domingo, enero 24, 2010

The Merida Initiative and Collapse by Design

Mexico's National Security Law has just been turned into a carbon copy of the PATRIOT ACT. The reforms were approved by its Congress while the "Swine Flu Epidemic" took place.
This event went unnoticed by the national and international media.

The myths and facts about the Merida Initiative, the Narco War and Mexicos collapse by design. A wake up call for all the good and inquisitive US, Mexican and Latin American citizens.

Watch out the english of the PANistas supposedly graduated from Harvard, Yale or Rise Universities

http://www.youtube.com/watch?v=77hwkyTUNKk



http://www.youtube.com/watch?v=8Zbl2zulX1c

Partido del Té: revuelta populista contra Obama y Wall Street

Bajo la Lupa

*Partido del Té: revuelta populista contra Obama y Wall Street

Scott Brown, durante una conferencia de prensa el miércoles pasado en Boston.


Aun año de su presidencia, Barack Obama ha sido sacudido casi letalmente en el bastión demócrata de Massachusetts, donde Martha Coakley, candidata a ocupar la senaduría que dejó vacante el icono Ted Kennedy, fue duramente vapuleada con 5 por ciento de diferencia cuando a finales de año llevaba una ventaja cómoda de 21 puntos.
La catástrofe rebasa los confines de Massachusetts y ha puesto en tela de juicio la capacidad de gestión de Obama, lo cual conlleva profundas implicaciones en la política exterior de Estados Unidos.
Anna Fifield, de The Financial Times (19/1/10), diagnostica correctamente que detrás del triunfo sorprendente del republicano Scott Brown (un óptimo candidato) se encuentra el Partido del Té (The Tea Party), que catalizó a la extrema derecha populista y racista.
Ya habíamos anticipado el ascenso irresistible del Partido del Té (ver Bajo la Lupa, 13/12/09), genuina protesta ciudadana frente a los atracos descarados de los banqueros de Wall Street.
Como hace más de dos siglos, hoy se repite en el mismo Boston la revuelta populista en contra de los excesos de un mal gobierno que ignora el malestar ciudadano.
Anna Fifield pone en relieve que el Partido del Té ha absorbido a la extrema derecha televangelista y racista del Partido Republicano.
Puntualiza que el Partido del Té “está bien organizado, y bien financiado (sic) por una red de grupos conservadores” cuya punta de lanza la constituyen FreedomWorks y Americans for Prosperity, que han congregado masivas manifestaciones en Washington en las que “se oponen a todo (sic), desde la legislación del cambio climático hasta el paquete de estímulo económico”, en donde han insultado con ataques racistas a Obama, tildado de “marxista musulmán” (otros lo han vilipendiado como instrumento de los banqueros israelíes Rotschild).
Cita a Faiz Shakir, del Centro del Progreso Estadunidense, centro de pensamiento cercano a los demócratas, quien considera que las protestas del Partido del Té “persistirán”, debido a su enorme financiamiento proveniente del “sector petrolero (¡súper-sic!) y/o de Wall Street”, quienes saben que no serán favorecidos por Obama, por lo que “usan la furia popular para sus propios intereses empresariales”. ¿Pues qué se esperaban los ingenuos demócratas?
Anna Fifield asevera que la influencia del Partido del Té es ya “muy significativa en la política interna de Estados Unidos” y que está apoyado por Sarah Palin, la fracasada candidata a la vicepresidencia, y Rush Limbaugh, “el incendiario conductor de Fox News”.
Mas que votar por el Partido Republicano y/o el Partido del Té, el iracundo electorado estaría votando en contra de Obama, quien ha sufrido una transmogrificación (transformación a una forma extraña) al actuar más como presidente del statu quo del establishment que como “el presidente del cambio” del Partido Demócrata que se esperaba, pretendiendo ignorar, a su cuenta y riesgo, la gravedad de la situación económica y financiera de Estados Unidos, que ha martirizado primordialmente a la clase media, ya no se diga a los miserables desahuciados, en beneficio de una caterva de banqueros parasitarios.
El Obama de inicios de 2010 no tiene nada que ver con el candidato de 2008 que tanta esperanza le infundió a Estados Unidos y al mundo.
El Obama de todo el 2009 fue un espejismo insalubre que pretendió engañar con su seductora grandilocuencia desvinculada de sus actos de gobierno y que dejó perdidas sus promesas en el desierto de sus maravillosos discursos de conciliación biosférica en Egipto, Turquía y Trinidad-Tobago.
El ascenso del Partido del Té es imponentemente real, como reflejo de una profunda crisis que se manifiesta más que en otro lado en el cementerio masivo del desempleo: 5 millones de estadunidenses perdieron su trabajo en 2009; solamente en diciembre se alcanzó medio millón de despedidos, mientras los banqueros de la plutocracia parasitaria de Wall Streeet se gratificaban con bonificaciones subvencionadas por los contribuyentes.
La reforma de salud de Obama ha quedado en el aire, mientras en Alemania lo dan por liquidado (Der Spiegel, 21/1/10).
No nos preocupa tanto la elección de “medio término” en noviembre de este año, cuando, en caso de proseguir la tendencia de la justificada revuelta ciudadana, el Partido del Té no solamente le quitaría las mayorías que todavía conserva el Partido Demócrata en las dos cámaras, amén de paralizar la lubricación del Ejecutivo con el Legislativo, sino, peor aún, pudiera llevar a la ominosa defenestración (impeachment) de un Obama pusilánime e irreconocible para sus electores defraudados.
Lo que más nos preocupa es la elección presidencial de 2013, que pudiera colocar a una amazona como Sarah Palin en la Casa Blanca, lo cual acercaría más que nunca al país a una confrontación bélica con Rusia y/o China, cuyos estrategas han de estar perplejos ante la acelerada descomposición doméstica de Estados Unidos.
La única salvación de Obama –y de paso, del mundo– es que regrese a ser aquel candidato que la mayoría de los ciudadanos del planeta anhelaron.
Obama tuvo un pésimo primer año de gobierno cuando fue secuestrado por los banqueros parasitarios de Wall Street y el complejo militar-industrial, mientras reaccionaba con un desprendimiento evasivo ante la gravedad de la situación.
No será tarea fácil su reconversión y pareciera que los tres años que le quedan serán todavía más difíciles después de haber perdido su oportunidad dorada hoy descarrilada por su vacuidad retórica.
Simon Schama, historiador israelí-británico de la Universidad de Columbia, aconseja que Obama “está obligado a jugar al populismo (¡súper-sic!)”, así como realizar un ajuste de sus consejeros, quienes han dejado mucho que desear.
Schama exagera los logros domésticos de Obama, pero considera que tiene una gran oportunidad de resucitar mediante “una reforma regulatoria de las finanzas”, como “su teatro perfecto para reclamar el populismo” y llenar “el vacío de pasión que la extrema derecha ha rugido (sic) con una histriónica furia infecciosa (sic)”.
¿Las múltiples amenazas de muerte a Obama en Facebook lo habrán eviscerado de su mística apasionada?
Son tiempos inéditos cuando la grave crisis financiera y económica global, propalada por el bushismo del Partido Republicano, requiere el ineludible golpe de timón de un gran estadista a imagen y semejanza de Franklin D. Roosevelt, a quien Obama debe emular para bien común de Estados Unidos y del planeta entero. No tiene otra opción y todavía está mínimamente a tiempo para revertir el doble tsunami doméstico e internacional que se le vino encima, ya que de otra manera pasará al basurero de la historia como un intranscendente Gorbachov, el sepulturero de la URSS.
Reconocemos que el daño que exhibe Estados Unidos es estructural y rebasa las contingencias sicoanalíticas de los personajes. Pero justamente los estadistas trascendentales son quienes entienden los ritmos y alcances de los tiempos.
Hoy Obama se encuentra ante un dilema de alcances shakespearianos: ser Roosevelt o Gorbachov. That is the real question.
Por su reciente declaración de guerra a los banqueros de Wall Street, Obama parece que no desea ser un Gorbachov.

Enviamos médicos y no soldados

En la Reflexión del 14 de enero, dos días después de la catástrofe de Haití que destruyó ese hermano y vecino país, escribí: Cuba, a pesar de ser un país pobre y bloqueado, desde hace años viene cooperando con el pueblo haitiano. Alrededor de 400 médicos y especialistas de la salud prestan cooperación gratuita al pueblo haitiano. En 127 de las 137 comunas del país laboran todos los días nuestros médicos. Por otro lado, no menos de 400 jóvenes haitianos se han formado como médicos en nuestra Patria. Trabajarán ahora con el refuerzo de médicos nuestros que viajaron ayer para salvar vidas en esta crítica situación. Pueden movilizarse, por lo tanto, sin especial esfuerzo, hasta mil médicos y especialistas de la salud que ya están casi todos allí y dispuestos a cooperar con cualquier otro Estado que desee salvar vidas haitianas y rehabilitar heridos.”
“La situación es difícil -nos comunicó la jefa de la Brigada Médica Cubana- pero hemos comenzado ya a salvar vidas.”
Hora tras hora, de día y de noche, en las pocas instalaciones que quedaron en pie, en casas de campaña o en parques y lugares abiertos, por temor de la población a nuevos temblores, los profesionales cubanos de la salud comenzaron a laborar sin descanso.
La situación era más grave que lo imaginado inicialmente. Decenas de miles de heridos clamaban por auxilio en las calles de Puerto Príncipe, y un número incalculable de personas yacían, vivas o muertas, bajo las ruinas de barro o adobe con que habían sido construidas las viviendas de la inmensa mayoría de la población. Edificios, incluso más sólidos, se derrumbaron. Fue necesario además localizar, en medio de los barrios destruidos, a los médicos haitianos graduados de la ELAM, muchos de los cuales fueron afectados directa o indirectamente por la tragedia.
Funcionarios de Naciones Unidas quedaron atrapados en varios de sus albergues y se perdieron decenas de vidas, incluidos varios de los jefes de la MINUSTAH, una fuerza de Naciones Unidas, y se desconocía el destino de cientos de otros miembros de su personal.
El Palacio Presidencial de Haití se derrumbó. Muchas instalaciones públicas, incluso varias de carácter hospitalario, quedaron en ruinas.
La catástrofe conmovió al mundo, que pudo presenciar lo que estaba ocurriendo a través de las imágenes de los principales canales internacionales de televisión. De todas partes, los gobiernos anunciaron el envío de expertos en rescate, alimentos, medicinas, equipos y otros recursos.
De conformidad con la posición pública formulada por Cuba, personal médico de otras nacionalidades, como españoles, mexicanos, colombianos y de otros países, laboró arduamente junto a nuestros médicos en instalaciones que habíamos improvisado. Organizaciones como la OPS y países amigos como Venezuela y de otras naciones suministraron medicamentos y variados recursos. Una ausencia total de protagonismo y chovinismo caracterizó la conducta intachable de los profesionales cubanos y sus dirigentes.
Cuba, al igual que lo ha hecho en situaciones similares, como cuando el Huracán Katrina causó grandes estragos en la ciudad de Nueva Orleáns y puso en peligro la vida de miles de norteamericanos, ofreció el envío de una brigada médica completa para cooperar con el pueblo de Estados Unidos, un país que, como se conoce, posee inmensos recursos, pero lo que se necesitaba en ese instante eran médicos entrenados y equipados para salvar vidas. Por su ubicación geográfica, más de mil médicos de la Brigada “Henry Reeve” estaban organizados y listos con los medicamentos y equipos pertinentes para partir a cualquier hora del día o de la noche hacia esa ciudad norteamericana. Por nuestra mente no pasó siquiera la idea de que el Presidente de esa nación rechazara la oferta y permitiera que un número de norteamericanos que podían salvarse perdieran la vida. El error de ese Gobierno tal vez consistió en su incapacidad para comprender que el pueblo de Cuba no ve en el pueblo norteamericano un enemigo, ni como culpable de las agresiones que ha sufrido nuestra Patria.
Tampoco aquel Gobierno fue capaz de comprender que nuestro país no necesita mendigar favores o perdones de quienes durante medio siglo han tratado inútilmente de ponernos de rodillas.
Nuestro país, igualmente en el caso de Haití, accedió de inmediato a las solicitudes de sobrevuelo en la región oriental de Cuba y a otras facilidades que requerían las autoridades de Estados Unidos para prestar asistencia lo más rápidamente posible a los ciudadanos norteamericanos y haitianos afectados por el terremoto.
Estas normas han caracterizado la conducta ética de nuestro pueblo que, unido a su ecuanimidad y firmeza, han sido los rasgos permanentes de nuestra política exterior. Eso lo conocen bien cuantos han sido adversarios nuestros en la esfera internacional.
Cuba defenderá firmemente el criterio de que la tragedia que ha tenido lugar en Haití, la nación más pobre del hemisferio occidental, constituye un reto a los países más ricos y poderosos de la comunidad internacional.
Haití es un producto neto del sistema colonial, capitalista imperialista impuesto al mundo. Tanto la esclavitud en Haití como su ulterior pobreza fueron impuestas desde el exterior. El terrible sismo se produce después de la Cumbre de Copenhague, donde fueron pisoteados los derechos más elementales de 192 Estados que forman parte de la Organización de Naciones Unidas.
Tras la tragedia, se ha desatado en Haití una competencia por la adopción precipitada e ilegal de niños y niñas, que obligó a que la UNICEF tomara medidas preventivas contra el desarraigo de muchos niños, que despojaría a familiares allegados de tales derechos.
El número de víctimas mortales sobrepasa ya las cien mil personas. Una elevada cifra de ciudadanos ha perdido brazos o piernas, o ha sufrido fracturas que requieren rehabilitación para el trabajo o el desenvolvimiento de sus vidas.
El 80% del país debe ser reconstruido y crear una economía suficientemente desarrollada para satisfacer las necesidades en la medida de sus capacidades productivas. La reconstrucción de Europa o Japón, a partir de la capacidad productiva y el nivel técnico de la población, era una tarea relativamente sencilla en comparación con el esfuerzo a realizar en Haití. Allí, como en gran parte de África y en otras áreas del Tercer Mundo, es indispensable crear las condiciones para un desarrollo sostenible. En solo 40 años la humanidad tendrá más de 9 mil millones de habitantes, y enfrenta el reto de un cambio climático que los científicos aceptan como una realidad inevitable.
En medio de la tragedia haitiana, sin que nadie sepa cómo y por qué, miles de soldados de las unidades de infantería de marina de Estados Unidos, tropas aerotransportadas de la 82 División y otras fuerzas militares han ocupado el territorio de Haití. Peor aún, ni la Organización de Naciones Unidas, ni el Gobierno de Estados Unidos han ofrecido una explicación a la opinión pública mundial de estos movimientos de fuerzas.
Varios Gobiernos se quejan de que sus medios aéreos no han podido aterrizar y transportar los recursos humanos y técnicos enviados a Haití.
Diversos países anuncian, por su parte, el envío adicional de soldados y equipos militares. Tales hechos, desde mi punto de vista, contribuirían a caotizar y complicar la cooperación internacional, ya de por sí compleja. Es necesario discutir seriamente el tema y asignar a la Organización de Naciones Unidas el papel rector que le corresponde en este delicado asunto.
Nuestro país cumple una tarea estrictamente humanitaria. En la medida de sus posibilidades contribuirá con los recursos humanos y materiales que estén a su alcance. La voluntad de nuestro pueblo, orgulloso de sus médicos y cooperantes en actividades vitales, es grande y estará a la altura de las circunstancias.
Cualquier cooperación importante que se ofrezca a nuestro país no será rechazada, pero su aceptación estará subordinada por entero a la importancia y trascendencia de la ayuda que se requiera de los recursos humanos de nuestra Patria.
Es justo consignar que, hasta este instante, nuestros modestos medios aéreos y los importantes recursos humanos que Cuba ha puesto a la disposición del pueblo haitiano no han tenido dificultad alguna en llegar a su destino.
¡Enviamos médicos y no soldados!
Enero 23 de 2010
5 y 30 p.m.

Chávez mensaje rumbo a elecciones 2010.flv


http://www.youtube.com/watch?v=j9ri0OuDt6Q

“Quitar la máscara al imperio”: Eva Golinger


Autora de las denuncias más contundentes contra las distintas formas del intervencionismo estadunidense en América Latina, como la acción de las organizaciones no gubernamentales, en sus obras Código Chávez; Bush contra Chávez; La telaraña imperial y La agresión permanente, Eva Golinger exhibe los documentos ocultos en archivos de agencias y departamentos del país aún más poderoso del mundo que prueban esa injerencia. Sostiene que, como abogada, sólo se apoya en evidencias.
En este momento hay una ofensiva imperial muy peligrosa contra la consolidación de la integración latinoamericana, por eso se incrementan los esfuerzos para neutralizar los procesos de cambio en la región, como el golpe de Estado en Honduras, advierte Eva Golinger, abogada, escritora y blanco de implacables críticas por su actitud antiimperialista. Expresa esa advertencia mientras admira la arquitectura del Centro Histórico de la ciudad de México. Toma aire y describe la sensación que le causa la ciudad más grande del mundo: “Quiero conocerla más a fondo y saber lo que viven los mexicanos. Aquí hay una riqueza de historia y de revolución; uno lo siente, lo huele, se ve en los rincones de los edificios”. La luchadora social abraza el Premio Nacional de Periodismo que le otorgó el Club de Periodistas. En su regazo resguarda la colección de todos sus libros, ésos que para miles de lectores son un referente obligado y que para otros confirman que es la vocera del gobierno de Hugo Chávez.
Eva nació estadunidense y venezolana en 1973 y se doctoró en derecho internacional por la Universidad de Nueva York. Desde muy joven combinó la práctica legal con el arte, disciplina en la que se graduó en la Universidad Sarah Lawrence, en Bronxville, Nueva York. Alterna su tarea como defensora de civiles que requieren de visa estadunidense con el rastreo tenaz de evidencia documental y testimonial que arrojen luz sobre las operaciones encubiertas del gobierno estadunidense en América Latina. Como usuaria de la Ley de Libertad de Información, la fama de esta joven creció cuando hizo públicos los pactos gubernamentales concertados a espaldas de los propios estadunidenses.
Ella se consagró a develar el origen de la propaganda contra iniciativas de política soberana en América Latina, que ofrecen “fuentes sin identificar” en centenas de artículos o reportajes, y a rastrear la reproducción, en medios de comunicación de todo el mundo, de la definición que hizo Condoleezza Rice de que “Hugo Chávez es una fuerza negativa en la región”. Su tenacidad logró desclasificar información que prueba que el gobierno estadunidense supo con anticipación los detalles del golpe contra el presidente venezolano en abril de 2002, que incluían planes para generar violencia en las manifestaciones, el arresto del mandatario y la participación activa en el golpe.
Explica que ella, como muchos latinoamericanos, se esperanzó con el proceso electoral de 2006 en México. Dice que en la región se creía que llevaría al gobierno a una nueva visión del poder, “pero al final no se logró por múltiples razones, de las que muchas no se conocen, o por lo menos con evidencias”. Opina que en este país, como en Honduras, “hay un pueblo que ha sido golpeado y excluido”, que intentó llegar al poder por la vía electoral, pero “se lo quitaron de las manos de forma descarada”.
Preocupa a la Golinger –como la llaman despectivamente sus detractores de Miami, Florida– el futuro inmediato de Panamá. Explica que el presidente Ricardo Martinelli, “un empresario multimillonario”, anunció en su primer discurso ante Naciones Unidas: “Panamá is open for business” (Panamá está abierto para los negocios). “¿Cómo es posible que Martinelli diga eso, pugne por un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos y promueva la instalación de bases militares estadunidenses en su territorio cuando su pueblo sufrió un profundo trauma por la invasión militar de 1989?”, pregunta.
Recientemente, Eva Golinger dictó ponencias en la Federación Rusa y Bielorrusia. Le impresionó el “exagerado consumismo” del pueblo ruso y su afán capitalista, pues para ella el consumismo es “una enfermedad, un veneno que, si uno no se cuida, entra y vive en uno”. Observa que ya envenenó a gran parte de la generación de rusos pos Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas. Contrasta esa visión con su experiencia en Minsk, donde persisten los valores socialistas gracias a Alexander Lukashenko, quien para Estados Unidos es el último dictador de Europa, aunque para Golinger él representa la última esperanza en aquella región del mundo.
Eva, que conoce bien los países de la Unión Europea, reclama que Italia y Francia –cuna de la primera gran revolución social de la historia y de la Comuna de París– no se unan para luchar contra la crisis actual.
Considera que los ciudadanos de América del Sur y del centro del continente “estamos mucho mejor preparados para enfrentar los efectos e impactos de esa crisis financiera, también política y moral”.
Obama: el lavado de imagen
El joven rostro de esta mujer se endurece cuando habla de las expectativas de cambio que despertó entre la comunidad internacional la presidencia de Barack Obama. Para Eva Golinger, el arribo del demócrata a la Casa Blanca “trajo un lavado de la imagen estadunidense y representó una seducción total” que se expresa en la Obamanía en Rusia. Esa tendencia le preocupa porque Rusia sufrió agresiones y guerra de Estados Unidos por décadas y ahora cae en lo que llama “la trampa y seducción de una figura presidencial”, que cambia de color y de discurso, pero con acciones iguales “o, incluso, peores que George Bush”.
Por eso, Eva considera que los europeos están más retrasados que América Latina. Afirma que en los últimos 10 años, los latinoamericanos construyeron un nivel de integración que no existía; Venezuela se distanció completamente de las instituciones financieras internacionales, y construyen nuevas los miembros de la Alternativa Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba). “Estamos en el único camino que es para asegurar el futuro de nuestra generación en América Latina”, subraya la abogada.
Asegura que el modelo de democracia que construyen Venezuela y los países de la Alba se asemeja al que propuso Abraham Lincoln –a quien Hugo Chávez suele citar–, que es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo. Agrega la también venezolana que en 2010, el gobierno del presidente Chávez ingresa en una etapa nueva, luego de 10 años de haber construido la estructura de la revolución económica con misiones sociales que atienden la miseria y promueven el desarrollo con más educación y cooperativas. Opina que ése es el camino que siguen los bolivianos, como también lo hacen Nicaragua, El Salvador y Uruguay pese a las presiones de Washington.
El enemigo interno
Para la escritora, éste es un momento muy interesante, porque nunca se pensó que la comunicación y la información asumirían tanto poder sobre la sociedad. Considera que el capitalismo, con los empresarios de los medios, ocupó los espacios informativos que eran del pueblo, lo que en su opinión “convirtió la comunicación en un negocio en donde se pervirtieron los conceptos de comunicación e información” al grado de que no se distingue qué es información, qué es propaganda y cuál es el origen de ambas.
Para la estudiosa del uso político de la información, los medios empresariales constituyen los nuevos enemigos internos que atienden a intereses ajenos del pueblo. Estima que sólo se les puede combatir con información pura, cierta y veraz, por lo que en sus investigaciones tiene cuidado de no afirmar nada si no tiene en sus manos las pruebas que lo respalden: “No es mi opinión, sino que me baso en la evidencia como abogada”.
Eva, que es autora de artículos que se nutren de fuentes documentales desclasificadas en varios departamentos gubernamentales estadunidenses, manifiesta su rechazo a las noticias “de impacto” que carecen de fuentes o en los que la fuente es otro medio u otro periodista, “y cuando lo buscas, tampoco tiene fuente o es una cuestión anónima”, exclama.
Eva Golinger enfatiza que en la guerra mediática nada es objetivo, por lo que critica a los medios y periodistas que afirman ser objetivos y balanceados: “¡Eso es mentira, nadie es objetivo, todos tienen una visión en su propia vida, pero a partir de eso hay que ver para quién están trabajando!”, exclama.
En la investigación La telaraña imperial. Enciclopedia de injerencia y subversión, Eva y el sociólogo francés Romain Migus describen el trabajo de subversión interna que realizan las fundaciones y organizaciones no gubernamentales (ONG) que se aliaron al Estado. Ahí exhibe cómo se relacionan ONG, think tanks, agencias gubernamentales, instituciones y partidos políticos con los grandes corporativos mundiales para formar una red que busca el dominio del sistema capitalista.
La luchadora social describe que el imperio pervirtió a las ONG y las usa en su provecho hasta convertirlas en verdaderas agencias gubernamentales bajo la fachada de no gubernamentales: “Ésa es una forma de agresión más peligrosa porque se hacen más invisibles, silenciosas y es más difícil denunciarlas”, advierte la analista. “Cuando alguien se atreve a sacar a la luz esos hechos, se le convierte en el demonio”.
La telaraña imperial descifra cómo se fusionan entre sí la mayoría de fundaciones internacionales que se ostentan como agrupaciones de nobles intenciones y que aportan recursos financieros en proyectos de beneficio social. En esa investigación, la autora estudia la historia de esas fundaciones, a los integrantes de sus consejos directivos o a sus asesores, y advierte que las mismas personas que participan en la junta directiva de una ONG o fundación asesoran a los medios de comunicación internacionales o a las empresas del complejo militar industrial.
Señala Golinger que la mayoría de fundaciones utilizan fachadas para mostrarse benévolas mientras que en otros espacios hacen un trabajo explícitamente sucio, por lo que reconoce: “Es muy difícil exhibirlos, desenmascararlos y destruir sus fachadas desde donde subvierten y desestabilizan a la sociedad”.
¿Y tú para quién trabajas?
?Trabajo para mí porque soy independiente, pero también por la justicia que es lo que motiva mi vida. Lucho contra la injusticia y por eso no tomo órdenes de nadie. Nadie me paga para escribir algo, para decir algo. Los riesgos vienen cuando se rompen los tabúes de no hablar de las actividades ilícitas de la Agencia Central de Inteligencia, del imperio y lo que hacen. ¿Por qué no podemos hacerlo y ellos siguen cometiendo ilícitos?
Afirma que los medios pretenden que la sociedad se silencie y borre su memoria histórica. “Nos drogan con el consumismo y el veneno que transmiten a través de las pantallas: telenovelas y películas o series estúpidas de televisión que no contribuyen al desarrollo de nuestros pueblos”. Eva Golinger ha denunciado el engaño mediático y admite que por ello ha pagado el precio de “estar más aislada, pero no veo otro camino”.


El maltrato a Eva Golinger en México
“Tú no viajas; te quedas aquí”, le espetó Juan Macías Hernández a Eva Golinger cuando intentaba abordar el avión de Mexicana de Aviación que la llevaría de regreso a Caracas, Venezuela. Eran las 12:20 horas del 10 de diciembre de 2009. El empleado de la aerolínea jaloneaba a la escritora para impedirle subir a bordo una pequeña maleta con objetos personales, mientras todos los pasajeros del vuelo 375 introducían dos y más maletas y bolsas al avión.
“El maltrato me hizo sentir humillada y abusada, y me provocó lágrimas y desespero. Sólo quería llegar a Venezuela, a mi casa, en un vuelo pagado y listo para viajar”, describe Eva Golinger en una misiva de protesta que dirigió a la aerolínea –cuya copia posee Contralínea.
La abogada y activista política admite que, aunque había sufrido la ofensa, “le supliqué al señor Macías Hernández para que me dejara viajar”, y le ofreció incluso documentar el pequeño maletín, pero la respuesta del empleado fue rotunda: “¡No, tú no viajas; te quedas aquí!” Y a pesar de que Eva siguió protestando en medio de un llanto de desesperación, Juan Macías agregó: “Me dan asco los venezolanos”.
Ante tal argumento, Eva replicó que también tiene la nacionalidad estadunidense. El hombre rebatió: “¡Peor aún!” Las palabras de Macías, “llenas de odio y discriminación, me hicieron sentir indignación e impotencia”, dice la autora de Chávez contra Bush. Aunque explicaba que horas atrás había recibido el Premio Internacional de Periodismo que otorga el Club de Periodistas de México y pedía ayuda a otros funcionarios de Mexicana de Aviación, con la policía del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México presente, nadie acudió en su auxilio. El avión partió sin ella y su desesperación llegó al colmo “a esas horas de la madrugada y sin dinero. Me sentí muy vulnerable; era mi primera visita a México y no conocía ni siquiera en qué parte de la ciudad me encontraba”. Además, era difícil localizar a los funcionarios de la embajada de Venezuela.
Acudió con otro hombre de la aerolínea para pedirle el reembolso por su pasaje y, en forma grosera, le respondió: “No te voy a dar nada y tienes que comprar otro pasaje”, a lo que Eva le reclamó diciéndole que también es abogada y, por lo tanto, conoce sus derechos. Ese empleado le contestó riéndose: “Ahora eres abogada, pensé que eras periodista”, y se retiró.
Hacia las 2 de la mañana, una Eva sola y sentada en un vacío aeropuerto logró conectarse por internet con otra aerolínea en la que logró viajar a Caracas (vía Miami) hasta las 7 de la mañana de ese día y previo pago de 759.78 dólares. “Sólo quería buscar la forma de salir de México”. A pesar del costoso boleto de avión, llegó a su segundo país hasta las 19:45 horas de un tormentoso día. (NE)
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Seguridad nacional y defensa mexicanas, desarticuladas e ineficaces


Al descubierto, la falta de coordinación entre las instituciones de seguridad nacional, seguridad pública y procuración de justicia en México. En un estudio del Casede, expertos en inteligencia y seguridad nacional señalan la incapacidad del gobierno mexicano para combatir al crimen organizado y para respetar los derechos humanos. El actual consejero de la Presidencia en materia de seguridad nacional, Jorge Tello Peón, reconoce que por primera vez en muchos años el Estado mexicano ha perdido control territorial. Al improvisar una supuesta “guerra” contra el crimen organizado, “Felipe Calderón no sabía lo que le esperaba”, señala Sergio Aguayo.
Jorge Tello Peón –consejero de la Presidencia en materia de seguridad nacional– reconoce que por primera vez en muchos años tanto las estructuras institucionales como las “históricas” han perdido control territorial en México. “Antes por lo menos se sabía quiénes eran (los que controlaban ciertas regiones del país)”, indica.
El exdirector del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y actual asesor de la Presidencia de la República añade que la gran cantidad de información que fluye sobre la seguridad, el crimen, la violencia y la impunidad ha generado en la población la sensación de riesgo a la seguridad personal, miedo, confusión, enojo y frustración.
En el texto “La seguridad pública en México. Síntesis social” –escrito para el Atlas de la seguridad y defensa de México, primera publicación del Colectivo de Análisis de la Seguridad con Democracia, AC (Casede)–, también acepta que el entorno social de la población es “cada día más violento”, lo que ha generado un ánimo nacional de ansiedad y angustia. Y el ciudadano promedio comienza hacer oír su grito, que es mezcla de ansiedad, reclamo y preocupación”.
Entretanto, Sergio Aguayo Quezada considera que si en la guerra al crimen organizado “el Estado salió de su catatonia” y lanzó la primera ofensiva, también se trató de una decisión improvisada. “Felipe Calderón no tenía idea de lo que le esperaba”. En su contribución “¿Quién gana la guerra contra el narcotráfico?”, Aguayo cita una entrevista que el mandatario federal sostuvo con el director del diario madrileño El País, el 15 de junio de 2008, donde expresó: “Cuando llegué a la Presidencia, el alcance del narco era ya insostenible. Llegué al quirófano sabiendo que el paciente tenía una dolencia muy grave, pero al abrirlo nos dimos cuenta de que estaba invadido por muchas partes y había que sanarlo a como diera lugar”.
A tal confesión, el profesor e investigador del Centro de Estudios Internacionales del Colegio de México lanza la pregunta: “¿Diagnosticó bien la dolencia o provocó una metástasis?” Aprecia que ésta es una batalla en la cual la calidad de la información “es vital”, pues el crimen organizado “la tiene y de primera”, mientras que el gobierno y la sociedad están generándola.
Al comparar los resultados de los primeros 18 meses de gobierno de Calderón con el mismo periodo de sus antecesores, el analista observa cómo se dispara el número de detenidos y la cantidad de decomisos de droga, dinero, armas y aeronaves. Además, destaca la reducción “notable” en la cifra de deserciones del Ejército Mexicano que, dice, alimentan las filas del sicariato: en 2006 botaron el uniforme 20 mil 536 militares; en 2007 fueron 15 mil 665.
Las malas noticias, dice el investigador, es que las cifras empequeñecen al contrastarlas con lo que se sabe sobre el dinero que se mueve en el negocio de la droga. Asegura que con un criterio muy conservador, en el primer año de gobierno, “el valor de lo decomisado representa una merma para los cárteles de sólo el 6 por ciento del dinero que mueven”. Explica que el impacto sobre el trasiego de armas “es todavía más insignificante”, pues sólo se capturó 1.4 por ciento del total del arsenal que, se estima, ingresó al país en los primeros 18 meses de este gobierno.
Pregunta Sergio Aguayo: ¿Cuántos desertores policías y militares se convirtieron en sicarios? ¿De cuántos efectivos armados disponen los cárteles? ¿Cuál es su base social? ¿Cuántas de las armas ilegales no decomisadas están en manos de los cárteles? ¿Qué tanto participa el crimen organizado en la política federal, estatal o local? ¿Tiene el Estado mexicano algún plan para anticiparse a los riesgos asociados con la mayor presencia estadunidense en las instituciones de seguridad mexicanas? Y ¿qué sigue si falla el Ejército en el combate al narco? Al final, afirma que por la violencia generalizada y la corrupción desenfrenada, avanza la percepción de que México está convirtiéndose en un Estado fallido.
Barry R McCaffrey, exjefe de la Oficina de la Casa Blanca para el Control de Drogas y comandante del Comando Sur, en su trabajo “El desafío mexicano: corrupción, crímenes y drogas”, explica que las fuerzas armadas se utilizan cada vez más por el gobierno federal “debido a las deficiencias en los organismos encargados de hacer cumplir la ley civil”. Reconoce que la administración de Calderón “tomó el poder con una débil legitimidad política” en una controvertida elección.
Desde su perspectiva, el gasto propuesto por el gobierno estadunidense para respaldar a México “es irrelevante” comparado con lo que ha gastado en Irak y Afganistán (que han consumido 700 mil millones de dólares con un saldo de 36 mil soldados muertos y heridos). McCaffrey enfatiza que lo que Estados Unidos se juega en México es enorme “y no se puede permitir tener un narco-Estado como vecino”. Además, plantea un difícil escenario para la seguridad nacional de su país, que la administración de Barack Obama debe impedir, pues “en menos de ocho años”, los violentos y beligerantes cárteles criminales de droga podrían abrumar a las instituciones de Estado y establecer un control de facto en amplias regiones del norte del país.
Inteligencia
Con frecuencia se dice que la inteligencia y la prostitución son las profesiones más antiguas de la historia, aunque lo que se dice menos es que, a pesar de las continuas críticas que ambas profesiones reciben, sus servicios son ampliamente utilizados y apreciados por sus usuarios, comenta Luis Herrera Lasso en su trabajo “Inteligencia y seguridad nacional”. Rechaza la versión de que los servicios de inteligencia se conocen más por sus fracasos que por sus aciertos, y opina que la misión fundamental de la inteligencia es evitar que se concreten amenazas que comprometan la tranquilidad social, la estabilidad y la gobernabilidad.
El fundador y director del Centro Latinoamericano de Estudios Estratégicos describe el sigilo, discreción y secretismo de las tareas de inteligencia como su “principal atributo”, pues una condición para desactivar cualquier amenaza a la seguridad nacional es el elemento sorpresa. “Hacer públicas las investigaciones de inteligencia anularía sus resultados”, explica Herrera Lasso al señalar que, frente a la sociedad, esto siempre ha sido y será una ventana de vulnerabilidad.
Estima que muchas preguntas quedan en el aire sobre los sistemas de inteligencia: ¿Qué hacen? ¿Cómo lo hacen? ¿Para quién trabajan? ¿A qué intereses responden? Sostiene que la diferencia entre sistemas de inteligencia radica en la forma en que se responde a las preguntas: inteligencia ¿Para qué? ¿Quién la hace y cómo? ¿Cuáles son sus límites? ¿Quién los supervisa?
Debilidad institucional
El atlas aborda el abandono de las fronteras norte y sur donde prevalecen el subdesarrollo económico, la pobreza, el éxodo migratorio, el deterioro ambiental y, sobre todo, la pérdida de vidas ligadas a la inseguridad. Abelardo Rodríguez refiere que esto es ejemplo de políticas públicas endebles para construir un Estado responsable con su sociedad, territorio y fronteras, porque sus instituciones resultan vulnerables para hacer frente a amenazas internas y externas.

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Subutilizan Petroquímica en beneficio de empresas privadas



Felipe Calderón impulsa Etileno XXI, el proyecto petroquímico más importante de su gobierno, a costa de subutilizar las plantas de Pemex Petroquímica y del millonario subejercicio presupuestal, revelan auditorías del Órgano Interno de Control. Por ello, la Comisión de Energía del Legislativo pedirá a la Auditoría Superior de la Federación audite el proyecto que será explotado por la iniciativa privada.
En tiempos de Vicente Fox se llamó Proyecto Fénix. Diseñado e impulsado por Rafael Beverido Lomelín, director general de Pemex Petroquímica (PPQ), como la obra que haría renacer la petroquímica nacional, antaño, una de las primeras del mundo. Felipe Calderón hizo suya la propuesta, denominándola Etileno XXI, en alusión al principal insumo que producirá esa industria.
“Es un proyecto que representa una oportunidad de la más alta trascendencia para elevar la productividad de la industria petroquímica… si logramos el objetivo, cubriríamos el 75 por ciento de las importaciones que hoy se realizan de polietileno de alta densidad y otras materias utilizadas en la industria petroquímica, como polietileno de baja densidad y polipropileno, etcétera, etcétera”, dijo el presidente Calderón el 31 de octubre de 2008 durante la ceremonia de Clausura del XL Foro Nacional de la Industria Química.
En ocasión de sus tres años de gobierno, el 29 de noviembre de 2009, subrayó: “El mes pasado se licitó, finalmente después de una década de cambios en el sector petroquímico, el Proyecto Etileno XXI, que implicará una inversión de más de 2 mil 500 millones de dólares para fortalecer este sector”. Incluyó el proyecto en su decálogo, difundido el pasado 2 de septiembre, donde afirma que el Etileno XXI, que explotarán comercialmente la mexicana Idesa y la brasileña Braskem, impulsará “la transformación de México”.
Ante el fracaso que resultó el Fénix de Fox, Calderón se asegura que no le ocurra lo mismo, pero fortalece su proyecto a costa de subutilizar las plantas de Pemex Petroquímica (PPQ), del millonario subejercicio presupuestal y de la cancelación de proyectos programados en esa subsidiaria, revelan auditorías de la Secretaría de la Función Pública (SFP) y diversos documentos internos signados por Rafael Beverido Lomelín, cuya copia obra en poder de Contralínea.
Las anomalías
Entre las irregularidades detectadas por el Órgano Interno de Control contenidas en la auditoría 9/2009, destaca, “por su importancia”, la “subutilización en la capacidad instalada de las plantas de etileno, polietileno de baja densidad y reformadora BTX (benceno-tolueno-xileno)”. La auditoría, clasificada como “expediente reservado” y fechada el 30 de junio de 2009, fue efectuada en Coatzacoalcos, Veracruz, sede operativa de PPQ.
El organismo de la SFP detalla la subutilización de cada planta. En la de etileno, cuantifica que, “de acuerdo con su diseño, presenta un desaprovechamiento del 32 por ciento”. En la de polietileno, el desaprovechamiento ha oscilado entre el 22 y el 52 por ciento. La planta reformadora BTX, dice la auditoría, “refleja un aprovechamiento de 62 por ciento respecto del procesamiento de nafta y de un 80 por ciento de la producción de reformado BTX”.
Además de la subutilización, que de acuerdo con la auditoría 9/2009 tienen las plantas de etileno, Rafael Beverido cerró tres plantas que producían materia prima en los complejos petroquímicos Pajaritos, Escolín y Morelos, de acuerdo con información oficial de Petróleos Mexicanos (Pemex). Según se denunció ante la SFP, la planta de etileno de Pajaritos se “desincorporó” poco después de una inversión de 60 millones de pesos para su ampliación.
Durante los últimos ocho años, la capacidad instalada de producción de etileno en PPQ, que asciende a 1 millón 364 mil toneladas anuales, ha sido aprovechada sólo al 67 por ciento, de acuerdo con un diagnóstico elaborado por el Instituto de Investigaciones y Estudios Energéticos de los Trabajadores de América Latina y el Caribe (IEETALC).
El periodo corresponde a la gestión del exdirector general de Industrias Negromex al frente de PPQ. Detrás de la subutilización, “está la intensión de Beverido de desmantelar la producción de Petroquímica y que de ella se encarguen exclusivamente los privados”, asegura Rocío Nahle García, exasesora de la Comisión de Energía en la Cámara de Diputados e integrante del IEETALC.
El megaproyecto
En la industria petroquímica, el etileno representa el segmento más importante, pues se usa como materia prima de una múltiple variedad de productos intermedios y finales, como plásticos, resinas, fibras, elastómeros, solventes, recubrimientos, plastificantes, pinturas, lacas, anticongelantes, detergentes, entre muchos otros, de allí su gran demanda a nivel mundial. Se comercializa principalmente a través de sus derivados (polietileno, dicloroetano, cloruro de vinilo, estireno, etilenglicol) en lugar de monómero puro. En los últimos años, su precio en el mercado internacional se ha mantenido a niveles sostenidos, pero, según estimaciones de la Secretaría de Energía, hacia 2012 irá a la alza.
El Etileno XXI proyecta construir y operar un cracker (horno de pirolisis) con una capacidad de 1 millón de toneladas de etileno al año, así como la construcción y operación de unidades integradas de polimerización para la producción de polietilenos. En noviembre pasado, Pemex asignó la concesión a Idesa/Braskem, que la explotarán comercialmente durante 20 años (a partir de 2015, en que comenzará a operar), y con la posibilidad de ampliar su periodo. La inversión estimada es de 2 mil 500 millones de dólares, 70 por ciento de los cuales se obtendrán mediante un Project Finance, y el resto con capital de los accionistas.
Mediante un convenio se estipuló que la paraestatal, a través de Pemex Gas y Petroquímica Básica (PGPB), le suministrará a Idesa/Braskem 66 mil barriles diarios de etano durante 20 años.
Aunque privado, el Etileno XXI implica una millonaria erogación económica de las arcas públicas: el programa de inversión de Pemex 2009-2012 indica que en lo que resta del sexenio, PGPB destinará 205 mil millones de dólares a construir dos ductos para suministrarle el etano a Idesa/Braskem; un ducto de 70 kilómetros de Ciudad Pemex a Nuevo Pemex y el otro ducto de 140 kilómetros de Nuevo Pemex-Cactus-Coatzacoalcos, municipio que albergará al complejo que se construirá en una extensión de 200 hectáreas donadas por el gobierno de Veracruz. El monto que PGPB gastará en sólo dos ductos representa más del 40 por ciento de su inversión destinada a “proyectos prioritarios” de este sexenio.
Eso no es todo. Para abonar a la supuesta necesidad de inversión privada en PPQ, Beverido Lomelín ha ordenado el considerable subejercicio presupuestal, la cancelación de importantes proyectos, así como la anticipada asignación de otros a la iniciativa privada. Lo anterior lo revela un informe fechado el 10 de noviembre de 2009, enviado por Rafael Beverido a la legisladora Laura Itzel Castillo Juárez, secretaria de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados.
En el informe, del que Contralínea tiene copia, el funcionario detalla cada proyecto cancelado durante 2009, a pesar de contar con los recursos presupuestales, también por impulsar el Etileno XXI.
El primero de ellos es la ampliación de la Planta de Etileno en el Complejo Petroquímico Morelos. La licitación se efectuó en dos ocasiones: diciembre de 2006 y marzo de 2008; en ambas, Beverido declaró desiertos los procesos. En junio de 2008 determinó suspender el proyecto y otros asociados a la cadena de etano y “vincularlos” a “la iniciativa del proyecto Etileno XXI”, especifica en el informe.
El segundo fue la ampliación de la Planta de Óxido de Etileno de 225 a 360 Millones de Toneladas Anuales (MTA), dividida en dos etapas. En 2007 se iniciaron los trabajos de la primera ampliación de 225 a 280 MTA. El 5 de junio de 2008, Beverido decidió suspender la segunda etapa, en la que se alcanzaría una producción de 360 MTA, para “vincularla” “a la iniciativa del proyecto Etileno XXI”, indica en el informe.
A investigación
Para la legisladora Castillo Juárez, el informe suscrito por Beverido Lomelín “es una prueba irrefutable de los malos manejos que está haciendo Pemex Petroquímica”, pues, dice, “en el caso concreto del Etileno XXI, es evidente que hay malos manejos. El mismo Beverido, en el informe que me envía, explica que su decisión de suspender la ampliación y modernización de la cadena de etileno en el complejo petroquímico Morelos es para vincularla al complejo Etileno XXI, lo cual es ilegal. Es muy grave lo que está haciendo ¡está desmantelando Pemex! Sorprende su respuesta ya que no oculta esa situación que es irregular, aunque pretende decirlo de manera eufemística”.


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Calderón ya fracasó y debe renunciar por causa grave


El artículo 86 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que debe normar nuestra conducta individual y colectiva, establece: “El cargo de presidente de la república sólo es renunciable por causa grave, que calificará el Congreso de la Unión, ante el que se presentará la renuncia”.
En el párrafo tercero del artículo 84 de la misma ley, se dice: “Cuando la falta del presiente ocurriese en los cuatro últimos años del periodo respectivo, si el Congreso de la Unión se encontrase en sesiones, designará al presidente sustituto que deberá concluir el periodo; si el Congreso no estuviere reunido, la Comisión Permanente nombrará un presidente provisional y convocará al Congreso de la Unión a sesiones extraordinarias para que se erija en colegio electoral y haga la elección del presidente sustituto”.
La Constitución de 1917 (resultado de la reforma a la Constitución de 1857 y ésta resultado de la gloriosa revolución de Ayutla de 1854 que parió la destitución de Santa Anna; creó a la generación liberal con Juárez a la cabeza; propició la restauración de la república; implantó la reforma; cimentó al Estado laico y afianzó la lucha victoriosa para vencer y expulsar a la invasión francesa y su monigote Maximiliano) facilita el procedimiento cuando el presidente en funciones renuncia antes de cumplirse los cuatro años, en el párrafo primero del citado artículo 84.
En este caso, está la posibilidad, por el bien de la democracia y el republicanismo, de que Calderón tenga que irse al menos cuando cumpla cuatro años en el cargo para el que no tuvo los tamaños, ya no de un estadista, que fuera mucho pedir, sino de un político, haciendo un esfuerzo de capacidad y eficiencia para resolver los crecientes problemas que constituyen un volcán social con probables estallidos al conjuro de las fiestas neoporfiristas por el bicentenario y centenario de las revoluciones de 1810 y 1910.
Tres años después, Calderón, el Partido Acción Nacional (PAN) en el gobierno y los calderonistas ya probaron que no pueden y que no es tanto el supuesto miedo a gobernar (como el investigador Carlos Arriola, proclive al panismo, expuso en su texto El miedo a gobernar. La verdadera historia del PAN, Editorial Océano de México), pues sus abusos del poder echan por tierra que tienen miedo (ni siquiera al infierno prometido por su iglesia, pues con una confesión, dos padresnuestros y un ave María son perdonados y ganan el cielo).
No. Los panistas calderonistas (el PAN tiene militantes que no comulgan con las ruedas del molino calderonista, y los hay renegados en busca del golpismo, como Manuel Espino que anda como “perro sin mecate”) no supieron gobernar y administrar… pero sí dedicarse al botín, el tráfico de influencias, el peculado y vivir en la total impunidad (Julio Scherer Ibarra, Impunidad. La quiebra de la ley, Editorial Grijalbo).
A los calderonistas y su jefe tribal, Calderón, les viene como “anillo al dedo” la imputación de Max Weber de que no “están políticamente maduros para la conducción del Estado”, porque no son capaces de actuar conforme a la ética de la responsabilidad, sino con arreglo a la ética de la convicción, “dejando el resultado en manos de su dios”.
Calderón ya fracasó. La nación, que en su mayoría son los remeros de la nave estatal que la mantienen a flote, sobrevive en la peor crisis económica, política y social. Y para colmo, al no haber ejercido la facultad del artículo 29 constitucional, la criminalización gubernativa está a la orden del día con la militarización creciente del país (que presagia un posible golpe de Estado); se esparce el tufo de un alcoholismo, como fue el binomio de Victoriano Huerta.
Una catástrofe nos ha puesto a la orilla del precipicio de levantamientos por hambre, desempleo, corrupción pavorosa de los aparatos judiciales (empezando por la Suprema Corte), y por la sangrienta inseguridad en una guerra de todos contra todos, donde los narcos llevan la delantera, las víctimas inocentes son la población civil y tenemos alcaldes dispuestos a la justicia con escuadrones de la muerte y paramilitares.
El país está a punto de tener dos celebraciones de los centenarios: la oficial, con luces de bengala, al estilo de Porfirio Díaz. Y la del pueblo, que puede poner las condiciones para la violencia, en lugar de deshacernos de Calderón sin derramamientos de sangre. Perredistas, con Ebrard; priistas, con Peña Nieto; panistas, con Calderón, se suman a las fiestas de salón, porque como Porfirio y los porfiristas, ignoraron lo que ya en 1908 había publicado Francisco I Madero: La sucesión presidencial en 1910.
Los reproches de los empresarios y banqueros, incluso de los que financiaron la campaña electoral de Calderón, no obstante haber obtenido millonarias ganancias, cuentan en un sistema capitalista. Ellos lo han reprobado. Lo han tachado de inepto. Tan burro o más que Fox. Y esto mientras no llegan las inversiones extranjeras y las nativas se retraen.
Es lo duro y tupido contra quien se presentó como “presidente del empleo” y ha propiciado un desempleo masivo, despiadado. Dijo tener “las manos limpias”, y casi todos los panistas en el poder han malversado los fondos públicos: hay saqueo, transas y complicidades que reportan un mal gobierno que no cumple con el mandato constitucional de “gobernar en beneficio del pueblo”.
Bueno, hasta el astronauta, de origen mexicano, recibido por Calderón, casi le escupió duras críticas por las desgracias que hunden a los más de 100 millones de mexicanos. Y no se diga la calificada y fundamentada opinión del economista, dedicado a los análisis económicos, Joseph Stiglitz, que señaló a Calderón como un inepto en el manejo de la crisis, censura que hizo tambalear al calderonismo.
Pero sobre todo, el pueblo entero reprueba los actos de Calderón (quien escucha en Los Pinos los pasos de Victoriano Huerta), y lo consideramos no apto para seguir en el cargo. La situación desastrosa de la sociedad, el gobierno y el daño a la vigencia del estado de derecho por la pobreza masiva, el desempleo, la impunidad, la corrupción y mal gobierno, lo hacen responsable de la causa grave por la que debe renunciar.
Y hacerlo antes de que por todo el territorio se enreden el militarismo, los narcotraficantes, las guerrillas, las protestas y los levantamientos civiles por hambre, en el contexto de alza de impuestos para, como en épocas de Santa Anna y Porfirio Díaz, provocar al pueblo, que ya considera a Calderón indigno e incapaz de gobernar.
Los calderonistas se han convertido, “por su indiferencia, por su egoísmo, por sus vicios, en incapaces e indignos de gobernar”, escribió Tocquevielle la víspera de la Revolución de 1848, muy a propósito del inicio de 2010, que tiene como factor común la alternativa: resolver pacíficamente nuestros problemas o dejar paso a la violencia.
cepedaneri@prodigy.net.mx

Candidatos bajo pedido

Enrique Peña Nieto, gobernador del estado de México.


MÉXICO, D.F.; 23 de enero (Apro).- La Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos acaba de aprobar lo que aquí en México la elección presidencial del 2006 con Felipe Calderón y la precandidatura de Enrique Peña Nieto para el 2012 han demostrado ser certeros ataques a la democracia.
El pasado jueves 21, en una votación dividida de cinco a cuatro, la Corte estadounidense echó abajo las restricciones legislativas que durante más de seis décadas impidieron a empresas y sindicatos pagar campañas a favor y en contra de candidatos.
Los sectores más conservadores estadunidenses, que en la víspera del primer aniversario de la llegada de Barack Obama habían recuperado el martes la mayoría en el Senado estadunidense, lograron que los jueces del máximo tribunal de ese país declararan inconstitucional los criterios vigentes desde 1947 y reforzados todavía hace seis años con la ley McCain-Feingold.
La decisión resultó del juicio interpuesto por la coalición Ciudadanos Unidos –en la que participa la Asociación Nacional del Rifle, opositora al control de armas– contra la Comisión Federal Electoral.
Bajo el argumento de que la libertad de expresión garantizada por la Primera Enmienda de la Constitución debe aplicar también a las grandes corporaciones, la estrecha mayoría de la Corte abrió las puertas para que los grandes corporativos estadunidenses utilicen recursos de sus tesorerías para hacer campañas a favor o en contra de un sindicato.
La resolución de la Corte estadunidense no habla expresamente de los sindicatos ni de los grupos de interés, pero para ellos se aplicará el mismo criterio. Entre los beneficiados de esta resolución destaca la Cámara de Comercio de Estados Unidos, que tiene una importante presencia en México dada la fuerte presencia de firmas estadunidenses en el país.
Lo que ahora tiene escandalizado a un sector importante de la población estadunidense es ya una práctica en México desde la elección federal del 2006.
Hay numerosas testigos y evidencias de la incursión ilegal que hicieron las organizaciones empresariales mexicanas para hacer campaña en contra de Andrés Manuel López Obrador y a favor de Calderón.
El propio Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación consideró que esa intervención –al igual que la descarada injerencia del entonces presidente Vicente Fox– desequilibró y puso en peligro la competencia, aunque en una justificación absurda señaló que no se podía cuantificar en votos a favor o en contra, por lo que no había motivo para anular la elección.
Con una injerencia aún más grave, Televisa lleva mucho tiempo construyendo la candidatura presidencial del gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto.
La resolución de la Suprema Corte estadunidense desestima el poder de las empresas para incidir en el ánimo de los electores. Baste recordar lo que hicieron varias empresas mexicanas para disuadir el voto por López Obrador. En algunas, fue de un franco chantaje: empleo a cambio de voto por Calderón.
Fue tal el daño de esa conducta que el propio Congreso mexicano reformó la legislación electoral para impedir que durante las campañas las empresas contraten espacios para favorecer o criticar a algún candidato en particular.
Pero esa disposición todavía se puede venir abajo. La Suprema Corte de Justicia de la Nación aún está por resolver un amparo interpuesto por empresarios e intelectuales, quienes la consideran como una limitante a su derecho de expresión.
A la luz de la resolución de la Corte estadunidense, es de esperar un nuevo embate de los sindicatos patronales en su afán de seguir fabricando candidatos bajo pedido.
jcarrasco@proceso.com.mx

Calderón: venta de garage


MÉXICO, D.F., 22 de enero (apro).- Mientras dirigentes políticos y aspirantes a gobernar un estado se debaten entre hacer alianzas o no con sus ancestrales opositores; o delinean la estrategia política que seguirán en la Cámara de Diputados para allegarse más votantes en la renovación de las autoridades de prácticamente la mitad del país --este año habrá 11 elecciones para gobernador y cuatro más de congresos locales y presidencias municipales--, el gobierno federal sigue con la venta de garage del país, y nadie repara en ello.
El distractor electoral es bueno para el gobierno. Para el PRI es lo que importa por ahora; requiere ganar estas elecciones para fortalecerse y en el 2012 recuperar la presidencia de la República. En este momento eso es lo importante, ya que tenga nuevamente el poder total en sus manos, quizá y solo entonces, podría preocuparse por el país y sus problemas reales.
Me refiero a las subrogaciones del servicio de salud, de las que Proceso dio cuenta y exhibió lo amañadas que han resultado ciertas licitaciones como, por ejemplo, la atención para enfermos renales.
Proceso publicó cómo el entonces director del IMSS y hoy secretario de Comunicaciones y Transportes, Juan Molinar Horcaditas, elaboró una licitación para dejar fuera a tradicionales empresas que han prestado eficientemente este servicio --según el dicho de los propios derechohabientes--, y entregó éste a Olegario Vázquez Raña, a través de su Centro de Diagnóstico Ángeles.
Un centro que, por cierto, no cuenta siquiera con las mínimas normas de salud, como son la higiene o de renovación del material utilizado para le hemodiálisis, con el consiguiente peligro de infectar de otras enfermedades a los ya de por si deteriorados enfermos renales.
Todo para uno de los empresarios favoritos del panismo.
Pero esta “venta” de los servicios no ocurre sólo en el sector salud, ya lo vimos con las ya famosas guarderías subrogadas y que provocó la muerte de 45 niños en Hermosillo, Sonora, por no contar con las medidas de protección civil.
Un caso similar ocurrió en noviembre pasado con otra empresa llamada Corphomed, la cual tiene la licitación de este servicio de hemodiálisis en Querétaro. En ese mes, el centro de atención fue clausurado. Ahí habían muerto más de 30 enfermos renales, sin embargo, la clausura no se debió a la negligencia médica, sino a que no contaba, tampoco, como en el caso de las guarderías de Hermosillo, con las medidas de protección civil adecuadas para garantizar la seguridad de los pacientes.
Lo curioso de este caso es que la licitación que le entregó Molinar Horcasitas establece que aunque se cierra un centro la misma empresa puede seguir brindando el servicio en otros hospitales.
El problema con esta subrogación, que prácticamente es una venta de los servicios, los cuales el gobierno está obligado a brindar, que para eso se cobran cuotas del IMSS y muchos otros impuestos, es que en las licitaciones se les permite o se les da una prórroga, una vez entregadas las licitaciones: Se les otorgan, en su mayoría, tres meses para acondicionar el lugar cuando ésta debería ser una de las exigencias mínimas para concursar.
Bueno, pues ahora un caso similar de licitación amañada o si se quiere catalogar como “dirigida” a ciertas empresas, esta en curso en Pemex.
El país está obligado, por la firma de convenios internacionales, a elaborar gasolinas menos contaminantes; para ello debe sustituir un elemento de la gasolina que se llama MTB y que es altamente contaminante. La sustitución será por el llamado etanol, el cual es un bioenergético mucho menos contaminante y que utilizará para la elaboración de las gasolinas.
Hablo de venta de garage porque prácticamente el gobierno está vendiendo al mejor postor para él, no para la sociedad, estas licitaciones dejando fuera de la competencia a productores mexicanos de sorgo, maíz o caña de azúcar que son la materia prima de la cual se puede obtener etanol.
En septiembre pasado, Pemex Refinación lanzó su convocatoria para adquirir más de 600 millones de litros para el estado de Jalisco y ahí empezar con la sustitución del MTB por etanol.
Cuando menos 15 empresas adquirieron las bases de licitación pero las exigencias son tan difíciles de cumplir que representan serios obstáculos para que los productores mexicanos asociados con empresas mexicanas puedan competir.
Por ejemplo, Pemex Refinación les demandó un capital mínimo de 333 millones de pesos y una fianza de más de 600 millones de pesos.
Esta demanda hizo que 14 de las concursantes se retirarán de la licitación.
Apenas el pasado viernes se supo que sólo tres empresas presentaron propuestas económicas, es decir, entre ellas estarán los ganadores. Y adivinen quién participa, pues una empresa brasileña líder en el mercado del etanol. Sólo una empresa como Andrade y Gutiérrez, S.A. de C.V., puede cubrir estos millonarios requisitos, claro que para ello se está asociando con otra empresa mexicana.
Es casi seguro que dicha empresa será la ganadora. De ahí que sostengamos que el gobierno mexicano continúa con su venta de garage del país, pues mientras está perdiendo la oportunidad de impulsar el campo mexicano, revitalizarlo e incluso apoyarlo con la adquisición segura de sus productos, y de paso podría reactivar la economía de algunas empresas que se pueden asociar con los productores para elaborar y comercializar juntos el etanol, el gobierno de Felipe Calderón está optando por ponerles los mayores obstáculos y beneficiar a empresas extranjeras.
De esto no se habla en los medios de comunicación. Pareciera que lo importante son sólo las elecciones, las alianzas perversas donde los principios ideológicos poco interesan.
Mientras el PRI, el PRD y el PAN están enfrascados en estas discusiones, el gobierno panista sigue con su venta del país. Y bueno, existen otros casos bastante documentados de cómo el gobierno calderonista y el de Vicente Fox en su momento, entregaron todo a la corona española a través de sus empresas para que sean éstas las que dominen el mercado energético en México.
Prácticamente la política energética está en manos de los españoles y no hay partido que detenga al gobierno en esta carrera por entregar todo al extranjero, ya sea mediante subrogaciones o mediante licitaciones, para el caso final es lo mismo: los mexicanos, las empresas medianas y los productores del país están cada día más y más fuera del mercado, y con pocas posibilidades de participar.
A ver si para cuando el PRI recupere la Presidencia de la República pueda hacer algo; o quien sabe si le interese hacer algo. Aquí lo que importa a los partidos es el poder; del bienestar de los mexicanos nadie se acuerda, menos en este año eminentemente electoral.
Correo mjcervantes@proceso.com.mx

La bomba demográfica juvenil

Joven detenido en una manifestación del 2 de octubre.

MÉXICO, D.F., 21 de enero.- El nigeriano que falló en su intento de hacer estallar un avión comercial que se dirigía a Estados Unidos es sólo uno de los muchos jóvenes musulmanes dispuestos a atentar contra el imperio; los muertos en las batallas contra el narcotráfico en México son jóvenes; los desempleados con estudios de todo tipo son jóvenes, y, peor aún, este es el sector de la población que alcanzará las mayores tasas de crecimiento en los próximos años.
Según el estudio de Jack Goldstone The New Population Bomb (La nueva bomba poblacional), publicado en la influyente revista Foreign Affairs (enero-febrero de 2010), el crecimiento poblacional juvenil representa el problema más importante para la seguridad internacional y también para la seguridad nacional de los países ricos.
Sustentado en datos provistos por la División de Población de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el autor señala que los habitantes del planeta pasarán de los actuales 7 mil millones a 9 mil 150 millones en 2050. Sin embargo, cuatro cambios históricos ocurrirán en este periodo: el peso poblacional de los países desarrollados descenderá alrededor de 25%, y el de los países en desarrollo aumentará de manera dramática; la fuerza de trabajo de las naciones desarrolladas dependerá de las subdesarrolladas; la mayoría de los jóvenes y trabajadores se encontrará en los países más pobres, donde se presentan las peores tasas de calidad educativa y de oportunidades de empleo; y, por primera vez en la historia, la mayor parte de la población mundial vivirá en las grandes ciudades de los países más pobres. De acuerdo con sus proyecciones, la expansión económica global y el crecimiento de una clase media con mayores capacidades de consumo se presentarán en Brasil, China, India, Indonesia, México y Turquía.
El envejecimiento de la población en Europa, Canadá, Estados Unidos y Corea del Sur, principalmente, va aparejado al cambio en el modo de producción económica y de organización social, dependiente de la generación de nuevos conocimientos y tecnologías, que se relacionan directamente con las capacidades de los países para ofrecer y mejorar la educación de sus jóvenes y fomentar la investigación científica y tecnológica. Para sostener su población adulta, estos países buscarán incrementar la llegada de jóvenes con el fin de sostener sus tasas de bienestar, salud y servicios básicos.
En la actualidad, 9 de cada 10 niños de hasta 15 años viven en países en desarrollo, y hacia 2050 el crecimiento será absoluto. A Goldstone le preocupa, sin embargo, el gran incremento de los jóvenes en los países de religión musulmana y en los grandes cinturones de miseria de las megalópolis, donde, dice, surgirán bandas de delincuencia organizada, violencia y terrorismo. La orientación del artículo de referencia va dirigido a los tomadores de decisiones de los países desarrollados, para indicarles que, de no fijarse en estas tendencias demográficas, sus políticas serán obsoletas en algunos años, porque el escenario ya es harto distinto del que consideraban hasta ahora.
En México, la población joven está creciendo de manera importante desde principios de la década de los noventa; pero, a diferencia del grupo de edad de 0 a 5 años, que tenderá a disminuir de forma muy considerable en los años por venir, el grupo de población en edades de trabajo y de estudio (15 a 64 años) se mantendrá en aumento hasta 2030. En 50 años este grupo se ha multiplicado por cuatro, con una tasa de crecimiento de 2.4%, lo que equivale a 1.45 millones de personas al año (confróntese México 2030, nuevo siglo, nuevo país, de José Gómez de León, FCE, México, 2000, página 94).
Si a ello se agrega que en esa población se concentran el mayor rezago educativo y la tasa más alta de migración al exterior –con grandes carencias en servicios de salud, vivienda y trabajo–, tenemos que la variable que se presenta en México es representativa de una sociedad a la que no le interesan sus jóvenes y donde las políticas de gobierno se orientan hacia su marginalidad y criminalidad, sin medidas ni programas dirigidos a mejorar sus condiciones de trabajo, de estudio, de vida y de futuro. Por el contrario, es a los jóvenes a quienes se conculcan sus derechos de expresión y de libre y responsable sexualidad, así como a quienes se constriñen sus posibilidades de acceso a la educación y a la cultura.
El 40% de los jóvenes en edad de escolaridad media superior (16-18 años) está fuera de las aulas, y sólo 2% en edad escolar del nivel superior puede acceder a éste. Más de 10 millones de jóvenes no se hallan inscritos en ninguna institución educativa, y quienes pueden mantenerse en algún plantel reproducen deficiencias severas en sus capacidades de lectura y comprensión, así como en la construcción de su proyecto de vida y en el razonamiento crítico y analítico frente a los procesos económicos, sociales y políticos en los que viven. Casi un millón y medio de jóvenes no cuentan con un trabajo estable, y más de 2 millones que realizaron estudios superiores no encuentran un trabajo adecuado.
Efectivamente, estamos frente a una bomba de tiempo, considerada de manera distinta conforme a las orientaciones de gobiernos, países y regiones, pero para nuestro país esta situación rebasa lo meramente demográfico porque tiene que ver con la sustentabilidad, la soberanía, la inversión que se realiza en educación –al igual que en cultura e investigación– y con el principal activo social de México para el presente y el futuro.

Periodistas delincuentes

Protesta en defensa de la libertad de expresión.

MÉXICO, D.F., 20 de enero.- En 2006, la Asamblea Legislativa del Distrito Federal sentó un precedente a nivel nacional al despenalizar todos los llamados “delitos al honor”, incluyendo la difamación, la calumnia, la injuria y otras figuras relacionadas con el daño moral. Con ello, supuestamente, ya no se podría amenazar o intimidar a los comunicadores que laboran en la Ciudad de México con demandas penales frívolas o temerarias. Sin embargo, pocos saben que en realidad el trabajo quedó inconcluso, ya que todavía existe un tipo penal que en manos de abogados sin escrúpulos o autoridades poco éticas podría convertirse en una poderosa arma de censura.
El artículo 342 del Código Penal del Distrito Federal impone una pena de uno a tres años de prisión y una multa de 50 a mil días de salario mínimo a la persona que “para obtener un beneficio o causar un daño, indebidamente produzca o edite, por cualquier medio técnico, imágenes, textos o voces total o parcialmente falsos o verdaderos”. Interpretada de mala fe, esta ambigua redacción podría prestarse para convertir a cualquier periodista o director de un medio de comunicación incómodo en un delincuente y mandarlo a la cárcel.
Este artículo legal viola de manera flagrante los criterios de la Comisión y de la Corte Interamericana de Derechos Humanos que obligan al Estado mexicano a despenalizar los delitos de prensa. Los únicos juicios que, en su caso, deberían proceder contra un medio de comunicación serían exclusivamente los de tipo civil.
Afortunadamente, hasta la fecha los capitalinos hemos contado con una Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) con sensibilidad y compromiso democrático, pues se ha negado a ser utilizada por los poderosos demandantes que han querido aprovecharse de este artículo para acosar a los periodistas. Sin embargo, funcionarios de la altura del procurador Miguel Mancera y del subprocurador Luis Genaro Vásquez no dirigirán la PGJDF para siempre. Por ello, y para evitar sorpresas en el futuro, urge que la Asamblea Legislativa culmine sus esfuerzos por despenalizar el ejercicio periodístico con la eliminación de manera definitiva del artículo en cuestión.
Comparto estas reflexiones con nuestros lectores porque a finales del año pasado un influyente abogado, molesto por el contenido de uno de mis artículos en Proceso, emprendió una cruzada jurídica utilizando precisamente el artículo 342 del Código Penal del Distrito Federal con el fin de acosar, amedrentar y descalificar la profesión periodística y con ello cerrar de manera definitiva la libertad de expresión en la capital del país.
En la denuncia que presentó ante la PGJDF el 7 de octubre de 2009, el licenciado Gustavo Herrera, quien a lo largo de su carrera se ha especializado en juicios contra integrantes de los medios de comunicación, declara que los periodistas “no se pueden jactar… (de) que exista un acoso judicial contra la prensa cuando ellos son los que acosan a la sociedad con sus artículos que publican a la ligera, sin cheqcar (sic) ni siquiera las fuentes, y luego dicen que no lo dijeron”. Asimismo, en una evidente referencia a la revista Proceso, el demandante señala que los periodistas “que continuamente se ven envueltos en demandas judiciales, por algo será, ¡verdad¡ (sic), no ha sido gratuito que los demanden, y como, son las víctimas del libre ejercicio de la libertad de expresión”.
Este episodio surge a raíz del artículo que un servidor publicó en la edición número 1691 de Proceso (29 de marzo de 2009), titulado Pinches periodistas, donde me permití reproducir el extracto de un acta administrativa elaborada por el juez 21 del Distrito Federal, Bruno Cruz Jiménez, en la que se excusa de un caso de acusación de daño moral de la magistrada Consuelo Villalobos en contra de los periodistas Eduardo Huchim, Rubén Lara, Abel Barajas, Víctor Fuentes y Luis Soto, porque el abogado de la magistrada, el licenciado Herrera, intentó presionarlo indebidamente. En el acta administrativa que resume las razones de la excusa se recoge la siguiente declaración del juez Cruz respecto de un encuentro que tuvo con el abogado Herrera:
“El día de hoy, siendo las 14:30 horas, recibí en mi privado, manteniendo la puerta abierta, al litigante Gustavo Herrera Torres, quien hizo manifestaciones y ostentación de que ganaría el juicio que patrocina en este Juzgado porque tiene un gran padrino de nombre Luis Guzmán Ramírez, y que había ido a comer recientemente con él, de quien sabe es maestro del suscrito ‘por haberme enseñado a jugar frontenis’, y que sabe que todavía en algunas ocasiones ‘nos reunimos para ir a jugar frontenis’, que tanto el litigante como el licenciado Luis Guzmán Ramírez vendrían personalmente para invitarme a comer; diciéndome el litigante con palabras antisonantes (sic) que no le tuviera miedo a ‘los pinches periodistas’ porque la Ley de Responsabilidad Civil estaba hecha a su modo y era anticonstitucional, y que llamaría a este juicio a declarar a todos los periodistas que comentaran el asunto, por lo que al escucharlo en tono amenazante le pedí que se retirara.”
Enojado por haber sido exhibida su falta de ética profesional y de respeto hacia los periodistas, el licenciado Herrera buscó cumplir su amenaza de llamar a declarar “a todos los periodistas que comentaran el asunto” y presentó una demanda penal en contra de un servidor y del propio Eduardo Huchim, quien al refutar una carta de la magistrada Villalobos en el periódico Reforma había mencionado las presiones de Herrera al juez, alegando que habíamos violado el artículo 342 del Código Penal del Distrito Federal.
El artículo en cuestión evidentemente no se aplica al caso, ya que ni Huchim ni yo “producimos” ni “editamos” los textos en cuestión. Asimismo, nuestros escritos nunca tuvieron el fin de “obtener un beneficio o causar un daño”, sino de informar a la ciudadanía en pleno ejercicio de nuestra libertad de expresión, tutelada por el artículo séptimo de la Constitución.
De cualquier modo, lo ambiguo de la redacción del artículo en cuestión, así como la posible intervención de presiones o incentivos externos, llevaron a que en lugar de archivar inmediatamente el caso por notablemente improcedente, el agente del Ministerio Público que recibió la denuncia abriera una investigación del caso. Incluso, en un evidente intento por amedrentar durante el periodo vacacional, el funcionario llegó al extremo de advertir a nuestro abogado, el destacado penalista licenciado Alejandro Ferrel Bautista, que nos giraría una orden de localización y presentación nada menos que el día de la Nochebuena, no obstante que el licenciado Ferrel había solicitado cita para que acudiéramos, conscientes de que no tenemos nada qué temer frente a este tipo de ataques.
Afortunadamente, al analizar con más cuidado el caso, y con la invaluable asesoría de la destacada abogada y defensora de la libertad de expresión Perla Gómez Gallardo, el pasado 7 de enero la procuraduría capitalina decidió declarar el no ejercicio de la acción penal y archivó de manera definitiva el caso.
Con esta resolución, la PGJDF demuestra su compromiso con la defensa de los principios democráticos. Sin embargo, todavía falta que la Asamblea Legislativa termine la tarea iniciada en 2006 y derogue de una vez por todas el artículo 342 del Código Penal para evitar abusos futuros en esta materia.

www.johnackerman.blogspot.com

Entrevista a Lorenzo Meyer, COLMEX Ene 19, 2010


http://www.youtube.com/watch?v=DcP0LVmbht4


Nueva relación con EU: partir de los hechos

El Despertar
*Nueva relación con EU: partir de los hechos
José Agustín Ortiz Pinchetti

La crisis mundial ha vuelto patente la crisis múltiple de México. Un modelo de desarrollo, una estructura política y hasta una forma de vida parecen agotados. Si queremos imaginar la recuperación, debemos aceptar la responsabilidad de crear una nueva relación con Estados Unidos.
Partamos de hechos sólidos:

1. No podemos divorciarnos de Estados Unidos. Estamos vinculados geográfica, demográfica, económica y culturalmente con ellos.
2. Nuestra historia, cultura, tabla de valores, composición social y racial son radicalmente distintos.
3. Estamos inmersos en un proceso de integración económica. Los resultados son muy malos: nuestro crecimiento es bajo y volátil. El producto interno bruto (PIB) de México comparado con el de Estados Unidos en 1980 representaba 35 por ciento; hoy puede haber caído hasta 20 por ciento.
4. Somos complementarios e interdependientes. Estados Unidos nos influye profundamente. Nosotros los influimos.
5. Estados Unidos es aún la mayor potencia; otras, como la Unión Europea, Japón y otras naciones como China, Corea del Sur, India y Brasil, están creando nuevas formas de equilibrio.
6. México podría ser una gran potencia, por su territorio y riquezas y sobre todo por la laboriosidad, ingenio y resistencia de su población. Somos una nación axial en lo cultural y en lo geográfico.
7. Estamos atrapados en una estructura arcaica. La política está dominada por poderes fácticos. Padecemos una oligarquía que absorbe 50 por ciento del PIB. No paga impuestos y funciona a través de monopolios. Sólo 18 por ciento pertenecemos a la clase media. Tenemos 40 millones de pobres. No somos una nación moderna y tenemos que serlo para poder convertirnos en socios contrapartes o aliados de las demás potencias.
Partiendo de estos hechos podríamos imaginarnos una nueva relación con Estados Unidos. Siempre que aceptemos, como decía Emerson, que la envidia es ignorancia y la imitación suicidio. Que tenemos que aceptar nuestro destino trascendente y no vernos a nosotros mismos como inválidos que necesitan la protección externa para sobrevivir.
jaorpin@yahoo.com.mx

Haití: buen provecho, señor

Miles de haitianos se dieron cita en la plaza Nacional de Puerto Príncipe para despedir con oraciones a las miles de personas que perdieron la vida durante el terremoto


DesfiladeroHaití: buen provecho, señor

Jaime Avilés


Haití, su tragedia (su condición permanentemente trágica, no el terremoto del otro día que la hizo visible de nuevo), es una metáfora de la nuestra. Pero, ¿cuál? No lo sé: al comenzar a escribir estas líneas, lo confieso, no lo sé. Haití fue la primera colonia europea de América que logró su independencia, en 1803. México fue el primer país del continente que se libró de la tiranía imperial de la Iglesia, mediante las Leyes de Reforma que Benito Juárez promulgó en 1850, y fue también el escenario donde, en 1910, se gestó la primera revolución social del siglo XX, casi una década antes que la de Rusia.
¿Y luego? Haití es el país más pobre de América (y el tercero más pobre de la Tierra), pero en 2009 su economía registró un crecimiento de 2 por ciento. México, una dizque potencia emergente, tuvo un retroceso económico de 8 por ciento (el dato exacto se conocerá dentro de pocos días), el peor que ha sufrido desde el crac de 1929. Como lo han ilustrado las imágenes noticiosas de la prensa, el de Haití ahora es un Estado fallido, que de hecho ya no existe: la ONU y las fuerzas armadas de Estados Unidos entraron a suplantarlo. El mexicano también es un Estado fallido, como lo reafirman, día tras día, con su pujanza y fortaleza, las empresas distribuidoras de sustancias ilícitas y las 15 mil muertes provocadas por el gobierno (o lo que sea) de Felipe Calderón, supuestamente para combatirlas.
Con 9 millones de habitantes, de los cuales 7 millones 200 mil viven en la miseria, Haití no se compara con México, donde en una población de más de 100 millones de personas, 60 millones viven en la pobreza y, de éstas, 40 millones no tienen asegurada su comida de mañana. ¿Cuál es, pues, la metáfora? Desde Montevideo, donde ha confesado a sus amigos que quisiera escribir unas palabras de aliento sobre Haití, pero no se le ocurre ninguna, y por lo tanto se limita a enviarnos un abrazo despalabrado, Eduardo Galeano acaba de publicar un ensayo acerca de la efímera democracia haitiana y del saqueo que esa desdichada nación del Caribe ha sufrido desde siempre.
Pues bien, la democracia mexicana nació el 2 de julio de 2000 y murió, sin que nos diéramos cuenta, de inmediato, el primero de diciembre de ese mismo año, cuando Fox asumió la Presidencia de la República blandiendo una imagen religiosa para anunciarnos, entre líneas, que la revancha de los cristeros caídos en la guerra de 1923 sería implacable.Y así nos fue. Con el ascenso del PAN al poder, y al calor del entusiasmo democrático, prosiguió el saqueo tal como era bajo el dominio del PRI, sólo que acompañado de una contrarrevolución ultraconservadora que hoy sueña con quemar en la hoguera, como brujas medievales, a las mujeres que aborten.
Hace 30 años, exactamente en febrero de 1980, estuve por única vez en mi vida (hasta hoy) en Haití. Llevaba semanas en Santo Domingo esperando un giro bancario para regresar a México y de pronto se dio la oportunidad. En aquellos días, los dominicanos celebraban poéticamente el trágico desembarco del patriota Francisco Alberto Caamaño, que a bordo de un yate llamado Black Jack, intentó repetir la hazaña de Fidel Castro en el Granma. Pero no tuvo tanta suerte. El ejército, al que había pertenecido con el grado de coronel, lo esperaba en la costa y lo acribilló junto a sus hombres. No se salvó nadie. En los años 70, finalizada la dictadura de Balaguer, la gente adquirió la costumbre de recordar a Caamaño arrojando claveles al mar para tejer una hermosa alfombra que se mecía en febrero, a la orilla del malecón, con el vaivén de las olas.
Había llegado a Santo Domingo invitado por el periodista Ramón Emilio Colombo, un reportero que en México se hizo célebre con el mote de El Calabazón debido a su ocurrente y calva cabeza. Colombo vivía en el garaje de una casa de buena familia y dormía sobre un colchón en el suelo, de modo que puso otro para mí y me hizo una clara advertencia: “Cada vez que vengas, fíjate si los postigos de las ventanas están entornados; si están entornados, vete a tomar café y demórate hasta que se vaya la jeba (muchacha)”.
Y, en efecto, tres o cuatro veces a la semana, los postigos estaban entornados y la jeba era, además de preciosa o por lo menos muy guapa, siempre distinta: aquella frenética actividad sexual formaba parte de la idiosincrasia del país, era una manera de vivir y la única explicación de por qué yo no ligaba nunca. Excluido del resto de la población por motivos culturales, me incorporé al gueto de los extranjeros en que vivía mi muy querida amiga marsellesa Michélle Jacob, que al igual que Colombo y una inglesa llamada Linda, había pasado unos años en México y decidido probar fortuna en el Caribe.
Un viernes en la mañana, Michélle y yo volamos en un avión de Air France a Puerto Príncipe. Llevábamos, entre los dos, 40 dólares: más que suficiente para turistear tres días. Nos alojamos en un hotel del barrio Caja de Cartón, cerca de la Aduana y del Correo (edificios que ahora, supongo con horror, serán tumbas de escombros) en una zona muy céntrica. La habitación costaba cuatro dólares por noche y el baño estaba al final del corredor, pero para entrar había que saltar una perpetua peregrinación de hormigas rojas, que desfilaban como una columna militar, de 20 en fondo.
No perdimos un instante. Recorrimos la ciudad en tap-tap (camionetas de transporte público pintadas de colores), subimos a Pétion Ville (la Montaña Negra), el barrio de los ricos, las embajadas y la ONU (en cuyos jardines en estos días duermen los periodistas foráneos), entrevistamos a un valiente conductor de radio, que estaba amenazado de muerte por la dictadura de Baby Doc; asistimos al sitio donde los tonton-macoutes (los tíos del saco, es decir, la policía secreta de Duvalier) habían decapitado a un militante opositor, y nos reunimos clandestinamente con dos redactores del semanario comunista Le Petit Samedi Soir (algo así como la pequeña gaceta del sábado).
Compramos muñecos de vudú, para clavarles alfileres y hacerle daño a alguien que nos cayera gordo, y polvos de magia negra y también para el amor. Presenciamos una ceremonia de rarrá (versión ligth del vudú, que se practica sólo durante la Cuaresma); estuvimos en un palenque de gallos; vimos un cortejo fúnebre seguido de una banda de música que entraba a un cementerio pero no caminaba detrás de ningún ataúd, y no nos atrevimos a comer unas extrañas hamburguesas que nos sirvieron en un café, porque al destaparlas para echarles catsup descubrimos que, dentro de la mía, había hormigas vivas, y dentro de la de Michélle plumas de pollo.
Desde que bajamos del avión hasta que nos fuimos de Puerto Príncipe tuvimos en todo momento la certeza de encontrarnos en África central, pero si algo nos marcó, en medio de tanta miseria y de tanta belleza, fueron los niños pordioseros, con sus enormes ojos tristes, que pedían limosna, arracimados a la puerta de los restaurantes, lloriqueando tres palabras insoportablemente irónicas: Bon gout, monsieur! Bon gout, monsieur! (buen provecho, señor).
Tres décadas después, ante las fotografías de prensa que muestran a jóvenes, cuchillo en mano, peleando por comida entre las ruinas de Puerto Príncipe, se me ocurre que a la mejor esa es la metáfora que ando buscando: en México sucede lo mismo, pero aquí los que le arrebatan con ferocidad lo más indispensable a los desamparados son gente finísima, que se viste con trajes de Armani, figura entre los ricos más ricos del mundo, y cuenta con una caricatura de gobierno (o lo que sea) que en todo momento la protege, la apoya y la obedece.
jamastu@gmail.com

Fuente: La jornada