viernes, septiembre 15, 2006

Más que torpe, es un chimplete

En nota del Universal

"Justificación torpe", argumento de Presidencia: Monreal

Rechaza el miembro del equipo de campaña de AMLO que grupos radicales de la coalición Por el Bien de Todos pretendieran llevar a cabo actos de provocación durante "El Grito"

Evitar provocaciones, causa de traslado de Grito: Presidencia 08:18
Fox cancela el ´grito´ en Palacio; se va a Dolores

09:01 Ricardo Monreal, miembro del equipo de campaña de Andrés Manuel López Obrador, calificó de “justificación torpe” las declaraciones de la Presidencia de la República sobre que grupos radicales de la coalición Por el Bien de Todos pretendían llevar a cabo actos de provocación y de violencia y con ello poner en peligro la seguridad de los asistentes al acto, incluida la de Vicente Fox.

Rechazó que haya grupos violentos en la plancha del Zócalo, “son grupos normales de ciudadanos pacíficos”, reprodujo Reporte 98.5.

Consideró como “un gesto prudente” la decisión del presidente Vicente Fox para dar el Grito de Independencia en Dolores Hidalgo, Guanajuato.

Señaló que él sabía que las condiciones no eran propicias y hubiese sido difícil contener los gritos y “el repudio que de manera popular habría sufrido el Presidente” por la actitud contra López Obrador.

Por otra parte, señaló que van a seguir algunas manifestaciones populares de repudio pero en la Convención Nacional Democrática se decidirá el futuro del plantón.

Comento: Primero, el Senado recomendó que fox no diera el grito en el Zócalo; segundo, Abascal tampoco lo consideró prudente; tercero, fox dijo que se iba por prudencia, luego que para no caer en provocaciones, después que dizque para cumplir con la tradición, luego de que había rechazado la invitación a Dolores Hidalgo en su "muy querido Guanajuato" y ahora sale con que grupos de choque o radicales atentaban contra la seguridad de los asistentes... Este traidor que parece ser además es extranjero, es más que torpe, es un verdadero chimplete. Lo peor de todo es que ni siquiera se da cuenta de que ante la mayoría de los mexicanos no da paso sin caer en el ridículo y prosigue con sus incoherencias malévolas.
"Cállate, chachalaca".

Del Correo Ilustrado de La Jornada

Para que ya dejen de estar satanizando a Hugo Chávez y repitiendo como pericos el discurso que el imperialismo les ha inyectado sólo porque este dirigente atenta contra los intereses del neoliberalismo (habría que investigar y conocer las acciones de Chávez en beneficio de la mayoría de los venezolanos, y no sólo atender a las facciones de derecha que insisten en desprestigiar a toda costa un movimiento revolucionario que tiene dignidad y que se interesa en implantar justicia social en Venezuela), les presento la respuesta de una venezolana a Carlos Fuentes, un hombre distante del pueblo y cercano a la alta burguesía cuya postura siempre ha sido ambigua y que se inclina según vaya el viento, por un lado seguir disfrutando de canonjías y por otra cuidar una imagen de intelectual de izquierda centro. A otro can con ese hueso.

Respuesta a Carlos Fuentes

Señora directora: Me dirijo a usted a fin de que me haga el favor de publicar la siguiente misiva:

Ayer vi por la televisión las declaraciones fuera de toda propiedad que hace el señor Carlos Fuentes, desde España.

El acusa a nuestro presidente Hugo Chávez de "payaso continental" y de inmiscuirse en la política interna de México. Para mí, Fuentes era un intelectual, un personaje lleno de inteligencia, pero qué decepción, me he dado cuenta ahora que debe ser pagado por la CIA o es un lector asiduo de lo que publica la CIA. Su miopía le impide ver la realidad de la República Bolivariana de Venezuela, sin el saqueo de nuestro petróleo, de nuestros bienes, que hoy son debidamente administrados por nuestro gobierno y empleados para beneficio de un pueblo libre y soberano.

Permítame contestarle, distinguido escritor, a través de La Jornada, que es un periódico serio y veraz, sin compromisos con intereses de los que usted representa. Usted está "más pelao que rodilla e chivo" -término muy venezolano-, lo que quiere decir que está bien equivocado.

Señor Fuentes, para empezar debo informarle que mi país no está en ruinas, el venezolano no se está muriendo de hambre, allá hay progreso, no hay dictadura ni comunismo. Mi país, Venezuela, es democrático y revolucionario; nuestro pueblo ha luchado por conseguir su soberanía y hoy en día, con Chávez al frente, lo ha logrado. En mi país, la oposición son los ricos, a quienes no les interesa el sistema que tenemos porque tienen sus propios intereses.

Yo vivo en México desde hace 15 años, tenía cuatro de no ir a Venezuela, recién llegué de allá, donde permanecí cuatro hermosos meses. Me vine maravillada del progreso que encontré, la gente está contenta, hasta tiene sus propios negocios con ayuda del gobierno, existen también cooperativas, donde el pueblo unido trabaja paulatinamente para conseguir un objetivo favorable. La gente pobre que no tenía dónde vivir ya tiene su casita propia. Otra cosa muy importante, ya no es un pueblo ignorante, ya la UNESCO declaró a Venezuela como país sin analfabetos.

Señor Fuentes, Chávez no está en decadencia ni está acabado como dice, Chávez ha crecido enormemente y sigue creciendo, el pueblo lo aclama por ser un hombre con una gran sensibilidad...es un gran ser humano a quien le lastima el dolor ajeno, es un ser humano que no olvida su origen y por eso entiende a su gente.

Los venezolanos que estamos fuera de la patria hemos sufrido callados por los ataques hechos a nuestro máximo jefe de gobierno a través de algunos medios de comunicación.

En la pasada campaña electoral de México no salvaguardaron la integridad de una nación como Venezuela, entrometiéndose en nuestra política interna, utilizando como bandera la imagen equivocada de Hugo Chávez, mostrándolo como guerrillero y asesino, ocultando su verdadera identidad como un verdadero líder latinoamericano.

Para finalizar, señor Carlos Fuentes, debo informarle que Venezuela tiene 25 millones de habitantes y que Chávez ganará en diciembre con 16 millones de votos, o es posible que con un poco más.

Atentamente.

Deyanira Vivas Requena

Baja California en la CND

Jaime Martínez Veloz

La Jornada

El espacio que no se produjo en medio de las campañas electorales lo brindó la convocatoria a la convención nacional democrática. Viejos y nuevos cuadros de la izquierda de la frontera norte y de la sociedad civil se entrelazaron en un arduo debate sobre el futuro de nuestro país y sobre la necesaria y urgente transformación justa y digna de la sociedad mexicana.

Largos y sustantivos debates se produjeron en cada uno de los municipios que conforman la geografía bajacaliforniana, que estará representada por un contingente de más de 500 delegados, que pudieron tener a su alcance alguna forma de allegarse sus propios recursos para sus traslados, electos o autopropuestos en las asambleas municipales, distritales o sectoriales que se produjeron en este lugar desde donde empieza la patria.

El debate sobre el rumbo de las futuras acciones del movimiento de resistencia civil se produjo con el mayor de los respetos y la mejor de las voluntades. Distintas conclusiones se tomaron en cada asamblea, pero todas ellas en el mismo rumbo, para fortalecer la resistencia civil pacífica en contra del fraude electoral.

De los elementos de las acciones programáticas discutidas se pueden destacar los siguientes:

Un país que garantice la tranquilidad y la seguridad pública, en el que no haya impunidad para nadie que violente las leyes, y todas las instancias que intervienen en la prevención, detención, juicio y reclusión de delincuentes, sean federales, estatales o municipales, se coordinen debidamente, compartan información y bases de datos y tomen medidas de fondo para combatir a la delincuencia común y a la delincuencia organizada.

Queremos un México donde el Ejército nunca más se utilice para resolver conflictos de origen social ni reprima demandas de libertad y de justicia. Queremos una sociedad en la que haya paz permanente y los grupos armados no tengan razón de ser, porque no existan ya las causas de su lucha. Un país que esté prevenido ante los desastres naturales y les dé pronta y efectiva respuesta cuando ocurran.

En el que el presidente sea un factor de unidad nacional, un jefe de Estado, no un líder del partido que lo llevó al poder; y esté sujeto a la revocación o confirmación de mandato a la mitad de su periodo.

Un México en el que los representantes populares se interesen realmente por la gente, sean su vanguardia y voz viva, y tengan la capacidad de lograr los acuerdos y las leyes que necesita este país para modernizarse y avanzar en forma acorde a las necesidades de nuestro tiempo. En el que el problema no sea el poder, sino que éste sirva para resolver problemas. En el que la relación del Ejecutivo con el Legislativo sea de respeto a la autonomía de éste y logren encontrarse formas de diálogo y acuerdos para los cambios fundamentales que el país requiere. En el que se reforme profundamente el Poder Judicial para transparentar la imparcialidad e independencia de sus decisiones.

Impulsamos un país en el que la política sirva a los intereses del pueblo, y sea revalorada como instrumento para llegar a acuerdos que a todos favorezcan, que privilegie las coincidencias y minimice las diferencias en aras del bien de la nación; que sea también sinónimo de democracia, y el clientelismo político sea desterrado de las prácticas electorales; en el que la gente recupere la confianza en sí misma y en sus instituciones, y las precampañas y campañas políticas se encuentren reguladas y con topes de gasto bien definido y verificable. En el que no se fragüen negocios al amparo del poder gracias al tráfico de influencias.

México debe ser una nación con una política exterior prudente, que rectifique el rumbo, con una clara agenda internacional que, tutelando nuestra soberanía, retome los principios fundamentales de autodeterminación, no intervención, igualdad jurídica de los estados, cooperación entre los pueblos y lucha por la paz, que le dieron prestigio y autoridad moral en todo el mundo. Con una buena política exterior basada en la buena política interior.

En esta visión de país cabemos todos, porque todos somos y formamos parte de México, sin importar nuestra raza, sexo, edad, cultura, posición económica, preferencias políticas o credo religioso. Caben el norte, el sur, oriente, occidente y el centro de la patria. La costa, la montaña, la selva, el altiplano, la Huasteca y las demás regiones.

Es posible una sociedad diferente, fuerte, organizada y en crecimiento, que esté presente en la conducción de su propio destino. Que se exprese y defienda sus espacios de participación, se atreva a pensar en un nuevo proyecto de país y esté dispuesta a una gran movilización nacional para lograrlo.

Por eso luchamos. Que la gente sepa de viva voz lo que queremos. No somos un peligro para México y quien eso afirme miente para causar miedo. Pero el pueblo es valiente y ha aprendido la lección. Ya no lo espantan tan fácilmente y sabe distinguir quién defiende verdaderamente sus causas.

Invitamos a todos y todas, a la gente de bien, a personas y organizaciones que tienen esperanza de que la vida les cambie a su favor, a quienes quieren contribuir en la construcción de un México más justo, fraterno y solidario, a sumarse con plena convicción a esta gran causa nacional.

Comento: Este espíritu es el que ha permeado en el movimiento de López Obrador, es lamentable que todavía haya gente con la piel dura y un amargo escepticismo, espero que cada vez sean menos y si no, no importa ya somos muchos millones los que "nos sumamos con plena convicción a esta gran causa nacional" y dispuestos a refundar una República por el bien de todos. ¡VIVA MÉXICO!, Jaime.

La refundación

Luis Javier Garrido

La Jornada

El fraude en las elecciones presidenciales de 2006, lejos de abrir la vía para el continuismo de la ultraderecha en el poder, lo que ha logrado es por un lado fortalecer un movimiento social cada vez más amplio, dispuesto a defender por todos los medios los derechos fundamentales de los mexicanos y, por el otro, hacer inviable un hipotético gobierno calderonista.

1. El escenario del México actual es inédito, porque por vez primera en nuestra historia reciente ante una tentativa brutal del gobierno de confiscarle al pueblo sus derechos políticos, éste está respondiendo de manera serena y pacífica, pero con una voluntad indeclinable, para hacerlos valer, y ello con el gobernante que eligió y que fue Andrés Manuel López Obrador. Y, al mismo tiempo, para impedir y obstaculizar las acciones de un gobierno de facto que pretende encabezar el neoliberal y ultraderechista Felipe Calderón para seguir desmantelando la nación y expoliando a los mexicanos.

2. El gobierno de Vicente Fox termina en medio de un descrédito descomunal por su fracaso histórico para enfrentar los problemas del país y por sus políticas sectarias que dividieron a los mexicanos y dejaron en ruinas al Estado, pero sobre todo por el principal legado histórico que deja al traicionar a la democracia, atentar contra los derechos políticos del pueblo e imponer el fraude con todas sus secuelas. Fox no pudo leer el día primero su sexto Informe ante el Congreso, ni podrá dar hoy por última vez de manera tradicional el Grito de Independencia y tendrá que esconderse como rata lo que resta del sexenio para evitar la ira popular, mientras que a Felipe Calderón, su presunto heredero, no le queda más que seguir día tras día a salto de mata a fin de evitar a la gente que lo repudia.

3. La preocupación de diversos sectores de la derecha ante la crítica situación no viene del desastre institucional en el que Fox deja al país, ni de que éste haya ahondado hasta límites inimaginables la miseria de la mayoría de los mexicanos, de que le haya cancelado derechos sociales básicos al pueblo o de que haya entregado recursos fundamentales de la nación a intereses del extranjero y el control de áreas estratégicas a Washington. La preocupación de esos grupos es por la insignificancia de Felipe Calderón, quien se convirtió en su heredero por una serie de circunstancias fortuitas, y que hoy aparece como un individuo incompetente para asumir el cargo, violento e intransigente, carente de ética y de principios, y entrampado en una serie de compromisos inconfesables con las mafias políticas que le ayudaron a encumbrarse por la vía del fraude electoral y que ya le están pasando la factura: desde Fox, Carlos Salinas de Gortari y la gente de El Yunque, hasta los operadores de Elba Esther Gordillo, tecnócratas salinistas y zedillistas y priístas de la más baja ralea, como los gobernadores de Puebla y Oaxaca.

4. La paradoja de lo que acontece es que los panistas y los yunquistas pretenden haber triunfado, pero nadie de ellos lo cree, pues saben bien cómo fue que el gobierno de Fox impuso el fraude para despojar a Andrés Manuel López Obrador de la Presidencia de la República, que había ganado legal y legítimamente; de ahí el escenario de desazón que tienen los aparentes "ganadores", que no lo fueron, sobre todo porque es notoria la falta de apoyo a Calderón y a lo que pretende representar, como lo demostró el fracaso de la movilización panista-yunquista del domingo 10.

5. El escenario actual de México es inédito y por eso ha requerido de una respuesta inédita, y ella está siendo la convención nacional democrática, a la que convocara López Obrador para refundar a la República a partir del 16 de septiembre, impulsando las políticas que los mexicanos requieren e impidiendo que Fox y un posible gobierno de facto prosigan actuando en nombre de una minoría y despojando al pueblo de sus derechos básicos.

6. La reacción oficial ante el hecho de que lejos de decrecer la oposición nacional al fraude ha ido aumentando ha sido muy similar a la que tuvo a lo largo de todo el proceso electoral: negar la realidad de los hechos con la manipulación de los medios masivos de comunicación, denostar al movimiento y buscar su división. Y así lo ha hecho lo mismo ante el crecimiento del movimiento de resistencia civil, la fortaleza de los campamentos de Reforma, Juárez, Madero y el Zócalo, o el éxito en los preparativos de la convención, a la que integrarán en sus inicios más de un millón de mexicanos.

7. El escenario actual del país es inédito porque existe un movimiento social sin precedente que está dispuesto a recuperar sus derechos y a cambiar el estado de cosas en el país, y porque hay un dirigente político que es Andrés Manuel López Obrador, que no va a claudicar y que asumirá con toda dignidad la responsabilidad que le reconozca la convención.

8. Los esfuerzos que han llevado a cabo Fox y su gobierno con todo el peso del Estado para destruir a la oposición democrática y acallar la inconformidad creciente ante el fraude han fracasado de manera contundente, lo mismo al tratar de aislar a López Obrador que al buscar desintegrar a la coalición Por el Bien de Todos o dividir al PRD y a sus grupos parlamentarios. La carta fuerte de Fox y Calderón para crear un frente anti López Obrador "de izquierda" no ha dejado de ser el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, a quien Fox diera un cargo en la Secretaría de Gobernación como coordinador de los festejos tanto del bicentenario del inicio de la Independencia como del centenario del comienzo de la Revolución Mexicana, pero la credibilidad de éste se halla muy mermada, tanto por su negativa a apoyar a López Obrador en 2004 ante los intentos de Fox por inhabilitarlo como por su oposición a él durante la campaña electoral de 2006, así como por su negativa a oponerse al fraude, de tal suerte que su fuerza política es de hecho inexistente.

9. La carta pública de Cuauhtémoc Cárdenas contra Elena Poniatowska, que éste hiciera publicar en inserción pagada a doble plana en Milenio Diario el jueves 14, molesto por las afirmaciones hechas por la escritora el día 9 en Durango, diciendo que él no había apoyado a López Obrador "por envidia", no ha logrado concitarle respaldo alguno más que de la gente del régimen, porque en ella aprovecha una vez más para lanzarse contra López Obrador y contra la convención con los mismos argumentos de Televisa, y sobre todo porque pretende ignorar la gravedad de lo que acontece.

10. El país está viviendo un momento de quiebre histórico y el error de muchos es no reconocer la trascendencia del cambio que se está impulsando desde abajo, queriendo ignorar que las largas luchas del pueblo mexicano suelen culminar de tiempo en tiempo como ahora, en que el fraude ha sido un detonador que está acelerando un proceso social que puede conducir a una nueva fase de la historia mexicana.

Comento: ¿MÁS CLARO? NI EL AGUA.

La CND, los agravios, los caminos

Adolfo Gilly

La Jornada

Elementos de la PFP vigilan a un costado del Palacio Nacional Foto José Carlo González

1. El grotesco fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación es la mejor confirmación del embrollo electoral. En dicho fallo el tribunal da suficientes razones para anular la elección. Pero no lo hace. Además, se mete a opinar sobre decisiones políticas que no le incumben. Por ejemplo, discute si López Obrador fue o no fue a un debate televisivo. Le faltó decir si le pareció o no que en el otro debate llevara corbata amarilla.

Con ese fallo, el tribunal se incineró en la fría hoguera del ridículo y terminó de confirmar que hubo fraude. Tal vez los jueces lo hicieron a propósito, para dejar sentado que en conciencia no estaban de acuerdo con la farsa que por orden superior representaron.

Anular la elección era lo sensato. Pero ya desde la feria de bufones del desafuero, desbaratada por la movilización popular, estaba claro que los poderes reales no iban a dejar pasar a López Obrador, a como diera lugar. Y así lo hicieron.

2. El primero y más antiguo de esos poderes, establecido en México desde el siglo XVI, es la jerarquía de la Iglesia católica. Al día siguiente del grotesco fallo, la Conferencia del Episcopado Mexicano le dio su bendición en un solemne desplegado (El Universal, 6 septiembre 2006, p.9): "Los obispos de México nos sumamos a los ciudadanos e instituciones que respaldan la actuación y el fallo que ha dado el tribunal electoral, y por tanto reconocemos la legalidad del nuevo presidente electo (...) Exhortamos a toda la ciudadanía a colaborar responsablemente con el próximo gobierno".

Muchos de aquellos que en el año 2000 creyeron estar votando a Vicente Fox para acabar con el PRI, no sabían que estaban votando el regreso al poder de la Iglesia católica y su jerarquía por primera vez desde Benito Juárez y la Constitución de 1857. ¿Creyeron acaso que esa jerarquía estaba dispuesta a abandonar ese poder por el cual se batieron cristeros, sinarquistas y sucesores?

El gobierno usurpador de Carlos Salinas abrió ese camino al derogar el artículo 130 constitucional. No necesito repetir quiénes fueron sus más cercanos colaboradores en esa empresa, hoy reciclados por el PRD.

Esta es la dimensión de la lucha presente en este país que se llama México: que no nos distraigan hablando de cualquier cosa para eludir esta nueva confrontación histórica entre liberales y conservadores, estos que hoy se dicen neoliberales.

3. Felipe Calderón recibió también las bendiciones, al día siguiente de la elección, de Bush y Rodríguez Zapatero, mandatarios de países con grandes inversiones en México, y de Televisa, que así pagó el voto unánime de los diputados del PRD en favor de la vergonzosa ley Televisa. Lo mismo hicieron los organismos empresariales. La Bolsa Mexicana de Valores, la Iglesia, la Casa Blanca y Televisa dieron su voto de calidad a Felipe Calderón.

Pero el PRD y sus aliados, en lugar de llamar a esos poderes por su nombre, siguen hablando de los ricos y los pobres, como en los tiempos de Pedro Infante, cuando cualquiera sabe que la primera condición de una pelea verdadera es identificar con precisión al adversario.

4. El 8 de julio pasado propuse en estas páginas que, si como era previsible, el tribunal electoral sancionaba el fraude y negaba el conteo, los electos del PRD (senadores, diputados, asambleístas, jefe de Gobierno y jefes delegacionales de la ciudad de México) declararan en suspenso la aceptación de sus cargos y abrieran así una crisis constitucional en todos los poderes electivos.

Preguntaba ese día: "¿Estarán dispuestos los electos del PRD y sus aliados a ponerse a la cabeza de la protesta popular y, como prenda, poner sus constancias de mayoría sobre la mesa? Es lo que nunca quisieron hacer, salvo alguna aislada excepción, los electos del FDN en 1988. ¿Están dispuestos los electos del 2006, con el respaldo de la indignación y también la amargura popular, a jugársela en serio?"

No, no lo estuvieron. Es cierto, han hecho muchos gestos y hasta tomaron la tribuna del Congreso, en un acto teatral tantas veces visto en todos los parlamentos desde el siglo XIX; ya en los tiempos de las caricaturas de Honoré Daumier (cuyo sarcasmo buena falta nos haría hoy). Pero arriesgar el puesto de a deveras, no, Dios no lo permita.

Van ahora a encabezar la convención nacional democrática (CND) y a apoyar un gobierno en rebeldía, mientras ellos permanecen en sus cargos en el Congreso del otro gobierno, el institucional. Debe de ser, dirán, una argucia táctica para confundir al enemigo. ¿Me permiten no tenerles confianza?

5. Los cuatro gobernadores del PRD (Baja California Sur, Guerrero, Michoacán y Zacatecas), al mismo tiempo que saludan la realización de la convención nacional democrática, apoyan expresamente la decisión de los legisladores de la coalición Por el Bien de Todos de asumir sus cargos y "no renunciar a ninguno de los espacios institucionales". Por su parte, mientras el dirigente de la coalición, Andrés Manuel López Obrador, manda al diablo a esas instituciones, los gobernadores insisten en que "no sería prudente abandonarlas", incluida la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), lo cual no les impide apoyar a la CND y a su gobierno en rebeldía. ¿Dónde está la congruencia?

6. Los gobernadores del PRD participan de la reunión plenaria de la Conferencia Nacional de Gobernadores donde Felipe Calderón es recibido como presidente electo. Todos sabemos que en una crisis política del poder presidencial como la presente, siempre ha sido el poder real de los gobernadores el que llena el vacío. Por eso la importancia, hoy, de la Conago.

Pues bien, esa reunión aprobó un punto de acuerdo sobre Oaxaca. Ese acuerdo expresa el respaldo unánime al actual gobierno de Oaxaca, encabezado por Ulises Ruiz, y se pronuncia "contra todo propósito desestabilizador que por la vía directa pretenda lesionar el orden constitucional de un gobierno erigido en elecciones libres, directas, legales y democráticas" (La Jornada, 12 septiembre 2006, p.13). Este acuerdo fue firmado por los 32 gobernadores del PRI, el PAN y el PRD, incluidos el jefe de Gobierno del DF, Alejandro Encinas; el gobernador de Oaxaca, Ulises Ruiz; el gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez (el de los presos de Guadalajara); el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto (el de los presos de Atenco), y el góber de Puebla, Mario Marín (el amigo de Kamel Nacif).

¿De cuál rebeldía, de cuál resistencia, de cuál gobierno itinerante nos están hablando? Uno puede comprender la amargura, la indignación, la rabia de millones de ciudadanos que vieron escamoteada una elección nacional. Pero no puede aceptar este juego sobre todos los tableros de quienes encabezan y representan a la coalición Por el Bien de Todos.

7. Por esta falta de congruencia entre las declaraciones y los hechos; por la falta de claridad sobre los fines y los modos de alcanzarlos; por la inmensa confusión entre lo que sería una convención con delegados electos y representativos de discusiones y propuestas diversas, y lo que será una reunión multitudinaria de cientos de miles donde en una sola tarde se votarán a mano alzada y por aclamación las propuestas del dirigente y su entorno, no estoy de acuerdo con la convención nacional democrática. Sobre cuanto esto significa, me remito a los clásicos: Antonio Gramsci, Max Weber, Elías Canetti. Quien los haya hojeado sabrá de qué estoy hablando.

8. No es falta menor de los organizadores de la CND el poner en primera fila a algunos cientos de indígenas, mientras siguen ignorando a los presos de Atenco, a los presos y reprimidos de los pueblos de Chiapas, a los desplazados de Acteal y de otros poblados, a los acosados por los paramilitares, y en Chiapas mismo se alían con el Croquetas Albores, con Constantino Kanter y con Juan Sabines. No es falta menor dar su apoyo al gobernador Ulises Ruiz y descalificar en la misma resolución al poderoso movimiento indígena, ciudadano y popular de la APPO en Oaxaca. Es absurdo que todavía los voceros de la CND acusen a los zapatistas de no haberlos apoyado en la elección, cuando ellos abandonaron a su suerte al EZLN y al movimiento del Congreso Nacional Indígena. El PAN y el PRI en esta elección le hicieron al PRD y a la coalición lo mismo que éstos, aliados con el PAN y el PRI, le hicieron en el Congreso de la Unión al EZLN a propósito de los derechos y la autonomía indígena.

Una CND que ignore o cierre los ojos ante estos hechos sólo podrá aprobar declaraciones vacías.

9. Los dirigentes de la CND y los gobernadores del PRD dicen que "nuestro mayor agravio" es "la desigualdad y la pobreza en la que viven millones de mexicanos". Desigualdad y pobreza son términos tecnocráticos que esconden los nombres verdaderos de la realidad y preparan falsas escapatorias paternalistas. No: los nombres de los agravios mayores son explotación, despojo y racismo, todos ellos sostenidos por la represión y por los órganos corrompidos de una justicia inexistente.

Si algo han probado esta elección y sus diversas secuelas, es que esos agravios no pueden ser enfrentados confiando en los partidos institucionales o en un dirigente, itinerante o fijo, que se comunica en directo con el pueblo y ofrece defenderlo y protegerlo.

De los agravios y de la injusticia brotan las propuestas y las luchas, como en Oaxaca, y en esas luchas surge y se renueva la organización. Decenas de miles de cuantos asistan a la convención nacional democrática, agraviados por el fraude y la imposición, andan en busca de esas formas y modos de organización. Ojalá que la experiencia de su paso por la CND les sirva a ellos, y no a los otros, para seguirse encontrando y organizando y para enfrentar las duras jornadas que el gobierno de la derecha, la jerarquía eclesiástica, los financistas, los inversionistas extranjeros y sus políticos de todos los colores nos preparan.

Mientras tanto, otros buscamos y andamos nuestros propios y menos clamorosos recorridos. Ya nos encontraremos, espero, cuando toque.

Comento: Tanta lectura y no aprender de experiencias que conformarían otros escritos que leer. Todavía la izquierda continúa su vieja práctica de ser críticos antes de que los movimientos en ese sentido se consoliden y de guardar rencores de cuestiones que sin duda en aquellos momentos fueren sentimientos válidos pero hay que dejar a un lado cuando el verdadero enemigo ataca con tanta virulencia. Cada quien tiene su forma de lucha, sus omisiones y sus aciertos. Lo que sí queda claro es que mientras AMLO y su movimiento han sido siempre respetuosos de otras formas de lucha, Marcos, Cuauhtémoc y quienes los siguen, no todos, se han dedicado a criticar y a dividir, a actuar en contra en vez de ponerse a atender con mayor eficacia lo que el movimiento de AMLO haya desatendido: a los presos de Atenco, a los presos y reprimidos de los pueblos de Chiapas, a los desplazados de Acteal y de otros poblados, a los acosados por los paramilitares... La lucha del movimiento de AMLO con todos sus defectos y sus puntos cuestionables ha logrado más que los que han estado enfocados a los otros problemas, no es coincidencia que este movimiento sea más fuerte y tenga el apoyo de más gente del pueblo. En efecto, cada quien busca y anda sus propios caminos y ambos deben respetarse porque existe un ideal común, en este caso sólo AMLO lo ha hecho y por ello su talla aparece mayor, y no hay que confundir lo clamoroso con lo efectivo.

Cuauhtémoc: el águila que cae

Víctor M. Toledo

La Jornada

Todo ser viviente nace, crece, madura, decae y muere. Lo mismo puede decirse de las sociedades o de las civilizaciones que irrumpen vigorosas en la historia, para después ensancharse, hacerse sólidas, luego rígidas, osificarse y desaparecer. Sólo los seres humanos tienen la extraña capacidad de perpetuarse en el tiempo por medio de la conciencia o del espíritu, de la palabra o la creencia, de la idea o de la fe. Pocos son, sin embargo, los que alcanzan la cúspide de la permanencia en la memoria.

En un país donde durante décadas a los defensores de la vida, de la justicia social, de la libertad de expresión y de la democracia real se les eliminaba, cooptaba o marginaba (y fuimos tantas veces testigos de cómo esta maquinaria brutal hizo desaparecer a innumerables luchadores), el nombre de Cuauhtémoc Cárdenas era ya un emblema de congruencia y sensatez que se izaba con orgullo en las batallas cotidianas, un personaje llamado a formar parte del cada vez más escaso contingente de la entereza y el decoro; un referente obligado para quienes creen que la verdad es la medida de todas las cosas.

Hoy, por sus actitudes, declaraciones y cambio de posiciones, ese ser emblemático, ese zoon polytikon, ese paladín de la lucha de los demócratas mexicanos, se ha autodestruido, se ha hecho pedazos, se ha inmolado como los monjes asiáticos, y todos hemos sido testigos del incendio. En el crepitar surgen rostros atónitos, desconciertos, miradas críticas: ¿alguien nos lo puede explicar teniendo sus cenizas entre las manos?

Todo individuo tiene un precio, y cada quien o lo establece o tiene la gallardía de rechazarlo. Se puede terminar dando la vida por una idea, como José Martí, Ernesto Guevara o Salvador Allende, pudriéndose o purificándose en las cárceles de las tiranías, o inclusive, aceptémoslo, discretamente retirado para realizar la reflexión, la resignación o la sabiduría. Pero lo que no puede hacerse es finalizar una trayectoria de décadas de liderazgo moral o político como "maestro de ceremonias" de las oligarquías. La República, la auténtica, hoy llora de tristeza. Nunca un águila había caído tan estrepitosamente.

Comento: Parece que por más que Cuauhtémoc racionalice sus posturas, todos sabemos que es pura palabrería de un hombre a quien la envidia, como bien lo dice Elena Poniatowska, lo carcomió y que sólo engaña a los que comparten ese sentimiento y a sí mismo. Más adelante podremos analizar su carta de respuesta a la escritora, ahora no podemos porque hay muchas cosas más importantes que atender en este día de celebración y en la Convención Nacional Democrática.

La alegría y la tristeza

Sique
Fotos: Seb Tal

El último día que Andrés Manuel López Obrador despide la luz del día en el Zócalo de la Ciudad de México dirigiéndose al pueblo en la Asamblea Permanente fue de buenas noticias: en plena libertad sin vallas, tanquetas o antimotines celebraremos el grito de Independencia; a Alejandro Encinas, un gobernante capaz que no ha caído ante las presiones de la reacción y ha sido respetuoso de las manifestaciones populares, se le donará la campana de la libertad del movimiento para que dé el grito de Independencia con todos los mexicanos que nos reunamos en la Plaza de la Constitución.



Nos quedamos para disfrutar los últimos momentos de los campamentos que comenzaban a desmantelarse y a moverse para dar lugar a la celebración.

La gente iba descubriendo los esqueletos de sus viviendas, las familias que un día llegaron para quedarse hasta no obtener una respuesta a sus demandas de justicia pasa a otra etapa con esperanza.

Todavía hay algunos que se detienen ante un televisor que les informa mediante un video lo que ha pasado, lo que está pasando, para que configuren con conocimiento su destino.

La últimas pláticas, un tanto nostálgicas, después de haber convivido en la lucha a diario, viene la despedida pero se inicia una lucha más madura, más estructurada que continuará pero de distinta manera porque en 48 días de resistencia han aprendido mucho,
han madurado como nunca.

Trabajan afanosamente, desarmando para volver a armar en otro lado, pero siempre con el mismo afán de contribuir a una causa noble y justa para todos.

Otros esperaban, tristes, pensativos, que nos deparará el mañana. Quizás no quisieran irse, hay nostalgia, cuesta trabajo dejar este lugar con la incertidumbre de si habrá valido la pena el sacrificio y de qué vendrá después.

Cuánto caminé por esos pasillos enlonados que se están desnudando pero que aún guardan el vocerío de Obrador, Obrador, Obrador... cuántas vivencias, cuánta lluvia, cuántas emociones, cuánto frío, cuánto enojo, cuánta alegría, cuánta esperanza y cuánto porvenir...

Las carpas iban cayendo, había gente sentada junto a sus pertenencias, cosas que quizás no tenían cuando llegaron, porque ese día decidieron quedarse así, como estaban, AMLO había preguntado "¿Nos quedamos?" y después de unos segundos de sorpresa habían gritado "¡Siiiií!" y así se quedaron con lo puesto, en una expresión de entrega total a sus ideales de libertad y justicia.

Esta gente es el motor, lo mero principal como diría AMLO, para que todos trabajemos porque ya no se puede soportar que sigan siendo explotados y humillados, nunca más, no lo permitiremos. Familias que se van a sus lugares de origen con la esperanza de que sus hijos disfrutarán de un México distinto, más justo, en el que tendrán oportunidad de educarse, de trabajar y de ser tratados con la dignidad que toda esta gente buena merece.
Ahora habrá patria para todos.

Globos, elotes, esquites, sombreros, quesadillas, buñuelos, camotes, plátanos, algodones, espectáculos callejeros, puestos de sombreros y las luces del Zócalo iluminado con colores y motivos nacionales daban alegría al ambiente.

La bandera ondeaba, muda testigo de la historia, observa a los héroes de este nuevo capítulo.


Fue una fiesta en la que las familias paseaban conviviendo con los fundadores de la nueva República, queríamos disfrutar hasta el último momento de esta etapa en la que hubo compromiso, solidaridad, unión en la lucha y sobre todo, calor humano.



Sí, nos preparamos para la fiesta, mañana es día de celebración y pasado seguirá la fiesta, porque cuando un pueblo ha despertado y está dispuesto a defender sus derechos de libertad y justicia, hay celebración y hay fiesta.

Nos vemos mañana en el grito por la Independencia.

¡VIVA LÓPEZ OBRADOR! ¡VIVA LA CONVENCIÓN NACIONAL DEMOCRÁTICA!
¡VIVA MÉXICO! ¡VIVA MÉXICO! ¡VIVA MÉXICO!

Carteles de la Resistencia


Del arte de
Javier Contreras



A la nochecita

Nos traemos de La Hora del Pueblo la magnífica:

A LA NOCHE-CITA
...con Jaime Avilés

=¿De qué habla, y a nombre de quién, el ingeniero Cuauhtemoc Cárdenas?

Antes de las películas, están saliendo anuncios en los cines de la cadena Ramírez (perteneciente a una acaudalada familia de la oligarquía de Michoacán) en los que la joven tapatía Lorena Ochoa promueve un torneo de golf en aquella entidad. Llama la atención que la deportista aparece a cuadro con una cachucha blanca que lleva sobre la visera el emblema de Banamex, la empresa de Roberto Hernández, el banquero que se distinguió como líder de la ultraderecha en la guerra sucia contra Andrés Manuel López Obrador.

Lazarito Cárdenas Batel, el gobernador de aquellas tierras que nunca pudo quitarse de encima el amor asfixiante de su papá, no ha tenido empacho en reconocer la supuesta "victoria" de Felipe Calderón, haciéndose de este modo cómplice del fraude electoral y del golpe de Estado de Vicente Fox. El nieto del último héroe de la Revolución Mexicana hasta ahora no ha dicho esta boca es mía para comentar las denuncias sobre las numerosas formas de la estafa que la élite dominante en México puso en práctica para robarle la Presidencia de la República a López Obrador.

Así como en 2001, por órdenes de su papá, Lazarito votó como senador del PRD en contra de los acuerdos de San Andrés, ahora ha vuelto a inclinarse ante el autor de sus días para establecer una alianza con Calderón y dar el salto quizá al gabinete del panista con quien teóricamente sólo tenía en común el haber nacido en el mismo estado, pero no, hasta donde se sabía, ideas reaccionarias y propensión a asumir conductas fascistas como dispararle a una manifestación de mineros indefensos, como Lazarito hizo apenas en abril pasado.

Por eso no consiguen sino exacerbar la irritación que existe en contra de los Cárdenas las opiniones que Cuauhtémoc publicó esta mañana en Milenio donde se permite calificar de "craso error" la decisión del movimiento de resistencia civil de formar un gobierno en rebeldía y reconocer como presidente de la República a Andrés Manuel.

Antes de criticar al líder de la resistencia con observaciones frívolas y decrépitas, el organizador de las fiestas del Vicentenario debería tomar nota de los éxitos del movimiento al que traicionó y guardarse sus comentarios. Porque a lo largo de estos 31 días de agosto y 14 de septiembre, que suman 45 ya, desde que se instaló el plantón, los pejeseguidores no sólo no han roto un solo vidrio ni manchado un solo muro sino que tampoco han dejado sin cumplir, hasta ahora, dos de las tres promesas formuladas por López Obrador cuando propuso, y la gente en la plaza aceptó, colocar campamentos a lo largo de 9 kilómetros sobre el corazón del Distrito Federal.

¿Cuáles fueron esas tres promesas? La primera, que Vicente Fox no rendiría su sexto y último informe en el Palacio Legislativo de San Lázaro. La segunda, que Vicente Fox no daría el Grito de Independencia en el Zócalo. ¿Y la tercera? Que Felipe Calderón no asumirá la Presidencia de la República el primero de diciembre.

¿A nombre de quién habla hoy en día el ingeniero Cárdenas? ¿Del pueblo al que abandonó o de Salinas de Gortari, el usurpador que le robó la presidencia de la República en 1988 pero le concesionó el título de candidato opositor vitalicio

AMLO en la asamblea permanente

Donó el pleno de la Resistencia Civil Pacífica al Gobierno de la Ciudad de México una campaña para la ceremonia del Grito en el Zócalo


Al tiempo, fox y sus compinches pagarán con cuerpomático

Nos envían el siguiente correo:

Sr. Presidente:

“Siempre lo he admirado pero dejé de hacerlo por su tozudez, su falta honradez y su traición hacia México, pero esto que está pasando ahora es verdaderamente vergonzoso para todas las personas. Eso, Sr. Presidente no es democracia, porque esta Usted pasando por encima y sobre las leyes, puesto que AMLO y quienes con razón apoyamos su movimiento, Usted y sus compinches (llámese Calderón, Ife, Trife, Televisoras, Suprema Corta, CCE y otros), atentan contra la libertad y han hecho del PAÍS un verdadero muladar, con la benevolencia y Complicidad de Usted. Todas las personas con las que yo he hablado estamos ansiosos y esperando que saquemos a esa gente como Usted y su Mafia del Gobierno y del País. Es una vergüenza su intolerancia, ya que López Obrador se da el lujo de decir que le va a permitir a Usted dar el grito en Dolores Hidalgo, Gto, (GRITAS Y TE VAS), y que el ejército desfile. ¿Esa es su democracia Sr. Presidente? Lo que va Usted a provocar es exactamente lo que hemos querido evitar, que los que vayan a acompañarlo para escucharle dar el “grito” tengan que salir como Felipe a Hurtadillas pues el verdadero Pueblo ya no los tolera y esa es la gente de Obrador, que verdaderamente representan el País. Espero que comprenda Sr. Presidente que hay que retirarse a tiempo porque el pueblo es sabio y lo acusará de traición a la Patria, y va ir a dar con sus huesos a la “La Palma” con todos y sus secuaces. Sr. Presidente escóndase no se vaya Usted a quedar con el baldón de que todo México lo veamos siendo Juzgado, que es lo de menos, y quizás provocando, con su intransigencia que corra su “atole con el dedo” por todo el Zócalo”.

Ruth Solís