón de la gente. Primero, llamando su atención sobre el problema y luego, logrando su apoyo.
¿Qué respuesta han tenido este tipo de movilizaciones?
Siempre hemos tratado de hacer cosas eficaces con el fin de comunicarnos con el público, ganar su simpatía y, por medio de ese apoyo, influir la política del país. Durante la guerra de Vietnam tuvimos un movimiento masivo, en parte debido al servicio militar obligatorio porque eso afectaba a todos los hombres y sus familias. Los universitarios tenían licencia durante los años de sus estudios pero todos sabían que, al graduarse, iban a tener que enfrentar la cuestión de la guerra y el servicio militar obligatorio. Fue un factor importante en la salida de Vietnam.
Durante la Administración de Reagan hubo muchas manifestaciones de solidaridad con América Latina y contra la intervención de Estados Unidos o el apoyo militar al régimen de El Salvador, especialmente, a raíz del asesinato de los seis jesuitas y dos mujeres.
Con la de Bush también hay manifestaciones, aunque no tan masivas como en el caso de Vietnam. No obstante, él sigue adelante con su guerra.
Como cada año por estas fechas, nos manifestaremos ante la Escuela de las Américas para exigir su cierre, pedir cambios en la política exterior de Washington y denunciar la muerte de los jesuitas. En 1996, el Pentágono tuvo que admitir que en esta escuela se habían utilizado manuales de tortura.
¿Recuerda alguna protesta en especial?
En relación con la masacre de los jesuitas en San Salvador el 16 de noviembre de 1989, unas seis semanas después, hicimos una protesta frente a la Casa Blanca en Washington. Echamos sangre al portón para demostrar que este derramamiento de sangre fue, en buena parte, responsabilidad de Estados Unidos.
De los 26 soldados del batallón que entró en la casa de los jesuitas y los masacró en el jardín, 19 habían recibido entrenamiento militar en la Escuela de las Américas. El Ejército salvadoreño estaba entrenado y financiado por EEUU.
Fue un acto un poco dramático; del jardín donde fueron asesinados sacamos un poco de tierra que mezclamos con nuestra sangre. Este martirio llamó la atención del mundo y pensamos que tuvo un papel en la aceleración del proceso de paz.
Junto a unos seis jesuitas fui desde Managua al funeral. Decidí no volver a Nicaragua sino ir a Washington para organizar algún acto de denuncia. Hablé con amigos y algunos organismos y preparamos esa protesta para el 5 de enero de 1990. Pasé una noche en prisión.
Como norteamericano que soy siempre siento un poco de responsabilidad por esas acciones de mi Gobierno.
¿Qué papel desempeña la Escuela de las Américas?
Es una manera de influenciar y controlar los ejércitos de América Latina que históricamente han jugado un papel muy negativo en el desarrollo de los pueblos, han practicado la tortura, asesinado y dado golpes militares para mantener el status quo.
En 2003, un grupo de treinta personas entramos y caminamos unos metros sobre la base. En 2004, nos juzgaron y tuve que pasar tres meses en prisión en el Estado de Georgia. Ahora, algunos gobiernos de América Latina han decidido no enviar a sus soldados a esta escuela. Hace poco perdimos por seis votos una votación en la Cámara de Representantes de Estados Unidos para cerrar este centro o suspender sus actividades mientras una comisión independiente la investiga.
Residente en Nicaragua, ¿cómo vive los nuevos aires que corren por América Latina?
La elección de Evo Morales en Bolivia, Rafael Correa en Ecuador... es una fuente de esperanza y una señal de que los pueblos se están dando cuenta de que el modelo neoliberal supone la eliminación casi total del Estado y de los derechos sociales.
El capitalismo salvaje, la estrategia de beneficiar a las grandes corporaciones y a las élites ha fracasado. Además, no ha producido beneficios para la mayoría de la gente. Hay una reacción popular en contra de ese modelo neoliberal.
Algunos países de América del Sur son muy ricos en recursos naturales, especialmente, Venezuela, Bolivia y Ecuador. Los gobiernos quieren tener más beneficios para su pueblo y no tanto para las corporaciones extranjeras.
En Nicaragua, Daniel Ortega ha puesto en marcha el programa «Cero hambre» destinado a entre 30.000 y 40.000 familias campesinas. Consiste en conseguir animales, pollos, semillas, pesticidas o préstamos de hasta 2.000 dólares en términos muy favorables para ellos. Es un paso pero esperamos más cambios en la educación, en la salud pública y en beneficio del pueblo.
Uno de los grandes problemas del país es la dramática inflación por el aumento del precio del petróleo. Es especialmente crítica para Nicaragua porque los salarios son los más bajos de América Latina; 100, 120 dólares al mes para profesores, enfermeros, algunas personas que trabajan en fábricas... Ganar 100 dólares y tener que pagar un dólar por una libra de frijol crea una situación muy difícil.
¿Considera que existe el peligro de que Estados Unidos quiera atajar estos cambios, tal y como hizo en décadas anteriores?
Sí, es posible. Ahora que está muy ocupado política y militarmente en Oriente Medio, no va a meterse demasiado en América Latina. Pero está muy preocupado por estos cambios que acabo de mencionar. Hace poco, un jefe del comando sur (el Ejército de EEUU para América Latina con base en Miami) advirtió del «peligro del populismo radical» y consideró una amenaza para los intereses de Estados Unidos.
Estamos asistiendo a una declaración de independencia y de dignidad de algunos países latinoamericanos contra la dominación histórica de EEUU, que mantiene la misma política en Oriente Medio. El ex secretario de Estado Collin Powel ya dijo que lo que pretenden es establecer «un área de libre comercio» en Oriente Medio.
En la década de los 70, vivió en un barrio latino de Chicago. Tres décadas después, los inmigrantes indocumentados se enfrentan a la deportación.
El peligro para ellos ha crecido. Este Gobierno es más represivo, está deteniendo a muchos y en grupos grandes, realiza allanamientos en fábricas y fincas donde trabajan. Las redadas han aumentado. Es otra contradicción porque algunos sectores de la economía necesitan de la mano de obra de los inmigrantes.
«Bush quiere controlar el gas y petróleo»
¿Cuál es el estado de los derechos humanos en EEUU?
Hay dos categorías de derechos humanos, una relacionada con los derechos sociales y económicos, y otra con los civiles y políticos. Desde la filosofía de occidente ponemos un mayor énfasis en esta última, pero la mayoría de la población piensa más en la primera. En EEUU hay 40 millones de personas sin seguro médico. En caso de emergencia pueden ir al servicio de urgencias de un hospital público, pero luego éste tratará de recuperar ese dinero. En la segunda categoría, hablamos del espionaje de las comunicaciones y de que bajo la «ley antiterrorista», el Gobierno puede detener a cualquier persona y llamarla «combatiente ilegal».
Con este Gobierno, hay una diferencia sustancial. El ex fiscal general Alberto González llegó a justificar la tortura. Los abusos a presos no son algo nuevo, pero sí que un fiscal general justifique abiertamente la tortura. Algunos fiscales fueron despedidos porque no colaboraban con la Casa Blanca en términos de represalias contra políticos demócratas. Incluso Bush llegó a la Casa Blanca como resultado de muchas irregularidades en los comicios de 2000. Este Gobierno ha llegado a unos extremos nunca vistos.
¿Qué cree que pasará con Irak?
Bush va a tratar de mantener la situación como hasta ahora. Espero que con otro Gobierno se pueda resolver de alguna manera, pero es difícil de predecir. El de ahora ha construido en Irak algunas bases que tienen apariencia de ser permanentes. Su estrategia es la de controlar los recursos de gas y petróleo y, como decía, establecer un área de libre comercio. Existe también el peligro de que Bush vaya a bombardear Irán como parte de una estrategia electoral. Muchos presidentes piensan que es mejor para su partido estar en guerra durante la campaña para que el pueblo le apoye y no piense en cambiar de partido. Es una hipocresía que diga que no puede permitir que Irán desarrolle energía nuclear cuando financia investigaciones para fabricar nuevas bombas atómicas y renovar las que existen. De hecho, EEUU es el único país que la ha usado.
El consumo responsable
La necesidad de organizar la economía según la justicia, el respeto al hombre y a los recursos naturales, ya no es una cuestión de opinión moral o política, es un imperativo que nos exige poner de nuestra parte. Esta posibilidad no deriva de derechos garantizados por la ley sino de la voluntad de vivir de forma responsable en lo cotidiano. El consumidor es el último eslabón del sistema económico y como tal tiene la responsabilidad y el poder de cambiar el estado a que se nos induce por los medios de comunicación social.
Las manifestaciones de la crisis social y ambiental en el Planeta son evidentes: todos los días encontramos ejemplos a nuestro alrededor o en los medios de comunicación del injusto reparto de la riqueza y el aumento de la pobreza o de los efectos que el actual desarrollo insostenible tiene para la Naturaleza. Son innumerables los ejemplos que van desde los fenómenos migratorios, hasta la deforestación o desertización, pasando por la explotación laboral (sobre todo de mujeres y niños) o el efecto invernadero.
Vivimos en una sociedad que favorece el consumismo: nos hemos convertido en la generación de usar y tirar. La publicidad nos bombardea con anuncios cuyo objetivo no es nuestro bienestar, si no hacernos engranajes de un sistema que reduce a las personas a consumidores sumisos. Este modelo económico de producción y consumo tiende cada vez más a su agotamiento: es insostenible.
Las instituciones tienen que cumplir su cometido y debemos exigirlo, pero tenemos a nuestra disposición medios de intervención que pueden tener una influencia directa sobre los centros de poder económico. Con nuestra forma de consumir podemos influir en la marcha de la economía y del mundo en forma directa. Un consumo consciente y responsable, orientado al fomento de actividades satisfactorias para la naturaleza y las personas, es un decisivo instrumento de presión frente al mercado.
Si bien el concepto de Consumo Responsable es amplio, podemos entenderlo en tres elementos sustantivos:
1.-El Consumo Ético: es aquel que se pregunta por las condiciones sociales y ecológicas en las que ha sido elaborado un producto o producido un servicio. Es una actitud diaria que consiste en elegir de manera meticulosa lo que compramos sobre la base de dos criterios: la historia del producto y la conducta de la empresa productora, señalándole al sistema los métodos productivos que aprobamos y los que condenamos.
Se ejerce cuando se valoran las opciones como más justas, solidarias o ecológicas y se consume de acuerdo con esos valores y no solo en función del beneficio personal. Desde el consumo ético hacemos especial énfasis en la austeridad como valor, como una forma consciente de vivir, dándole más importancia a otras actividades que al hecho de consumir y teniendo la capacidad de distinguir entre necesidades reales e impuestas; organizándolas a nivel colectivo, garantizando a todas las personas la satisfacción de sus necesidades fundamentales con el menor despilfarro.
La incorporación de estos valores en nuestro consumo no disminuye el bienestar y la calidad de vida, todo lo contrario. Es signo de bienestar comer carne, pero deja de serlo cuando constatamos en muchos de nosotros altos niveles de colesterol, o comemos con tanta abundancia que son frecuentes los problemas de obesidad.
Esto incluye todas las esferas de nuestra vida, nuestras opciones más personales y supone un esfuerzo, pero no es imposible. Un primer paso sería esa toma de conciencia en el ámbito personal; un segundo compartir nuestras reflexiones para construir una conciencia colectiva.
Este tipo de consumo implica dos aspectos fundamentales:
* La búsqueda de información y la formación de un pensamiento crítico con la realidad que nos rodea, con los medios de comunicación y la publicidad, cuestionándonos que hay detrás de cada cosa que consumimos y cuáles son sus consecuencias.
* La reducción de nuestros niveles de consumo como una opción ética. Si nuestro modelo de desarrollo no es ecológico y genera estructuras sociales injustas, no es posible que estimulemos esta situación. Se trata de cambiar nuestro hábito de consumismo, optando por un modelo de bienestar y felicidad no basado en la posesión de bienes materiales: no es más feliz el que más tiene sino el que menos necesita. Es un cambio en nuestra escala de valores y en nuestras prioridades. Esto nos permitiría dedicar una mayor parte de nuestro presupuesto a comer de forma sana, disfrutar nuestro ocio de una manera más constructiva, reducir nuestro tiempo de trabajo e invertir en solidaridad y trabajo comunal.
El pequeño poder del consumidor puede ser muy eficaz. Hay que comenzar por la elección de nuestros alimentos, de nuestras compras para la vivienda, de nuestros vestidos, del uso de nuestro dinero, del tipo de empaque que aceptamos o rechazamos. Lo que falta es desarrollar una conciencia crítica y solidaria acompañada de comportamientos más colectivos y políticos: cuando hacemos la compra no tenemos que dudar que somos poderosos y que las empresas están en una situación de profunda dependencia de nuestros comportamientos como consumidor
2.-El Consumo Ecológico: incluye las tres erres del movimiento ecologista: Reducir, Reutilizar y Reciclar, en el que también se incluyen elementos esenciales como la agricultura y la ganadería ecológicas, entre otras formas de producción alternativa.
Si echamos una mirada en el tiempo para ver cómo ha cambiado nuestra forma de producir y de consumir, veremos que las culturas tradicionales que identificaban a las personas con su entorno social y ecológico han ido desapareciendo. El valioso y sencillo modelo campesino basado en una producción diversificada para el autoabastecimiento sin perjudicar al entorno, ha sido destruido.
A principios del siglo XX se acentúa el desarrollo industrial en torno a las grandes ciudades y el abandono de los pueblos, pasando a depender cada vez más el medio rural de las ciudades y del capital. Las poblaciones humanas se concentran en grandes núcleos urbanos donde se pierde la relación con el medio físico y los recursos naturales. En los años 70 tiene lugar la llamada "revolución verde", concepto lanzado por el Banco Mundial como garantía de la seguridad alimentaria. Se basa en la mecanización y en la utilización de grandes cantidades de abonos artificiales y fitosanitarios en la industria agraria. Para adaptarse a estos cambios se necesitaba una gran inversión que los pequeños propietarios no podían asumir, por lo cual comenzó a cambiar la estructura de la propiedad, concentrándose en menos manos y provocando éxodo en el campo y envejecimiento de la población rural. Este fenómeno se ve acentuado por las políticas derivadas de la inclusión de los Estados en organismos financieros internacionales, que cambian la normativa sobre el uso de los recursos e incentivan a las grandes explotaciones agrícolas y ganaderas de carácter industrial más rentables en términos económicos.
Los procesos de globalización económica están transformando la estructura socioeconómica del medio rural. La producción se desplaza a países con menos costo de producción y menos protección ante los crímenes ecológicos. Todo esto va encaminado a una producción destinada más al mercado que a las personas. El productor se convierte en cliente dependiente de las multinacionales agroquímicas (que le suministran semillas, fitosanitarios, combustible,...) y en proveedor de materia prima barata para la industria alimentaria y las grandes cadenas de alimentación.
Se está imponiendo un modelo arrasador que provoca desaparición de culturas campesinas y ganaderas más integradas en el medio natural, despoblamiento del campo, destrucción de ecosistemas, pérdida de diversidad agrícola y biológica, contaminación y deterioro de la calidad y seguridad alimentaria. Paralelamente nos imponen otros hábitos de consumo, al incrementarse la producción de pocos tipos de alimentos, en detrimento de la producción tradicional de nuestra dieta.
3.-El Consumo Solidario: se impulsa el comercio justo, considerando las relaciones sociales y condiciones laborales en las que se ha elaborado un producto o producido un servicio. Se trata de pagar lo justo por el trabajo realizado. Se trata de eliminar la discriminación por causa del color de la piel, nacionalidad, género o religión; se trata de visualizar alternativas sociales de integración y de inducir un nuevo orden económico internacional.
A lo largo de la historia de la humanidad el comercio ha jugado un papel importante en el intercambio de bienes, tecnología y modelos culturales, permitiendo un recíproco enriquecimiento. En la actualidad el comercio es cada vez más subordinado y uniformado a las reglas del capitalismo. La producción destinada exclusivamente hacia la exportación, está causando graves consecuencias para los pueblos. Entre otras, la pérdida de autosuficiencia alimentaria, el saqueo permanente de los recursos naturales y la imposición de hábitos de consumo irracionales ajenos a su tradición cultural.
En este sentido las multinacionales y el capital no dividen al mundo en Norte y Sur o entre las diferentes culturas, la auténtica división que plantean es entre quienes pueden comprar -que constituyen el mercado- y quienes no pueden hacerlo -que representan algo inútil que podemos desechar-. Los intereses de las multinacionales que controlan gran parte de la producción y del comercio internacional, no es generalizar el consumo y el bienestar a la humanidad, lo es reforzar los niveles de consumo entre los que tienen un nivel económico suficiente para gastar.
Reglas de oro
1. Ser críticos con nuestro consumo y nuestra forma de vida, aplicando filtros tejidos con valores éticos.
2. Exigir información e informarnos acerca de las condiciones sociales y medioambientales en las que un producto o un servicio ha sido elaborado, como ha llegado hasta nosotros y cuáles son sus consecuencias sobre el ambiente.
3. Reducir nuestro consumo, como opción ética y ecológica, optando por un modelo de bienestar y felicidad no basado en la posesión de bienes materiales.
4. Practicar un consumo respetuoso con la naturaleza, reduciendo, reutilizando y, por último, reciclando y consumiendo productos ecológicos y artesanos.
5. Practicar un consumo solidario y socialmente justo, respetuoso con las personas y las culturas, en el que no haya lugar para la discriminación ni la explotación
* Guillermo Quirós Álvarez es Oceanógrafo Físico
Educación para la ciudadanía: La asignatura pendiente del Monarca español, el Gobierno y las Fuerzas de Seguridad del Estado

Carlos Tena
Yo tenía razón. Aquel joven de baja estatura, de modales altaneros, de rostro imperturbable, era un policía o un guardia civil, vestido de paisano para no alarmar a los pasajeros del vuelo a La Habana. Exigía, sobre todo a las personas de piel oscura, que se identificaran nuevamente (aunque ya habían pasado por el control obligatorio), que mostraran de nuevo sus pasaportes, las visas de entrada y salida de España, amén del billete y el asiento en el avión. Todo ello con ademanes algo destemplados, más propios de un aprendiz de chulo de barrio, cuando no de un macarra a lo Javier Sardá, acomplejado por su escaso metro sesenta y, a pesar de ello, como Aznar o Hitler, convencido absolutamente de la superioridad de la raza blanca.
Lo miré con cara de quien está viendo una película repleta de gags penosos, ante lo cual me conminó para que le mostrara de inmediato mis documentos. Se los entregué, y mientras me sentaba en un sofá le dije: “Cuando termine de revisarlos, me lo dice porque quiero salir rápidamente de este país con aroma de cuartel”. La furia que despertó tal frase se notaba hasta en el sudor que comenzó a brotarle por la frente en forma de pequeñas gotas, fruto de la impotencia o la rabia, ya que no se había identificado como miembro de la benemérita institución y no podía impunemente darme un par de hostias, cosa que en un cuartelillo habría hecho ante el aplauso de sus jefes. Por eso, pálido, furioso pero contenido, con el inconfundible aire que distingue a un servidor al que le han gritado desde niño, alzando la voz y una ceja, me dijo: “¡Ya puede irse¡”. Claro que me fui. Y bendiciendo mi destino, que era Cuba.
Y es que es lo que me digo: ¿Por qué no se enseña en España la asignatura de Educación para la Ciudadanía a los aspirantes a policías, guardias y militares? Estoy convencido de que si estudiaran un libro como éste, publicado por los benditos Luis Alegre, Carlos y Pedro Fernández Liria, o siquiera por curiosidad le echaran un vistazo, como pueden hacer las personas de paisano (menos las del PP), obrarían de distinta manera. Serían educados, sencillos, corteses pero hieráticos, eficaces y pacíficos, cultos y preparados, como sus homólogos cubanos.
No hay tal, y la fractura social es tan evidente, tan enorme, que los golpes caen siempre del mismo lado: en el de quienes intentan aprender democracia, solidaridad, civismo y e igualdad. Por el contrario, aquellos que deben proteger tales virtudes, se gradúan en recintos donde impera la defensa de la violencia gratuita, los malos tratos al detenido, el desprecio a las personas de otras etnias, la incultura, la insolidaridad, el clasismo y el autoritarismo bananero o borbónico, que es lo mismo. Difícil combinación, querido Sancho. Como decía mi amigo Eduardo: “¿Qué clase de personas pueden surgir de un lugar donde se enseña a los alumnos a no hacer nada útil, en medio de berridos e insultos, y a toda velocidad?”
Los últimos acontecimientos acaecidos en España, con los fascistas campando por sus respetos, gozando de la venia de casi todas las autoridades municipales, autonómicas y estatales, han demostrado una vez más que ese país se parece más a aquella sociedad en la que un general golpista imponía el desorden y el caos, la tortura y el maltrato, que a un estado que combate por poner en práctica la auténtica democracia como… (¡ejem¡ Un momento, que no se me ocurre ninguno en Europa, ni en el norte de América).
Bueno, pues diré entonces como Venezuela y Cuba, naciones en las que la extrema derecha (la que le gusta al Borbón y que Zapatero tolera y comprende) gobernó durante décadas, en medio de una irrespirable atmósfera de corrupción, autoritarismo, violencia policial y crímenes de toda clase, incluidos los del terrorismo de Estado y la habitual tortura y el asesinato en las cárceles, comisarías, prisiones, penales y cuarteles, en los que los funcionarios se ensañan con los ciudadanos sin posibilidad de defensa. Hoy, en ambas naciones latinoamericanas, por fortuna, la verdadera voluntad del ciudadano es la que cuenta y no la del ciudadano con la cuenta corriente llena de ceros.
En el reino de Juan Carlos I, jamás las leyes fueron tan violentadas desde los propios tribunales; jamás los jueces esgrimieron tanta demagogia para justificar decisiones ilegítimas; jamás hubo un entorno de tanta agresividad, que no flotaba en las calles desde los tiempos de la muerte del dictador; jamás un organismo como el Constitucional había sido cuestionado en foros internacionales. Se ha consagrado el Estado de Derecho Retorcido. (Por cierto, no sé qué cara pondría el inquilino de la Zarzuela y sus mesnadas, si en la constitución venezolana se integrara un artículo eximiendo al presidente de cualquier responsabilidad penal, como en la española, que protege al monarca ante cualquier denuncia, por cualquier presunto delito).
No hay ninguna duda. España no es un país en paz, democrático, progresista, culto y divertido, sino en continua zozobra social, sufriendo retrocesos importantísimos en las libertades mínimas, inculto y aburrido. Así las cosas, no sería extraño que Aznar fuera el próximo candidato al Premio Nobel de la Paz.
Enhorabuena a Zapatero, que ha logrado superar en desfachatez, mediocridad e inutilidad al mismísimo Felipe González. Pero a José Luis, para tener contento a su rey y a su amigo Rajoy aún le falta acabar con ETA. Ya sabe la fórmula de su correligionario sevillano: unos cuantos millones de euros de los fondos reservados, veinte funcionarios como Vera o San Cristóbal, Barrionuevo o Corcuera, unas conversaciones con Sarkozy, prohibiciones, porrazos a mansalva (debe aprovechar ahora que el recién nombrado Fiscal General de los USA es partidario de la tortura), miles de detenciones, amenazas, más violencia, que en cien años todos calvos.
Estoy seguro de que el Monarca nunca leerá esa magnífica obra, Educación para la Ciudadanía. Aún hay mandatarios que creen en el sistema de las órdenes cuarteleras, donde el diálogo y la palabra se han condenado a galeras.
Educación para la Ciudadanía, de Pedro Fernández Liria, Luis Alegre Zahonero, Miguel Brieva y Carlos Fernández Liria. Editorial Akal. www.akal.com
Encubrimiento en el Pentágono: 15.000 o más bajas estadounidenses en la Guerra de Iraq
El Pentágono ha estado ocultando la verdadera cantidad de bajas estadounidenses en la Guerra de Iraq. La verdadera cantidad excede las 15.000 y CBS News puede probarlo.
La Unidad de Investigación de CBS quería hacer un informe sobre la cantidad de suicidios en las fuerzas armadas y “presentó una solicitud según la Ley de Libertad de la Información al Departamento de Defensa.” Después de 4 meses recibió un documento que muestra – que entre 1995 y 2007 – hubo 2.200 suicidios entre soldados “en servicio activo.”
Tonterías.
El Pentágono ocultaba la verdadera magnitud de la “epidemia de suicidios.” Después de una investigación exhaustiva de los datos de suicidios de veteranos proveniente de 45 Estados, CBS descubrió que sólo en 2005 “HUBO POR LO MENOS 6.256 ENTRE LOS QUE SERVÍAN EN LAS FUERZAS ARMADAS. ES DECIR 120 EN CADA UNA Y EN TODAS LAS SEMANAS DE SÓLO UN AÑO.”
No es un error de tipografía. Personal activo y en retiro de las fuerzas armadas, sobre todo jóvenes veteranos entre 20 y 24 años, vuelven del combate y se matan en cantidades récord. Podemos suponer que “múltiples períodos de servicio” en una zona de guerra han precipitado una crisis de salud mental desconocida por completo por el público y que es negada totalmente por el Pentágono.
Si sumamos las 6.256 víctimas de suicidios de 2005 a las 3.865 víctimas “oficiales” de los combates de las que hablan, obtenemos una cifra de 10.121. Incluso un cálculo exageradamente bajo de cifras similares de suicidios para 2004 y 2006, significaría que la cantidad total de víctimas estadounidenses de la guerra de Iraq excede ahora las 15.000.
Así es; 15.000 militares estadounidenses, hombres y mujeres, muertos en una guerra que – hasta ahora – no tiene justificación legal o moral.
CBS entrevistó al doctor Ira Katz, jefe de salud mental en el Departamento de Asuntos de Veteranos. Katz trató de minimizar la ‘oleada’ de suicidios de veteranos diciendo: ‘No hay una epidemia de suicidios en Asuntos de Veteranos, pero los suicidios constituyen un problema importante.”
Tal vez Katz tenga razón. Tal vez no haya una epidemia. Tal vez sea perfectamente normal que jóvenes hombres y mujeres vuelvan del combate, se hundan en una depresión inconsolable, y que haya más que se suicidan que los que mueren en el campo de batalla. Tal vez sea normal que el Pentágono los abandone en cuanto vuelven de su misión para que se puedan volar los sesos o se cuelguen con una manguera de jardín en su sótano. Tal vez sea normal que los políticos sigan financiando una matanza generalizada mientras dejan de lado a las víctimas que han producido con su indiferencia y falta de coraje. Tal vez sea normal que el presidente persista en repetir las mismas mentiras insípidas que perpetúan la ocupación y que siguen matando a muchísimos jóvenes soldados que se arriesgaron por su país.
No es normal; es una pandemia – un estallido de desesperación que es el corolario natural de una vida en constante temor; de ver que sus amigos son desmembrados por bombas al borde de la ruta, o que niños son despedazados en puestos de control, o de encontrar cuerpos maltratados tirados al lado del lecho de un río como si fueran bolsas de desperdicios.
La erupción de suicidios es el vástago lógico de la guerra de Bush. Los soldados que vuelven están traumatizados por sus experiencias y ahora se matan en masa. Tal vez debiéramos haber pensado en eso antes de la invasión.
Vea el vídeo en CBS News “Suicide Epidemic among Veterans”: http://www.cbsnews.com/stories/2007/11/13/cbsnews_investigates/main3496471.shtml
Fuente: http://www.informationclearinghouse.info/article18737.htm
(Diario) El País contra Chávez, fuego a discreción
Pascual Serrano
Desde Teherán, desde Caracas, desde Managua, desde Madrid, desde Londres; en el editorial, en la portada, en la revista de prensa, en el suplemento del domingo; el enviado especial, el corresponsal, el escritor consagrado, el editorialista… Todas las baterías del diario El País en su versión de papel del domingo 18 de noviembre [1] se pusieron a disparar contra el presidente venezolano Hugo Chávez de forma sincronizada atendiendo a la misma orden militar.
No es que el presidente venezolano sea noticia ya en primera página, es que ya es protagonista en tres de las noticias de la portada: la que se ocupa de la Casa Real tras el incidente en la Cumbre de Santiago de Chile, la llamada del especial del Domingo que incluye foto, título “Por qué no se calla” y subtítulo “Hugo Chávez utiliza el incidente con el Rey para afianzar su poder”; y el anuncio del artículo de Vargas Llosa titulado “El comandante y el Rey” que, cómo no, se ocupa del mismo asunto.
Si abrimos el periódico y vamos recorriendo una a una las páginas encontramos de nuevo a Chávez en el artículo de análisis internacional de Moisés Naím, ministro de Fomento bajo la presidencia de Carlos Andrés Pérez, titulado “El ‘reality show’ de la cumbre Iberoamericana”. En él se dice que “los jefes de Estado de América Latina están hartos de Hugo Chávez”, “el narcisismo de Hugo Chávez ya fastidia hasta a sus aliados” y “sabemos que Chávez no se destaca por su temperamento democrático hacia quienes discrepan de él”. Obsérvese que el “opinador” opina en nombre de los aliados y jefes de Estado de América Latina y lo que él piensa lo presenta como hecho seguro en primera persona del plural: “sabemos”.
En la sección de Nacional, tenemos otra vez a Chávez, ahora en una crónica a dos páginas de Ernesto Ekaizer donde se aborda la figura y situación del rey de España. Sobre el presidente, el mismo pensamiento: “explotación del incidente por parte del presidente venezolano de cara al referéndum de reforma de la Constitución de su país” y final apoteósico: “Chávez se quedó helado, sin reaccionar. Ahora justifica su estado de congelación porque, dice, no les escuchó. Si hasta Michelle Bachelet, al otro extremo de la mesa, escuchó, ¿cómo no iba Chávez a hacerlo cuando estaba muy cerca? Es una explicación de consumo interno para disipar la humillación que siente.” El analista anterior de Internacional sabe lo que piensan los jefes de Estado de América Latina sobre Chávez, aunque no lo digan y, ahora, éste sabe si Chávez oyó o no a Zapatero mejor que el propio Chávez.
Llegamos a la sección de Economía, allí Ángeles Espinosa, desde Teherán, vuelve a aguijonear a Chávez con motivo de la cumbre de la OPEP: “Tanto Ahmadineyad como Chávez apuestan por unos precios al alza para financiar sus proyectos políticos populistas”.
En Opinión no iban a ser menos. De entrada le tienen reservado un editorial, “La careta de Chávez”, donde continúan con el discurso monocorde: “El líder venezolano está traspasando el límite de lo tolerable”, “El referéndum se va a celebrar sin las más mínimas garantías. El Consejo Nacional Electoral está controlado por el chavismo y el censo está corrompido”, “la tensión con España tiende a aislarle del resto de América Latina”. El País se convierte en quien decide lo que es tolerable o no de un presidente latinoamericano y en la autoridad electoral que aprueba la limpieza o no de unas elecciones. En esta misma sección de Opinión, existe una Revista de Prensa, en ella recogen un fragmento de un artículo de The Economist. Cómo no, sobre Chávez, o mejor dicho, contra Chávez, de modo que sigue la misma música: “La escena del ‘Por qué no te callas’ ha llenado de alegría a los incontables millares de personas que sufren la diarrea verbal crónica de Chávez (…) Para Chávez es importante evaluar si todo esto le sirve para convertir el impopular referéndum sobre cambios constitucionales en un plebiscito popular sobre su persona”. Se inventan lo de “impopular referéndum” a pesar de que no hay encuesta que refleje que no lo va a ganar Chávez. No dejamos la sección de Opinión para encontrar a página completa el artículo de Vargas Llosa ya anunciado en portada, “El comandante y el Rey”. Teníamos una crónica internacional, otra nacional, un analista político internacional, un editorial, un texto de revista de prensa, ahora la munición es un escritor de prestigio, y no podía ser otro que Mario Vargas Llosa: “la estupidez conceptual se enriquece si quien la emite se expresa con la vulgaridad del comandante Chávez y su gesticulación cuartelera”. Ayudar a Chávez también debe tener su castigo, aunque sólo sea por tener alopecia y kilogramos de más: “Otro tercermundista y comandante entra en escena, esta vez Daniel Ortega maltratado por los años con una calvicie acelerada y una panza capitalista”. Continúa el artículo con el recordatorio de rigor del levantamiento militar de Chávez en 1992 y traca final de Vargas Llosa, donde muestra su fina capacidad de análisis geopolítico: “Es posible que, al reaccionar como lo hizo, el Rey de España transgrediera el protocolo. ¡Pero qué alegría nos deparó a tantos latinoamericanos, a tantos millones de venezolanos! ¿La prueba? Que he escrito este artículo arrullado por los animados compases del flamante pasodoble que ahora entonan y bailan en todas las universidades venezolanas, que se titula ¿Por qué no te callas? Y cuya tonadilla y letra llueven sin tregua sobre mi computadora”. El “flamante pasodoble” al que hace referencia es nada menos “Que viva España”, de Manolo Escobar, de tan casposo y franquista recuerdo en la península.
Y seguimos repasando el arsenal de El País. Llegamos al suplemento Domingo. Página completa de foto de archivo de Hugo Chávez vestido de militar, la misma que aparecía en el avance de la portada, seguida de reportaje de tres páginas del habitual corresponsal en Caracas Francisco Peregil. Por si alguien no había leído a Vargas Llosa se vuelve a recordar la nueva letra del pasodoble de Manolo Escobar y el “golpe de Estado" de 1992. Se cita como nuevo abandono ideológico del bando chavista a su ex esposa Marisabel Rodríguez, quien hace ya años que no milita en el chavismo. Como comentarista, el reportaje recoge la opinión del director del diario Tal Cual, Teodoro Petkoff, político antichavista que se dice de izquierdas y quien, casualmente escribía también en el diario español El Mundo hace un par de días. Parece que o no tienen mucha diferencia de criterio los dos periódicos para elegir analistas o hay poco donde elegir en Venezuela para escribir contra Chávez. Seguimos en el suplemento Domingo y lo siguiente que encontramos es otra página completa, ahora contra Daniel Ortega por su apoyo a Chávez. Como no podía ser de otro modo, el reportaje comienza con el testimonio de una sandinista defraudada: “Hoy no se siente representada por el presidente de Nicaragua ni por la cúpula del Frente Sandinista porque ‘han traicionado la revolución’”. “Como Vilma Núñez, abundan los nicas a los que no gusta la influencia creciente de Chávez en Nicaragua”. Y sigue el operativo militar sin descanso. La siguiente información es sobre las empresas españolas en América Latina, que dicen que no se van a ir y que nadie en América Latina quiere que se vayan “en respuesta a las últimas amenazas de Hugo Chávez”. El reportaje recuerda “el peligro del populismo que representa Chávez” y que “no es la primera vez que los empresarios asisten a salidas de tono de parecido calibre de Chávez”. Todo muy novedoso.
El recuento es abrumador, la edición de El País del domingo 18 de noviembre dedicó a combatir a Chávez –todos los textos eran críticos contra el presidente venezolano-, tres llamadas en primera página, un artículo de análisis en Internacional, un reportaje a dos páginas completas en España, un artículo a cuatro columnas en Economía firmado en Teherán, uno de los dos editoriales, uno de los dos textos seleccionados de ente la prensa extranjera, una página entera de Opinión de la firma más prestigiosa de su plantel y tres reportajes, desde tres países distintos, que ocupan un total de seis páginas completas del suplemento Domingo. Un ejemplo muy claro de dos cosas: de utilizar todos los hierros a enfrentar al presidente latinoamericano que más elecciones ha ganado y más apoyo electoral tiene del continente, y de que existe una impecable coherencia, coordinación y disciplina entre las diferentes secciones para formar y actuar a las órdenes que la dirección del diario marca.
La otra conclusión es la duda que nos queda de quién puede soportar, ideologías aparte, todo un periódico dedicado a repetir durantes meses y en todas las secciones, el mismo discurso de combate contra un presidente que gobierna a miles de kilómetros de donde se vende el periódico. Probablemente ni el Pravda en los tiempos de la era soviética fuese tan monocorde y soporífero. Quizás por todo esto regalaron ese día con el periódico una pastilla de jabón.
www.pascualserrano.net
[1] La edición escrita que consulté fue la de Andalucía.
Boletín Informativo ISA núm 266
PRESENTA EL GOBIERNO LEGÍTIMO EL “PROYECTO ALTERNATIVO PARA RESCATAR Y DESARROLLAR AL SECTOR ENERGÉTICO Y CONVERTIR A MÉXICO EN UNA POTENCIA ENERGÉTICA”
Como fue anunciado ayer por Andrés Manuel López Obrador, presidente legítimo de México, el día de hoy se efectuó la presentación del “Proyecto Alternativo para Rescatar y Desarrollar al Sector Energético y Convertir a México en una Potencia Energética”, a cargo de los secretarios de Patrimonio Nacional, Claudia Sheinbaum; de la Hacienda Pública, Mario di Costanzo, y para la Honestidad y Austeridad Republicana, Octavio Romero, del gabinete de gobierno lopezobradorista.
El siguiente es el texto en el que se expone lo que será el eje central de la actividad del gobierno legítimo de México, de la Convención Nacional Democrática y del movimiento de resistencia pacífica durante los próximos meses, a fin de detener los intentos por privatizar la industria petrolera mexicana.
Hoy hablamos de rescatar al sector energético porque desde 1983 los gobiernos neoliberales lo han debilitado, descapitalizándolo y tomando decisiones estratégicas contrarias a su desarrollo y creando un ambiente propicio para su privatización y entrega al extranjero.
Esto lo han hecho fomentando la creciente dependencia de gas del exterior, permitiendo que las reservas de crudo se reduzcan a niveles peligrosos como no lo permite ninguna empresa petrolera del mundo, negándole a Pemex los recursos para invertir en refinación y obligando a la reducción de producción en las plantas petroquímicas.
La estrategia de debilitamiento del sector energético y en particular de Pemex la han justificado los gobiernos, entre otros, con el argumento de que no hay recursos presupuestales suficientes para mantener el alto nivel de inversiones que este sector requiere. Esto es una falacia.
En primer lugar, porque los recursos para el gasto público destinado a otros fines han ido en constante aumento, sobre todo en el gasto burocrático. En segundo lugar, porque lo que se invierta en el sector energético siempre se paga sólo.
Por eso nuestro proyecto alternativo contiene dos acciones profundas y simultáneas, justificadas por la verdadera emergencia nacional que tenemos para evitar la privatización de este sector bajo cualquier modalidad.
Es imprescindible, en primer lugar, corregir la expansión del gasto corriente ocurrido en el sexenio pasado y mismo que continúa hoy, porque es en parte este gasto lo que impide liberar recursos para invertir en el petróleo.
El gasto total con el que comenzó el gobierno de Vicente Fox fue de 1,248 miles de millones de pesos (1.248 billones). Después de crecer cada año, llegó en 2006 a 2.255 billones y para 2008 se aprobó por el Congreso un gasto de 2.568 billones.
Dentro de este gasto, el corriente aumentó de 714 mil millones a 1.321 billones en 2006, es decir, casi se duplicó. Su aumento, de 607 mil millones, se financió con excedentes petroleros por 404 mil millones.
Estos excedentes surgen cuando se planea el presupuesto con un precio del petróleo y en la realidad resulta un precio mayor. Pero el gobierno ha derrochado el excedente en gasto corriente, en lugar de invertirlo. El gasto corriente aumentó en el sexenio pasado en 607 mil millones de pesos, mientras que la inversión física directa sólo aumentó en 19 mil millones. Por cada peso que aumentó la inversión, el gasto corriente aumentó 32 pesos.
Propuesta de reducción del gasto corriente
El rescate de nuestro petróleo, gas y electricidad merece cualquier sacrificio. Nuestra propuesta es una reducción del gasto corriente, para con ello realizar un aumento de la inversión, de tal manera que no proponemos una simple reducción con consecuencia negativas para la demanda, sino un mejor gasto.
El alto gasto corriente y el grave dispendio que el gobierno hace del mismo, manteniendo una alta burocracia excesivamente costosa y con grandes privilegios, nos permite asegurar que una fuerte reducción del gasto corriente es posible y deseable.
No por cuantiosa la propuesta de reducción es utópica. México ha realizado estas reducciones en muchas instancias en el pasado reciente. En los 80’s, el gasto se redujo en 2 puntos porcentuales del PIB; a principios de los 90’s también se lograron 2 puntos; y a mediados de los 90’s se tuvieron logros similares. Pero, a diferencia de la reducción de gasto que han hecho en el pasado los gobiernos neoliberales, basada en reducir el gasto de inversión y obra pública, nosotros proponemos reducir el gasto burocrático.
La regla que proponemos no toca los salarios de los empleados públicos, aunque sí los de la alta burocracia. Tampoco creemos necesario reducir los gastos sociales en educación y salud ni en programas de apoyo a sectores desprotegidos. Pero sí proponemos reducir el gasto en los costos operacionales.
Los gastos operacionales del sector público han registrado en el sexenio pasado el incremento más fuerte, de 261 mil millones de pesos en los seis años hasta 2006, para llegar a 487 mil millones. Este incremento ha sido a pesar de que el gobierno no ha hecho nada nuevo en materia de obra pública que justifique este aumento. Lo que sí ha ocurrido es el crecimiento de la burocracia, de las compras de materiales que hace, de la corrupción en las compras y de la duplicación de gastos.
Proponemos que este gasto operacional se ajuste a lo que debió haber sido su crecimiento desde 2001 si se hubiera ajustado a una mínima norma de eficiencia. Proponemos que su crecimiento a partir de 2001 debió haber seguido una tasa de la mitad del crecimiento de la economía, mediante un aumento sostenido de la productividad en el sector público.
Los ahorros que hoy tendríamos mediante la aplicación de esta regla serían en todo el sexenio de 487 mil millones de pesos menos de lo que gastamos. No hay justificación para argumentar pérdida de eficiencia en el sector público, ya que si estamos preparados a realizar inversiones públicas por un monto equivalente, habría dinero suficiente para mayor capacidad física y mantenimiento de la misma, incluyendo equipos y materiales. Lo que no habría sería dinero para dispendio, sobreprecios a contratistas o compras innecesarias.
Podemos comprobar que el valor de ahorros que se hubiera obtenido sería superior a la suma de excedentes petroleros por encima del presupuesto por 404 mil millones. Agregamos que aun en el año 2000, el aparato burocrático era demasiado obeso y que era factible desde entonces efectuar una reducción aún mayor que la que resultaría de la regla que proponemos.
Bajo esta norma, el gasto de 2006 sería 193 mil millones de pesos menos a lo que fue. Como porcentaje del PIB, la reducción sería en promedio de 1.1% en los últimos seis años y de 2%, en 2006. Hay que recordar que en ese año solamente, el excedente presupuestal petrolero fue de 105 mil millones de pesos. Debemos recordar que el gasto corriente durante los pasados 6 años aumentó de 13% al 14.4% del PIB, de tal manera que el ajuste que proponemos no es irrealizable.
En julio pasado propusimos generar ahorros por 20 mil millones de pesos para que no fuera necesario aumentar los impuestos a la gasolina y con ello los precios y la inflación. Entre otros planteábamos ahorros por reducción de salarios de la alta burocracia, así como privilegios.
Hoy la tarea es más urgente aún. Frente al argumento del gobierno espurio de que no hay recursos para invertir en petróleo, gas y refinación y que por lo tanto no queda otra más que vender Pemex, nuestro proyecto es convocar a un esfuerzo de todos para obtener ahorros que a la larga nos van a resultar en un sector energético mucho más fuerte y capaz de impulsar el desarrollo de México, sin perder soberanía.
¿Qué debemos corregir en el sector energético?
Como ya lo mencionamos, los gobiernos neoliberales han aplicado en materia de energía, políticas contrarias al interés nacional. En lugar de mantenerla como fuente de empleo, competitividad y valor agregado nacional, la han descapitalizado, desintegrado de la industria nacional y relegado al papel de fuente de ingreso fiscal. Para ello han encarecido sus productos y creado un enorme obstáculo a la competitividad nacional.
A mediados de los ochenta, todavía éramos autosuficientes en gas y gasolina, y la balanza comercial en petroquímicos era ligeramente superavitaria. Hoy dependemos del exterior para: 40% de la gasolina, 25% del gas y cuantiosas importaciones de petroquímicos que, junto con el gas y los refinados, arrojan importaciones por 20 mil millones de dólares. Estamos exportando materias primas e importando productos derivados, pero con un valor agregado mucho mayor.
Hasta principios de los ochenta la integración del sector energético era alta y creciente, con gran desarrollo tecnológico y con efectos multiplicadores y sinergias con los proveedores de la industria, desde fabricantes de maquinaria hasta grandes firmas de ingeniería de diseño y construcción de plantas. Hoy los proveedores nacionales han sido desplazados por extranjeros al trasladar los pedidos a firmas del exterior, con la consecuente pérdida de empleos, divisas y desarrollo tecnológico. Los ingenieros graduados que antes iban a la industria, hoy van a trabajar para las empresas extranjeras que Pemex subcontrata, pero en mucho menor número.
Las empresas que forman parte de Pemex y del sector eléctrico han sido descapitalizadas. Sus fuertes ingresos han sido capturados por el gobierno para financiar el desmedido crecimiento del gasto corriente. Esto ha ocurrido a pesar de que los precios que el gobierno impone para la electricidad, el gas y los refinados son muy altos si se comparan con los precios internacionales. Una consecuencia es que el gobierno ha sacado de la competencia a muchas industrias privadas. Los consumidores también sufren las consecuencias de estas políticas, por los altos precios que tienen que pagar.
Requerimos de este esfuerzo presupuestal para comenzar a corregir los grandes errores que nos llevan a la situación actual. Estos errores son:
1. Una política de precios equivocada, que maximiza el ingreso fiscal en el corto plazo, sin mirar hacia el mediano y largo plazo y a costa de las posibilidades de la industria y de toda la economía. A diferencia de las grandes empresas petroleras internacionales, que están integradas y maximizan el valor agregado total, Pemex aplicó precios internos entre sus diferentes subsidiarias que lo han llevado a cerrar y descapitalizar áreas completas de negocios que deberían no sólo ser rentables, sino ser un eslabón de apoyo para la industria usuaria de sus productos. A su vez, los precios que cobra a sus clientes nacionales han hecho que el sector privado también haya cerrado y dejado de invertir en muchas áreas de la petroquímica.
2. La falta de inversión en todas las áreas de Pemex, desde la exploración de crudo y producción de gas, refinación y petroquímica. Ello nos ha convertido en deficitario en gasolina y gas, y contribuido a los altos precios del gas, pues lo tenemos que importar de Estados Unidos, un país de precios altos y que a su vez es deficitario en gas. Estos precios altos tienen graves consecuencias para la industria nacional y para sus planes de expansión en México.
3. La intención de los gobiernos neoliberales de privatizar la industria. La falta de inversión ha sido ante todo una decisión de los gobiernos desde Miguel de la Madrid hasta Calderón, y servido como pretexto para argumentar que no producimos lo suficiente porque no hay inversión y que debemos cambiar la Constitución para permitir que el sector privado haga esas inversiones. Esa política no se maneja de frente a la nación, sino se aplica en un bajo perfil, pero cada día que pasa hace más débil a Pemex y a la CFE. Aparte de que no estamos de acuerdo con la desnacionalización de la industria, es imperdonable manejar la falacia de que los mexicanos no somos capaces de administrar bien la industria o de aplicar la tecnología que se requiere.
4. La decisión de usar gas natural en todo el crecimiento de la industria eléctrica, ha sido a todas luces una política equivocada. Aunado a la falta de inversión para producir gas, ha resultado en precios muy altos. El gobierno desechó las alternativas de usar derivados del petróleo crudo, abundantes y de difícil comercialización externa, en lugar de gas. De hacerlo se reducirían tanto el costo de la electricidad como el de las importaciones de gas. Existe la tecnología para usar estos combustibles sin causar deterioro del medio ambiente. La decisión de seguir usando gas natural es totalmente irracional.
5. El cambio en las modalidades de licitación en Pemex y la industria eléctrica han favorecido a los proveedores extranjeros, desplazando a los nacionales. En particular, el financiamiento vía Pidiregas, encarece el costo directo y el costo financiero de las inversiones y discrimina contra los proveedores nacionales, especialmente los medianos y pequeños. La consecuencia de esto es una creciente dependencia de proveedores extranjeros, con la consiguiente pérdida de empleos y divisas.
6. La división de Pemex en empresas subsidiarias independientes aumentó el costo y la complejidad administrativa de la empresa. Más importante aun, la política de precios de transferencia entre estas empresas ha sido tan irracional para ser empresas de un mismo dueño, que ha acabado con procesos industriales completos sobre los cuales ya teníamos un gran avance como productores.
7. La falta de control del gasto corriente del gobierno ha reducido aún más las posibilidades de invertir en el sector energético. Así, hoy tenemos la paradoja de que con precios históricamente altos del crudo, cuando la empresa de mayores utilidades en el mundo es una empresa petrolera, el sector petrolero mexicano está descapitalizado.
Estamos en uno de los momentos más críticos para la nación y convocamos a todos a reflexionar y a unirnos en el proyecto alternativo de rescate del sector energético. El Gobierno espurio ha emprendido una campaña para desacreditar a Pemex, diciendo que pierde dinero y que no tiene ni recursos ni tecnología para las tareas que enfrenta. Esto es un mito. Pemex genera un gran superávit antes de impuestos, de casi 60 mil millones de dólares o más del 6% del PIB. Es la empresa más rentable del país y la segunda petrolera con mayor flujo de efectivo del mundo. Los impuestos que pagó el año pasado fueron 60 mil millones de dólares, equivalentes a 38% del ingreso del gobierno federal y a más de 3 veces lo todas las empresas privadas del país pagaron de impuesto sobre la renta. Si Pemex no invierte lo suficiente es porque el gobierno se lo confisca todo. En cuanto a la tecnología, ésta se puede contratar, pero más importante aun es que tenemos los técnicos mexicanos para asimilarla y desarrollarla, tal como se hizo desde 1938 hasta principios de los 80’s. Contra todos los pronósticos de las compañías extranjeras, Pemex en 1938 salió adelante en sus operaciones, como lo va a lograr hoy, con 70 años de experiencia de nuestros técnicos. Sólo los tecnócratas acomplejados y vende patrias pueden argumentar que hoy Pemex no puede y que el sector privado es el único salvador.
¿Cómo podemos lograr el fortalecimiento energético?
1. Ante todo es imperativo cobrar conciencia de nuestra identidad nacional. No queremos ir hacia atrás en la historia de México y vender patrimonio nacional al extranjero, como lo hizo Santa Anna, a quien las ventas de territorio ni siquiera le alcanzaron para financiar su gasto corriente. Así tampoco la venta de Pemex sería suficiente para cubrir el gasto corriente del gobierno.
2. Reducir el tamaño y el gasto corriente del gobierno para obtener ahorros por 200 mil millones de pesos en una primera instancia y a partir de ahí someter el gasto corriente operacional a una regla de eficiencia que limite su crecimiento a la mitad de lo que crece la economía. Esto es condición indispensable para redimensionar el tamaño del gobierno a nuestras circunstancias y necesidades y ganar credibilidad frente a la sociedad.
3. Rescatar el carácter integral de Pemex, fusionando sus diferentes empresas subsidiarias en una sola, eliminando gastos redundantes y permitiendo una toma de decisiones racional sobre su gestión y sus precios internos de transferencia. Al reducir el gasto del gobierno, se facilitaría el financiamiento para un ambicioso programa de inversión en todo el sector energético, pero en particular en Pemex.
4. Determinar que todo el excedente presupuestal petrolero, por encima del precio promedio de 2006 sea invertido en el desarrollo del sector energético. Para tener una idea del potencial de esta medida, si se mantuviera el precio de hoy por un año, este excedente sería de 200 mil millones de pesos. La inversión requerida para satisfacer las necesidades de gasolina del país es de 110 mil millones. Con 6 meses que se mantengan los precios actuales se financiaría esta capacidad de refinación, reduciendo las importaciones de gasolina en el rango de 80 mil millones de pesos por año.
5. Utilizar el aumento de recursos para Pemex para invertir en proyectos urgentes, en particular en la producción de crudo en campos existentes, principalmente en las aguas someras, en donde tenemos cuando menos 15 mil millones de barriles de reservas. Un esfuerzo sostenido en estos campos a lo largo de varios años nos daría eventualmente la capacidad tecnológica y la capacidad de negociación en la compra de la tecnología que fuera necesario adquirir afuera, para emprender exploración y producción en mayores profundidades. A la exploración de nuevos campos podemos dedicar 30 mil millones de pesos y al desarrollo de yacimientos de gas natural 20 mil millones. La construcción de refinerías, la modernización y ampliación de plantas petroquímicas y el aumento de gastos de mantenimiento por 20 mil millones de pesos caben perfectamente en un presupuesto de 20 mil millones de dólares que sería el recorte de gasto que proponemos, sin considerar los excedentes petroleros en los precios que actualmente tiene. La diferencia entre un sector energético realmente fuerte, que reconstituya importantes cadenas industriales de oferta y demanda y nos haga competitivos en precios son estas acciones que demandan de una gran disciplina presupuestal y de un gobierno nacionalista y preocupado por engrandecer a México.
6. Cambiar la forma de contratación de los proyectos de inversión de Pemex. El Instituto Mexicano del Petróleo debe volver a jugar un papel importante en el desarrollo de tecnología y proveedores nacionales. Los proyectos se deben asignar a los proveedores de menor costo y mayor calidad y no sólo a los que pueden obtener financiamiento. Se debe prescindir de los Pidiregas para nuevos proyectos y en su lugar utilizar deuda directa, cuando sea necesaria.
7. Comenzar a prepagar el saldo de Pidiregas. El prepago se puede financiar con emisión de bonos en los mercados internacionales, lo que generaría ahorros de cuando menos mil millones de dólares anuales tan sólo en intereses. O bien el prepago lo lograríamos, si el gobierno adquiere reservas internacionales del Banco de México, logrando un ahorro en el costo de servicio de la deuda hasta de 2 mil millones de dólares en la contabilidad consolidada del sector público. La señal que debemos dar al mundo es que la deuda de Pemex es una deuda de la Nación.
8. Cambiar el sistema de precios de Pemex y de la CFE. Al interior del sector energético debemos aprovechar al máximo la infraestructura existente. Hacia fuera del sector, debemos reducir los precios con una referencia nacional que refleje los costos sin quitarle competitividad a la industria. Esto daría certidumbre a la industria nacional, lo que tendría enormes beneficios.
9. Impulsar el desarrollo científico y tecnológico en materia energética, tanto de hidrocarburos como de fuentes renovables.
De aplicarse esta propuesta, tendríamos ahorros directos de divisas para el sector público de 10 mil millones de dólares por año, en menores importaciones de gasolina y gas. Estos se complementarían con ahorros importantes en las importaciones del sector privado.
Como muchos de esos productos se fabricarían en México, se crearían empleos directos y, adicionalmente, los proveedores del sector energético tendrían un ciclo de alta inversión y crecimiento. La industria nacional sería más competitiva por los menores precios de los insumos energéticos y el crecimiento económico sería mayor.
Estas medidas son necesarias y urgentes. El no actuar inmediatamente nos puede poner en situaciones muy difíciles y comprometer la soberanía nacional, como varias veces ocurrió en los dos siglos pasados.
Más aun, si no se fortalece al sector energético, corremos el riesgo adicional de un grave deterioro en las condiciones de oferta de energéticos internacionales y graves tensiones geopolíticas entre consumidores y productores, como las que hoy vemos en el medio oriente. Ningún mexicano patriota quiere poner a México en una grave situación de dependencia del extranjero en materia energética.
Calderón nos va a salir con que la única salida para una crisis energética y financiera es vender nuestra industria energética. Esto sería irresponsable y antipatriota, pero no obstante, sería consistente con lo que han hecho los últimos gobiernos desde principios de los ochenta. Es responsabilidad de todos los mexicanos impulsar políticas que potencien al sector energético y oponerse, a toda costa, a la privatización del sector, último gran patrimonio de los mexicanos.
El teatro de operaciones
Cd. Juárez, Chihuahua, México
Dice un refrán bien conocido que no deben hacerse cosas buenas que parezcan malas, diríamos entonces que tampoco hay que hacer cosas buenas, mal, esto significa que una buena idea mal aplicada, es decir, que no cuenta con la operación efectiva y los consensos necesarios puede tornarse incluso negativa.
El "Plan México", o "Iniciativa Mérida" se plantea como un proyecto de cooperación entre México y Estados Unidos en el combate al narcotráfico. Desde su surgimiento, este proyecto ha despertado la incredulidad y zozobra de propios y extraños, pues no queda el papel de cada Nación en este acuerdo, ni las formas de acción de un proyecto de esta naturaleza. El problema del narcotráfico ha sido, desde el inicio de este gobierno federal, el eje central de su estrategia de seguridad nacional. Anunciado como una lucha difícil, de altos costos para la Nación, el plan de Felipe Calderón se basa en atacar, estado por estado, las células del narcotráfico enquistadas en la dinámica social de cada zona, y en los mismos sistemas de gobierno. En reunión en la capital yucateca, Felipe Calderón compartió con su homólogo estadounidense esta visión del combate al narcotráfico y nació así la posibilidad de hacer un trabajo conjunto, en donde ambas naciones pondrían esfuerzo humanos y materiales para abatir la presencia del negocio ilícito de las drogas en sus respectivos territorios. Hasta aquí el proyecto parece un avance de civilidad y visión democrática de coadyuvancia regional; pero falta mucha claridad para que podamos pensar eso. Por ejemplo, no se han detallado los alcances del proyecto, sus formas de acción, sus implicaciones para la soberanía y, sobre todo, no ha quedado claro cuál será el teatro de operaciones de esta batalla, pero tememos deducir que será nuestro propio territorio.
Evidentemente no es posible sacar de su espacio de operación al crimen organizado, sin que esté de por medio una lucha frontal entre este y las fuerzas del estado, imposible sacar al cártel de Tijuana de esta ciudad, o al de Juárez de la nuestra; entonces es evidente que los gobiernos de ambos países están concientes de que la batalla se realizará aquí mismo y que seguramente están pensando en el impacto social que esto traerá. No se puede iniciar una guerra sin cuartel en medio de las ciudades, entre la población civil, sin que se prevea un fuerte impacto en la seguridad pública. Sobre todo si se conoce al enemigo que se enfrenta; pensemos solamente en el comando armado de 50 delincuentes que entraron a la Semefo de Ensenada, Baja California, para rescatar los cuerpos sin vida de dos de sus miembros que habían muerto en un accidente al caerse un helicóptero. La capacidad de ataque del crimen organizado es mucha y están dispuestos a sacarla a la calle en defensa de sus intereses. El estado, o los estados en este contexto de la "Iniciativa Mérida", parecen estar en el mismo tono de ataque; y en medio del fuego cruzado quedamos los ciudadanos comunes que salimos a la calle a realizar nuestras actividades diarias y no sospechamos hasta qué punto pueden quedar suprimidas nuestras garantías.
En la zona de la frontera esto presenta un peculiar matiz de gravedad, pues las células más visibles de la operación del narco están en esta franja, recordemos que el flujo de la droga va de sur a norte, de productores a consumidores y es Estados Unidos el principal consumidor. Entonces en Tijuana, Ciudad Juárez, Mexicali, Laredo se encuentran centros de operación claramente identificados.
¿Seremos entonces las poblaciones de frontera el primer teatro de operaciones de esta guerra?, y si es así ¿qué garantías ofrece el Estado a los ciudadanos?. En una guerra se suprimen las garantías individuales de facto y por mandato, como una forma de proteger a los civiles, ¿qué pasará en este caso?. En la frontera tenemos muchos motivos para preocuparnos, habría que esperar que nuestros gobiernos locales pongan el dedo sobre el renglón y no se olviden del pacto federalista a la hora de encarar los proyectos del Gobierno Federal que puedan poner en riesgo la zona.
Retratos del Sureste : Campeche, Tabasco, Chiapas….¡Tan lejos pero tan cerca de la frontera norte de México! No cabe duda que el mosaico cultural que es nuestro país se unifica ante los desastres naturales, las negligencias ocultas y la falta de oportunidad en la respuesta. En los últimos días hemos visto y escuchado llamados de Felipe Calderón en torno a la solidaridad y el auxilio al pueblo de Tabasco y Chiapas que al bajar las aguas denotan la magnitud de la tragedia., sin embargo, lo que esta ocurriendo en las costas de Campeche donde la contaminación esta cada vez peor debido al digamos incidente en la plataforma de PEMEX, se ha dejado de lado y solo sirve de relleno a las notas de los responsables tanto de la Paraestatal como de la Secretaria que es cabeza de sector. Lucrar con el dolor de una comunidad es para algunos y desgraciadamente no pocos, la razón de su presencia en la zona., no es solamente la distribución selectiva de los apoyos lo que debe estar a discusión sino las tertulias políticas que se han dado en torno al tema dejando de lado el fondo real del problema, dejando a los tabasqueños a merced del mejor publicista y en el caso de Campeche minimizando un evento de magnitudes económicas y ecológicas sin precedentes, y por supuesto, las responsabilidades del mismo. El sureste demuestra hoy, un mucho y desgraciadamente, lo que a la clase política con intereses meramente nacionales ve en el país, esto es, el posicionamiento mediático para lo que sigue… por encima de la obligación institucional y mas que nada humana. Se olvidan, sin embargo, que la memoria colectiva cada vez esta más afinada.
Soy Edna Lorena Fuerte y mi correo es ednalorenafuerte@gmail.com para sus comentarios. Muchas gracias.
19/Noviembre/2007
Protesta antifascista en Barcelona; 60 lesionados
Madrid, 18 de noviembre. Al menos 60 personas, entre ellas 22 agentes de la policía catalana, los Mossos d’Esquadra, resultaron heridas durante los enfrentamientos que se desataron el sábado durante una manifestación en repudio al asesinato de un joven antifascista, en Madrid, el pasado día 11. Unas mil personas repudiaron el asesinato de Carlos Palomino –cuando se dirigía a boicotear una manifestación fascista–, cometido por un soldado y un ultraderechista. Siete personas fueron detenidas y hoy unas 50 personas se congregaron frente a la comisaría de Les Corts de Mossos para exigir su liberación, sin que hubiera incidentes.