En la gaceta del Gobierno del Distrito Federal se publicó hoy el “Protocolo de Actuación Policial”
en el que se describe la manera en que los elementos de la policía
deben “manejar” a las manifestaciones, protestas y prácticamente
cualquier concentración masiva de personas en la capital del país.
Con términos como “conducción de multitudes”, “resguardo de instalaciones”, “contención de multitudes” y “restablecimiento del orden público, el GDF define las situaciones “peligrosas” en las que los policías quedan libres de arrestar a cualquier persona “sospechosa” o en “actitud agresiva”.
También se dan pautas para la actuación de la policía en eventos deportivos y culturales. El uso de la fuerza pública podría llegar a “letal” en
casos en donde no pueda restablecerse el orden público. Con esto, el
GDF pretende “meter orden” en las manifestaciones, así como dar margen
legal a la brutalidad policial, les dejamos el texto completo:
⇒ Parte III: Oaxaca, el octavo productor de oro, el cuarto en pobreza extrema
Catálogos de la Secretaría de Economía (SE) demuestran que Fortuna
Silver Mines es una de las 301 compañías extranjeras que exploran y
explotan los metales preciosos del país. Tiene presencia en Oaxaca, el
octavo productor de oro y plata a nivel nacional. Son 33 los proyectos
extractivos en todo el estado, reconocido como el cuarto en extrema
pobreza del país
San José del Progreso, Oaxaca. El documento Empresas con proyectos mineros en México,
elaborado por la Dirección General de Minas de la Secretaría de
Economía, muestra que además de Fortuna Silver Mines, otras firmas con
capital de origen canadiense son Almaden Minerals, Aztec Metals Corp,
Canada Gold Corporation, Silver Dragon Resources Inc, Ross River
Minerals Inc, por mencionar algunas.
Del Sistema Integral sobre Economía de Minerales se desprende que
Oaxaca es el octavo productor de oro y plata a nivel nacional. Son 33
los proyectos en todo el estado, reconocido como el cuarto en extrema
pobreza del país.
Del listado –elaborado por la Secretaría encargada de ejecutar
políticas económicas para el desarrollo del país– se desprende que en
este estado, el 79 por ciento de los proyectos pertenecen a empresas
canadienses, el resto con origen en Estados Unidos. Fortuna Silver Mines
opera en San José del Progreso, en fase de producción, y en Tlacolula,
en exploración, ambas de oro y plata.
La defensa empresarial
Juan Carlos Gómez Muñoz, gerente de Administración y Finanzas de la
Compañía Minera Cuzcatlán, filial de Fortuna Silver Mines, asegura en
entrevista que ésta es una empresa comprometida socialmente, y que sus
políticas tienen un perfil social y de cuidado del medio ambiente.
Comenta que la presencia de la minera en la localidad indígena
zapoteca emplea a 750 personas, de las cuales el 66 por ciento pertenece
a la zona y el resto, a San José del Progreso. Todos los empleados, en
todos los niveles, se encuentran contratados bajo el mecanismo de
subcontratación (conocido como outsourcing). Esta situación los desvincula directamente de la trasnacional y no genera obligaciones directas entre el obrero y el patrón.
El ejecutivo dice que en 2012 la minera dotó de recursos por 8
millones de pesos al municipio donde se encuentran sus instalaciones y
otros 7 millones de pesos en 2011, con el fin de llevar a cabo obras de
infraestructura para los pobladores.
Alberto Mauro Sánchez Muñoz, presidente municipal de San José del
Progreso, defiende la presencia de la minera en la zona. En entrevista
con Contralínea y con integrantes de la Misión Civil de
Observación Justicia para San José del Progreso, acepta que “este pueblo
era muy tranquilo, no había pleitos. Ahorita estamos en la voz de todo el mundo por las muertes que ha habido”.
El hombre que administra el tercer municipio más pobre del estado
porta gruesas cadenas de oro en cuello y muñecas. Dice que “las minas no
son nuevas: había mucha gente que venía a explotar los recursos a San
José del Progreso, y antes sí eran esclavos los que tenían trabajando
ahí. Mi abuelo y mi papá trabajaron en la mina y los obligaban a
trabajar por una paga que no alcanzaba ni para comer”.
—¿Qué ha significado la presencia de la compañía minera Fortuna Silver Mines para la comunidad?
—San José de Progreso tiene 89 años; es un pueblo nuevo, minero. Se
fundó de toda la gente que venía a trabajar a las minas desde hace 150
años. En 2006, llega Cuzcatlán [filial de la canadiense Fortuna Silver
Mines] y empiezan a trabajar. Vienen a comprar las tierras a 30 mil
pesos la hectárea, aquí había gente campesina que nunca en su vida había
visto 10 mil [pesos]; menos, 30 mil, y así fueron adquiriendo terrenos.
Empezamos a exigirle a la empresa minera que dejara un beneficio, que
no fuera nada más el saqueo sino que dejara un beneficio a la comunidad.
Hacía donaciones con becas escolares, lo mínimo.
Discrepa de las cantidades que dice la empresa haber entregado al
municipio, pero asegura: “Fuimos la primera autoridad en realizar un
convenio con la minera para que deje bonificaciones. En 2011 dio al
municipio 6.5 millones [de pesos] en obras; en 2012 fueron 7 millones de
pesos”.
Contrario a la inconformidad de los pobladores y a la aceptación de
las autoridades estatales de que se han violentado los derechos humanos
en este territorio, el presidente municipal asegura que la empresa
trabaja cabalmente, y “como autoridades le exigimos todos los estudios
correspondientes: impacto ambiental, sismográfico, de no contaminación
del viento; la empresa no genera polvo, se les hizo que a los molinos se
les pusieran silenciadores”.
MÉXICO, D.F. (apro).- ¿Qué hace un contralor? Investiga posibles
malos manejos y los denuncia. Y cuando el contralor encuentra posible
desvío de recursos y no hay consecuencia, ¿cuál es la razón? Sólo una:
el cinismo se ha instalado en ese lugar, más si nadie le exige rendir
cuentas sobre sus actos y decisiones. Eso es justamente lo que
está sucediendo en el Instituto Federal Electoral y sus nueve
consejeros. Desde junio de 2012, los consejeros electorales fueron
omisos ante pruebas contundentes de que se preparaba en algunas zonas y
operaba ya en otras una triangulación de recursos millonarios,
prohibidos por la ley electoral, hacía la campaña presidencial de
Enrique Peña Nieto. El llamado Monexgate.
Nadie puede asegurar
que su inacción fue lo único que llevó a Peña Nieta a la Presidencia de
la República; pero sí que ayudó en mucho. Las omisiones de los
consejeros electorales tuvieron consecuencias negativas para la vida
democrática del país.
Los consejeros electorales, ni a toro
pasado cuando revisaron el tema quisieron sancionar las operaciones, las
llamaron “atípicas”, irregulares, todo menos ilegales. Ante las
evidencias puestas sobre la mesa, los consejeros decidieron no actuar, y
la Cámara de Diputados que fue donde se les eligió, nunca los llamó a
cuentas.
Hoy sucede lo mismo. El contralor de la institución
Gregorio Guerrero Pozas, un experto en revisión de cuentas y detector de
irregularidades, se topó con “indicios” de un posible fraude por 144
millones de pesos.
Según su investigación, el exsecretario
ejecutivo de Administración, Fernando Santos, habría pagado 144 millones
más por el inmueble ubicado en Acoxpa 436, colonia Exhacienda Coapa.
Guerrero Pozas sostiene que inmueble valía 118 millones de pesos pero
el exfuncionario pagó 262. A lo largo de dos años el contralor cotejó
facturas, realizó avalúos y detectó pagos indebidos como el de 12
millones en impuestos y el de 5 millones por adeudo de predial.
Cuando el contralor presentó su informe al Consejo General, los
consejeros electorales decidieron votar en contra de que se sancionara a
quien habría cometido el fraude contra el IFE; los consejeros
simplemente votaron en contra del informe arguyendo que sólo eran
“indicios”.
Guerrero Pozas es un experto en el tema de las
auditorías, entre sus cargos destaca el haber sido el Contador Mayor del
Congreso, lo que hoy es la Auditoria Superior de la Federación, así es
que conocimiento, experiencia y capacidad para detectar irregularidades,
las tiene.
Luego de la decisión de los consejeros, Gregorio
Guerrero Pozas no dudó en decir de los consejeros que “se han agachado a
esconder la mugre debajo del tapete”.
Eso, no es novedad; en el
caso Monexgate los consejeros también se “agacharon” para esconder la
mugre del PRI en el proceso electoral.
En esta ocasión, Guerrero
Pozas tuvo mucho más valor que los diputados federales, quienes no se
atrevieron siquiera en llamarlos a cuentas por su decisión de exonerar
al PRI en el caso Monex, aun cuando existieron pruebas de sobra. Bueno,
el colmo fue que el propio IFE reconoció la triangulación, participación
indebida de empresas particulares, la existencia de contratos
irregulares, y aun así, decidió “agacharse” para poner la mugre debajo
del tapete.
Ante la indignación por el resolutivo, el contralor
cuestionó los golpes de pureza que se dan los consejeros antes los
medios de comunicación: “Algunos consejeros que habitualmente hacen
encendidas defensas en sus columna y se llenan la boca de conceptos como
transparencia, rendición de cuentas y combate a la corrupción, hoy se
han ocultado, han empeñado su nombre y han empeñado su inteligencia” al
heredar al IFE “una buena dosis de impunidad”.
Aseguró lo que
muchos pensamos, que si se tratara de su dinero, los consejeros
seguramente detectarían y sancionarían cualquier peso mal habido.
Lo mismo que a Guerrero Pozas, la resolución del consejo general del
IFE “produce indignación y un poco de vergüenza”. Pero el actuar de los
consejeros y el cinismo con que aprueban actos ilegales seguirán, en
tanto nadie se atreva a cuestionarlos, mientras el Congreso dela Unión
no les exija cuentas.
Por suerte, hoy, el contralor tuvo el valor
de enfrentarlos y contra la decisión de los consejeros de no hacer nada
por el presunto quebranto, él hará lo propio y presentará la denuncia
penal. Y si la autoridad no hace nada, al menos Gregorio Guerrero los
evidenciará.
A estas alturas, la ciudadanía ya juzgó a los
consejeros; la poca claridad con la que actuaron en la revisión de los
millonarios gastos del PRI en las pasadas elecciones presidenciales, en
el caso monex gate, y ahora esto, no provoca en uno sino la misma
exclamación de Guerrero Pozas, “se agacharon” para “poner la mugre
debajo del tapete”.
Comentarios mjcervantes@proceso.com.mx
Twitter: @jesusaproceso
De las propiedades de la ex lideresa sindical, Elba Esther Gordillo,
resaltan 2 casas ubicadas en un exclusivo Club de Yates de Coronado
Cays, en San Diego, California.
La investigación sobre la presunta red de lavado de dinero de la
lideresa magisterial Elba Esther Gordillo tiene una línea para indagar
todos sus bienes, incluyendo los que pudieran estar registrados por
familiares o prestanombres en México, Estados Unidos y Europa, de
acuerdo con El Universal.
Elba Esther es dueña de un lote ubicado en el número 23 de Green Turtle
Road, en el Club de Yates de Coronado Cays, en San Diego, California,
según ha publicado a prensa nacional, la residencia fue adquirida desde
1991.
De acuerdo con Reforma, la casa Green Turtle 23 tiene seis recámaras,
mide 440.46 metros cuadrados y tiene un valor de más de 4 millones de
dólares.
Otra propiedad de la maestra se ubica en la misma calle Green Turtle,
pero en el número 1, tiene cinco recámaras, mide 409 metros cuadrados y
tiene un precio de más de 4 millones de dólares, según Reforma.
Mira el video del exclusivo Club de Yates de Coronado Cays, en San Diego, California
Además, Reforma publica otras tres propiedades de la lideresa. La
primera, ubicada en Edgar Allan Poe 10, una casa valuada en 10.5
millones de dólares.
Una más Dickens número 30, departamentos tres y siete. Y otra propiedad en Paseo de Ahuehuetes 501.
Además, de acuerdo con El Universal, a la maestra se le han detectado
cuentas de inversión en empresas como Morgan Stanley o Merrill Lynch.
Además, los allegados a Gordillo hicieron transferencias a países como
Bélgica y España, así como operaciones financieras a bancos de Suiza y
el principado de Liechtenstein, apunta el diario.
Además, existen indicios de que cuenta con bienes en España o Francia, además de los inmuebles en la ciudad de México.
El gobierno declinante de Felipe Calderón no muestra tener otra alternativa para imponer a su sucesor que la de manipular fraudulentamente las elecciones, extremando entre otras cosas la guerra sucia contra las fuerzas de oposición, lo que lo ha llevado a buscar el respaldo de la administración Obama y de las principales fuerzas políticas de Estados Unidos a sus acciones ilegales, para lo que les está haciendo nuevas concesiones, por lo que de no frenársele el destino de México estará cada vez más comprometido.
1.El proceso electoral de 2012 se ha iniciado en un clima antidemocrático que no tiene precedentes en la historia reciente, marcado por dos factores centrales: a) un clima de violencia generado por Calderón con su “guerra contra el narco”, que no lo es, pero que entre otras cosas busca amedrentar a los mexicanos, por lo que la está intensificando mediante sus grupos paramilitares, y b) por un activismo desbocado del titular de facto del Ejecutivo, que escudándose en el estatuto de impunidad no escrito que han tenido los gobernantes mexicanos, está teniendo todo tipo de injerencias en el proceso electoral buscando manipularlo, todavía con la lejana expectativa de poder imponer en 2012 al candidato de la extrema derecha.
2. Las acusaciones lanzadas por Calderón al PRI en una entrevista con The New York Times, pretendiendo que su regreso sería un peligro para México porque los priístas están dispuestos a pactar con el narco, y que tras una campaña fascistoide orquestada por Gobernación llevaron al PRI a acusar –el pasado martes– a Calderón y al PAN ante el IFE por violar el marco constitucional del país, no son más que un anuncio de lo que viene y que muchos pretenden no ver: un individuo como Calderón, que llegó a la Presidencia por un macrofraude electoral para satisfacer los intereses de unos cuantos grupos, no se va a detener en su ambición, y por eso está buscando ya, por otra operación fraudulenta, imponer a su sucesor.
3. Las evidencias se multiplican día a día en el sentido de que Calderón pretende por todos los medios imponer a Ebrard como candidato presidencial del PRD por medio de una encuesta fraudulenta, a fin de que sea un candidato testimonial (pretendiendo así cerrar el camino a López Obrador), y que al mismo tiempo busca destruir la imagen de Enrique Peña Nieto y del PRI con una campaña de acusaciones, presentándolos como aliados del narcopoder, lo cual ha abierto un enorme debate en el país, en el cual las declaraciones de Vicente Fox recomendando el día 18 que el nuevo gobierno “pacte con el narco” no son más que un ejemplo del extravío de la clase política.
4. La discusión sobre cuáles deben ser las políticas del Estado ante el narcotráfico, planteada de manera sofista por el gobierno del PAN como una disyuntiva entre a) “la guerra contra el narco”, que ya se sabe que no es tal, sino un ardid para desmantelar al Estado nacional, y b) los pactos con el narco, que según Calderón caracterizaron a los gobiernos del pasado –sin que pueda documentarlo–, es en todo caso falsa, pues las cosas no son como dice la propaganda oficial ni fueron nunca como él pretende, ya que los panistas, siguiendo las instrucciones de la administración Obama, ahora están protegiendo a algunos cárteles (con los que tienen acuerdos) y oponiéndose a otros para que Washington regule el mercado.
5. La cuestión primordial es, por el contrario, determinar si el poder público debe actuar ante el narcotráfico en un marco de legalidad y racionalidad, o como lo está haciendo Felipe Calderón: siguiendo órdenes del extranjero por oscuros móviles políticos, transgrediendo todas las normas legales y violando los derechos de los mexicanos al actuar en plena irracionalidad fascistoide: no para combatir el narcotráfico, que se ha expandido notablemente durante su gestión, ni para terminar con la violencia, que se ha extendido sin cesar, sino para satisfacer intereses facciosos sin dejar por eso de proseguir entregando el control del aparato estatal a Washington.
6. En Estados Unidos, por ejemplo, como en casi la totalidad de los países occidentales (salvo Colombia y México), hay políticas instituidas frente al narcotráfico en las que los poderes públicos lo aceptan como una realidad, con una tolerancia fundada en la imposibilidad de exterminar a miles de productores, traficantes y consumidores, como Calderón y la derecha mexicana, fanática y delirante, pretenden que van a hacerlo, sin esconder que lo que buscan en realidad es generar un escenario de caos para propiciar que se acelere el desmantelamiento de la nación. Nadie acusa en Estados Unidos, por ejemplo, al presidente Obama de “tener acuerdos con el narco” por no lanzar a grupos paramilitares y al ejército a generar un baño de sangre en las ciudades estadunidenses ni por no impedir que la droga llegue a los consumidores de su país.
7. Los sectores más injerencistas de Estados Unidos están actuando, por consiguiente, de manera cada vez más falaz e hipócrita para extremar el escenario que han creado con la complicidad de Calderón, conforme al cual los cárteles mexicanos amenazan la seguridad de Estados Unidos. Las acusaciones, que ahora se dirigen en el sentido de que los narcos mexicanos reclutan a niños estadunidenses en Texas (La Jornada 18/10/2011), y de que organizaciones terroristas de Medio Oriente, con la complicidad de los narcos mexicanos, están actuando desde el territorio de México, son a todas luces mentirosas, pero no por eso no se están imponiendo como verdades en Estados Unidos.
8. El anuncio hecho el pasado día 11 por el procurador Eric Holder de que habían desarticulado un complot iraní (en el que habría participado “un cártel mexicano”) para asesinar al embajador saudita en Washington, y que buscaba dar al gobierno de Obama justificaciones para intervenir militarmente en Irán y en México, fue estimado como mentiroso por la prensa estadunidense, pero la gran diferencia se suscitó en las reacciones que se produjeron en las naciones acusadas, pues mientras Teherán lo rechazó como un montaje, el gobierno de Calderón lo estimó como cierto: dándole razón a las pretensiones de Washington.
Puedo decir que debemos al PRI la descomposición de nuestras instituciones y la corrupción como norma de conducta política. Pero con ánimo deportivo tendría que señalar sus méritos: el PRI en su origen (PNR) contuvo la autodestrucción sangrienta del grupo revolucionario y ayudó a la reorganización del Estado. Nunca estuvo en favor de la democracia y siempre fue un instrumento en manos del jefe máximo o del presidente, pero en sus primeras décadas logró estabilizar el país, contener a la reacción y hacer crecer a la economía. Su programa contenía una reivindicación nacionalista como afirmación de identidad, valores e intereses y una vocación para mejorar la condición de vida de las clases populares. Con traiciones y contradicciones esto se mantuvo hasta 1946. El PRI de Alemán fue transformándose en un partido conservador cada vez más lejano a su origen popular y más cercano a los grupos de interés.
Hasta 1985 defendió sus vocaciones nacionalistas y populistas, pero a partir de entonces y hasta la fecha renunció a cualquier tendencia reformista. En los gobiernos de Salinas y Zedillo se alentó a los monopolios, la concentración del ingreso y a convertir a México en un protectorado de Estados Unidos. El PRI ha sido el principal artífice del neoliberalismo. Todas las leyes que dieron estructura a esa tendencia fueran aprobadas por el PRI aliado en firme al PAN. La preocupación de los priístas fue mantener la impunidad de sus próceres. A cambio de garantizar la de los panistas.
Hoy la propuesta del PRI no implica la recuperación de sus principios originales. El PRI y los priístas se quebraron por dentro al perder su núcleo ideológico. A la desesperación colectiva por la evidente descomposición del país, ofrecen un rescate nostálgico de su hegemonía. Pero los tiempos de la estabilidad priísta no están a 12 sino a 40 años de distancia. El México de hoy es otro país, como señala Virgilio Caballero. El PRI se propone utilizar dos herramientas para ganar el sindicalismo mafioso en que destaca la maestra Gordillo y el apoyo de los medios electrónicos de comunicación: dos personajes que controlan 85 por ciento de todas las señales de televisión de toda la República y 12 familias dueñas casi todas las frecuencias radiofónicas. El futuro que el PRI ofrece es el aumento del poder de los cárteles de las drogas, más impunidad, más violencia, cierre de empresas, desempleo y la incorporación a la vida social de millones de jóvenes sin trabajo y sin escuela, cientos de miles huérfanos de la criminal guerra de Felipe Calderón.
En Jorge Hank Rhon el gobierno federal encontró el blanco perfecto: con un expediente negro que nadie ignoraba, su captura tiene un objetivo que rebasa el presunto castigo al hijo del profesor Carlos Hank González, el padrino creador de una estirpe de políticos que han vivido arropados por el poder y la impunidad. En realidad, el proceso judicial al que está sometido el dueño de los casinos Caliente pretende golpear las aspiraciones de Enrique Peña Nieto de llevar al PRI de regreso a Los Pinos, imposibles de ocultar los estrechos lazos –políticos, económicos, familiares– que unen al gobernador del Estado de México con la familia Hank. En las páginas subsecuentes Proceso documenta cómo este episodio refleja, como pocos, lo cerca que conviven en el país el crimen y la política.
TIJUANA, BC.- En 2007, cuando estaba en campaña por la gubernatura de esta entidad, Jorge Hank Rhon solía decir: “Reto a cualquier autoridad a que me prueben un delito”…
Pero la buena estrella del empresario y político nacido en el Estado de México se apagó la madrugada del sábado 4, cuando fue detenido por un comando militar que, de acuerdo con la versión oficial, perseguía a un sujeto que acabó internándose en una residencia localizada en el Hipódromo Agua Caliente, ambos inmuebles propiedad de Hank Rhon. Dentro de la casa fue descubierto un arsenal, según el reporte de las autoridades castrenses.
La detención de Jorge Hank ocurre justo después de que el escenario político fue contaminado por versiones en el sentido de que el gobierno de Felipe Calderón preparaba una andanada de golpes dirigidos al PRI, concretamente contra algunos exgobernadores de ese partido a quienes se investiga por presuntos nexos con el narcotráfico o malversación de recursos públicos.
Hank Rhon era una pieza clave en el esquema de apoyo del candidato a la gubernatura mexiquense, Eruviel Ávila, pues al menos a dos importantes personajes ligados a él –Luis Javier Algorri, exsecretario de Seguridad de Tijuana, y Mario Madrigal, exdirigente estatal del PRI y líder sindical de los trabajadores de los centros de apuesta Caliente– se les ha visto muy activos en la campaña priista en el Estado de México.
En el operativo fueron detenidas 11 personas, incluido Hank Rhon. En su residencia fueron incautadas 88 armas de fuego de diferentes calibres, algunas para uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, así como 9 mil 250 cartuchos útiles, según informó la Procuraduría General de la República (PGR) en su boletín 647/11, difundido el viernes 10.
De acuerdo con la PGR, “fue posible identificar que dos de las armas aseguradas –una calibre .40 y otra calibre .380– están vinculadas con homicidios sucedidos en Baja California”.
El titular de la Secretaría de Seguridad Pública de Tijuana, Gustavo Huerta Martínez, declaró que fue la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) la que alertó a las autoridades sobre la existencia del arsenal en la casa de Hank Rhon, aunque, indicó, fue él quien informó al Ejército para que iniciara el operativo.
Y no obstante que el detenido negó ser el dueño de las armas; que su jefe de escoltas, Jorge Vera Ayala, desapareció del lugar junto con cuatro pistoleros; que su esposa, María Elvia Amaya, ofreció una conferencia para exculparlo, y que sus abogados alegaron la inocencia de su cliente, el miércoles 8 de junio, 96 horas después del arraigo a que fue sometido en la Ciudad de México, el exalcalde fue recluido en el penal de El Hongo, ubicado en Tecate.
La captura de Hank detonó una airada reacción entre la clase política. Militantes del PRD y del PRI, sobre todo, sostienen que se trata de un golpe político. Otra de las confirmaciones de ello es la detención, el pasado martes 7 en el aeropuerto de Cancún, Quintana Roo, del exgobernador de Chiapas Pablo Salazar Mendiguchía, por presunta malversación de recursos federales.
Las malas compañías
Dueño de una cuantiosa fortuna, estimada en más de mil 500 millones de dólares, Jorge Hank Rohn suele ser fanfarrón y mitómano.
Se inició como empresario en Tijuana en la década de los ochenta, cuando obtuvo la concesión del hipódromo Agua Caliente. A partir de entonces ensanchó su imperio con la instalación de casas de juego y apuestas Books conocidas como Caliente.
En 1997, él y su hermano Carlos fueron investigados por el FBI, el Departamento de Aduanas, la oficina de impuestos (IRS, por sus siglas en inglés) y las autoridades de San Diego como parte de la operación antinarcóticos White Tiger (Tigre blanco). La indagación abarcó las casas de juego y el Laredo National Bank, propiedad de Carlos, quien terminó por deshacerse de él por la sospecha de que en la institución se lavaba dinero ilícito (Proceso 1684).
Al año siguiente, Jorge Hank fue detenido en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, cuando intentaba introducir un cargamento ilegal procedente de Japón. Gracias al influyentismo de su padre, Carlos Hank González, por aquel tiempo uno de los políticos más poderosos de México, recuperó su libertad horas después.
Si bien Jorge heredó de su padre las habilidades empresariales, su carrera política está llena de trompicones. Quizá su mayor fracaso sea el de 2007, cuando perdió la contienda por la gubernatura frente al panista José Guadalupe Osuna Millán.
Su hermano mayor, Carlos, tuvo un descalabro similar en 2004 en el Estado de México frente a su correligionario Enrique Peña Nieto, quien le ganó la candidatura al gobierno que dejará en los próximos meses.
Poco antes de su derrota, en noviembre de 2006, cuando Jorge Hank aún era alcalde de Tijuana, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) y el Ejército realizaron el Operativo Conjunto Tijuana, mediante el cual los policías municipales fueron desarmados y varios de sus altos mandos concentrados en la Ciudad de México bajo acusaciones de proteger al narcotráfico.
En ese tiempo, Teodoro García Simental, quien se separó del cártel de los Arellano Félix, desató una guerra contra Luis Fernando Sánchez Arellano, El Alineador o El Ingeniero, uno de sus antiguos aliados.
Por antecedentes como los citados, a Hank Rhon se le identifica de hecho como criminal. Por ejemplo, no han sido pocas las voces que lo señalan como el autor intelectual del asesinato del editor y columnista del semanario Zeta de Tijuana Héctor El Gato Félix en 1988. Nada pudo comprobársele, si bien su jefe de escoltas, Jorge Vera Palestina, fue sentenciado bajo la acusación de ser el autor material del asesinato, delito por el cual aún purga una condena.
Dos décadas después su nombre volvió a mencionarse a raíz de la ejecución de otro periodista del semanario Zeta: Francisco Ortiz Franco, pero tampoco se le comprobó nada.
En 2007, antes de dejar la alcaldía, declaró a este semanario que se le ha acusado de todo en su vida, pero que nadie le ha podido comprobar un delito.
“No me prueban nada. Dicen que mandé matar al Gato Félix, a Luis Donaldo Colosio, a José Francisco Ruiz Massieu y hasta al cardenal Posadas. En algún momento dijeron que lavaba dinero y que traficaba. Ninguna acusación tiene bases ni fundamentos. Cuando tengan bases, pues yo estoy a sus órdenes. Pero como ves, yo circulo, y circulo por toda la ciudad y por todas partes, porque tengo la conciencia totalmente tranquila” (Proceso 1575).
Hoy, tras la detención del empresario, la PGR solicitó al gobierno de Estados Unidos información sobre sus presuntos nexos con la delincuencia organizada, toda vez que la SIEDO tiene abierta una investigación en su contra por ese delito. Por lo pronto, la situación jurídica de Hank Rhon se definirá el martes 14, cuando la juez Noveno de Distrito, Blanca Delia Parra Meza, dicte su resolución.
Con sus alternancias y transiciones utópicas, es correcta la imputación de López Obrador de que los sexenios panistas han sido mafias de foxistas y calderonistas. Con la victoria pírrica de Fox y el ilegítimo triunfo, dudoso como el de Salinas, de Calderón, llevaron a sus socios, amigos y familiares a los cargos administrativos, legislativos y judiciales. Y contra la consigna de Carlos Castillo, perdieron el partido (ya en decadencia) y perdieron el gobierno, dedicándose al saqueo (haciéndose de recursos para sus campañas electorales en puerta, echando manos del capital de la banca de desarrollo, mientras buscan desacreditar a sus enemigos a través de la Unidad de Inteligencia Financiera que escarba en los “ahorros” de funcionarios y políticos).
Juan Camilo, Iván, Mouriño Terrazo –hijo de una millonaria familia española radicada en nuestro país (los Mouriño Atanes, Escalante y Terrazo), y quien había financiado a Calderón desde que ambos se encontraron en la Cámara de Diputados– fue el principal cómplice-amigo hasta que, como a Colosio, desde los pasillos del poder presidencial, lo mandaron matar.
Las historietas Calderón-Mouriño, García Luna-Calderón y otras parejas de Calderón son parte del excepcional libro Los cómplices del presidente, de la reportera Anabel Hernández. En nueve capítulos, una presentación y un índice onomástico (con más de 400 páginas), la periodista amenazada de muerte por el mequetrefe Genaro García Luna (policía improvisado desde el foxismo, protegido de la Sahagún) nos cuenta, con pelos y señales, los intereses creados del calderonismo (la prima-hermana de la esposa de Calderón, una de las cómplices del incendio de la Guardería ABC, protegida y exonerada). Mouriño era el elegido de Calderón para sucederlo, pero, en el camino de la oficina presidencial a la Secretaría de Gobernación, cambiaron los planes (remember Salinas-Colosio), y tras su homicidio, ahora el favorito es García Luna, el temible policía con la pistolaamartillada en cuanto escucha la palabra periodista.
Anabel Hernández enfocó su trabajo periodístico en la creciente corrupción que existe (mansión, sospechoso en Francia de depósitos, favoritismo a sus cómplices, montajes televisivos para sus capturas y su cercanía con Calderón más allá de la relación entre un empleado y el jefe, etcétera); y en sus textos del cotidiano quehacer del diarismo, como en sus documentados libros, va del foxismo al calderonismo ofreciendo en los medios periodísticos las mejores aportaciones para que los lectores conozcan de primera mano cómo los panistas resultaron listos para el saqueo, tontos para la administración, estúpidos para gobernar y unas “chuchas cuereras” para los abusos al amparo de la impunidad del manto presidencial. Periodista hasta las últimas consecuencias, reportera incansable, Anabel Hernández no se ha dejado intimidar y continúa el cumplimiento de su deber.
La lucha contra la delincuencia debe considerarse un problema social que debe combatirse con educación, trabajo, salud y deporte, En la imagen, Javier Sicilia en la marcha por la paz.
Si se legalizara la droga, México sería un paraíso de criminales, declaró el pasado miércoles el licenciado Felipe Calderón Narcofosa, en cumplimiento de una cláusula de su contrato de trabajo que lo obliga a negar la realidad con la de todos los medios de incomunicación electrónica y a vivir con tapones de cemento en los oídos para no escuchar los gritos, ya ensordecedores, ya insoportables, del dolor social. Ese dolor que el domingo, en el Zócalo, a pesar del solazo y del calorón, produjo continuas lloviznas de lágrimas. De lágrimas que todavía no se secan y siguen quemando la garganta.
Hace cuatro sábados, una familia del estado de México disfrutaba comiendo mariscos en un restaurante de Acapulco. De pronto recibió un narcomensaje. Éste llegó bajo la forma de una botella de güisqui. La manda aquel señor, les dijo el mesero. Minutos después, el generoso que se había tomado la molestia de enviarla se acercó al padre y le pidió permiso para sacar a bailar a su hija, una niña de 15 años. El padre se negó. Óyeme bien, le advirtió el generoso:Esta mujercita es mía.
Vámonos, dijo el padre. La familia regresó al hotel donde pasaba las vacaciones. Entre todos empacaron a las carreras y salieron a bordo de un coche rumbo al DF. Al cabo de una hora, dos camionetas los obligaron a detenerse. De ellas bajaron hombres armados con rifles. El generoso encaró al padre. Te dije que esta mujercita es mía pero no me creíste. Ora me la vas a entregar o mato a toda tu familia delante de ti.
La niña está desaparecida desde entonces. El breve episodio que tal vez terminó con su breve vida –que todos los dioses y todos los diablos se confabulen para que vuelva sana y salva– no fue relatado el domingo en el Zócalo, donde al menos 57 personas de todo el país, durante más de cuatro horas, contaron a gritos, y muchas de ellas llorando, sus propias tragedias. Historias espeluznantes y abominables, en las que destacan como elementos comunes a todas ellas tanto la corrupción de las autoridades locales, estatales y federales, como la ineptitud de la policía, del Ejército y la Marina, y de los soldados azules de Genaro García Luna, la nueva estrella del canal de las estrellas.
La única voz cargada de optimismo y de esperanza, en aquella asamblea pavorosa de la que miles y miles salimos destrozados –pero también transformados por la luz de la indignación–, fue la del representante de la Policía Comunitaria de la Montaña de Guerrero, una de las regiones más peligrosas de México hasta que los habitantes de aquellos pueblos asolados por bandidos y militares, hace 15 años decidieron encargarse de su propia seguridad y se armaron y uniformaron, como corporación civil, para restablecer la paz pública: un ejemplo que sin duda habrá que imitar a escala nacional cuando caiga este régimen asesino, que empieza a hundirse bajo el peso de sus decenas de miles de crímenes.
¿Por qué está sucediendo lo que está sucediendo? En 1996, según el Banco de México, 75 por ciento del dinero depositado en los bancos del país estaba concentrado en sólo 2.5 por ciento de las cuentas de ahorro, mientras 97.5 por ciento de las cuentas restantes se repartían el 25 por ciento del dinero. Hoy, hoy, hoy, 0.18 por ciento de la población mexicana (alrededor de 260 mil personas) posee 42 por ciento del producto interno bruto, es decir, casi la mitad de la riqueza que generamos anualmente más de 100 millones de mexicanos.
Tamaña desigualdad, aunada a la perversidad de George WC Bush y de Hillary Clinton y a la estulticia de Fox, Calderón y el equipo gobernante, nos llevó a la narcodictadura pero empieza a mostrarnos el camino hacia la libertad. Pensemos en los volcanes. Cuando la lava no puede salir por la boca del cráter, empuja por aquí o por allá hasta que encuentra el punto débil que le permite abrirse paso a la superficie.
Las grandes reservas morales del pueblo de México –la dignidad, la bondad, la nobleza, el espíritu solidario, la decisión de luchar pacíficamente, el anhelo de cambio que ya no admitirá una nueva postergación hasta 2018, los proyectos en algunos puntos coincidentes y en otros contrapuestos, las experiencias de militancia y de conducción política– son los ingredientes de la lava que, en estado de ebullición, se organiza para brotar desde el fondo de la tierra.
La lava que acumula y multiplica el Movimiento Regeneración Nacional, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, intentará subir al poder por la boca del cráter el día de las elecciones presidenciales de 2012. La otra lava, la que nutren con su dolor las familias destrozadas, y que es también mi dolor y el de millones que lloramos con y por ellas, la conduce Javier Sicilia y trata, no de llegar al poder sino de transformarlo por medio de la resistencia civil pacífica. Uno de los hechos más positivos del histórico mitin del domingo pasado es que entre ambos líderes hay coincidencias esenciales: los dos sostienen que la lucha contra la droga no provocará sino más muerte y destrucción mientras siga siendo concebida como un problema policiaco y militar, y no como un problema social que debe combatirse con educación, trabajo, salud, deporte y (agrego yo) los infinitos placeres que se derivan de la creación y la recreación artística.
La segunda coincidencia entre AMLO y Sicilia (y quizá la primera entre millones de mexicanos y millones de franceses) es la destitución de García Luna, un trofeo que Calderón de ninguna manera puede entregar porque Sarkozy de inmediato solicitaría su captura y su extradición a París. García Luna, bien lo señaló Magú, transformó la Secretaría de Seguridad Pública en un set de Televisa, y construyó el más formidable búnker subterráneo de todos los tiempos, mismo que –nos lo informó Enrique Galván Ochoa– quedó inundado e inservible tras la granizada que azotó al DF la noche de hace unos sábados.
Argelia
Serapio Bedoya, el olvidado tonto del pueblo de Tecamacharco, ahora vive en África. “Tengo un alcoholismo de Tehuantepec y vine a este país porque aquí no hay cantinas. Llevo dos años sin chupar. Además, me enamoré de Argelia desde el primer momento. Pero te escribo por otras razones. El próximo 25 de mayo se cumplirán exactamente 100 años de la renuncia de Porfirio Díaz. Por otra parte, Javier Sicilia busca un lugar para construir un muro en recuerdo del holocausto calderónico. Y supe que algunos activistas del colectivo que pinta las fuentes planean un festival artístico para el 28 de mayo, ante la narcofosa donde Calderón quiere levantar la narcotorre en memoria de Luz y Fuerza del Centro.
La idea, me cuenta un amigo pintafuentes por Facebook, es celebrar los 100 años de la caída de Díaz y pedir la de García Luna con espectáculos de teatro, pintura, escultura. Diles que además hagan una gran ofrenda de flores y serpentinas en honor de los caídos, y que haya música de jaraneros y cante el coro de la UACM. Pero, sobre todo, diles que inviten a Javier Sicilia y le pidan que, en nombre de todos los que estamos hasta la madre de la guerra estúpida, decrete que en ese lugar, en vez de una columna imbécil y pretenciosa recubierta de cuarzo brasileño pulido en Venecia (¡hazme el favor!), habrá un jardín y una lápida que guarde para siempre los nombres de los 40 mil muertos, y de los que mueran hoy, y los que mueran mañana, y pasado mañana, y luego, y más tarde, y aún después...
Editado por Molly Molloy, el libro del periodista Charles Bowden El Sicario: The Autobiography of A Mexican Assassin (El Sicario: La autobiografía de un asesino mexicano) será puesto en circulación por National Books a partir del 14 de junio en Estados Unidos. En una serie de conversaciones grabadas en abril de 2010, parte de las cuales fueron adelantadas por este semanario (Proceso 1788), el gatillero revela que la existencia de narcofosas en el país no es nada nuevo, pues cientos de ellas proliferan en la frontera norte de México. Y eso, afirma, lo saben incluso policías y militares, algunos de los cuales participaron en las ejecuciones.
WASHINGTON.- En la frontera norte de México hay cientos de narcofosas con miles de cuerpos dentro, declaró al periodista Charles Bowden un antiguo gatillero del cártel de Juárez en una serie de conversaciones que recoge el libro El Sicario: The Autobiography of A Mexican Assassin (El Sicario: La autobiografía de un asesino mexicano), que comenzará a circular en Estados Unidos a partir del 14 de junio, editado por Molly Molloy.
El entrevistado vaticina que Felipe Calderón perderá la guerra que emprendió contra las bandas del crimen organizado; además, denuncia que el alcalde de Ciudad Juárez está coludido con el narcotraficante que se adueñó de esa plaza.
El protagonista del documental El sicario room 164, filmado por Gianfranco Rosi en colaboración con Bowden (Proceso 1788), insiste: “Bueno, digamos que hay por lo menos 100 narcofosas, de las cuales posiblemente sólo cinco o seis han sido descubiertas”.
Expolicía con formación universitaria, afirma haber sido entrenado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) y que durante 20 años fue matón a sueldo para el cártel de Juárez. Su relato se condensa en 224 páginas del libro de la editorial National Books.
Las revelaciones de El Sicario, hechas en abril del año pasado, cobran actualidad a la luz de los hallazgos de la narcofosas en San Fernando, Tamaulipas, al tiempo que desnudan la corrupción gubernamental y la impunidad de que gozan los criminales y aun las tropas inmersas en la lucha militarizada lanzada por Calderón contra los cárteles de la droga.
“El lector no está mirando de frente al rostro del sicario sino a la cara del verdadero Estado mexicano. En este lugar nadie pregunta si un policía es corrupto u honesto, si un asesinato será investigado; aquí nadie pide justicia, simplemente busca sobrevivir.
“En este mundo las declaraciones de los presidentes de Estados Unidos sobre México no significan nada porque insisten en hablar de un México que no existe y que nunca ha existido”, escribe Bowden en el prefacio de la obra, que National Books envió a Proceso de manera anticipada.
Y aun cuando el volumen incluye partes sustantivas del documental de Gianfranco Rosi exhibido en salas europeas desde febrero pasado, contiene los detalles del entrevistado en las que explica por qué considera que el narcotráfico tiene el control del país.
“El presidente Felipe Calderón tiene un problema muy serio: dentro de su gobierno hay informantes de las organizaciones del tráfico de drogas; él no va a poder limpiar la casa. En el gobierno hay gente que tiene años de haber sido corrompida por el narco”, comenta El Sicario.
Y aventura un diagnóstico: “Calderón no ha entendido cómo debe afrontar la situación el gobierno. Él está favoreciendo a un cártel, mientras otro simula una guerra. Calderón no va a poder resolver esta situación en un sexenio. Ojalá se compongan las cosas, pero (pienso que) tendría que limpiar todo, comenzando por la Presidencia”.
Las revelaciones
Dividido en siete capítulos: “El yugo”, “El paquete”, “Niño”, “Adolescente”, “Hombre”, “Niño de Dios” y “Sistema y la Vida”, el libro documenta la forma en que el entrevistado –quien afirma que en 2007 tuvo que huir de México– aprendió a asesinar, torturar y desaparecer a sus víctimas. También insiste en que el narcotráfico se enquistó en todos los niveles de gobierno mexicano.
Sobre las narcofosas, El Sicario es enfático: “No puedo decir con precisión cuánta gente fue ejecutada… Es imposible saberlo. Yo estuve una vez en la ejecución de 100 personas. Todas fueron enterradas en un lugar específico; pudieron ser miles las ejecuciones.
El cártel de Juárez tiene muchas casas de seguridad y muchas personas bajo su mando. En los lugares que han sido descubiertas (las fosas) se encontraron 30 o 40 cuerpos; en algunos sólo 10, aunque los sitios con menos muertos son casas de seguridad”.
Expone también que, para eliminar el olor de la descomposición de los cuerpos, “es necesario ponerles jugo de limón y otros químicos. Se les quita la ropa y todo lo que lleven encima para que no quede rastro y para que no sean localizados”.
El Sicario, por cuya cabeza sus antiguos compañeros ofrecen 250 mil dólares de recompensa, sostiene que algunos militares, policías federales, estatales y municipales conocen la ubicación de las narcofosas, pues llegaron a participar en las ejecuciones.
Conocedor de los entretelones del narcotráfico en las plazas del norte de México, El Sicario critica abiertamente la lucha militarizada de Calderón: “El presidente de México dice: ‘Yo tengo el control…’, pero el nivel de corrupción es tan alto que el gobierno no puede ser controlado. Lo que pasa es que son los narcos los que están controlando al presidente”.
Al resumir su carrera en el cártel de Juárez pone énfasis en la presunta relación del capo Vicente Carrillo Fuentes con el alcalde de Ciudad Juárez, el priista Héctor Murguía Lardizábal.
En la parte final del libro, Bowden y Molloy escriben que así respondió El Sicario “a la pregunta sobre el resultado de las elecciones (del 4 de julio de 2010) en el estado de Chihuahua y el subsecuente asesinato de un funcionario en Ciudad de Juárez”.
“Dios nos bendiga.
“Por desgracia la gente de Juárez decidió votar otra vez por el canguro, por no llamarlo como debería llamarlo; una rata que camina en dos patas...
“Su grupo sufrió dos o tres golpes antes de que asumiera el poder, pero eso no fue más que un recordatorio de quién le está pagando y que será mejor que obedezca. Esto parece ser lo que está ocurriendo, con esta elección habrá otros tres años de abusos con impunidad total. Los criminales se estarán reorganizando dentro de la policía, todo en secreto, igual que antes, cuando él manipuló a la policía municipal de Juárez.”
El entrevistado también habla del presunto asesino del dentista y columnista de El Diario de Juárez Víctor Manuel Oropeza, ejecutado el 3 de julio de 1991 dentro de su consultorio y cuyo caso no ha sido resuelto: “Recuerdo muy bien lo mucho que se habló de este asesinato. La orden directa (de matarlo) provino de un tipo conocido como El Cora de Sinaloa”.
Oropeza, quien publicaba su columna A mi manera, fue el primer periodista que denunció los casos de corrupción por narcotráfico en el gobierno estatal y municipal de su estado. Según El Sicario, Oropeza estaba muy bien informado y lo que escribía en su columna era verídico. Admite incluso que el cártel de Juárez nunca descubrió quién era su fuente.
“Ninguna de las células que operaban en la ciudad en esos años quería involucrarse en el caso. Pero había un grupo de cinco individuos bajo la dirección del Cora, que se dedicaban exclusivamente a ejecutar a gente en las calles. Este grupo asumió la orden. Hicieron un plan y ejecutaron al doctor” en su consultorio, añade.
No obstante, dice, “El Cora y sus hombres cometieron un error muy grave: se les olvidó llevarse la billetera del dentista”. Eso echó por tierra el plan, que era hacer creer a las autoridades que Oropeza había sido acuchillado durante un asalto.
“Al final, el asesinato del doctor sirvió para abrirle el camino al Señor de los Cielos, Amado Carrillo Fuentes, quien se convirtió en cabeza del cártel y asumió el control de la plaza de Ciudad Juárez”, subraya El Sicario.
Según él, Amado Carrillo supo calmar las disputas internas en la organización luego del asesinato de Oropeza. Por esas fechas, El Sicario acababa de iniciar su carrera como policía estatal. Relata que fue a él a quien le pidieron esconder a “uno de los policías estatales que fue implicado en el homicidio (de Oropeza)”.
Las confesiones
En la introducción del libro, Molloy escribe que El Sicario comentó que “el número 10 (del cártel de Juárez) fue quien dio la orden para ejecutar a los 16 jóvenes en la masacre de la colonia Villas de Salvárcar, el 31 de enero de 2010”.
“Hasta hace unos años los narcos respetaban la vida de las mujeres y de los niños; pero desde hace como un año y medio (inicios de 2008), parece que esa regla dejó de funcionar. ¿Por qué? Porque los narcos comenzaron a reclutar a mujeres para que se dedicaran a cobrar deudas. Y ellas comenzaron a utilizar a los niños como escudos para protegerse”, refiere.
La autobiografía explica el modus operandi de los grupos especiales de sicarios dentro de los cárteles de la droga, a los que también se les conoce como células.
–¿Cuántas células operan en Ciudad (Juárez)? –se pregunta El Sicario, e inmediatamente se responde:
–En años recientes ha habido alrededor de… puede que tenga cinco células trabajando en Ciudad Juárez. Don Vicente (Carrillo Fuentes), tomando en cuenta que él es la cabeza de la plaza, ha de tener 20 células.
La relación entre los cárteles de la droga y las fuerzas de seguridad de México es descrita por El Sicario de distintas maneras a lo largo del libro:
“En ese tiempo era muy fácil para mí trabajar en Juárez, Chihuahua, Sinaloa o Durango. Todo lo que teníamos que hacer era llegar a un aeropuerto, subirte al avión e irte. No era ningún problema. Las armas y el dinero en efectivo también se transportaban en aviones privados. En el aeropuerto todo ya estaba arreglado; en los aeropuertos el Ejército se hacía cargo de todos los vuelos privados. De los vuelos comerciales se hacía cargo la Policía Federal Preventiva...”
Según El Sicario, en el gobierno federal hay funcionarios que no se dejan corromper por el narcotráfico. Es el caso, dice, de José Luis Santiago Vasconcelos, quien falleció junto con el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, en un avionazo en la Ciudad de México el 4 de noviembre de 2008.
“Era respetado incluso dentro de los cárteles. Cuando iniciaba una investigación, incluso era una prioridad para los cárteles; se hacían a un lado y le deban espacio para que hiciera su trabajo… Era un hombre humilde, dedicado a su trabajo y a su familia. Me hubiera gustado conocerlo.”
Molloy, quien editó el material contenido en el volumen, es investigadora de la Universidad de Nuevo México y se ha dedicado a recabar información sobre los asesinatos en Juárez. Bowden, periodista y escritor, es autor de libros como La ciudad del crimen y Blues para caníbales.
El sicario, un documental proscrito en México completo
http://www.youtube.com/watch?v=uylhdcRsw3Q
Una fuerte denuncia de los métodos de tortura, asesinato y reclutamiento de los cárteles mexicanos y la acusación de complicidad de autoridades con el crimen organizado, centran el documental "El sicario room 164", realizado en 2010.
"No hay fronteras para el narco: ni en México, ni en Estados Unidos, ni en Colombia, ni en Costa Rica, ni en El Salvador. El narco puede comprar todo, paga policías, paga aduanas, paga migración. ¿Qué tan difícil es, si mueven y mueven toneladas de drogas, mover a una persona?"
Esta es una de las confesiones que el sicario narra encapuchado frente a la cámara en la habitación número 164 de un motel no revelado, en un lugar cercano a la frontera de Estados Unidos con México, escenario de hechos criminales en los que el testimoniante participó.
La cinta fue realizada por el escritor y periodista estadounidense Charles Bowden y el cineasta italiano Gianfranco Rosi, cuyos detalles fueron revelados en la más reciente edición de la revista mexicana Proceso, en una entrevista realizada a Bowden, quien facilitó a su entrevistador una copia del documental.
A través de la producción audiovisual, el sicario explica en detalles las técnicas de tortura, secuestro o asesinato en una especie de manual para aprender cómo practican esas actividades los grupos criminales, expone la revista.
La profesionalización de un sicario, hasta su educación universitaria en la mayoría de los casos, es una inversión que hacen los jefes de los cárteles de la droga para contar con asesinos efectivos y discretos, asegura el asesino en la reseña publicada por Proceso. Leer más http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id...
Un Presidente que no habla cuando y como se debe, y que pacta con Obama en lo oscurito. Un vecino poderoso que nos ha perdido el respeto, y un embajador entrometido, experto en estados fallidos. Una secretaria de Seguridad Interior imprudente, que no pierde oportunidad de denigrar a los políticos mexicanos. Y al final, por supuesto, la zanahoria de los cientos de millones de la Iniciativa Mérida, detenidos por congresistas estadunidenses preocupados por los derechos humanos. ¿A eso se reduce la relación con Estados Unidos?
Ahora sabemos a qué fue Felipe Calderón a Washington. Según The New York Times (15/03/11), a autorizar a la Defensa estadunidense para que continúe sobre el territorio nacional los vuelos con aviones no tripulados que inició en febrero pasado (¿tiene facultades?). Además, a aprobar con Obama la apertura de un segundo centro de fusión para que los dos países trabajen en medidas contra el narco. Así sí se entiende lo inesperado del viaje. Los funcionarios que hablaron con el Times aseguraron que esta ayuda se ha mantenido en secreto por las restricciones legales de México y los acalorados argumentos que surgirían en torno a las sensibilidades políticas sobre soberanía.
Se acabaron los días de la dignidad, aquellos en que la voz de México sonaba fuerte en Estados Unidos. Los días en que nos respetaban, porque teníamos una inquebrantable política exterior basada en valores nacionales; una política clara y fácil de entender para propios y extraños. Marcábamos nuestras diferencias y nos representaban cancilleres prestigiosos, conocedores del derecho internacional; diplomáticos que promovían los valores nacionales y enarbolaban las banderas de la soberanía y la autodeterminación (hoy palabras vacías). Se acabó la jurisprudencia, y llegó el pragmatismo “a la americana” de los licenciados en relaciones internacionales.
Hoy la frontera con Estados Unidos y la relación misma se han vuelto permeables: áreas grises donde oscilan indistintamente ideas, costumbres, políticas, culturas, armas, drogas y dinero, y donde México, por su falta de instituciones sólidas y la ausencia de un estado de derecho, recibe la peor parte. Tras escuchar la labia de Obama, y su falta de sensibilidad en las relaciones con México, casi extraño a George W. Bush, el ignorante que habiendo crecido en la frontera respetaba al menos la comida tex-mex y era afecto a soltar dichos en español.
La pena es que estando en Washington Calderón pactó en lo oscurito y calló. No expresó como se debe su pérdida de confianza en el embajador Carlos Pascual. Nadie sabe si tocó el tema en privado, pero fuera de la Casa Blanca lo trató entre bromas con The Washington Post. El tema no se prestaba para eso, porque sus comentarios dejaron claro que le pesaba el agravio del diplomático que denigró al Ejército y al propio Calderón en los cables de Wikileaks. Convertido en estratega militar, Pascual envió cables informando que el Ejército Mexicano “tiene una nula preparación, es lento, sufre aversión al riesgo… y no es una garantía en la lucha contra el crimen organizado”. Dijo que él se coordina mejor con la Marina. Aversión al riesgo, como se vea, es una forma no muy velada de acusar al Ejército de cobardía: ¡en medio de sus bajas en la guerra contra el narco! Y en momentos en que el mandatario lo necesita más que nunca para terminar lo mejor posible su guerra inopinada y su mandato.
Calderón recurrió a dichos folclóricos (no me defiendas, compadre), pero no planteó la remoción de Pascual ni el retiro del beneplácito. Al ser interrogado sobre su falta de confianza en Pascual, Calderón contestó con una evasiva: la confianza es difícil de conseguir y fácil de perder. Pedir el retiro de Pascual era obligado para conservar la confianza del Ejército. ¿Cómo continuar luchando (y muriendo) por un comandante en jefe que no defiende a sus tropas?
Al regreso de Washington lo esperaba el operativo Fast and Furious, un experimento intervencionista, y a todas luces criminal, de la Dirección de Alcoholes, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF), que permitió y fomentó la exportación ilegal de armas a México para que las armas caminen (caminen y asesinen mexicanos, debieron añadir). ¡Tráfico vigilado, le llaman!
Más de 2 mil 500 armas, incluyendo las que perforan vehículos blindados, se pusieron en manos de contrabandistas que las vendieron al crimen organizado. La idea era seguirles el rastro y asociarlas a delitos. Aunque en un documento obtenido por CBS aparece que el Departamento de Justicia suspendió el operativo (La Jornada, 15/03/11), John Dodson, agente de ATF, asegura que Rápido y furioso sigue funcionando. Mientras tanto, la embajada del señor Pascual afirma que “el gobierno mexicano sabía del operativo”. Alguien miente.
¿Quién exigirá cuentas y defenderá el territorio, al Ejército y la soberanía, si no lo hace el Presidente, ni la buena de la señora canciller, ni nuestro embajador con su inglés impecable; ni el Senado, que tiene el deber constitucional de analizar la política exterior del Ejecutivo?
En todos los asuntos de las políticas públicas, el foxismo y el calderonismo han echado a perder lo poco que se había logrado, muy a pesar del neoliberalismo de los últimos 28 años, desde el mediocre y tartufo De la Madrid, pasando por el depredador y sangriento Salinas con el desmantelamiento del patrimonio nacional que culminó con el déspota Zedillo que fue ¡secretario de Educación Pública! Pero con Fox y Calderón, el salvajismo del capitalismo pro empresarial y pro estadunidense sólo ha enriquecido a inversionistas y narcotraficantes: Slim, alias Mr Monopoly; el Chapo; los devoradores banqueros, y el abuso de Televisa que, con Azcárraga Jean y el saqueo publicitario pagado por los politiquillos encabezados por Peña Nieto, se embolsa toneladas de dinero (mucho del cual convierte en dólares para su exportación).
Van y vienen análisis sobre la impartición de educación, más pública que privada, arrojando probadas descalificaciones en la preparación de los educandos desde subprimaria hasta preparatoria-bachillerato. Aparte de las deserciones (porque las escuelas no tienen métodos para interesar a los alumnos y porque sus familias se desbaratan presionadas por la crisis económica), tenemos un magisterio, en su mayor parte, corrupto que ha implantado la nefasta doña Perpetua (ver el libro de Arturo Cano y Alberto Aguirre), para usar al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) como cómplice de su Partido Nueva Alianza (Panal), dejando de lado la obligación magisterial de mejorar su preparación para educar mejor a los alumnos. No hay preparación de los maestros porque a la señora saltimbanqui (priista, panista, foxista, calderonista, panalista) no le da la gana que su monopolio magisterial sea una asociación de ciudadanos entregados a su deber y obligación de formar a la niñez y juventud.
Esta escolaridad está en manos de Elba Esther Gordillo Morales, cacique, millonaria y sobornadora de profesores, que ambiciona más y más poder para estar en las cúpulas donde se toman las decisiones políticas. Enmascarada en sus 1 mil y una cirugías plásticas, se piensa eterna y construye su imperio desafiante contra la institución educativa para ser, con Televisa, el duopolio contra la educación formal. Para esto se apoya en su sindicato (cuyas cuotas le han dejado cuentas multimillonarias), la complicidad de Calderón, el sumiso Lujambio (hábil para gastarse millones en su circo del bicentenario y centenario) y el antiguo guardaespaldas de su hija, ahora su yerno, incrustado como subsecretario encargado de… ¡la Educación!
Está el país en manos de incapaces y voraces personajes ávidos de poder: Azcárraga, Salinas Pliego, Slim, Peña Nieto, la misma Elba… todos hundiendo la nave estatal, con sus “ahorros” en cuentas bancarias estadunidenses, europeas y paraísos fiscales. No hay examen a la calidad de la educación que se imparte, desde hace una década –la década maldita de la derecha con la guía de El Yunque y un grupo fundamentalista revolcándose en la corrupción, el mal gobierno y el baño de sangre que aterroriza a la nación–, donde reprueben los maestros y con ellos su tarea que arroja gravísimas deficiencias en la enseñanza y el aprendizaje sobre lectura y comprensión de la misma, matemáticas y ciencias naturales.
Conforme a la calificación del Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes, la educación mexicana mereció puntajes reprobatorios (El Financiero, 8 de diciembre de 2010) –según la nota de la reportera Miriam de Regil–. En el cuadro sobre el desempeño escolar en 65 países, México ocupó en lectura el lugar 48; en matemáticas, 51, y en ciencias, 50. Estamos en los últimos lugares de la fila. Y debemos a Elba Esther Gordillo el manejo político de los maestros y el gasto anual multimillonario asignado a la Secretaría de Educación Pública (SEP), tirado a la basura. La maestra perversa, que anda queriendo regresar al Partido Revolucionario Institucional para favorecer a Peña Nieto (éste le asegura la SEP para ella o su interpósita persona… ¡su yerno!), es la responsable del fracaso de las políticas educativas desde que Manuel Camacho (el de las transas con Calderón para las complicidades chuchistas del Partido de la Revolución Democrática con el Partido Acción Nacional) y Salinas la hicieron sucesora del que fuera cacique del SNTE: Jongitud Barrios, quien la dejó entrar hasta la cocina al grito de “¡tráiganme a esa flaca!”, cuando ésta echaba de gritos en una asamblea.
Desde entonces, ha pasado 28 años controlando con favores de todo tipo (¿y Misael Núñez, el victimado por homicidio, ordenado desde los pasillos cupulares magisteriales?) a más de 1 millón de profesores, a través de su mozo de cordel Rafael Ochoa Guzmán. ¿Recuerdan la foto de Guillermo Sologuren, en La Jornada de 8 de diciembre de 2010, donde Lujambio muestra sus respetos al subsecretario de Educación Básica, José Fernando González? ¿Adivine, lector, quién es?… ¡el yerno de doña Perpetua, doña Perversa, doña Millones, doña dueña del SNTE, del Panal, del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, de la Lotería Nacional, del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, y anda el rumor de que lo será de Petróleos Mexicanos cuando nombren a Yunes Linares.
Televisa, el cártel empresarial golpista y educadora con sus programas de violencia; Elba y Calderón, con su testaferro Lujambio (¿y su madrina Patricia Flores, dónde andará tras su fracaso por querer imponer a Roberto Gil, por la estrategia de Margarita Zavala, a pesar de los intereses de Calderón?), han desgraciado la educación nacional, llevándola al analfabetismo en todas las materias. Los alumnos no saben leer y cuando lo hacen no comprenden ni interpretan ni reflexionan. Y si la educación es enseñar a crear, pensando, en matemáticas, a muy duras penas medio saben sumar, restar y casi nada dividir ni multiplicar. El desastre se lo debemos a Gordillo, a Azcárraga, a Lujambio (que tiene el escritorio y el sillón donde despachó Vasconcelos, pero no pasa de burro) y a su encubridor, Felipe Calderón.
MÉXICO, D.F., 23 de febrero (apro).-El excandidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador, adelantó que no va a renunciar al PRD.
"No voy a presentar la renuncia. No estoy pensando en renunciar al PRD, pedí licencia. Me quedo como ciudadano libre", señaló en entrevistaq con Carmen Aristegui en su espacio de MVS.
"Primero, no presentaría la renuncia, y segundo, no les voy a dar el gusto a los miembros de la mafia en el poder. ¿Te imaginas a Salinas y Calderón frotándose las manos? (...) Estoy libre, pero sigo siendo del PRD", subrayó.
López Obrador aseguró que decidió separarse temporalmente del partido y será el Consejo Nacional perredista la instancia que determine su situación, pues a ese órgano de dirección le envió su solicitud.
Explicó que su decisión de mantener una distancia es porque no será parte de una "farsa" en la que un partido de izquierda puede unirse con otro de derecha, y presentar un mismo proyecto de gobierno.
El político tabasqueño fue cuestionado de por qué hasta ahora asume esta posición, cuando se han dado otras alianzas, como la de Oaxaca. "He sido muy tolerante, pero lo que pasa es que todo tiene su límite", respondió.
MÉXICO, D.F., 2 de febrero (apro).- El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal dio a conocer hoy que en 2010 se registraron 2 mil 142 plagios en México, 295 más de los oficialmente reconocidos por las instancias gubernamentales competentes, sin incluir los secuestros exprés ni los plagios de migrantes. En conferencia de prensa, el dirigente de ese organismo, José Antinio Ortega Sánchez, reveló además que, de acuerdo con datos del Sistema de Seguridad Pública (SNSP) y la Procuraduría General de la Republica, de los mil 847 secuestros reconocidos formalmente 209 víctimas fueron asesinadas por sus captores. El también líder del movimiento blanco aseguró que muchos de los datos que proporcionan los gobiernos locales sobre homicidios dolosos están “rasurados” y que las cifras de secuestros suelen estar “falsificadas y sub-registradas.” Por ejemplo, mencionó que los gobiernos de Veracruz, Tamaulipas y Nuevo León no reportaron en 2010 el número real de sus secuestros. En el caso particular de Veracruz, dijo que el gobierno estatal reportó al SNSP cero plagios, las autoridades federales registraron ocho y la prensa local contabilizó 11. Asimismo, el gobierno de Tamaulipas considero sólo 25 secuestros cuando el Ejercito Mexicano rescató a 173 personas. En Nuevo León, lasautoridades estatales registraron 18 secuestros, cuando en realidad ocurrieron 103. En conferencia de prensa, Sánchez conjeturó que podría existir otros dos mil 142 secuestros “no denunciados” que incrementarían la cifra de secuestros a 4 mil 284 sólo en 2010. Además, advirtió que el secuestro de inmigrantes indocumentados se ha incrementado 200% más en el sexenio de Felipe Calderón. Actualmente, dijo, se tiene una cifra de mil 847 inmigrantes secuestrados. El autor del libro “Secuestro en México” indicó que el 2010 ha sido el año con los índices de secuestros más altos en la historia del país. De acuerdo con el estudio de 1971 a 2010, mil 253 víctimas han sido asesinadas y de el 30% de esos casos han ocurrido en este sexenio. El análisis indica que entre las administraciones de Luis Echeverría y Carlos Salinas, el promedio anual de secuestrados asesinados fue de seis; en la de Ernesto Zedillo de 42; en la de Vicente Fox de 59, y en la de Felipe Calderón de 123 por año. Aunque aseguró que el aumento de secuestros durante el sexenio son la prueba rotunda del fracaso de la estrategia gubernamental contra el secuestro, Ortega Sánchez reconoció que, sin la intervención del Ejercito Mexicano, el número de secuestros se incrementarían y “las 570 personas que fueron rescatadas por ellos hubieran sido asesinadas.” Prosiguió: “Por ello, resulta indignante la campaña de caricaturistas de izquierda de México Unidos Contra la Delincuencia y del gobernador Enrique Peña Nieto en contra del combate que el Ejército libra contra los grupos del narcotráfico”. Antonio Ortega consideró una “farsa” el Registro Nacional de Usuarios de Telefonía Móvil y la Ley sobre el Secuestro. “Son una cortina de humo y un medio para que las autoridades políticas y de seguridad publica compren tiempo… la problemática no deriva de la legislación sino de la falta de voluntad política, como se observó en los secuestros de Eduardo García Valseca y de Alfredo Harp donde el gobierno no hizo nada”, concluyó.
MÉXICO, D.F., 31 de enero (apro).- Más que la victoria en sí, el dato clave en la elección de Guerrero es el que se produjo cinco días antes con la declinación del Partido Acción Nacional (PAN) a favor del polo de izquierda, porque afianza el pacto de Felipe Calderón con la cúpula perredista para perfilar la candidatura presidencial de Marcelo Ebrard.
La decisión del PAN, que humilló a su candidato Marcos Parra, es insólita: Jamás había respaldado una candidatura del PRD, el partido más detestado por sus dirigentes --más aún que el PRI-- desde que fue fundado, en 1989, un odio que ha llevado a extremos demenciales y aun delincuenciales con Andrés Manuel López Obrador.
De hecho, el contubernio de Calderón con la cúpula perredista encabezada por Jesús Ortega --cuyo operador de ambas facciones es Manuel Camacho Solís-- tiene como principal condición neutralizar a toda costa a López Obrador y ensalzar a Ebrard, aun cuando a la derecha le parezca inmundo por haber despenalizado el aborto y promovido las bodas gay.
A los panistas les desconcierta que puedan apoyar a Ebrard, pero entienden que Calderón preferiría entregarle la presidencia a él y no al PRI, porque implicaría una vergüenza histórica por ser hijo de uno de los fundadores del PAN.
Ese es el eje teórico de las componendas vigentes que hacer creer a Ebrard que sí puede contar con el apoyo de Calderón, que no es de fiar.
Pero mientras tanto, en aras de consolidar la alianza con Calderón hacia 2012, Ebrard ha dado inclusive un giro estratégico a su relación con él: Ha desplegado una repentina mansedumbre, que incluye guardar silencio sobre la irrupción de tropas del Ejército y la Marina en las calles de la capital del país, conducta que ha sido correspondida por la mordaza impuesta desde Los Pinos al PAN capitalino.
Otra señal de la alianza entre Calderón y la cúpula perredista controlada por Los Chuchos, cuya astucia tiene a raya a las estridentes pero inoperantes corrientes --y aun al propio López Obrador--, se materializará este domingo 6 de febrero en Baja California Sur: El PRD entregará al PAN la gubernatura del estado.
A diferencia de Guerrero, a donde acudió en seis ocasiones durante la campaña de Ángel Aguirre --y la séptima en la victoria de ayer domingo--, Ebrard no fue ni una sola ocasión a Baja California Sur a respaldar a Luis Armando Díaz, candidato perredista a gobernador, a quien sólo recibió en su oficina de la Ciudad de México, el 7 de diciembre.
Esta manifiesta omisión de Ebrard, sumada a la deliberada abulia del PRD nacional hacia la campaña de Díaz --cuyas más recientes encuestas ubican en el tercer lugar--, perfila el triunfo del candidato del PAN, el experredista Marcos Covarrubias, quien como alcalde dejó en la quiebra al municipio de Comondú.
De manera que si es impresentable el exgobernador Ángel Aguirre Rivero, lo es también Covarrubias, cobijado por una derecha tan inescrupulosa como la izquierda corrupta que encabeza Jesús Ortega, cuyos arreglos con Calderón perfilan otras transacciones: Michoacán para la panista Luisa María Calderón, la “hermana incómoda”, por Nayarit para el perredista José Guadalupe Acosta Naranjo.
El Estado de México es el siguiente objetivo para una alianza, al menos de facto, cuya candidatura que se buscará fortalecer, con el apoyo de Los Chuchos, es la de Luis Felipe Bravo Mena…
Apuntes
¿Qué las elecciones son un asco? Lo son, pero no hace unas semanas ni meses. Lo han sido desde que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) convalidó, como aquí se anticipó, el acervo de trampas cometidas en la elección de 2006, incluido el intervencionismo de los poderes públicos… Nace una estrella: Emiliano Salinas Occelli encabeza un movimiento social para, según él, restablecer la paz en México –“se buscan ghandis”--, y uno evoca los aproximadamente 300 asesinatos de opositores políticos cometidos en el gobierno de su padre, Carlos Salinas, ahora también agitador social. A ver quién les cree…