Estado de los Estados
Beltrones y Gamboa apoyarán la reforma energética
Nadie rinde cuentas de la renta petrolera: A. Jalife
En marcha preparativos de resistencia civil
Por Lilia Arellano Felipe Calderón es un privatizador a ultranza que tiene el compromiso de abrir a Petróleos Mexicanos (PEMEX) a la inversión estadounidense, cuyas trasnacionales están desesperadas por apoderarse de los recursos energéticos del país, por lo que insisten en apoderarse del Golfo de México.
El gobierno calderonista y sus funcionarios “están haciendo de sirvientes de los intereses trasnacionales, es una vergüenza, son todos ellos émulos de Carlos Salinas de Gortari”, aseguró el ex secretario de Gobernación, Manuel Bartlett Díaz.
Durante una entrevista en el programa radiofónico Estado de los Estados, que se transmite por Radio 620 de la cadena RASA, el ex senador también reprobó la actitud y conducta asumida por los coordinadores parlamentarios del PRI en las cámaras de Senadores y de Diputados, Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa, respectivamente, quienes ahora intentan aparentar molestia porque el gobierno federal no ha presentado aún el proyecto de reforma energética, y amagan con presentar ellos mismos la iniciativa en la materia en el Senado de la República, en donde no tienen ninguna iniciativa elaborada.
En la Cámara Alta, dijo, la fracción priísta lo que tiene es una serie de planteamientos en el sentido de que no se va a reformar la Constitución, que no se va a privatizar, que no va a haber contratos de riesgo, pero más allá de eso no tienen nada. Llama la atención que son los mismos argumentos que han estado manejando Felipe Calderón y sus funcionarios. También destaca su intención de votar en el Congreso la reforma en cuanto se presente junto a la fracción del PAN, van a respaldar una reestructuración de PEMEX y la implementación de un régimen fiscal adecuado. Eso hay que observarlo con mucho cuidado, señaló el ex funcionario.
Los coordinadores legislativos del PAN, al igual que el ex candidato presidencial perdedor priísta, Francisco Labastida, están metidos en un juego de espejos, en donde un día declaran una cosa y al otro se desdicen, consideró Bartlett.
Calderón lo único que ha hecho es mandar y difundir su diagnóstico sobre el petróleo, en donde señala que hay que buscar flexibilidad, cambiar las reglas de funcionamiento de PEMEX y, por las actuales condiciones de las reservas petroleras, asociarnos con empresas extranjeras, porque PEMEX no puede solo, con lo que se ve claramente su intención de abrir a la paraestatal a la inversión extranjera, que es el principal objetivo de la actual administración federal.
Engañan con las cifras
Por su parte, el doctor Alfredo Jalife señaló que en el debate de la reforma energética PEMEX engaña con las cifras, mientras que la oposición no tiene el control de las mismas. Para ejemplificar lo anterior, señaló que en una primera instancia el gobierno calderonista difundió que las reservas probables en aguas profundas del Golfo de México era de 100 mil millones de barriles, después la titular de la secretaría de Energía, Georgina Kessel, dijo que no, que eran de 30 mil millones de barriles, y luego el propio Felipe Calderón mencionó que eran 45 mil millones de barriles.
¿De qué se trata? ¿Es esto un juego, porque estamos hablando de una riqueza que supera en 7 veces el actual Producto Interno Bruto (PIB) del país?
Jalife destacó que durante su administración Vicente Fox recibió 500 mil millones de dólares producto de la venta de hidrocarburos, y en el 2007 Felipe Calderón recibió 104 mil millones de dólares por el mismo concepto. ¿A dónde está ese dinero? Nadie ha rendido cuentas de ello y la situación se agrava pues ya el barril de petróleo ronda los 100 dólares, recursos que llegan al país y que son despilfarrados.
El especialista también subrayó que no hay una política de Estado en la materia, por lo que es urgente diseñarla. La administración federal, dijo, parece no conocer el término de modernización que proponen para el sector energético, pues este concepto se refiere a una característica de los tiempos actuales y presentes. Y hoy por hoy el 90 por ciento de las reservas mundiales de petróleo, a diferencia de la década de los 70 ó de los 90, la tienen las empresas estatales y están desapareciendo las empresas privadas trasnacionales tanto texanas como gallegas. Hoy la tónica es hacia la desprivatización, la renacionalización. Sin embargo, aquí lo que nos están proponiendo es una política fracasada de Yeltsin y quieren en México repetir el mismo modelo de privatización. A pesar de la gravedad de la situación, no hay debate, y éste se está dando sólo en las academias. Son monólogos, no hay diagnóstico.
Jalife subrayó que lo más grave de todo lo de las asociaciones estratégicas que proponen e intentan imponer los calderonistas es que uno le tiene que dar la mitad de estas reservas porque el otro tiene la tecnología. “Si son 30 mil millones de barriles o 45 mil millones de barriles, el tesoro en la profundidad del Golfo de México, le estoy dando de entrada a las grandes trasnacionales texanas el 50 por ciento de este tesoro”. Sin embargo, esa tecnología se puede alquilar, no necesariamente se requiere asociarse de esa manera, y también se puede aprender, como lo hicieron los brasileños. Ahí está el grave peligro en los contratos de riesgo y en estas asociaciones estratégicas porque le estaríamos dando gratis la mitad de los recursos petrolíferos, en forma parasitaria, a alguien porque tiene la tecnología.
¿Colaboracionismo o chantaje?
El debate no iniciado formalmente en torno a la reforma energética se calentó en el Congreso de la Unión. El grupo parlamentario del PRI elaboró un documento que fue leído por su coordinador en el Senado, Manlio Fabio Beltrones, en el que se advierte que en la construcción de acuerdos no habrá por parte de los legisladores del Revolucionario Institucional “ni colaboracionismo ni chantaje”. Los priístas se lanzaron contra el gobierno de Calderón a quien acusaron de titubear y mantenerse en la indefinición, actitudes que, dijeron, sólo benefician a los intereses creados y a los grupos de presión. Sin mencionarlo, a Andrés Manuel López Obrador y al Frente Amplio Progresista (PRD, PT, Convergencia) los acusaron de buscar reeditar un ambiente de crispación, como el de las elecciones del 2006, en donde no importa la razón sino el descrédito y destrucción del adversario, “en donde se piensa que la ruina del gobierno y la parálisis del país son el camino y la táctica a seguir para acceder al poder”.
Beltrones declaró que “los priístas no serán rehenes de los conflictos morales” y dejo en claro la disposición de su partido de avanzar por el camino de las reformas.
Por otra parte, la fracción del PRD en el Senado de la República rechazó una solicitud de la titular de la Secretaría de Energía, Georgina Kessel de reunirse con los legisladores del Sol Azteca para presentarles directamente la propuesta de reforma en materia de hidrocarburos. Los perredistas argumentaron que prefieren esperar a que la iniciativa llegue de manera formal al Congreso y también para evitar malos entendidos sobre los contactos con el Gobierno Federal.
Acciones de resistencia civil
Andrés Manuel López Obrador advirtió que las acciones de resistencia civil pacífica comenzarán en cuanto la iniciativa de reforma energética sea entregada ya sea en la Cámara de Diputados o de Senadores. El tabasqueño consideró que la propuesta será entregada la próxima semana, pues el actual periodo ordinario de sesiones termina en ambas cámaras el próximo 30 de abril.
López Obrador sostuvo que a PEMEX no le hace falta dinero para modernizarse, pues bastaría que se le entregaran los excedentes por los precios altos del petróleo y dijo que tampoco es cierto que debemos asociarnos para tener tecnología. Sostuvo que una posible privatización de la industria petrolera mexicana afectaría a nuestro país en su soberanía, además de que constituye una "flagrante violación" a la Constitución, pues ésta no permite la realización de contratos de riesgo ni asociaciones con empresas extranjeras.
De los pasillos
Luego de que en el Congreso trascendió que las observaciones a la cuenta pública del último año del gobierno de Vicente Fox alcanzaban los 45 mil millones de pesos, este jueves el titular de la Auditoria Superior de la Federación (ASF), Arturo González de Aragón, salió a aclarar que “sólo” son 33 mil 187 millones de pesos, y que, además, de esa cantidad, 14 mil 312 millones, es decir el 43 por ciento, corresponden a Estados, Municipios y el Gobierno del Distrito Federal.
Después de 13 años, el hermano del ex presidente Carlos Salinas de Gortari, Raúl, y su esposa Paulina Castañón, podrían recuperar 140 millones de dólares que depositaron durante el “salinato” en cuentas secretas en bancos suizos. Según lo publicó el diario Le Temps, el gobierno de ese país está a punto de ordenar la repatriación a las autoridades mexicanas de ese dinero que fue bloqueado en 1995 de una cuenta sospechosa, que presuntamente era utilizada para blanquear dinero procedente del tráfico de drogas.
Aunque todo apunta a lo contrario, Jesús Ortega, el líder de Nueva Izquierda, negó haber hecho trampa en la elección por la presidencia nacional del PRD y, además, acusó la obstrucción en el conteo de votos. Por su parte, el abanderado de Izquierda Unida, Alejandro Encinas, solicitó al Comité Técnico Electoral que los conteos de los sufragios sean en sesiones públicas.
Aunque se destrabó la revisión de actas en Oaxaca, Puebla, Tabasco, Chiapas, Estado de México y Tamaulipas, se reanudo ayer la guerra de cifras. El equipo de campaña de Encinas difundió datos extraoficiales según los cuales, de acuerdo al cómputo en 22 entidades el candidato de Izquierda Unida lleva 123 mil 440 votos contra 114 mil 68 de Ortega.
Porfirio Muñoz Ledo, el coordinador del Frente Amplio Progresista (FAP), aseguró que ellos no contrataron el spot en el que se invitaba a la concentración masiva convocada por Andrés Manuel López Obrador. Dijo que el spot no es más que una cortina de humo de la Secretaría de Gobernación y de su titular Juan Camilo Mouriño para desviar la atención de la privatización del petróleo. También señaló que tendrán que ser las autoridades electorales las que definan el tipo de sanción que deberá recibir Televisión Azteca, empresa que lo transmitió. Por su parte, el consejero presidente del IFE, Leonardo Valdés, advirtió que el Frente Amplio Progresista carece de facultades para contratar espacios en medios electrónicos para propaganda electoral, pues la Constitución lo prohíbe.