domingo, noviembre 02, 2008
En estos momentos quedó claro que el principal enemigo de Felipe Calderón no es Andrés Manuel López Obrador ni sus seguidores; es él mismo, después su propio gabinete y de los empresarios que lo encumbraron. Su actuación ante el desastre del paciente americano, la crisis financiera mundial y sus secuelas para México no dejan lugar a equívocos. Ellos son responsables de su pérdida de credibilidad ante la sociedad. Desde que los panistas llegaron a Los Pinos, una pregunta flota constantemente en el ambiente: ¿quién gobierna realmente a la nación? Porque, según las evidencias, no han sido Vicente Fox ni Calderón. En particular, la economía navega a la deriva, peor que el buque del holandés errante; o, mejor dicho, se hunde en su propia recesión inflacionaria con desempleo.El mito de la fortaleza económica y financiera fue desbaratado espectacularmente por la brutal orgía especulativa de quienes menos esperaban –es un decir– los calderonistas: 16 consorcios, entre ellos Telmex, Televisa, TV Azteca, Femsa, Comerci-Banorte y Cemex. Es decir, la oligarquía mexicana para quien Felipe Calderón ha gobernado. En sólo 72 horas, 8.9 mil millones de dólares de las reservas del banco central pasaron a sus bolsillos, gracias al “libre mercado”. Ante una arremetida similar, Luis Echeverría expropió algunas tierras y las repartió entre los campesinos, unas fueron del panista Manuel J. Clouthier. José López Portillo, en un agónico acto que restauró la dignidad del Estado, nacionalizó la banca, el símbolo de la oligarquía que había saqueado al país y hundido en una de sus peores crisis. ¿Calderón Hinojosa tomará una medida similar o seguirá siendo el hazmerreír del empresariado y la población?Ante las evidencias de una crisis mundial que se agudizaba, Calderón y su gabinete elaboraron una estrategia económica para 2009, donde el mundo parecía disfrutar de una plácida tranquilidad. Una vez que la desaforada manada de especuladores colapsó los circuitos financieros mundiales, en especial los de Estados Unidos, los calderonistas se dijeron sorprendidos, como si hubiera caído un relámpago en pleno cielo sereno –recuérdese la fisonomía fantasmal de Calderón, Agustín Carstens y Guillermo Ortiz cuando presentaron a su nueva criatura–, y tuvieron que aceptar que su plan inicial era inviable. Quedó en calidad de nonato. La emergencia asociada a los “coletazos” de la crisis sobre nuestra “fuerte economía” –según las palabras de Agustín Carstens–, que tundieron al peso, los obligaron a replantear las directrices básicas. En su lugar parieron otro atildado engendro, llamado aparatosamente “programa para impulsar el crecimiento y el empleo”, cuyo improvisado disfraz, por el lado que se le vea, nada tiene que ver con lo que podría denominarse plan anticrisis. Cinco son los principales rasgos del programa.1) Carece de medidas inmediatas para contrarrestar el desplome ya registrado por la economía mexicana, por lo que éste se profundizará en lo que resta de 2008. El gasto adicional en infraestructura por 53.1 mil millones de pesos (MMDP) –publicitado engañosamente con pompa y circunstancia por Calderón y sus chicago boys– empezará a ejercerse en 2009. Mientras tanto, persistirá el subejercicio en el gasto público actual, por encima de la Ley de Egresos aprobada por el Congreso para 2008, estimado en al menos 30 MMDP, parte de los cuales serán utilizados en el futuro programa. Si ese dinero se hubiera empleado oportunamente, como estaba presupuestado, eventualmente las tendencias recesivas de la economía serían menos acentuadas. Por desgracia, la persistente restricción fiscal y monetaria, que afecta la demanda interna (el consumo y la inversión productiva), sumada a la recesión de Estados Unidos, que inhibe las exportaciones, tenderá a profundizarlas. La economía caerá sin paracaídas. En los Criterios de Política Económica (CPE) de 2007, se había previsto que este año se crecería 3.6 por ciento. En los de 2008 se redujo la meta a 3.5 por ciento. En los de 2009 a apenas 2.4 por ciento, aunque el Fondo Monetario Internacional (FMI) la estima en 2.1 por ciento (World economic and financial surveys, octubre de 2008).2) Contra la ortodoxia se acepta que el déficit fiscal de cero por ciento se convierta en desbalance de 1.8 por ciento del PIB. En gran medida, esto se deberá a las actividades y el cambio en el trato fiscal de Petróleos Mexicanos (Pemex), la exclusión de su inversión en el balance presupuesto, que incluye la desaparición de sus Pidiregas (la inconstitucional obra privada realizada en nombre del Estado) y su consolidación de sus pasivos en deuda pública. No deja de ser llamativa la decisión de utilizar el Fondo de Estabilización de Pemex (12 mil millones de pesos) para la construcción de una nueva refinería, ya que los calderonistas siempre dijeron que se carecía de recursos para ella y justificar la reprivatización disfrazada de la paraestatal.Todo lo anterior me lleva a una presunción: que constituye el caballo de Troya que formaliza la reprivatización de la industria petrolera, la traición a la nación; que Felipe Calderón, a través de uno de los depredadores de Pemex, Juan Camilo Mouriño, ya negoció con los priistas del Congreso, encabezados por Manlio Fabio Beltrones, para violar la Constitución y abrir las puertas a la inversión privada, contrarreforma que se impondrá después de la discusión presupuestal.3) La dosis adicional de desgravación arancelaria y de liberalización de los mercados para supuestamente hacer más competitiva a la economía. Justo en el momento en que la desregulación financiera y la “ética” empresarial y de los cancerberos encargados de supervisarlas han sido duramente criticadas y responsabilizadas de la crisis financiera mundial, por su voracidad y sus prácticas delincuenciales. En 1982-1983 los aranceles cubrían el ciento por ciento de las importaciones. Es cierto que se propició un aparato productivo ineficiente y una elite empresarial parasitaria; pero, la economía creció a una tasa media real anual de 6.1 por ciento entre 1950 y 1982, con el modelo de economía cerrada o de industrialización. Con la reducción de aranceles iniciada en 1984 y que en este momento sólo afectan al 11.4 por ciento de las compras externas (el arancel simple total es de 10.2 por ciento y el ponderado, es decir, el realmente aplicado, es de 2.3 por ciento), ¿qué economía “competitiva” se generó? Los nuevos empresarios son iguales o peores de ineficaces y parasitarios.La rápida apertura comercial, en plena crisis productiva e inflacionaria de la década de 1980, destruyó gran parte de las empresas locales al someterlas a una competencia externa desleal y al abandono gubernamental, lo que profundizó nuestra dependencia estructural del mercado mundial. No mejoró el crecimiento, al contrario, el modelo neoliberal de economía abierta contribuyó al dilatado estancamiento de 1983-2009, donde la tasa media de crecimiento anual será de 2.5 por ciento, comparable a la existente a principios del siglo XX. Calderón quiere más apertura, mientras los países industrializados refuerzan sus aranceles y subsidian a su aparato productivo, las bases de su poderío económico y su desarrollo.Cabe preguntarse: ¿qué áreas pretenden descobijar aún más Felipe Calderón y sus chicago boys? El margen es limitado. El arancel menos alto corresponde a las compras externas de bienes de consumo (el simple es de 21 por ciento y el ponderado de 5.9 por ciento). Por sectores, el mayor ponderado es el del sector agropecuario (5 por ciento), y las industrias del papel (5.9 por ciento), minerales no metálicos (3.5 por ciento) y alimentos (3 por ciento). ¿Pretenden desproteger más al sector agroalimentario para completar la pérdida de la soberanía en ese renglón? ¿Logrará que ahora sí sea eficiente la economía, cosa que no se logró entre 1984 y 2008?, ¿productivamente hablando, cuándo serán marginales e indiferentes las reducciones? En ausencia de programas públicos sectoriales se dejará todo al “mercado” y las llamadas “ventajas comparativas”, basadas en productos tradicionales (energéticos, minerales, agroexportaciones, mano de obra esclava), como ya sucede y que en nada benefician al desarrollo.Lo que busca Felipe Calderón es terminar por destruir a la economía y desaparecer a los productores rurales más pobres. Ellos tienen la palabra: aceptan sumisamente su condena a muerte o buscan su supervivencia a costa de Calderón y los neoliberales. Ante la guerra de tierra arrasada que les han decretado, con el respaldo del Congreso, cualquier método que adopten será legítimo.4) El programa económico para 2009 acepta tácitamente que no es para el crecimiento. En los CPE de 2007 y 2008 se propuso una meta de crecimiento de 3.6 por ciento para el próximo año. En el mal parido, de 3 por ciento; y en el nuevo engendro, de 1.8 por ciento. Se cayó a la mitad. En los hechos se reconoce que probablemente el producto interno bruto se derrumbe en los dos primeros trimestres (en una tasa de alrededor de cero por ciento o menor a ella). Luego se mantendrá aletargada y acaso tienda a recuperarse en el último trimestre. Sólo así puede explicarse el promedio anual de 1.8 por ciento. Apenas un estertor, producto de la simple inercia.En ese tenor puede suponerse legítimamente que el “programa” de marras, con todo y sus 53.1 MMDP adicionales, no apuesta por el “crecimiento y el empleo”. Es el plan que oficializa la recesión y ata de manos los instrumentos contracíclicos: el gasto público y el relajamiento de la política monetaria. El crecimiento se deja a la venia del redentor “mercado”, la “creatividad” empresarial y la esperanza remota de la reactivación de Estados Unidos. Por desgracia, el FMI ha estimado que Estados Unidos se hundirá en la recesión: le calcula un crecimiento de 1.3 por ciento en 2008, 0.1 por ciento en 2009 y sólo hacia 2013 mejorará a 2.3 por ciento. Paul Volcker, que ocupó la Reserva Federal con Carter y Reagan, uno de los artífices del desastre neoliberal, acaba de señalar: “La economía (de Estados Unidos), creo, está en recesión”. Difícilmente podría arrastrar al cadáver de la economía mexicana. La tasa de 1.8 por ciento equivaldrá a un año más de estancamiento en el largo plazo. El 27 consecutivo desde que los neoliberales usurparon el poder. Según los CPE, Calderón soñaba con una tasa media anual sexenal de 4 por ciento y a la mitad de nuestra pesadilla será de 2.5 por ciento. Fox nos decía que terminaría en un nivel de 7 por ciento y apenas promedió en su mandato 2.3 por ciento. Felipe Calderón dice que cerraría en 5.2 por ciento. La realidad ha sido cruelmente veleidosa con los “planeadores”.El programa no es para el crecimiento. Está diseñado para tratar de estabilizar nuevamente los mercados financieros y, por enésima vez, alcanzar la meta de inflación de 3 por ciento, el eje rector de todos los CPE calderonistas. La política monetaria (altos réditos de 8 por ciento, 4-5 por ciento reales, 4-5 veces mayores a los de Estados Unidos) y fiscal se mantiene atada a muerte al dogma neoliberal.El pobre objetivo de crecimiento –por llamarlo de alguna manera– para 2009 es un símil de la tragedia calderonista: sus expectativas se han desinflado estrepitosamente en escaso tiempo.5) Tampoco es un programa para el empleo y el bienestar. Hasta septiembre, la tasa de desempleo abierto llegó a 4.5 por ciento, contra la de 3.4 por ciento de diciembre: aumentó 22 por ciento. En lo que va del mandato del “presidente del empleo”, los arrojados a la calle han subido 20 por ciento. Martín Werner, subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda, reconoce que se crearán 300 mil nuevos empleos de los 800 mil prometidos, pese a que se requieren 1.3 millones. Eso en el mejor de los casos, porque pueden ser menos. ¿Mantendrán Mouriño, las policías y los militares el suficiente vigor en los músculos para imponer toda la fuerza del Estado para los nuevos candidatos a delincuentes, tal y como lo hicieron en contra de los maestros en el estado de Morelos?Mientras el sistema financiero mundial se desplomaba, Gerardo Ruiz, secretario de Economía, dijo ante los pasmados congresistas que el gobierno no pensaba “tomar medidas extraordinarias porque sería anticiparnos a algo que todavía no pasa”. Sólo se tomarían hasta ver cuál es impacto en el bolsillo de los mexicanos. Es decir, en pleno desastre. Sólo le faltó aclarar a qué “bolsillos” se refería. Si eran los de Elba Esther Gordillo y personajes similares, tenía razón. No hay por qué preocuparse. La despótica aliada de Calderón puede darse el lujo de regalar 59 Hummers –valuados entre 22 y 30 millones de pesos– a sus capos del sindicato, para que transiten tranquilamente entre la floreciente delincuencia y los vejados y apaleados maestros, que deben de estar más irritados por el obsceno destino de sus cuotas sindicales o por el posible pago calderonista de los sucios servicios prestados por la señora, o ambas cosas. Si pensaba en los trabajadores, le faltó aclarar de qué magnitud tiene que ser la horadación en sus miserables bolsillos para que se tomen la molestia de inventar algo. La paupérrima alza en los salarios mínimos de este año ya se perdió dos veces. El poder de compra de los contractuales ha perdido el 25 por ciento de su aumento, más lo que se acumule, en ambos casos, en lo que resta de 2008. Según la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, en septiembre las ventas en las cadenas minoristas cayeron 6.5 por ciento; en las de autoservicios, 4.4 por ciento, y en las departamentales 13.8 por ciento. Desde luego, Gerardo Ruiz no es una pitonisa, pero no necesitaba estrujarse demasiado el cerebro para imaginárselo. Pero eso no le inquieta. Al contrario, es lo esperado por la política monetaria y fiscal que buscaba reducir el consumo para tratar de controlar la inflación. El posible descontento será controlado por la “tiranía” del “mercado libre”, es decir, Javier Lozano, secretario del Trabajo, los empresarios, el temor al desempleo abierto y los garrotazos, si es necesario.


Desde la administración de Carlos Salinas de Gortari, Petróleos Mexicanos (Pemex) y sus subsidiarias invierten recursos públicos en empresas privadas, a pesar de que ninguna legislación vigente las faculta para comprar o vender acciones.
Por medio de la Ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, la paraestatal y sus filiales Pemex Exploración y Producción (PEP), Pemex Refinación (PR) y Pemex Gas y Petroquímica Básica (PGPB) reconocen inversiones por más de 63 mil millones de pesos en 37 empresas privadas.
Admiten ser los propietarios únicos de 20 de las 37 compañías, de acuerdo con las respuestas a las solicitudes de información 1857200101308, 18575000-60008, 1857600053108, 1857700015208, 1857800015-308 y 1860000004108. Ninguna está registrada como paraestatal.
El valor actual de las acciones de esa veintena de empresas asciende a 30 mil 425 millones 751 mil pesos, de los cuales, 29 mil 304 millones 533 mil pesos estarían radicados en los paraísos fiscales de Islas Caimán, Luxemburgo, Irlanda, Suiza, Bahamas, Países Bajos, Inglaterra y Delaware, Estados Unidos.
Ello, porque 17 de las 20 compañías forman parte del esquema de sociedades instrumentales o fantasmas (international bussines corporation) estructurado en el extranjero por la paraestatal mexicana a finales de la década de 1980 y actualmente manejado por la administración de Jesús Reyes Heroles González Garza (Contralínea 27 y 105).
Las acciones de esas empresas están capitalizadas en cinco monedas: pesos mexicanos, dólares estadunidenses, euros, libras esterlinas y francos suizos, descubren los informes entregados por Pemex y sus subsidiarias a esta revista.
Recursos multimillonarios
El equivalente a 4.6 por ciento, es decir, 2 mil 964 millones 821 mil 984 pesos, corresponde a las acciones que posee Pemex Gas y Petroquímica Básica. Se trata de inversiones en seis compañías, de las cuales cuatro son ciento por ciento de su propiedad.
Aunque Pemex Refinación sólo ha invertido en Mexicana de Lubricantes, el capital destinado a ésta –764 millones 144 mil pesos– representa el 1.1 por ciento del valor total actual de las acciones adquiridas por Pemex y sus subsidiarias desde la década de 1980.
El 0.6 por ciento restante se liga a la participación de Pemex Exploración y Producción en tres empresas –una de éstas de su propiedad–, por 416 millones 605 mil pesos.
El ingeniero Rafael Decelis, experto en temas petroleros, asegura que Pemex ha omitido informar a los mexicanos cuántas empresas opera, en dónde y para qué. “Sabemos que existen, pero no tenemos más información”. Por ello, exige se dé transparencia y se rindan cuentas a la sociedad de esta red empresarial.
Al margen de la ley


Sonda de Campeche. El primer año de la gestión de Jesús Reyes Heroles González Garza en Pemex se cuenta como uno de los más convulsivos, por los accidentes que se sucedieron en las plataformas, atribuidos por el funcionario a fenómenos meteorológicos. Sin embargo, documentos confidenciales de Petróleos Mexicanos (Pemex), cuya copia posee Contralínea, revelan que en 2007 entraron en operación 40 plataformas, que en su mayoría presentaban graves deficiencias en infraestructura y sistemas de seguridad, detectadas desde que comenzaron funciones; incluso dos de ellas fueron declaradas “no aptas” por los supervisores de la petrolera sin que se rescindieran los contratos.
Las condiciones, ubicación y trabajos de las plataformas petroleras en esta zona neurálgica es considerada por el gobierno mexicano como un asunto de seguridad nacional. Solamente los directivos de Pemex y los contratistas conocen las condiciones físicas y de infraestructura en que los artefactos marítimos son arrendados a la subsidiaria Pemex Exploración y Producción (PEP) –que dirige Carlos Arnoldo Morales Gil– por periodos multianuales y tarifas millonarias, y sólo se conoce de sus deficiencias hasta que ocurre algún desastre.
De las 40 plataformas, 31 son propiedad de los consorcios texanos Mexdrill Offshore, Noble Contracting, Nabors, Todco, Pride Drilling y su subsidiaria México Drilling, grupo económico para el cual trabajó como asesor el hoy director de Pemex y a quien asesora actualmente su predecesor Luis Ramírez Corzo. Todas se contrataron sin opción a compra.Los documentos de Pemex revelan que la mayoría de estas plataformas presentaban fallas que contravienen las normas de seguridad y los acuerdos internacionales en la materia, como el Convenio Internacional para la Seguridad de la Vida Humana en el Mar (SOLAS, por sus siglas en inglés). En algunos casos, el equipo y la infraestructura contratada y pagada por PEP no era la que en realidad tenían las plataformas al momento en que fueron supervisadas.
Norrie Mc Vicar, presidente del Grupo Internacional de Fuerza de Trabajo Costa Afuera de la Federación Internacional de los Trabajadores del Transporte (ITF), encargada de la supervisión y verificación del cumplimiento de las normas internacionales en las plataformas petroleras en los 148 países miembros, explica que su reciente inspección a la Sonda de Campeche detectó que: “Los mismos consorcios que tienen sus plataformas en el resto de los países petroleros tienen buenas prácticas industriales, pero en el Golfo de México bajan sus estándares de calidad e incumplen las normas internacionales de seguridad”.
Hace un mes, la ITF arrancó a nivel mundial la campaña emergente para mejorar las condiciones de los trabajadores en la Sonda de Campeche. Según la ITF, el principal problema en torno a la industria petrolera es la corrupción.
Las actas de Pemex revelan que las cuatro plataformas tienen deficiencias. En el caso de la Ocean New Era, se dictaminó “no apta”, aunque no se le rescindió el contrato.
Ésta fue construida en Alabama en 1974 y operaba con bandera de Estados Unidos. Actualmente utiliza bandera de conveniencia de las Islas Marshall, según datos de la Secretaría de Marina Armada de México. El 27 de julio de 2007 se arrendó con el contrato 421006824, por 250 millones de dólares, aún cuando éste estipulaba que la plataforma debía tener un año máximo de construcción de 1990.
Durante tres meses no se le sometió a ninguna verificación. El 14 de octubre el grupo multidisciplinario encargado de los check list, encabezado por Alberto Soberanis Gutiérrez, concluyó que no cumplía los requerimientos mínimos de PEP. El documento indica que, durante los dos días que se inspeccionó, “se presentaron condiciones inseguras” y que no se contaba con un plan de respuesta de emergencia: hubo una alerta de presencia de gas y el personal de la contratista no supo cómo actuar; además, se descubrió que no tenía el paquete básico de seguridad para detectar gas sulfhídrico.
Aún con estas deficiencias se le paga una renta promedio de 3.5 millones de pesos al día, vigente hasta el 29 de enero de 2010. La Ocean New Era opera al norte del campo Ku-Maloob-Zaap, a un costado de la plataforma Petrolia.
El 26 de julio de 2007, otras dos plataformas de Mexdrill comenzaron a operar en la Sonda: la Ocean Voyager y la Ocean Worker. La primera fue construida en 1973 y traída del Puerto de Sabine Pass, Texas; se rentó mediante el contrato 421006823 por 324 millones de dólares. Se supervisó hasta el mes de noviembre, aunque la norma indica que la revisión debe ser previa.
El monto del contrato incluye el mantenimiento integral de la plataforma y el costo de la tripulación (42 personas) del 26 de julio de 2007 al 10 de febrero de 2010. Cuando se supervisó, dicen los documentos, adolecía de mantenimiento general. La infraestructura más deteriorada: grúas, zona habitacional, comedor y servicio médico. En el área de seguridad, los extintores estaban caducos, los botes salvavidas no tenían equipo de comunicación y los remos no servían. Tampoco las balsas salvavidas eran aptas.
Aunque los sistemas de comunicación son vitales para comunicarse con tierra, los de la Ocean Voyager no estaban completos o no funcionaban. Ante las deficiencias, los representantes del área de Seguridad Industrial, Protección Ambiental y Calidad de PEP se negaron a firmar el acta donde se le determina “apta” para operar.
El check list de la Ocean Worker, rentada mediante el contrato 421007826 del 26 de julio al 24 de agosto de 2007, indica que el helipuerto presentaba fallas, al igual que los sistemas de detección de gas.
En diciembre de 2007 entró en operación la Ocean Ambassador, construida en 1975, arrendada mediante el contrato 421007832, que concluyó en abril pasado. El acta de supervisión indica que el software con el que operaba no era el estipulado en el contrato. En cuanto a la infraestructura, habían fallas en los sistemas de medición de flujo de combustible.
La The 205 fue calificada “no apta” por los supervisores. Tampoco se le rescindió el contrato. Se verificó en enero pasado, tres meses después de que iniciara trabajos. Ante las deficiencias, los representantes del SIPAB, Alberto Pérez Hernández y Claudia Lizbeth Martínez Ascencio, y el encargado de mantenimiento SPESO, Ignacio Cárdenas Castan, se negaron a firmar las actas.Se descubrió que requería mantenimiento anticorrosivo urgente. El equipo de radiotransmisión estaba incompleto. El sistema general de alarma no tenía señalización.
Las grúas no movían la carga requerida, lo que alteraba los trabajos en los pozos. La caseta de los perforadores de pozos no tenía equipo de comunicación. La contratista no presentó reportes de los pozos en los que trabajaba, tampoco de las fallas durante los trabajos ni las acciones correctivas. No se tenía sistema de mezclado de lodos. Las bombas contraincendio no alcanzaban la presión requerida. Las canastas de carga estaban oxidadas y rotas. El quemador ecológico, que de acuerdo con el contrato debe operar desde que la plataforma inicia trabajos y hasta el último día de arrendamiento, no servía. Los residuos de hidrocarburos estaban apilados por todas partes.
El gabinete médico carecía del instrumental y tanto el mobiliario como el material clínico eran de calidad inferior a los mínimos requeridos. Por ejemplo: la camilla ubicada en el piso de perforación estaba sucia y los tubos corroídos.
El mobiliario de las oficinas estaba oxidado y las láminas laterales filosas. El software y hardware no cumplían los requerimientos estipulados en el contrato de PEP. El drenaje en la zona habitacional y piso de perforación estaba tapado.En cuanto a los sistemas de seguridad: los botes salvavidas no tenían mantenimiento y no pasaron las prueba de izaje. Los motores de las lanchas salvavidas no servían. El contrato marcaba que debía haber cuatro resucitadores de oxigeno y solamente había dos. Los cables de seguridad eran deficientes.
El check list de la The 206 revela anomalías en las áreas de infraestructura y seguridad. No se tenía el certificado clase ABS. No tenía detectores de concentración de gas sulfhídrico ni había alarmas de detección de gas.El helipuerto requería de mantenimiento anticorrosivo y un programa contraincendio. Las grúas no tenían sistemas de comunicación, tampoco las zonas de perforación. El equipo de bombeo era deficiente, los motores estaban dañados.Todo el mobiliario de la zona habitacional requería ser sustituido. El personal de la plataforma no pudo comprobar su experiencia y tampoco estaba capacitado para situaciones de emergencia.
DENUNCIA INTERNACIONAL
El tema de la reforma energética o la manera de privatizar las áreas más rentables de la paraestatal Petróleos Mexicanos ha sido para el presidente de México, Felipe Calderón Hinojosa, su principal tema en la agenda desde que se desempeñó como secretario de Energía en el sexenio de Vicente Fox y ahora durante su gobierno.En enero de 2008 el presidente Calderón nombró a Juan Camilo Mouriño Terrazo secretario de Gobernación (Ministro del Interior) para que cabildera su proyecto de reforma energético. Mouriño Terrazo era además promovido por el propio presidente, como su sucesor natural a la Presidencia de la República en 2012.A unas semanas de su nombramiento, en febrero de 2008, la revista mexicana Contralínea, especializada en periodismo de investigación, publicó un amplio reportaje firmado por Ana Lilia Pérez, donde se revelaba una serie de contratos que Juan Camilo Mouriño firmó entre 2001 y 2004, con Petróleos Mexicanos, a favor de su empresa Transportes Especializados Ivancar, en su dualidad como contratista de Pemex y presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados. Los contratos, para el transporte de hidrocarburos (gasolina y turbosina), por 120 millones de pesos, se los adjudicó sin licitación pública de por medio, la subsidiaria Pemex Refinación.La misma semana en que Contralínea publicó la investigación periodística, el excandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador solicitó a la revista los documentos en cuestión. El día 21 de marzo frente a la torre de Pemex en un multitudinario mitin en contra de la privatización de Pemex, exhibió los documentos para acusar al secretario de Gobernación de “traficante de influencias”.El hecho de que la revista Contralínea entregara a congresistas y políticos los documentos publicados derivó en el acoso, persecución y amenazas de muerte en contra de la reportera Ana Lilia Pérez y del director de la publicación, Miguel Badillo Cruz. Paralelamente, empresarios vinculados al presidente Calderón y al secretario Mouriño promovieron en cascada demandas judiciales por daño moral en contra de la publicación, del director y de la reportera.Esto es una muestra de los intentos del gobierno federal de castigar, reprimir y desaparecer a los periodistas y medios de comunicación que han revelado cómo un grupo de funcionario públicos y empresarios se han enriquecido de manera ilícita con recursos de la principal empresa del Estado, y es una muestra clara de los intereses detrás de la reforma que por estos días aprueba el Congreso mexicano, en medio de las protestas de los expertos en la materia -que saben el impacto para el pueblo mexicano al privatizarse la principal empresa del país- y de la población en general.A raíz de las investigaciones periodísticas relacionadas con los funcionarios públicos y los empresarios a quienes señalan como responsables del acoso y presiones en su contra, los periodistas han recibido amenazas de muerte e intimidaciones. Consideran que su vida e integridad está en riesgo, lo mismo que la de sus familias.Los hechos se han denunciado ante las autoridades judiciales y en materia de derechos humanos: Procuraduría General de la República y Comisión Nacional de Derechos Humanos. Hasta el momento no ha habido respuesta.¡
EXIGIMOS RESPETO A LA VIDA Y TRABAJO DE LOS PERIODISTAS HONESTOS !
¡ LOS PERIODISTAS ANA LILIA PÉREZ Y MIGUEL BADILLO CRUZ NO ESTÁN SOLOS !POR EL COMITÉ NACIONAL DE ESTUDIOS DE LA ENERGÍA
A. C.Ing. Alfredo Hernández Peñaloza
Arq. Mario Galicia Yepez
C. Francisco Javier Carrillo Soberón.
COORDINACIÓN NACIONAL

La televisión en México, la de Televisa y TV Azteca, es televisión estridente, efectista, de mucho oropel, mucho ruido y pocas nueces, a menos que las nueces las tengan en la mira los dueños y ejecutivos de las televisoras. Por eso, y a riesgo de sonar de nuevo sospechosista, esta columna se pregunta por qué a veces, así nomás, la tele pierde de pronto el interés en algo que nos estaba cacareando apenas hace un instante con su vocinglera esquizofrenia. Dicen los que de estas oscuras cuestiones mucho dicen saber, que debajo de la superficie de los noticieros hay una enorme, inmensa avenida de conveniencias y complicidades finamente tejidas con la burda fibra del dinero; que los noticieros suelen ser parte de los mejores ingresos de las televisoras, porque no solamente representan una gorda fuente de ingresos, sino que posiblemente, muy posiblemente, buena parte de esos ingresos entran a caja libres de espinas, sin adocenados acomodos contables ni, desde luego, obligaciones tributarias.
Eso puede no ser más que mala leche de la que se nutren los más cutres rumores, pero uno no puede dejar de ver en el pasado reciente terribles escándalos, casos irresueltos que cimbraron a toda una sociedad y que parecen ser, para tranquilidad de perpetradores y angustia de sobrevivientes y víctimas, agüita debajo del puente.
¿Por qué, a guisa de macabro ejemplo, habla la tele de las muertas de Juárez sólo de vez en cuando, como si hablara de algo por todos sobreentendido, como si se tratara de una vieja fractura geológica, un edificio ruinoso, vago, añejo problema?, ¿por qué las televisoras quitan pronto el dedo de ese retorcido renglón en lugar de porfiar en entrevistas a funcionarios ineptos: gobernadores, ex gobernadores, procuradores estatales de justicia, hasta llegar al sótano de lo judicial?, ¿por qué no hacer periodismo de investigación –no dejárselo sólo a cineastas– y bucear de veras en la mierda, sondear las versiones que involucran a juniors gringos, a una vasta red de pornografía asesina de mayoritario consumo estadunidense?, pero qué tal, en cambio, la basura farandúlica de programas como Hoy o Venga la mañana … ¿Por qué no hacen un día una emisión desde Juárez o Tijuana, en que Andrea Legarreta en lugar de las paporretas babeantes de siempre, establezca un diálogo directo, de concienciación, con las madres y hermanas de las víctimas de esa masacre de género que nos avergüenza en el mundo entero?, ¿por qué no implementar una recia campaña de concientización para las mujeres que trabajan en las maquiladoras de la frontera y hablarles acerca de la pavorosa realidad a la que se exponen día tras día? Pero qué tal, en cambio, la pastura, la sarta de estupideces de quienes editorializan la telenovela de la noche en Se vale o Ventaneando …
¿Por qué nadie en la tele, ni con aquellas pruebas documentales, cuestiona que Mario Marín siga en la silla grande en Puebla?, ¿que Ulises Ruiz, ese mago de la mentira y la represión descaradas, se mantenga en el poder en Oaxaca?, ¿por qué ningún comentarista, analista o conductor de noticieros pregunta dónde está Kamel Nacif, o repasa la posibilidad de los nexos entre presuntos pederastas (y también, de estrechos vínculos con la comunidad empresarial mexicano-libanesa) y funcionarios federales antes priístas y hoy furibundos panistas?, ¿es que se olvidó de pronto de quién es el yate en que Succar Kuri se sacaba fotos con las chiquitinas que violaba y regenteaba?
¿Es de verdad la mexicana una televisión –una sociedad– con tan poca memoria?, ¿por qué no vemos a los reporteros de los duopólicos conglomerados noticiosos perseguir con la misma agresividad que persiguen a funcionarios de izquierda y de verdadera oposición a este balbuceante régimen de derechas, a esos funcionarios y empresarios sobre los que pesan serias acusaciones o sospechas?, ¿por qué no hay una tropa de reporteros agresivamente inquiriendo las razones de los empresaruchos sacadólares, de los que no pagan impuestos sobre sus transacciones multimillonarias, de aquellos que no pueden explicar tranquilamente su riqueza y su ostentación?, ¿por qué han dejado en paz de pronto a gente de cola tan larga como la Sahagún, su pelele marido y su prole voraz?
Cualquiera con dos dedos de frente contestaría que hay un porqué, y que se cuenta en maquinitas, se agrupa con ligas y se traduce en divisas varias, y es lo que realmente mueve al mundo. Sobre todo al mundo de la televisión, y que nadie, pero nadie, se atreve a destapar la cloaca inmunda.
Jorge Moch
tumbaburros@yahoo.com
.....directo a su cloaca!
Apro / Álvaro Delgado
El Partido Acción Nacional sufre un sostenido desplome en el respaldo de los mexicanos después de la elección presidencial de 2006 y, a casi dos años del Gobierno de Felipe Calderón, ha perdido más de 2 millones de votos.
Inclusive este año, ya con Germán Martínez como Presidente, ha padecido tantas derrotas que de ser primera fuerza electoral en 2006, se convirtió en la tercera, detrás del PRI y hasta del PRD.
El PRI se consolidó como la primera fuerza con un millón 690 mil votos, seguido del PRD, que acumuló poco más de 730 mil sufragios, y el PAN sumó 592 mil, según cifras de los órganos electorales de los estados.
Tras 21 procesos electorales locales en dos años, el PAN se ‘consolidó’ también como cuarta fuerza política en estados como Guerrero e Hidalgo, detrás de Nueva Alianza, el partido de Elba Esther Gordillo, con la que Martínez negocia una coalición para 2009.
La última elección del año tendrá lugar el próximo domingo en Hidalgo -donde las expectativas de éxito del PAN son prácticamente nulas- un día después de que se reúna el Consejo Nacional para discutir las causas de las derrotas.
“En ese momento haré juicios de valor, haré valoraciones de la estrategia y en ese momento propondré rutas de futuro, pero antes no emitiré ningún comentario”, advirtió Germán Martínez tras convocar a ese órgano un día después de la elección en Coahuila, donde fueron vapuleados los candidatos impulsados por el senador Guillermo Anaya, compadre de Calderón.
Pierden panistas 2 millones de votos
El desplome electoral del PAN comenzó en las elecciones de Chiapas y Tabasco, en 2006, y se profundizó durante 2007, cuando el presidente era Manuel Espino. En ese período acumuló una pérdida de un millón 419 mil 226 sufragios.
Como candidato único a dirigirlo, por decisión de Felipe Calderón, Germán Martínez ofreció hacer del PAN un partido ganador con base en la unidad y evitar la pérdida de presidencias municipales, algunas emblemáticas.
“En las últimas fechas no alcanzamos el triunfo en varios palacios municipales, como Ciudad Juárez, Aguascalientes, Oaxaca, Mazatlán o Veracruz. No podemos seguir perdiendo oportunidad de darle a los mexicanos el ideario de Acción Nacional”, dijo Martínez en la ceremonia de su registro, en noviembre del 2007.
Y advirtió: “Si perdemos palacios municipales ponemos en riesgo en 2012 el Palacio Nacional. Nuestra esencia federalista y municipalista es la ruta de la victoria electoral”.
Sin embargo, el retroceso electoral ha seguido. Ungido presidente del PAN el 7 de diciembre del año pasado, Martínez ha acumulado pérdidas de alcaldías y, en las elecciones de este año, registra una disminución de 592 mil 458 votos respecto a las elecciones de 2006, según cifras de los institutos electorales federal y estatales.
En total, después de 2 procesos electorales en 2006, 14 en 2007 y 8 en este año, el PAN perdió un total de 2 millones 11 mil votos, a razón de un millón anual, tendencia que Martínez pretende frenar hacia 2009, cuando se disputarán la Cámara de Diputados, alcaldías y diputaciones locales en 11 estados, así como seis Gubernaturas.
A contrapelo del silencio de Martínez, que ha instruido a los presidentes estatales a evitar controversias por los resultados, un consejero nacional, Fernando Canales Clariond, le envió una carta privada, el 23 de octubre, en la que le advierte: “Creo que en las derrotas electorales recientes el pueblo nos está mandando una señal clara”.
Y explica: “No quieren al PAN que solapa a sus funcionarios corruptos, no quieren al PAN que se alía con lo peor del PRI, no quieren al PAN que al llegar al poder designa a sus cuates para desempeñar puestos para los que no están calificados, no quieren a un PAN que calla a sus liderazgos en las regiones donde somos oposición en aras de una supuesta gobernabilidad y/o popularidad nacional, no quieren a un PAN que pretende enfrentar realidades negativas con discursos triunfalistas. En suma, no quieren a un PAN que cada vez se parece más al PRI”.
El ex Gobernador de Nuevo León, quien al incorporarse al Gobierno de Fox fue sustituido por Fernando Elizondo -el más viable candidato del PAN al Gobierno de ese estado-, apunta: “Estamos muy a tiempo de cambiar, en el PAN y en el Gobierno. Tan simple como volver a nuestros orígenes, tan simple como actuar con congruencia y acorde con nuestros principios”.
Canales Clariond envió la carta a Martínez para repudiar la decisión del CEN de “atraer” el caso del Alcalde de Monterrey, Nuevo León, Adalberto Madero, acusado de corrupción, a contrapelo de los resultados de una comisión ad hoc para investigar el caso.
La comisión estuvo integrada por el presidente estatal del PAN, Juan Carlos Ruiz, José Luis Coindreau, Ana María Schwartz, José Eduardo Pérez y él mismo, quien le manifiesta a Martínez su desacuerdo con la decisión del CEN, que sin embargo acata:
“1.- Es una decisión centralista que desconoce la capacidad de resolver sus problemas a los órganos locales. 2.- Resta autoridad y estatura política a las instancias locales y a las personas que estábamos interviniendo. 3.- Proyecta una imagen de ‘solapar’ a autoridades panistas corruptas, en aras de intereses electorales”.
Y añade: “Tengo la impresión de que muchos panistas de Nuevo León no hemos tenido capacidad de transmitir a nuestros dirigentes nacionales el fondo del caso Madero, va mucho más allá que la coyuntura electoral del 2009, va mucho más allá de la candidatura al Gobierno del Estado de Nuevo León. Se trata de reafirmar ante nuestra militancia y ante la sociedad nuestra vocación de servicio público con honestidad. Se trata de demostrar congruencia en nuestro objetivo de: ‘Llegar al poder para realizar el bien común’, no se trata solamente de ganar elecciones.”
Las pérdidas
Ganar elecciones es, justamente, lo que no ha hecho el PAN desde 2006, cuando Calderón fue designado oficialmente como ganador bajo acusaciones de fraude electoral. El 20 de agosto de ese año se celebraron comicios en Chiapas, donde su candidato, Francisco Rojas, declinó por el priísta José Antonio Aguilar Bodegas y sólo recibió 29 mil 476 votos, equivalentes al 2.4%.
La pérdida de sufragios fue de 185 mil 882, porque Calderón había logrado 215 mil 358 votos, es decir, el 16.9%.
Ocurrió lo mismo en Tabasco, el 15 de octubre: aunque el candidato panista, Francisco Cáceres, no declinó formalmente por el priísta Andrés Granier, fue obvia la alianza y el PAN obtuvo apenas 29 mil 982 votos, si bien fueron apenas 2 mil votos menos que los 31 mil 975 de Calderón.
El 2007, el primer año de Gobierno de Calderón y todavía con Espino como presidente, parecía prometedor para ese partido con la victoria que obtuvo en Tuxcueca, Jalisco, en las elecciones extraordinarias del 18 de febrero, después de un empate a 662 sufragios.
Pero no: en la primera elección formal del año, el 20 de mayo, en Yucatán, el PAN perdió la Gubernatura frente al PRI, aunque sólo retrocedió 10 mil votos respecto de los obtenidos por Calderón.
El 1 de julio se celebraron elecciones en Chihuahua, donde la caída fue muy pronunciada: el PAN perdió 147 mil 420 votos en comparación con los obtenidos por Calderón, y en Durango, tierra natal de Espino, también se produjo un retroceso de 57 mil 937 votos respecto a la elección presidencial.
Ese mismo 1 de julio se celebraron elecciones en Zacatecas y, aunque el PAN conquistó la capital, los votos que obtuvo en todo el estado fueron 56 mil 78 menos que los de Calderón.
Un mes después, el 5 de agosto, el PAN siguió a pique. En Aguascalientes el retroceso no sólo consistió en perder la capital y su condición de primera fuerza, sino la disminución en 88 mil 198 votos respecto de la elección presidencial, y en Oaxaca, donde el PRI ganó todos los distritos, la caída del PAN fue de 111 mil 965 sufragios comparados con los obtenidos por Calderón.
Baja California fue, para el PAN, un oasis: retuvo la Gubernatura, ganó cuatro de los cinco ayuntamientos y 14 de los 16 diputados de mayoría, aunque perdió 13 mil 826 votos respecto de la elección presidencial.
Pero en Veracruz, el 2 de septiembre, el PAN se derrumbó: además de perder municipios emblemáticos, como el puerto de Veracruz, perdió 246 mil 651 votos respecto a la elección presidencial.
El 7 de octubre hubo elecciones municipales en Chiapas, y aunque perdió Tapachula, el PAN se recuperó por la coalición que hizo con Nueva Alianza y alcanzó 322 mil votos, mientras que en las de Oaxaca, también de ayuntamientos, preservó el nivel que tenía tres meses antes.
Una semana después, el 14 de octubre, en Sinaloa el PAN padeció otro descalabro: no sólo perdió la emblemática ciudad de Mazatlán, sino que cayó su votación en 94 mil 688 votos respecto de 2006.
Las últimas elecciones del año, el 11 de noviembre, también representaron pérdidas de votos para el PAN en comparación con 2006. En Michoacán, aunque quedó en segundo lugar, retrocedió en 29 mil 753 votos, y en Puebla fue barrido por el PRI, con un retroceso de 207 mil 931 sufragios respecto de los obtenidos por Calderón.
En las elecciones de Tamaulipas, el PAN perdió 159 mil 122 votos, pues en la elección presidencial Calderón obtuvo 506 mil 177, mientras que en las locales sólo logró 347 mil 55.
Tlaxcala, donde gobierna el ex priista Héctor Ortiz, fue el único estado donde Acción Nacional se mantuvo como fuerza hegemónica, al obtener 131 mil 894 votos, y con todo fueron 8 mil 234 menos que los 140 mil 128 logrados por Calderón.
Germán, como Espino
Con la llegada de Germán Martínez a la presidencia del partido muchos panistas creyeron que las derrotas terminarían, no sólo porque concluiría la confrontación Espino-Calderón, sino porque fueron incorporados al CEN expertos electorales encabezados por Jorge Manzanera Quintana, secretario general adjunto.
Socios de Quintana en Desarrollo y Operación de Campañas (Docsa), empresa que hasta ahora asesora a candidatos panistas en todo el País y que en el Estado de México tiene un mercado cautivo, Alejandro Villalobos Bayón fue nombrado secretario de Elecciones, y Javier Rodarte de la Rosa secretario de Fortalecimiento Interno.
Las primeras elecciones de su gestión, celebradas el 3 de febrero de este año, continuaron la tendencia descendente de Espino: En Baja California Sur, Calderón obtuvo el segundo lugar, con 62 mil 127 votos, pero en las elecciones estatales el PAN perdió 41 mil 127 sufragios, al obtener sólo 21 mil en la elección de alcaldes, lo cual lo hizo retroceder hasta el cuarto lugar, detrás inclusive de Nueva Alianza, el partido de Gordillo.
En Quintana Roo la pérdida de votos respecto de la elección presidencial fue de 39 mil 128. Calderón obtuvo 111 mil 500 y en las elecciones locales el PAN logró 72 mil 372.
En Hidalgo, Calderón logró 251 mil votos, pero en la elección de diputados locales el PAN consiguió 81 mil 606. Una pérdida de 169 mil 394 sufragios que lo colocó como la cuarta fuerza electoral.
Como Baja California con Espino, las elecciones de Nayarit fueron para Martínez un oasis, porque el PAN sólo perdió 4 mil votos respecto de 2006: Calderón logró 69 mil votos, mientras que en la elección de diputados locales acumuló 65 mil 460 votos.
Pero, en contraste, el desplome en Coahuila fue brutal, el peor en los dos años de Gobierno de Calderón: el PAN obtuvo el primer sitio en la elección presidencial, con 400 mil votos, pero en la elección local sólo recogió 127 mil 334. La pérdida asciende a 272 mil 666.
En Guerrero, Calderón obtuvo 160 mil votos, pero en las elecciones locales la pérdida para el PAN fue de 66 mil 143 sufragios, porque únicamente ganó 93 mil 857 en la elección de municipios. Su bastión, Taxco, le fue arrebatado.
Para colmo, hubo municipios donde no obtuvo ni un solo voto, como Tlapa de Comonfort, la entrada a la región de la Montaña, y en Malinaltepec, aunque ganó cuatro municipios, entre ellos Cuajinicuilapa, una comunidad mayoritariamente negra.
Aunque queda pendiente la elección de Hidalgo, el CEN del PAN está concentrado completamente en las elecciones intermedias del 5 de julio de 2009, cuando, además de diputados federales, se elegirán alcaldes y diputados locales en los estados de México, Guanajuato, Distrito Federal, Jalisco, Morelos, Campeche, Colima, Nuevo León, Querétaro, Sonora y San Luis Potosí. En las últimas seis entidades se elegirá, además, Gobernador.
En estas elecciones el PAN de Germán Martínez tratará de revertir la tendencia perdedora que, con Calderón en el Gobierno federal, ha implicado la pérdida de un millón de votos anuales.
En el PAN se especula también sobre los movimientos en el gabinete: se perderá un secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, pero se ganará un candidato al Gobierno de Campeche.
Preocupa Vicente
Hasta para una discusión amplia en el Consejo Nacional panista se han presentado problemas. El máximo órgano de dirección del PAN sesionará el próximo sábado, día de la clausura de la “Cumbre San Cristóbal: Democracia eficaz, la nueva era del humanismo de centro en la política” -convocada por Vicente Fox, presidente de la Internacional Demócrata de Centro (IDC)–, a la que asistirán políticos de derecha, como Mariano Rajoy, dirigente del Partido Popular de España, y Álvaro Uribe, presidente de Colombia.
Ese empalme ha causado desconcierto entre panistas: Germán Martínez, al convocar al Consejo Nacional el mismo día, opacará la “cumbre” en la que está anunciada su participación, pero además porque la organiza Fox -a quien él designó como el principal estratega para “guanajuatizar” México- y porque está prevista también la asistencia de numerosos consejeros nacionales.
¿Sabes lo que es el 'Amero'? Un Virtual Golpe de Estado
Un Virtual Golpe de Estado
A Espaldas de Todos
Este plan fue al asunto clave que se acordó en la reunión que en Marzo de 2005 tuvo lugar en la Universidad de Baylor, en Waco, Texas, entre los presidentes Bush y Fox y el primer ministro canadiense Martin... a espaldas de todos en sus países.
La declaración conjunta de los tres dirigentes publicada después de esa reunión — y que no fue divulgada en México más que en círculos muy cerrados —, anunciaba la formación de un ente inicial llamado "Sociedad para la Seguridad y Prosperidad de Norteamérica".
¿Y para qué se creó esta sociedad?
Objetivo: Establecer una sociedad trilateral que está dirigida a producir para Norteamérica, un plan de seguridad así como a proveer el libre movimiento de personas, capital y comercio a través de las fronteras entre los tres socios del NAFTA (TLC en español).
1. Estableceremos un enfoque común (léase 'criterio de Washington') hacia la seguridad, para proteger Norteamérica (léase Estados Unidos) de amenazas externas, prevenir y responder a amenazas dentro de Norteamérica (léase represión a disidentes), y extender más la línea para el movimiento seguro y eficiente de el tráfico legítimo y de bajo riesgo a través de nuestras fronteras.
2 Estableceremos grupos de trabajo dirigidos por nuestros ministros y secretarios que consultarán con entidades de interés ('stakeholders') en nuestros respectivos países. Estos grupos de trabajo responderán a las prioridades de nuestra gente y nuestros negocios, y sentarán metas específicas, medibles y realizables.
Esto, obviamente es el blablablá normal de este tipo de comunicados conjuntos, orientado al consumo externo. Pero horas despúes, la Secretaría de Prensa de la Casa Blanca sacó su propia nota donde aclara: "El objetivo de este plan es aumentar la posición competitiva de las industrias de Norteamérica en el mercado global y proveer una mayor oportunidad económica a nuestras sociedades, al mismo tiempo que se mantienen altos estándares de salud y seguridad para nuestra gente. Los Estados Unidos, México y Canadá trabajarán unidos y en consulta con los grupos de interés ('stakeholders'), para:
- Mejorar la Productividad
- Reducir los Costos de Comercio
- Mejorar la Calidad de Vida.
¿Soberanía? ¿Cuál Soberanía?
Dentro de esto, se avizora la formación de una autoridad política supraregional que funcione por encima de la soberanía de los países integrantes de esta especie de súper unión norteamericana, pero no hace falta mucho talento para deducir cuáles soberanías serán las que quedarían anuladas de facto.
La idea es crear una entidad que, controlada de facto desde Washington aun cuando en el papel se diga otra cosa, extienda la capacidad de protección de los Estados Unidos más allá de sus propias fronteras, lo que haría que la frontera estratégica norteamericana incluya las costas mexicanas así como la frontera al sur entre Guatemala y Belice, capturando a la vez, un mercado que quedaría prácticamente cautivo del flujo de bienes y servicios provenientes del que sería el socio hegemónico, los Estados Unidos, y que debido a la disparidad entre las economías, sería por mucho la más beneficiada desde el punto de vista económico... tal y como ha sucedido con el TLC actual.
La Crónica de un Fracaso Anunciado
NAFTA o TLC ha fracasado en crear una real sociedad debido a que no ha habido, en el gobierno hegemónico norteamericano, un cambio o transformación en la manera de tratar con los demás socios. Un bilateralismo dual, impuesto por el poder de los Estados Unidos, continúa gobernando e irritando a los gobiernos de los otros dos 'socios', Canadá y México.
¿Por qué entonces, esperan los gobiernos de Canadá y México que ahora sí, el trilateralismo funcione donde antes no funcionó? Un trilateralismo verdadero lograría que las normas acordadas, no el poder de facto, sean las que muevan los destinos de esta sociedad. Pero es iluso pensar que las poderosas camarillas norteamericanas, manejando leyes a su antojo en los lobbies y caucases americanos, dejen de lado sus prácticas abusivas e impositivas.
Además, el Amero
A partir de la función de los grupos de trabajo, y como era esperable, emergió el concepto del 'Amero', como una moneda internacional la cual resultaría de homogenizar el sistema monetario estadounidense con los de México y Canadá,
Es importante hacer nota que esto que estamos comentando no es una teoría de alguna conspiración, amarillismo ni especulación. Este plan es un trabajo internacional que está ya en marcha en la que se embarcaron los ejecutivos de los tres países referidos, sin el previo consentimiento ni supervisión de sus respectivos cuerpos legislativos.
Por ello, es importante hacer notar la inconstitucionalidad de ese acuerdo firmado por Fox en marzo de 2005, que está siendo asumido como válido por Calderón, el presidente institucional de facto que está continuando con el modelo neoliberal, ampliamente rechazado por las mayorías mexicanas.
La pérdida de soberanía tanto de México como de Canadá será una de las consecuencias inexorables de este 'acuerdo', donde como sucede en otras organizaciones mundiales, como son la misma ONU y la OMC, rige la voluntad de los Estados Unidos, por encima del consenso o votación de los demás.
Colapsando el Dólar Americano
Para poder lanzar el Amero como moneda de cuño corriente internacional, es necesario antes colapsar el dólar, y de hecho, parece ser que la estrategia encaminada hacia este propósito ha comenzado ya a ser ejecutada.

"La creación del amero le será presentada a la opinión pública como la solución mágica del gobierno para la recuperación del dólar. Es claro que en el proceso de creación del amero, la administración de Bush decidió abandonar el dólar."
Y mucho menos caigas en la trampa del famoso boletazo.
Editorial ¡Otra más a la cuenta!.
Domingo 02, noviembre del año 2008
Toda vez que oficialmente ya sabemos que las elecciones del 2006 fueron un fraude a la Nación; y que por consiguiente el señor Calderón es un Presidente espurio (razón por la que tanto le molesta que se lo echen en cara) es fácil entender el porqué quien habita en Los Pinos no tiene ningún compromiso con el Pueblo y por consiguiente ninguna intención de servirlo.
Y en esas circunstancias es lógico entender que anunciara pomposamente su programa energético para los industriales, por medio del cual los empresarios podrán pagar una tarifa fija anual de electricidad.
Y de la misma manera acceder a un contrato de gas que les garantice el precio de los energéticos por todo un año. Es decir, a la estabilidad económica que se requiere como indispensable para programar y crecer.
Lo que ciertamente está muy bien, sobre todo si recordamos que fue una de sus promesas de campaña.Lo malo del caso es que, para no variar, se olvidó del Pueblo al que supuestamente se debe.
Lo que hace de nuestra Democracia una parodia perversa en la que los políticos han perdido la vergüenza para engañar a los ciudadanos.
Por lo que cada vez que el señor Calderón le dirige la palabra a los conciudadanos, no se puede esperar nada bueno. Haciendo entendible el porqué en menos de dos años ya tiene harto al Pueblo.
Que seguramente aprovechará las próximas elecciones para manifestar su inconformidad, absteniéndose de participar en la farsa que son los comicios. Al tiempo; finalmente ya falta poco.
PROGRAMA MINIMO DE LÓPEZ OBRADOR Y LO QUE FALTA
02 noviembre 2008
pedroe@cablered.net.mx
1. Me da un enorme gusto que el “expriísta” Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no se canse ni se “raje”, así como que siga haciendo mítines y concentraciones en todo el país causando dolores de cabeza a gobierno y empresarios que lo consideran “un loco o un peligro para México”. A pesar de sus orígenes políticos (que tanto se le ha criticado) ha estado por encima de miles de “marxistas y leninistas dispuestos a dar la vida” que prefirieron venderse al PAN o al PRI u otros partidos o que se retiraron a negocios lucrativos. Podrá ser un socialdemócrata que piensa que el “único camino hacia el gobierno es el electoral”, pero su estrategia política basada la movilización está ayudando a frenar al poder, además que puede transformarse en mejores cosas para los trabajadores. Lo que le falta a AMLO se irá construyendo en el camino si los luchadores sociales y los trabajadores son más inteligentes que la burguesía dominante.
2. La realidad es que si innumerara mis artículos de los últimos cuatro años (100 por ciento sobre asuntos políticos) encontraría que quizá el 50 por ciento han sido escritos alrededor de las batallas de López Obrador. De ninguna manera por ser un seguidor de él y mucho menos de su partido (el PRD); sin embargo debo decir que durante ese tiempo el centroizquierdismo de López Obrador ha sido lo más representativo de la política nacional. Quizá como él, fueron Marcos y el EZLN lo más importante en los cuatro años que siguieron al levantamiento zapatista de 1994. Aunque todo el año de 2006 lo dediqué esencialmente a la lucha de los profesores y de la APPO oaxaqueñas y no he dejado de escribir sobre las heroicas batallas de la CNTE por un sindicalismo y una educación al servicio del pueblo, López Obrador me comprometió más por ser sus batallas más generales y nacionales.
3. Obviamente, muy por encima de las batallas que libran en México los lópezobradoristas están, sin duda, las que se registran en América Latina y Asia contra el imperio yanqui y el capitalismo internacional. Mientras en México se decide esencialmente el camino de un país, las batallas de Fidel Castro, Hugo Chávez, Evo Morales, del mismo Lula, así como la de los palestinos, de Irak, Irán, India y China, tienen que ver de manera directa, con una batalla internacional contra el capitalismo y por el socialismo. ¿Por qué la lucha de López Obrador no se ve en ese contexto “antiimperialista” a pesar de que Calderón está el servicio directo del gobierno yanqui? Quizá porque AMLO ha sido muy cuidadoso para no echarse en contra a los yanquis, aunque más tarde no le quede otro camino que hacerlo porque nuestra economía, la distribución de nuestro presupuesto y mucho más, tienen que ver con los yanquis.
4. AMLO acaba de presentar un programa mínimo de demandas muy concretas, pero poco explicadas; mismas que rascándoles un poquito encontraría cualquier investigador que son imposibles de conseguir sin grandes movilizaciones y denuncias contra la poderosa clase empresarial nacional y extranjera. ¿Se olvida acaso que desde 1982, al asumir De la Madrid la Presidencia (en medio de la gran crisis) se firmó con el FMI un documento que lo autoriza a imponer un Plan económico en México y a vigilar su cumplimiento? Los gobiernos de De la Madrid, Salinas, Zedillo (del PRI) y de Fox y Calderón (PAN) sólo obedecieron las exigencias de los organismos financieros al servicio de los EEUU: debilitar al Estado, apoyar las privatizaciones para fortalecer a la iniciativa privada, reducción total del gasto social, apertura indiscriminada a la economía de mercado, represión a los movimientos sociales, gobiernos derechistas.
5. El Programa de AMLO, que: 1. Se elimine o disminuyan las partidas del Presupuesto destinadas a mantener los privilegios de la alta burocracia. 2. Se otorgue créditos con bajas tasas de interés a pequeñas y medianas empresas y comercios, condicionados a no despedir trabajadores; 3. Se proteja los ahorros y los fondos de pensiones de los empleados y de la clase media; 4. Se fortalezca la educación pública y dé atención prioritaria a los jóvenes; 5. Se pongan en práctica programas de apoyo directo a discapacitados, madres solteras y adultos mayores; 6. Se frene la pérdida del poder adquisitivo del salario, mediante el congelamiento de precios en alimentos, impuestos y servicios; 7. Se reduzcan los precios de gasolinas, diesel, gas y energía eléctrica; 8. Se impulse la construcción de infraestructura, vivienda y obras públicas para reactivar la economía y crear empleos; 9. Se apoye a los productores del campo para lograr la autosuficiencia alimentaria y 10. Se garantice el acceso a los servicios de salud, así como otorgar medicamentos gratuitos a quienes carecen de seguridad social.
6. Sin embargo, aunque es un programa limitado porque su objetivo es movilizar, debe introducírsele demandas directas de organizaciones de trabajadores para que otros organismo participen; demandas tales como luchar contra las reformas a la Ley del Trabajo, apoyo a la lucha por la democracia e independencia sindicales, así como contra líderes sindicales venales; combate contra los terratenientes rurales y monopolios urbanos; organización del Movimiento de Trabajadores Desempleados (como en Argentina); defensa de los trabajadores expulsados de EEUU; organización y lucha de trabajadoras sexuales por sus derechos; presupuesto con orientación social; no pago a rescates bancarios y carreteros, etcétera. Además de la lucha social por intereses políticos deben figurar demandas de trabajadores y organizaciones que permitan agrandar y profundizar el movimiento.
7. Es importante haber invitado a decenas de prestigiados coordinadores de las acciones políticas que se organizarán. Al parecer estas coordinaciones pueden crecer más, tanto en número como en actividades. Lo importante es que no sean simples piezas de ornato que por falta de un justo salario se conviertan en ineficientes. Es necesario que ante este gobierno panista, que tiende a reprimir con mayor saña los movimientos sociales de oposición, se auxilien de cientos de activistas que, conscientes del significado de esa gran tarea, estén dispuestos a entregar el tiempo y las energías necesarias. Si estas coordinaciones se llevan a los sindicatos y demás agrupaciones podrían lograrse muchos avances. Ante la crisis económica y el desgobierno, existe indudablemente una buena coyuntura para luchas y avanzar en la organización de los trabajadores. Si no se aprovechan estas circunstancias perderemos una gran oportunidad.
8. La situación del país en los últimos meses se ha agravado por el desempleo, los miserables salarios, los aumentos de artículos, por el descontento que se desató por la privatización del petróleo y ahora por la devaluación del peso respecto al dólar. La continuidad de la lucha de los lópezobradoristas agrupados en la CND, es un magnífico indicador. Solamente falta crear una gran coordinación de movimientos sociales en la que los electricistas, los indígenas zapatistas y campesinos, los maestros y los estudiantes, los mineros, telefonistas, trabajadores de la UNAM y del IMSS, así como los miembros de la APPO, de Atenco, los Panchos Villas 1 y 2 y otros, tengan un lugar. Si Muñoz Ledo, Doña Rosario, Camacho, Monreal no son capaces de usar su enorme experiencia para agrupar a otros sectores sociales en lucha, entonces estaremos condenados a marchar cada quien de su lado y a que nos destruyan por eso.
pedroe@cablered.net.mx
Pa' que no se olvide:
¿Quién del PRD, PT y Convergencia votó a favor de la reforma petrolera?Publicado por Samuel García |
Latinoamérica soberana
Editorial de La Jornada
El presidente de Bolivia, Evo Morales, suspendió ayer de manera indefinida en su país las operaciones de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés), por el financiamiento de funcionarios de ese organismo a sectores de la oposición boliviana y por su participación en acciones de “espionaje político” en contra del gobernante. El anuncio se da apenas unos días después de que el gobierno de la nación andina negara a la DEA permisos para sobrevolar su territorio, y en momentos en que la complicada relación diplomática entre La Paz y Washington ha derivado en la expulsión de sus respectivos embajadores.
Amén de las acusaciones fincadas por el mandatario en contra de la agencia antidrogas estadunidense –que dan cuenta de inadmisibles intentos por subvertir la democracia en Bolivia–, debe reconocerse que la medida adoptada por Morales reviste sensatez, dignidad y un inequívoco espíritu de defensa de la soberanía nacional: la presencia de agentes de la DEA en otros países es un hecho visto incluso con normalidad que implica, sin embargo, la aplicación extraterritorial de las leyes estadunidenses y constituye, consecuentemente, una amenaza a la soberanía nacional y al principio de autodeterminación de los pueblos.
Por lo demás, el episodio que se comenta forma parte de una oleada que tiene lugar en América Latina. Ayer mismo, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, señaló que la multinacional Repsol YPF –renuente a modificar los términos contractuales con el gobierno de ese país– tendrá que irse, e incluso añadió: “que entiendan las compañías trasnacionales: la banana república se acabó”. Este anuncio tiene como referente inmediato el realizado el 13 de febrero de este año por el venezolano Hugo Chávez, en el sentido de suspender, tras una larga historia de litigios judiciales en instancias internacionales, el suministro de crudo a Exxon Mobil y poner fin a las relaciones comerciales entre el gigante energético estadunidense y la estatal Petróleos de Venezuela SA, en respuesta a las acciones de hostigamiento jurídico y económico emprendidas por la multinacional con el respaldo de la Casa Blanca.
Otro ejemplo relevante dentro de esa tendencia lo constituye la adhesión de Honduras, el pasado 25 de agosto, a la Alternativa Bolivariana para las Américas –que integraba ya a Venezuela, Cuba, Nicaragua y Bolivia–, una decisión que fue calificada por Manuel Zelaya, presidente del país centroamericano, como una “segunda independencia”. Dicho acuerdo busca frenar la influencia política y económica de Estados Unidos en la región y constituye, en ese sentido, una respuesta al Área de Libre Comercio de las Américas, promovida por Washington como una extensión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
En suma, como puede verse con los ejemplos referidos, diversos países latinoamericanos avanzan en la recuperación progresiva de sus soberanías y la reconfiguración de sus relaciones con actores foráneos –sean éstos gobiernos o corporativos–, en términos que resulten benéficos para sus intereses nacionales y que salvaguarden la potestad sobre su territorio y recursos naturales. Es significativo, por cierto, que mientras esto ocurre en la región las autoridades mexicanas se empeñan en transitar en sentido opuesto, y en descalificar, calumniar y linchar mediáticamente a quienes no suscriben esa necedad.
El rescate, saqueo final de Bush
En los días finales de la campaña presidencial, muchos republicanos parecen haberse dado por vencidos. Pero eso no significa que estén descansando. Si quieren ver verdadero trabajo duro republicano, vean la energía que le pusieron a sacar por la puerta grandes porciones del rescate de 700 mil millones de dólares. En una reciente sesión de la comisión bancaria del Senado, el republicano Bob Corker estaba obsesionado con esta tarea y con una clara fecha límite en mente: la toma de posesión presidencial. “¿Cuánto crees que pueda gastarse de aquí al 20 de enero o algo así?” Le preguntó Corker a Neel Kashkari, el ex banquero de 35 años encargado del rescate.
Cuando los colonizadores europeos se dieron cuenta de que no tenían de otra más que entregar el poder a la población originaria del lugar, muchas veces se enfocaron en despojar a la tesorería local de su oro y llevarse el valioso ganado. Si eran realmente desagradables, como los portugueses en Mozambique a mediados de los años 70, vertían concreto por los huecos de los elevadores. La pandilla de Bush prefiere instrumentos burocráticos: subastas de “activos en riesgo” y el “programa de adquisición de acciones”. Pero no se vayan con la finta: la meta es la misma que la de los derrotados portugueses: un último frenético saqueo de la riqueza pública antes de entregar las llaves de la caja fuerte.
¿De qué otra manera serían lógicas las bizarras decisiones que han dominado la asignación del dinero del rescate? Cuando la administración de Bush anunció que inyectaría 250 mil millones de dólares a los bancos estadunidenses a cambio de acciones, el plan fue descrito por muchos como “nacionalización parcial”: una medida radical que se necesitaba para que los bancos comenzaran de nuevo a prestar dinero. De hecho, no ha habido ninguna nacionalización, parcial o no. Los contribuyentes no han adquirido un control significativo, razón por la cual los bancos pueden gastarse su inesperada ganancia como quieran (en bonificaciones, fusiones, ahorros…) y el gobierno no puede hacer otra cosa que rogar que utilicen una parte en préstamos.
Entonces, ¿cuál es el verdadero propósito del rescate? Me temo que es algo mucho más ambicioso que un regalo que se da una sola vez a los grandes negocios: este rescate está diseñado para seguir saqueando al Departamento del Tesoro durante años. Recuerden, la preocupación principal entre los grandes jugadores en el mercado, en específico los bancos, no es la falta de crédito sino los maltrechos precios de sus acciones. Los inversionistas han perdido la confianza en la honestidad de los bancos, y con razón. Aquí es donde el capital del Departamento del Tesoro rinde frutos.
Al comprar acciones en estas instituciones, el Departamento del Tesoro lanza el mensaje al mercado de que son una apuesta segura. ¿Por qué segura? Porque el gobierno no puede darse el lujo de que fracase. Si estas compañías se meten en problemas, los inversionistas pueden suponer que el gobierno seguirá encontrando más dinero, ya que permitir que se derrumben significaría perder sus primeras inversiones de capital (nomás miren a AIG). Esa atadura del interés público a las compañías privadas es el verdadero propósito del plan de rescate: el secretario del Tesoro Henry Paulson le está entregando a todas las compañías que son admitidas en el programa –que podrían ser miles– una implícita garantía del Departamento de Tesoro. Para inversionistas asustadizos en busca de lugares seguros para meter su dinero, estos acuerdos de capital serán aún más reconfortantes que una calificación Triple A de Moody’s.
Un seguro como ese no tiene precio. Pero para los bancos, la mejor parte es que el gobierno les paga –en algunos casos miles de millones de dólares– por aceptar su aprobación. Para los contribuyentes, en cambio, todo el plan es muy riesgoso, y podría costarle significativamente más que la idea original de Paulson de comprar 700 mil millones de dólares en deuda tóxica. Ahora los contribuyentes no solamente están enganchados por las deudas sino, podría decirse, por el destino de cada empresa que les vende capital.
Resulta interesante que tanto Fannie Mae y Freddie Mac disfrutaron de este tipo de garantía tácita. Durante décadas el mercado comprendió que, debido a que estos jugadores privados estaban enredados con el gobierno, el Tío Sam siempre saldría al rescate. Era el peor de todos los mundos. No sólo se privatizaban las ganancias mientras los riesgos se socializaban, sino que además el respaldo gubernamental implícito creaba poderosos incentivos para hacer imprudentes inversiones.
Ahora, con el nuevo programa de adquisición de acciones, Paulson tomó el desacreditado modelo de Fannie y Freddie y lo aplicó a una enorme franja de la industria bancaria privada. Y una vez más, no hay razón alguna para rehuir de apuestas riesgosas: sobre todo ya que el Departamento del Tesoro no le ha exigido a los bancos que dejen los instrumentos financieros de alto riesgo a cambio de los dólares de los contribuyentes.
Para documentar nuestro optimismo, el gobierno federal también reveló ilimitadas garantías públicas para muchas cuentas de depósito bancarias. Ah, y por si esto no fuera suficiente, el Departamento del Tesoro promueve que los bancos se fusionen entre sí, asegurándose así de que las únicas instituciones que queden en pie sean “demasiado grandes como para fracasar”. Se le está diciendo, de tres maneras distintas, al mercado fuerte y claro que Washington no permitirá que las instituciones financieras del país se responsabilicen de las consecuencias de su comportamiento. Puede ser que ésta sea la innovación más creativa de Bush: el capitalismo sin riesgos.
Hay un atisbo de esperanza. En respuesta a la pregunta del senador Corker, al Departamento del Tesoro se le dificulta distribuir los fondos del rescate. Pidió cerca de 350 mil millones de los 700 mil millones de dólares, pero la mayor parte de éstos todavía no sale por la puerta. Mientras tanto, cada día queda más claro que el rescate fue promovido de manera fraudulenta. Nunca consistió en conseguir que los préstamos fluyeran. Siempre en convertir el Estado en una gigantesca compañía de seguros para Wall Street: una red de seguridad para la gente que menos lo necesita, subsidiado por la gente que más lo necesita.
Esta grotesca duplicidad es una oportunidad. Quien sea que gane la elección del 4 de noviembre tendrá una enorme autoridad moral. Puede ser utilizada para hacer un llamado a frenar la distribución de los fondos del rescate, no después de la toma de posesión sino ahora mismo. Todas las acuerdos deben ser renegociados inmediatamente, y que esta vez sea el pueblo el que obtenga las garantías.
Es riesgoso, claro, interrumpir el rescate. Al mercado no lo gustará. Nada podría ser más riesgoso, sin embargo, que permitir que la pandilla de Bush le dé este regalo de despedida a los grandes negocios, el regalo del que continuaría tomando.
* Naomi Klein es autora de La doctrina del shock. www.naomiklein.org.
Copyright 2008 Naomi Klein. Este texto fue publicado en The Nation.
Traducción: Tania Molina Ramírez.
La nueva etapa aquí, y su contexto
gershen@servidor.unam.mx
El proceso de ampliación del programa del movimiento de defensa de nuestro petróleo entró en una nueva etapa. La crisis, la incapacidad gubernamental de hacerle frente, y el cuadro internacional en desarrollo, contribuyeron a que, como planteó Andrés Manuel López Obrador en el Hemiciclo a Juárez el jueves pasado, ahora los objetivos se resumen en la defensa del petróleo, de la economía popular y de la soberanía nacional.
La defensa del petróleo dista mucho de pasar a ser un punto programático más. Los diputados opositores se quejan de varias trampas, cambios ilegales frente a las minutas llegadas del Senado sobre los dictámenes, y ya se han opuesto activamente a ellos.
Se proponen medidas legales para frenar el proceso “legal” de lo que se llamó reforma energética. También están las medidas que puedan adoptarse para evitar la ejecución práctica de actos contrarios a la soberanía nacional y/o a la salud de Pemex. Y se plantean actos y movilizaciones cercanas, que culminarían el domingo 23 de noviembre con una marcha del Ángel de la Independencia, por Reforma y Juárez, hasta el Eje Central.
Es importante considerar el contorno internacional. Si se envió a la Cámara de Diputados el paquete para hacer frente a la crisis, con una nueva refinería de Pemex y otros elementos que ha demandado la izquierda, es precisamente porque la crisis nacional e internacional aprieta y el cuadro político mundial cambia. En Estados Unidos ya se pone de manifiesto que la baja demanda y la consecuente baja producción, ya detectadas y aquí comentadas, se refleja en más despidos y más desempleo.
Las empresas que han anunciado despidos masivos en semanas recientes incluyen financieras, industria eléctrica y automotriz, la Cocacola y casi todas las líneas aéreas. Se estima que el número de desempleados aumentará más rápido que hasta ahora. El producto nacional bruto se redujo, en el tercer trimestre, por primera vez en años.
Se convoca a una reunión del G-20 –Grupo de los 20– en Washington, para el 15 de noviembre. Con esto se pasa por encima de un acuerdo del mismo organismo, cuyo presidente en turno es Brasil, de llevar a cabo la reunión en Sao Paulo. Y Bush insiste en que los necesarios cambios se mantengan dentro del libre mercado, la libre empresa y el libre comercio.
Hay un contraste entre esas imposiciones y exigencias, y la situación política en el vecino país. Faltan dos días para las elecciones. Ya una parte de la atención se ha dirigido a un posible fraude, dados los que hubo en 2000 en Florida, y en 2004 en Ohio, ambos estados decisivos para el resultado final. Aunque ahora la ventaja de Obama es en varios estados, sus partidarios no se confían. En Colorado, uno de los estados “reñidos”, aunque con ventaja para el propio Obama, defensores del voto mostraron ante un juez que se habían eliminado del padrón unos 30 mil votantes y demandaron que se restablecieran a tiempo para la elección. En una salida de compromiso, se dan cédulas provisionales a los afectados para que puedan votar. Y la ventaja de Obama, en general, se afianza. El cambio de gobierno es en enero.
El pasado fin de semana se llevó a cabo la reunión bianual de países de Europa y Asia, esta vez en China. Se creó un virtual frente para lograr, en la reunión del G-20, nuevas y más enérgicas regulaciones para el sector financiero y, en general, que haya decisiones concretas y no sólo discursos.
Este bloque Europa-Asia, más el posible apoyo de Brasil y Argentina, tiene otra fuerza de su lado: si Bush se resiste, pues se convoca a otra reunión en enero, aprovechando para devolver la sede al presidente en turno del G-20, ya con el nuevo gobierno estadunidense, y ya no habrá defensores del pasado.
¿O nuestros derechistas “representantes” se van a lanzar contra el mundo? Recordamos que en este espacio, hace dos semanas, se mencionó un paquete elaborado por el partido de Obama, el Demócrata, en la cámara de diputados (o de representantes), con un segundo conjunto de medidas anticrisis, incluyendo fuertes aumentos a la inversión pública y al gasto social, y que se considera para su presentación al nuevo presidente.
No es casual la prisa de las trasnacionales petroleras por sacar “al vapor” las reformas en su ámbito en México; sabían que el futuro inmediato no les sería favorable. Y en este ámbito internacional se va a desenvolver la nueva etapa de la lucha en nuestro país.