lunes, abril 27, 2009

Muertos por influenza porcina en México tenían otras enfermedades: OMS

Califica OMS al virus como "suave" y pide tratar a la influenza con antivirales en vez de tratar de contenerla
Las muertes en México por influenza eran personas con "otras patologías", es decir con otras enfermedades, dio a conocer el experto en epidemiología de la Organización Mundial de la Salud, Keiji Fukuda.


Las muertes en México por influenza eran personas con "otras patologías", es decir con otras enfermedades, dio a conocer el experto en epidemiología de la Organización Mundial de la Salud, Keiji Fukuda.
De acuerdo con una nota publicada en El País, el responsable por la seguridad sanitaria de la OMS dio a conocer que de momento el virus de la influenza porcina es "suave", por lo cual las personas que fallecieron en México a causa del virus tenían otras enfermedades.
El diario español reportó que la OMS ha decidido por lo tanto no recomendar restricciones de viajes o de comercio ya que la medida no será de mucha utilidad ya que "el virus ya está muy extendido geograficamente."
Por ello, la OMS señaló que su recomendación a los gobiernos del mundo es concentrarse en combatir a la enfermedad con antivirales y no tanto intentar contener al virus.
"El virus está tan extendido que ya no tiene sentido intentar contenerlo", dijo Fukuda.
Cabe señalar que México es el único país en el que se han registrado muertes presuntamente por influenza porcina. En Estados Unidos los casos registrados han sido calificados como "leves" y con recuperación sin complicaciones.
Sin embargo, los medios en México se han enfocado en señalar las muertes por influenza--aunque sin dar a conocer detalles de los cuadros médicos de los contagiados que pudieran indicar otras patologías--y no en enfatizar el hecho que la mayoría de los enfermos por influenza porcina en México se han recuperado.

MEXICAN FLU MAY HAVE ORIGINS IN US


AUSTIN, Texas — The recent swine flu outbreak taking place in Mexico may have originated at a US-owned pig-breeding farm by the name of Granjas Carroll (aka Carroll Farms), which is owned, in part by the Smithfield Food Company.
Smithfield also promotes the consumption of genetically-altered foods, and even owns certain genetic lines of pork breeding. On April 12 of 2009, before the swine flu outbreak was covered by mainstream media outlets, the Mexican newspaper La Jornada broke a story on how Carroll Farms was polluting the drinking water near the towns of La Gloria and Perote, in Veracruz.
According to La Jornada, Carroll Farms maintains a strong political influence in municipal governments in the area. Recently, group of environmental protesters that blocked a highway near the Carroll Farms facilities was arrested. Among them were Guadalupe Serrano Gaspar, a 66-year-old man who said was arrested by undercover police officers. Local residents from 20 towns nearby in Veracruz and the bordering state of Puebla also oppose what they consider deplorable environmental practices by Carroll Farms. The complaints from local residents range from reports of large quantities of pig excrement in the waterways to the smell of chemicals and feces in several towns.
Veratect, which is company that tracks epidemic outbreaks, has posted a timeline of events that also indicates that the Mexican swine flu outbreak may have started in Veracruz, Mexico near the Carroll Farms facilities. According to the Veratect timeline, more than 400 local residents at La Gloria, Veracruz and other nearby towns reported having strong flu-like symptoms days before the outbreak was reported by the media. Local health authorities in La Gloria and Perote have determined that this “strange” flu-like disease or “new strain of the flu” was spread to the local towns by flies that feed on pig feces. In the town of La Gloria, 60 percent of the 3,000 inhabitants have been infected.
The newspaper La Jornada also reported that local health officials and residents found “clouds of flies” feeding on organic pig waste, carcasses and feces. Reportedly, Carroll Farms has been dumping organic pig waste out in the open, leaving it exposed for the flies to feed.
The swine flu has now been spreading to major cities in Mexico, the US and Canada. In Mexico, over 900 people are dead. Mexico City has begun to close down schools, churches, and libraries. The Mexican government is planning to vaccinate 500,000 people, although it is widely known that there is no vaccine for this latest strain of swine flu because it has not yet been produced.

Expertos alertan sobre guerra biológica y negocio de Donald Rumsfeld con la "gripe porcina"

¿Sabía usted que el virus de la influenza porcina apareció por primera vez en Estados Unidos y que el único medicamento al que parece responder es producido por un laboratorio del que es directivo y propietario Donald Rumsfeld?


Un revelador trabajo de investigación del Informativo Pacífica, elaborado por el colectivo periodístico con base en California Pueblos Sin Fronteras, plantea varias interrogantes que los medios hegemónicos de comunicación han obviado, en su afán por generar terror entre la población. ¿Cuál es el origen del nuevo virus que ya ha matado a más de cien personas en México? ¿A quién beneficia esta epidemia? ¿Qué otras noticias está sepultando? ¿Para qué se está utilizando la emergencia en México? El reporte de Fernando Velázquez menciona un artículo de la investigadora Lori Price en el sitio web Globalresearch.ca , titulado "La gripe acaba con los memos de la tortura", en el que ésta señala que la influenza porcina, fabricada probablemente en laboratorios militares de Estados Unidos, ha acabado con la noticia de los memos sobre la tortura ordenada por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) contra prisioneros en Guantánamo, Abu Ghraib, y cárceles secretas. El artículo mencionado señala que un investigador de biodefensa indonesio declaró el año pasado que Estados Unidos ya podía fabricar armas biológicas en el laboratorio de Los Álamos, usando muestras de la gripe aviar enviadas por Indonesia a la Organización Mundial de la Salud. Detalles sobre el tema aparecen en el libro "Es tiempo de que cambie el mundo: manos divinas detrás de la gripe aviar", escrito por el ministro de Salud indonesio.

Lori Price subraya que la actual histeria provocada por el virus porcino podría dar grandes ganancias a Donald Rumsfeld. El ex secretario de Defensa de Bush es directivo desde hace 20 años del laboratorio Gilead Sciences, Inc. la firma con sede en California que fabrica y tiene los derechos de "Tamiflu", el supuesto remedio contra la influenza que aterroriza al mundo.

Fernando Velázquez también entrevistó para su reporte al periodista Ralph Schoenman, productor del programa radial "Taking Aim" (Apuntando) que se transmite en la emisora WBAI de Nueva York. Schoenman afirma que los laboratorios militarizados a lo largo de Estados Unidos han estado perfeccionando armas biológicas con los virus porcino, aviar, el asiático y otras enfermedades para las que no hay respuesta inmunológica. "En laboratorios de nivel 4 y 5 en todo el país las enfermedades más virulentas han sido alteradas de tal forma que no hay defensa contra ellas, y han sido arrojadas en varias partes del mundo. Se han dispersado en África, y han sido monitoreadas por militares estadounidenses", afirma Schoenman. Velázquez también menciona en su reporte el libro "Clouds of Secrecy" (Nubes de secretos), del profesor de políticas de Salud Pública Leonard Cole, quien documenta que por 40 años el Pentágono ha estado esparciendo billones de vacilos I en el metro de Nueva York, en las escuelas públicas de Minneapolis y Saint Louis y, en particular, en la bahía de San Francisco. En esa ciudad, los efectos fueron un incremento en un 10% de meningitis de la espina dorsal. El número de personas impactadas por el vacilo I asciende a 10 millones. Velázquez recuerda el libro "Matando la esperanza", donde William Bloom describe que en 1971 la central de inteligencia proveyó a exiliados cubanos con un virus que causa fiebre porcina africana. Seis semanas después, un brote de la enfermedad obligó al gobierno cubano a sacrificar a medio millón de puercos. Diez años después la población fue atacada por una epidemia de dengue transmitida por mosquitos, que se extendió por la isla enfermando a más de 300 mil personas y matando a 158 (de los que más de un centenar eran niños menores de 15 años). Reporta también Fernando Velázquez que documentos desclasificados en 1956 y 1958 revelan que el ejército estadounidense crió grandes cantidades de mosquitos en La Florida y en Georgia para ver si los insectos podían ser usados como armas diseminando enfermedades, y que en 1969 más de 500 estudiantes de 36 países se graduaron en cursos sobre guerra epidemiológica en la escuela de química del ejército en Fort McClellan en Alabama.

Las acciones de Roche se disparan por gripe porcina
El medicamento contra la gripe Tamiflu, fabricado por Roche, es considerado un medio eficaz Contra la enfermedad y su uso fue recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) tras detectarse el brote.

Roche anunció que hará llegar a la OMS hasta tres millones de dosis de Tamiflu.
Zurich.- Las acciones de la compañía farmacéutica suiza Roche se dispararon hoy en la bolsa ante los crecientes casos de gripe porcina registrados sobre todo en México.
El medicamento contra la gripe Tamiflu, fabricado por Roche, es considerado un medio eficaz Contra la enfermedad y su uso fue recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) tras detectarse el brote.
A la apertura de la bolsa en Zúrich, las acciones de Roche subieron un 4,6 por ciento, mientras que pocos minutos habían aumentado hasta el 4,6 por ciento, a 147 francos suizos (128 dólares).
Roche anunció que hará llegar a la OMS hasta tres millones de dosis de Tamiflu. DPA
El Dr Manuel Servin nos envio un tip, darle al Google estas dos palabras.....Fort Detrick + Swine Fluy wow....resulta que se perdio una cepa de este virus de este Fuerte considerado el mas tenebroso, pues esta dedicado a la experimentacion biogenetica, se especula que de ahi salio el SIDA y de ahi salieron las cepas de Antrax que quisieron asesinar a los Senadores opositores a Bush, despues del 11 de septiembre del 2001

Detrás de la Gripe Porcina

Los representantes de la gran burguesía se reúnen en tertulias ministeriales del G-7 y G-20 en Washington
Una de las formas que la gran burguesía dominante tiene para distraer a las Masas es difundir los llamados Virus o Enfermedades Contagiosas a través de sus Medios de Difusión Masiva, cuyo único fin es apartar la atención del vulgo e infundir miedo para que las clases dominantes puedan resolver ciertas “complejidades” que puedan afectar a los ciudadanos o gobernados. No es, sin duda, nada nuevo dentro de sociedades marcadamente capitalistas. La ignorancia es la fuerza de su eficacia.

A lo largo de la historia humana se han venido desarrollando distintas Formas de Distracción Masiva que han venido acompañando a sociedades en la que las clases dominantes han ejercido su poder frente a los gobernados. Estas tienen a su vez el fin de controlar de algún modo a la clase oprimida. Y cuando ese control lo vemos fracasar rotundamente una de las alternativas que tienen las clases dominantes es ejercer la fuerza a través de su aparato coercitivo.
Tanto a nivel nacional como a nivel internacional este tipo de variante “Virus o Enfermedades Contagiosas” se presenta a las sociedades de manera “ingeniosa”. A nivel internacional hemos sido testigos de la “BUENA” difusión de enfermedades o virus como: el SIDA, la “vaca loca”, el “évola”, la “melamina” en la leche china, etc. En tanto a nivel nacional, en Chile, por dar un ejemplo de donde me encuentro, han existido o existen de vez en cuando: el virus “hanta”, la “sémola”, fiebre “aftosa”, la “salmonela”, la gripe “aviar”, la “marea roja”, etc. Pueden ser amenazas reales y todo lo demás, el punto es en la FORMA en que estas son difundidas frente a las masas. ¿Es necesario hacer todo un espectáculo para que los ciudadanos supuestamente puedan estar “informados”? ¿Es necesario difundir de manera exagerada algo que muy bien podría ser tratado adecuadamente dentro de SUS límites? ¿Es necesario tapar al mundo con una información que dista de merecer la importancia que le dan?
Detrás de la Gripe Porcina
Por estos días estamos presenciando un nuevo espectáculo de las clases dominantes, dirigido especialmente a las Masas: la Gripe Porcina. México, tal como nos “informan”, se ahoga lentamente con la Gripe Porcina.
La cifra de muertos que podrían presentar en México cada día, supuestamente por esta gripe, no superaría -me atrevo a señalar- la cifra de muertos causados, en un día, por la delincuencia local que se produce todos los días.
Los Medios de Difusión Masiva expertos en transformar una cosa minúscula en algo gigante han hecho de “maravillas” su trabajo. Ahora no sólo en México existe temor por el “extraño” virus; progresivamente el miedo a ser contagiado se ha desplegado a numerosos países de América Latina y Europa. Todos parecieran estar pendientes a las “informaciones” de este “potencial pandémico”. Los informes noticiosos nos hacen ver a un México lleno de mascarillas, al que se le aconseja no salir de suscasas, no estar en aglomeraciones de personas, no dar la mano, no dar besos, no ir a la escuela, etc. Todo avalado, según parece, por una estructura reconocida mundialmente como lo es la Organización Mundial de la Salud (OMS) -tan rimbombante llega a ser el nombre que pareciera ser que obligara a ponerle seriedad al asunto.
Cuando las clases dominantes criollas desean alarmar a sus gobernados nada mejor podría haber, para estas circunstancias, que hacer llamados públicos a que reine la calma. Las autoridades en México “inteligentemente” han procedido a echar a andar la fábrica del pánico.
Pero lo que muchos ignoran es que a kilómetros de donde brotó este “notición”, los representantes de las clases dominantes el mismo 24 de Abril, día viernes, en Washington, los ministros de finanzas del G-7 (Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Francia, Alemania, Italia y Japón) se reunían con los gobernadores de los principales Bancos Centrales para luego dar en una nueva reunión ministerial, esta vez con el nombre del G-20 (Argentina, Alemania, Australia, Arabia Saudita, Brasil, Canadá, Corea del Sur, China, EEUU, Francia, India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Rusia, Sudáfrica, Turquía, Unión Europea) (1).
¿Fueron reuniones sin trascendencia y por lo tanto no tienen por qué saber el “vulgo”? ¿Por qué los Medios de Difusión Masiva no dieron o no han dado a esas reuniones la importancia que debe tener? ¿Detrás de aquellas reuniones se esconden decisiones sumamente importantes que tiene que brotar humo, tal como se está haciendo con la famosa Gripe Porcina?
Pues me atrevería a decir que este tipo de reuniones tienen más importancia que las acontecidas a principios de Abril. Estas son las reuniones donde se deja “cocinado el pavo” para luego presentarlas junto a sus “primeros mandatarios”, quienes tienen el nexo con los gobernados.
Pasó igual con la cumbre del G-20 a principios de Abril, donde a mediados de Marzo, en el sur de Inglaterra, los ministros de finanzas del G-20 se reunieron para “cocinar el pavo” el cual se habría de presentar en bandeja a principios de Abril a los dominados (2).
Algunas fuentes consultadas:
1)http://www.publico.es/dinero/221348/g/ve/posible/recuperacion/mismo/ano
2)http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/business/newsid_7943000/7943903.stm
http://stolpkin.net/

Calderón avanza hacia el estado de excepción

El brote de una epidemia de influenza porcina que estalló en Estados Unidos y especialmente en México a mediados de abril y que amenaza con propagarse a todas partes ha puesto en estado de alerta a la sociedad de ambos países y obligado a sus gobiernos a actuar al respecto. Se trata de un virus de origen animal, hasta ahora desconocido, con una capacidad preocupante de contagio. La Organización Mundial de la Salud (OMS) convocó a una reunión de emergencia el 25 de abril para decidir el rumbo a tomar en el caso que debiera elevarse el nivel de alerta de pandemia, que hasta ese día era de 3, en una escala de 1 a 6. (Véase el artículo siguiente “Crisis de agua; epidemia de influenza”).
Como en las anteriores crisis que vienen sacudiendo a la sociedad mexicana desde 2006 (política, económica, alimentaria y del medio ambiente) en el caso de esta reciente y peligrosa crisis sanitaria, nuevamente se ha puesto de manifiesto la incompetencia e irresponsabilidad del gobierno panista de Felipe Calderón. Aún más, en esta ocasión preséncianse amenazadores avances de su parte para arrojar al país a un estado de excepción.
El sábado 25 de abril, Calderón emitió un decreto que otorga facultades extraordinarias a las autoridades de la Secretaria de Salud justificadas en las acciones para prevenir y combatir la existencia y trasmisión del virus de influenza. Entre estas facultades están las de aislar a las personas que padecen la enfermedad y a los portadores de gérmenes y se otorga el derecho de las autoridades de ingresar “a todo de local o de casa habitación” en el ejercicio de sus labores de control de la epidemia.
Estas decisiones no pueden verse aisladas, sólo como medidas de una campaña sanitaria desprendidas de una práctica e ideología políticas que son las razones de ser del gobierno de Calderón, el cual está inmerso en una situación cruzada de graves contradicciones sociales. En 2007 el ejército salió de sus cuarteles y desde entonces no ha dejado las calles, comprometido en “una guerra contra el narcotráfico” que ha incrementado la represión, la violencia y la arbitrariedad del comportamiento gubernamental. Esta medidas son acciones culminantes de los primeros días de la emergencia nacional; los métodos implementados por las autoridades hasta hoy han provocado pánico, miedo e histeria colectivos, principalmente en el Distrito Federal y en el Estado de México.
Primero el gobierno federal subestimó manifiestamente el brote de la epidemia. El 23 de abril, el secretario de Salud, Córdova Villalobos, escenificó en menos de diez horas actos de incongruencia mayúsculos y confirmó hasta la saciedad lo antes dicho. Al mediodía declaró que no había nada que temer con motivo de los datos y acontecimientos ya sabidos (muertos, contagios) y después, cerca de la medianoche, declaró exactamente lo contrario, anunciando las medidas de emergencia nacional que desquiciaron por completo la vida cotidiana del DF y el Estado de México, zonas de la mayor concentración demográfica del país.
A esta conducta incompetente e irresponsable hay que añadir las graves consecuencias políticas que apenas comienzan a vislumbrase, que se desprenden del específico momento en que se encuentra el sistema de dominación.
Calderón y la camarilla panista que ocupan Los Pinos, representan el primer gobierno federal dependiente por completo del gran capital financiero nacional e imperialista y del ejército. Es heredero ciertamente del aparato de control masivo, en especial de los trabajadores, erigido por el priismo durante sus setenta años de dominación. Los panistas no lo han desmantelado y lo usan en lo que pueden. La abierta y descarada alianza de la dirigente del SNTE, Elba Esther Gordillo, bastaría para demostrarlo y constituye el único vínculo con cualquier tipo de “apoyo” social para su gobierno. Pero se trata de un residuo de las formas corporativas y organizativas de un bonapartismo en su etapa senil, en decadencia completa.
El conflicto con el sindicato minero, otro legado del vetusto charrismo priista, por otra parte confirma que las bases proletarias se rebelan contra la subordinación a los designios presidenciales. De hecho la larga resistencia de las huelgas de los mineros de Cananea, Taxco y Sombrerete representan combates decisivos del movimiento obrero, que concita una creciente solidaridad. (Véase adelante “El proletariado sigue sin cabeza”).
El anterior gobierno de Fox, gozó de un margen de maniobra popular más amplio por el personaje que “derrotó al PRI”, margen que pronto se agotó al surgir sin tapujos su crudo carácter reaccionario de “gobierno de los empresarios”.
Calderón y su camarilla han encontrado en la crisis actual la oportunidad de legitimar ante al población una medida cuyas semillas son potencialmente peligrosísimas. La octava medida del decreto antes mencionado dice: “Ordenar las medidas atingentes a fin de evitar congregaciones de personas en cualquier lugar de reunión”: este paso hacia un estado de excepción se pretende justificar con la emergencia sanitaria actual. Muchas preguntas se plantean naturalmente. ¿ Esta mediad impedirá la manifestación del primero de mayo?, ¿ Se permitirán protestas públicas, manifestaciones, mítines, huelgas, movimientos ciudadanos de cualquier tipo?
El movimiento popular, las organizaciones democráticas revolucionarias estamos ante un desafío importante. No podemos permitir debemos luchar organizada y unitariamente contra todo intento del gobierno de Calderón y la ultraderecha de imponer un estado de excepción en México.
Crisis de agua; epidemia de influenza

Una ciudad altamente vulnerable
Por Jaime González

No habían pasado dos semanas desde que la ciudad de México había sufrido una grave y extendida carencia de agua (la cual, por cierto, no ha sido superada), cuando el jueves 23 de abril por la noche los gobiernos federal y del Distrito Federal anunciaron, de modo repentino y sorpresivo, una serie de medidas para intentar frenar una grave epidemia de influenza.
Esta situación puede apreciarse por la magnitud de las medidas: se suspendieron las clases en las escuelas, se suspendieron actos y concentraciones públicos, y se anunció una campaña de vacunación dirigida especialmente al personal médico y a las enfermeras de los hospitales. La urgencia y precipitación con que las medidas fueron decretadas se hicieron evidentes el viernes por la mañana, cuando una parte de la población que no se había enterado de la suspensión de clases llevó a sus hijos a las escuelas, para encontrarlas cerradas.
Y el sábado 25, las medidas anunciadas por el propio Felipe Calderón Hinojosa extremaron el rigor de la emergencia decretando que el gobierno federal podrá recluir a los enfermos en sus casas, y el ingreso sin aviso de las fuerzas del orden a domicilios particulares. Aunadas a otras disposiciones, de hecho Calderón ha declarado un estado de excepción en toda l república mexicana. Tales disposiciones, en tiempos como los actuales en que el gobierno ha sacado al ejército a las calles, entrañan un gran peligro para el pueblo mexicano
En un país profundamente dividido por el fraude electoral del 2006 y sus secuelas, no es de extrañarnos que muchas personas se hayan sentido confundidas, y que haya habido quienes creyeron que se trataba de una campaña para infundir miedo, con fines políticos o electorales. Pero el mismo día 24, la Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó mediante un comunicado en su sitio de internet (www.who.int) que 854 personas en la ciudad de México habían sido reportadas con enfermedad tipo influenza, y que 59 de éstas habían muerto. Asimismo, se reportaban otros 24 casos de este tipo de enfermedad y tres muertes en San Luís Potosí, así como brotes en otras partes del país.
La razón por la cual las OMS le prestó tanta atención a la epidemia de influenza es que el análisis realizado por laboratorios canadienses de 18 muestras provenientes de los enfermos de México mostraban que se trata de una variedad desconocida hasta hoy de un virus de influenza altamente letal y contagioso. El tipo de virus detectado, catalogado como influenza A/H1N1, es similar al que ocasionó la más grande y mortífera pandemia (es decir, epidemia ocurrida en varios continentes simultáneamente) en toda la historia de la humanidad: la “influenza española” de 1918, que ocasionó la muerte de alrededor de 50 millones de personas en todo el mundo.
Con sus 20 millones de habitantes en la ciudad misma y en las áreas conurbadas, hay pocos lugares en el mundo donde una epidemia con este nivel de peligrosidad pueda presentar una amenaza tan grande como en la ciudad de México: los enormes hacinamientos en el transporte público, en los centros comerciales y en diversas actividades y áreas de la ciudad facilitan el contagio y la rápida expansión de una enfermedad como la influenza. Adicionalmente, la ciudad de México es un importante centro de operaciones económicas y de comunicaciones a nivel mundial, y existe un enorme flujo de pasajeros que viaja hacia prácticamente todos los países del mundo.
La preocupación de la OMS fue tal que su directora, Margaret Chan, suspendió repentinamente una visita a los EUA, para regresar al centro de su organización en Ginebra, Suiza.
El mismo día 24, los Centros para la Prevención y el Control de las Enfermedades de los EUA (www.cdc.gov) secundaron casi simultáneamente la ingente preocupación de la OMS. Asimismo, aclararon que se trata de un virus altamente transmisible de un humano a otro.
Es posible que el brote de esta peligrosísima cepa de la influenza A/H1N1 se haya originado en México. La mutación que dio origen a esta cepa, por supuesto, es un hecho biológico del cual no se debe culpar a nadie. Hay, sin embargo, varios aspectos muy preocupantes en lo que respecta a la conducta y a la política del gobierno mexicano.
Primero que nada, según el comunicado de la OMS, los casos de enfermedad tipo influenza comenzaron a ser reportados en el Distrito Federal desde el 18 de marzo. La epidemia tuvo que llegar a más de 800 casos, muchos de ellos pacientes hospitalizados, y a producir 59 muertes, para que las autoridades comenzaran a reaccionar y a alertar a la población.
De acuerdo a una denuncia publicada en el diario El universal el sábado 25 de abril por médicos residentes en hospitales de la Secretaría de Salud en el DF, hacía semanas que se sabía que venían muriendo dos y tres personas diarias a causa de enfermedad tipo influenza, y ya se habían presentado casos de personal de salud que había quedado contagiado (con por lo menos dos personas trabajadoras de salud muertas a consecuencia de este contagio). Por parte de las autoridades hubo amenazas de represalias contra cualquier médico residente que hablara con los medios sobre la gravedad de la situación que se estaba presentando en los hospitales.
Además de la torpeza médica y sanitaria mostrada por las autoridades ante el avance de la epidemia, ¿cómo es posible que en México no se cuente con la tecnología necesaria para analizar las muestras, y detectar las características genéticas de las cepas de virus de influenza?
El hecho es que el análisis tuvo que ser realizado en EUA y en Canadá. Esto significa que en varias ramas de la investigación científica, al igual que sucede en tantos otros campos (como es el caso de varios productos agrícolas fundamentales y de la tecnología petrolera) el gobierno mexicano ha abandonado la política de autosuficiencia, y se encuentra totalmente a merced de los EUA y de otros países del llamado “primer mundo”.
Durante la segunda mitad del siglo veinte, México estuvo en la vanguardia del mundo semiindustrializado en varias ramas de la investigación científica. Hoy, la ciencia mexicana ha quedado muy atrás ante el avance de países como Brasil y la India. Bien por Brasil, y bien por la India, y no digamos China; pero sólo podemos imaginarnos la estrechez de criterio y la mediocridad de la visión de los gobiernos mexicanos que han descuidado el avance científico en nuestro país.
La respuesta al brote ha sido tardía y precipitada. Peor aún, ante los hechos anteriormente presentados, es imposible despejar la impresión que fueron la OMS, Canadá y los EUA quienes presionaron al gobierno de México a admitir la gravedad de la situación y a declarar las medidas de emergencia.
En segundo lugar, y no menos importante, está la temible vulnerabilidad de la ciudad de México. Esta ciudad es heredera de un rasgo de rezago y falta de planeación, que arrastra desde el virreinato: la llamada macrocefalia política y económica, en la que en una sola ciudad se concentran tanto el poder político como el económico.
Ninguno de los partidos registrados ha presentado una propuesta para superar este problema, y ningún funcionario electo ha presentado siquiera una visión, ni mucho menos ha tenido la voluntad, de emprender el tipo de desarrollo distribuido en las treinta y dos entidades federativas, que es el tipo de desarrollo que el país necesita.
La ciudad de México, uno de los grandes centros económicos, culturales y de población que hay en el mundo, es también una ciudad profundamente vulnerable. La destrucción sembrada por el sismo de septiembre de 1985; la escasez de agua en muchas zonas conurbadas y de la ciudad misma; los desesperantes congestionamientos y la ineficiencia del transporte, son sólo algunos de los síntomas de la disfuncionalidad que padecemos. A todo ello, hoy se suma la epidemia de influenza.
La ciudad es cada día menos funcional desde el punto de vista de sus habitantes; sin embargo, representa una oportunidad extraordinaria para los mil millonarios que continúan acumulando riquezas sin importar los desastres que su sistema económico ha venido sembrando.
Hoy, la ciudad y el país entero reclaman que a la brevedad se comiencen a dar los pasos hacia un modelo de desarrollo planificado, que es el único que puedo resolver los ingentes problemas de la crisis urbana de la ciudad de México. Dicha planificación deberá hacer posible, además del desarrollo equitativo de las 32 entidades federativas, soluciones como el transporte colectivo, y la protección de áreas naturales, mismas que el desarrollo caótico ha venido destruyendo de manera irracional.

La transnacional canadiense "Granjas Carroll" la que desato la epidemia

SÍ EXISTE ESTA EMERGENCIA, posiblemente creada por el encubrimiento de las autoridades veracruzanas y federales, que cobijaron a la transnacional canadiense "Granjas Carroll" -la que desacató las normas mexicanas de higiene y de salud y en condiciones de crueldad animal, suciedad inimaginables, destruyendo el medio ambiente del sitio y la salud de sus habitantes-, ubicada en Las Glorias, Perote, Veracruz (caso similar a El Salto), donde el 60% de sus pobladores enfermaron de gripa, neumonía y finalmente influenza porcina. Grupos ambientalistas y de derechos humanos, han apoyado desde hace tiempo a los oriundos del sitio afectado, quienes fueron arrestados por manifestarse, por las autoridades de Perote, Veracruz, presuntos cómplices de la porqueriza canadiense.
Muy probablemente, debido a esta negligencia y encubrimiento gubernamental hoy TODOS LOS MEXICANOS ESTAMOS EN PELIGRO DE MUERTE y la salud de los habitantes humanos y cerdos DE TODO EL PLANETA, es incierta.

DOS NOTAS EN PERIÓDICO REFORMA:

Hallan en Perote foco de gripe

Margarita Vega

(27-Abr-2009).- MÉXICO.- Una consultora estadounidense dedicada a biovigilancia, Veratect Corporation, identificó el inicio del brote del nuevo virus de influenza en una comunidad de Perote, Veracruz, en donde la mayor parte de la población presentó síntomas relacionados con esta enfermedad.En el portal de la empresa, el científico James Wilson afirma que la compañía reportó que desde el 2 de abril se declaró una alerta en la comunidad de La Gloria, en Perote, en donde se registraron 400 casos de una infección respiratoria atípica e incluso afirma que ya se implementó un cordón sanitario.Según el científico, los pobladores de esa comunidad responsabilizan a las granjas de cerdos locales (Granjas Carroll) de la situación y aseguran que contaminaron el ambiente y los cuerpos de agua."Oficiales de salud indicaron que el 60 por ciento de la población del pueblo (aproximadamente mil 800 casos) ha sido afectada. No precisa el tiempo en que ocurrieron, pero fuentes reportan que un oficial local había estado buscando asistencia sanitaria para el pueblo desde febrero", destaca el reporte de Wilson.Dicha información, asegura, fue colocada desde entonces en el portal de la empresa, accesible para todos sus clientes, incluyendo a los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos.Para el 20 de abril, continúa, la empresa fue cuestionada por "clientes en la comunidad pública de salud de EU", quienes decían haber recibido solicitudes de apoyo de las autoridades de Canadá y México."Veratect contactó al centro de operaciones de emergencia del CDC para sensibilizarlos acerca de la situación en México y el CDC indicó que ya estaba trabajando en los casos detectados de H1N1 de influenza porcina en California y posiblemente en Texas", señala el reporte.En el recuento también incluye la declaratoria de alerta establecida por las autoridades mexicanas, así como el reconocimiento oficial de 20 muertos por la presencia de un nuevo virus de influenza, asociada a los puercos.Wilson advierte que la situación de la inseguridad y el narcotráfico en el País pueden obstaculizar los sistemas de notificación de casos."La oleada reciente en crimen organizado y violencia relacionada a la droga en México, incluyendo homicidios, los secuestros, extorsión, y hurto, ha afectado desproporcionadamente a estados mexicanos a lo largo de la Costa del Pacífico y a la frontera entre México y Estados Unidos."Este factor puede confundir el conocimiento de la enfermedad respiratoria en México y contribuir a los problemas en medidas epidemiológicas de la investigación", alerta.

'Advertimos sobre problema potencial'

Adriana Alatorre

(27-Abr-2009).- MÉXICO.- James Wilson, jefe científico de la empresa Veratect Corporation, aseguró que desde el 2 de abril se lanzó una alerta por los casos sospechosos de influenza porcina en México.En entrevista telefónica desde Washington, aseguró que su organización fue la primera en el mundo en reportar dichos casos a la Organización Panamericana de la Salud, quien a su vez informó a las autoridades mexicanas."Nosotros compartimos esta información con la Organización Mundial de la Salud y ellos son quienes pueden hacer los enlaces correspondientes con el Gobierno de México, pero nosotros lo supimos desde el 2 de abril", afirmó."Lo que hacemos es advertir sobre un problema potencial, el siguiente paso es que la autoridad lo tiene que confirmar. Así que somos un sistema de aviso temprano, no un sistema de verificación", precisó.El jefe científico de la empresa encargada de advertir posibles brotes de enfermedades a través del personal que labora para ellos en 283 países, indicó que desde los primeros días de abril informaron a funcionarios locales de salud del brote de una enfermedad respiratoria en la localidad La Gloria, municipio de Perote, Veracruz.Sus fuentes caracterizaron el caso como un "extraño" brote de infección respiratoria aguda, lo que condujo a la neumonía bronquial."Los funcionarios de salud registraron 400 casos que buscaron tratamiento médico en la última semana en La Gloria, que tiene una población de 3 mil. Los funcionarios indicaron que el 60 por ciento de la ciudad se ha visto afectada", informó el especialista que ha colaborado con la OMS en casos del ébola en África.Explicó que su trabajo consiste en reunir la información y compartirla para advertir de un posible problema, y subrayó que no publican o pasan información que no sea confirmada por una autoridad de la salud."Notamos esto como inusual, ciertamente, porque está fuera de temporada, así también porque tiene que ver por la localidad y forma de contagio. Juntando estas referencias, encontramos que es información preocupante y en la manera que tratamos esta información hasta que no se confirme sólo es un rumor que puede agravar el problema", sostuvo.Como justificación, el científico externó que su información no sirve para "enfadar" al Gobierno mexicano, sino para alertarlo.

Elsa Stettner

H1N1: Estado de Excepción y Elecciones

Asimetrías

H1N1: Estado de Excepción y Elecciones

Por Fausto Fernández Ponte

“La campaña contra el H1N1 es una estrategiatipo “think tank”, que sólo se usa cuando quieren tener al pueblo enun sopor hipnótico”.
-Ivonne Marín.-
I
La administración de la crisis de salud representada por el brote epidémico atípico del virus de la influenza porcina ­o H1N1­ pare ceacusar todas las características de un Estado de Excepción empleando metodologías de control social mediante el terror.
Señálese que en un Estado de Excepción se permite todo, incluso cancelar procesos constitucionales normales como las elecciones,concentraciones de obreros o campesinos, etcétera, justificado desde la lógica del poder político y sus aparatos burocráticos civil ymilitar de carácter coactivo/coercitivo.
En una excepcionalidad así la violencia del Estado se torna inconstreñiblemente metaconstitucional aunque no moral o ética desde una estricta perspectiva jurídica. La justificación es la suma de causales ­una epidemia, por ejemplo --como en México--, que dieron origen al establecimiento de dicha excepcionalidad.
De hecho, el Estado de Excepción ya existe por el decreto presidencial que cancela incluso las garantías y derechos individualesy sociales constitucionales, aun aquellos en proceso de promulgación. Ese Estado de Excepción parece ser el destino de una secuencia de sucedidos no distintos a los de un “coup d´État”.
¿”Coup d´État o golpe de Estado? No sería exagerado arribar a esa conclusión. Para los estudiosos de la filosofía, la historia, el derecho y otras ciencias políticas y sociales y de la realidad con métodos científicos --como los del historicismo y el materialismo dialèctico y el histórico-- esa conclusión lógica sería inevitable. Y es que esa situación de excepcionalidad ha sido decretada apresuradamente por fiat del titular de la rama ejecutiva (de vena ideológica conservadora y, ergo, oscurantista que se opone a la enseñanza de filosofía y la historia en el sistema educativo) mediante uso de técnicas de control social. Y una de esas técnicas es la difusión masiva y repetitiva premeditadamente alarmista de mensajes orientados a crear psicosis e histeria y, de esa guisa, temores rayanos en terror para paralizar al a población y las iniciativas ciudadanas para protestar por la crisis y superarla e incluso actividades productivas.
En síntesis, la ecuación tiene secuencia dialéctica propia: una campaña de terror sustentada sobre un peligro ­brotes atípicos de una potencial epidemia vírica-- cuyo verismo y alcance se exageran, para inducir conductas colectivas predecibles y conformar, así, un prototipo de conformismo y pensamiento único de la sociedad.
II
Trataríase, según piénsase en ciertos cenáculos de la intelectualidad y la academia y entre ciudadanos suspicaces y avisados, que el peligro “excepcional” que corremos presuntamente los mexicanos justificarían incluso posponer o, de plano, cancelar los comicios convocados para realizarse el 5 de julio próximo.
Ello, si cierto demostradamente, despide un tufillo hediondo a“coup d¨État” para que los personeros panistas del poder político del Estado puedan lograr su implícitamente declarado propósito de establecer un Estado Policiaco o Totalitario bajo modalidades legales,como lo confirmarían las iniciativas de ley calderonistas.
Esas iniciativas de ley, como sabríalo el leyente informado,fueron propuestas al Senado de la República por el Presidente deFacto, Felipe Calderón, para legalizar el proceso ocurrente de militarización del país --la cual es flagrantemente inconstitucional­ so pretexto de combatir al narcotráfico.
Parece diseñada con el propósito de inhibir las interacciones y las iniciativas societales en virtualmente todos los ámbitos del quehacer, incluyendo aquellos de protesta social de la ya político-reivindicatoria y económico-productivo.
La cara leyente Marín, citada en el epígrafe de ésta entrega,reflejaría bien, a nuestro ver, el sentir y el perspicaz parecer de no pocos mexicanos y de otras mujeres y hombres en países acerca del brote atípico del virus de influenza porcina, conocido mejor como H1N1.
Y la colega Flor Berenguer, en un texto de su autoría muy informado, escribe:
“Las posibilidades reales de contraer influenza son mínimas, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud; la alerta para México es (de) tipo 3 (…) no hay evidencias que la enfermedad animal se traslade masivamente sin contacto directo a la población, con muy poca transmisión del virus de persona a persona”.
La cara leyente Yeidckol Polenvsky, Senadora de la República porel PRD, afirma: “Existe temor (de) que el gobierno esté manipulando la magnitud real del brote epidémico con fines electorales y para desviar la atención pública de la crisis económica, el descontento social y de la intención de militarizar al país”.
III
Ciertos leyentes, empero, como Régulo León-Arteta, tienen otro parecer: “Hoy pudieran haberse salvado muchas vidas si desde antes de la revista que realizó (Barack) Obama a su gabinete mexicano se hubiese dado la voz de alarma, ¡ya!”.
El caro leyente Andrés Ruiz Furlong, en su turno, escribe: “Aún comprobada, la “epidemia” , el actual desgobierno no puede eludir su responsabilidad”. Dice que tanto el secretario de despacho de Salud del Presidente de Facto Calderón como el gobernador Enrique Peña Nieto “son muy ojones para ser palomas”.
Pero, ¿qué hay realmente detrás del telón de fondo y los móvilesveros de los operadores de la tramoya? ¿Por qué éste juego al parecer frenético y sospechoso de manipulación oportunista de los personeros panistas del poder político del Estado cuyo efecto es una psicosis colectiva y una histeria social aguda?
Para empezar, ausente o minimizado, si no es que deliberadamente omitido, es el discernimiento objetivo (por lo que toca a los personeros panistas del poder político del Estado) del fenómeno del desarrollo epidémico atípico del virus H1N1, seguido de una reacción exacerbada diseñada con fines de control social.
Esas interrogantes carecen de respuestas objetivas, pero susubjetivismo tiene raigones hondos en la psique colectiva de amplios estratos de la sociedad mexicana, a partir de un hecho que sí ofrece el atributo de la objetividad: la carencia de credibilidad del poder político panista-priísta-perredista en general del Estado.
www.faustofernandezponte.com
Glosario:
Fiat: decreto. Órdenes tajantes e indiscutidas. Decisiones imperiales.
Raigones: raíces.

Columna Asimetrías. H1N1: Manipulación Política





27 abril 2009



“Hay que interrumpir el ciclo reproductivo del virus H1N1 para frustrar la
naciente epidemia; ello requiere no sólo medicamentos, sino también mayor
educación y mejoría del entorno físico y moral”.


Rosalío González Randolph, médico epidemiólogo.

I

El brote atípico de cientos de casos de víctimas del virus de la
llamada influenza porcina (o virus H1N1) que ha causado preocupación
en grado variopinto entre los mexicanos, principalmente los que
habitan el Valle de México y, en un sentido más amplio, el Altiplano,
es un problema sanitario cuya severidad, si dicho con franqueza, ha
sido hasta ahora únicamente potencial.

Empero, no se desestima ese potencial de desarrollo y propagación
rápida del virus, pero tampoco es un motivo para incurrir en
manifestaciones de dramatismo, psicosis e histeria colectivas, como al
parecer han caído los personeros del poder político panista del Estado
mexicano. Antojaríase más oportunismo político-prelectoral que
vocación de servicio.

Hágase la salvedad pertinente que con este planteamiento no se
desestima en absoluto el potencial propagatorio del virus ni sus
secuelas que, si descuidado o ineficiente su enfoque y tratamiento,
podrían ser de proporciones cataclísmicas. No, no se desestima ese
potencial, pero sí advertimos que su enfoque tiende a ser demagógico,
político o, por mejor decir, politiquero.

Con ello querríase decir aquí que el enfoque y el manejo –o
administración— del brote epidémico atípico no estacional del virus
H1N1 que los personeros panistas del poder político del Estado le dan
al fenómeno tiene por móvil insoslayable obtener dividendos de
naturaleza política. Trataríase, al parecer, de acrecentar un capital
político que decrece a toda prisa.

¿Por qué obsérvase insoslayable el móvil de los personeros
panistas del poder político del Estado mexicano? Porque hasta ahora,
ninguno de ellos, desde el Presidente de Facto hasta el último de los
partiquinos y cofrades blanquiazules insertados en la alta y mediana
burocracias gubernamentales, estatales, ha dado muestra de
preocuparse por los gobernados.

A ello débese, presumiríase, esa reacción rápida del mismísimo
titular del Poder Ejecutivo y sus secretarios civiles y militares (que
incluye a los de la Marina de Guerra) de despacho, muchos de ellos
actuantes bajo premisas y silogismos de una ideología que
desprivilegia el laicismo en el ejercicio del poder político. El
potencial de grandes ganancias políticas es tentador.

II

Cierto. Don Felipe podría emerger como el providencial salvador de
los mexicanos, al rescatarlos y liberarlos de las zarpas monstruosas
de una peste que, en rigor científico y técnico, no se ha declarado
aún, pese a que ha habido una veintena de muertos en todo el país y no
obstante que el poder político del Estado enfrenta con vacunas de
declarada ineficacia.

Sábese hoy que el virus sospechoso --el H1N1— apareció por
primera vez hace nueve años en Vietnam y desde entonces a la fecha ha
causado en el mundo un centenar de decesos, concluyéndose que el
citado organismo vector es atacable, neutralizable y susceptible de
morir mediante tratamiento adecuado y, sobre todo, oportuno. No hay
motivo para psicosis e histeria.

Pero la psicosis y la histeria de los personeros panistas del poder
político del Estado está permeando a la sociedad. Ello nos lleva a la
suspicacia acerca de un segundo móvil, adicional al potencial de lucro
político y acrecentamiento inmoral de capital electoral, opuesto a
toda ética propagandística y mediática con miras a los comicios del 5
de julio próximo.

Con sus actitudes y conductas, los personeros calderonistas del
poder político del Estado atizan las fogaratas de la psicosis
colectiva, que es no otra cosa que una forma de perturbación mental
caracterizada por las alternativas de de excitación y depresión del
ánimo y, en general, de todas las actividades orgánicas; la
psiquiatría social la aplica a las colectividades humanas.

La histeria –o histerismo, más apropiadamente en lo semántico--
es una patología mental crónica, caracterizada por una amplia gama de
síntomas, principalmente funcionales, y a veces por ataques
convulsivos. Es un estado pasajero de excitación nerviosa producido a
consecuencia de una situación anómala; el brote epidémico atípico
del H1N1 es una anomalía.

Los indicios de epidemia atípica del virus H1N1 les parecieron a
los personeros calderonistas del poder político del Estado como una
oportunidad nada calva, caída providencialmente del cielo (o de las
entrañas de ciertos laboratorios de armas bacteriológicas de Estados
Unidos) para hacer proselitismo paraelectoral sin que lo parezca ni
viole las leyes del ramo.

III

Así, al señor Calderón se le puso milagrosamente en bandeja de
plata el pretexto para hacer proselitismo preelectoral a favor de los
candidatos de su partido, el de Acción Nacional, muy desacreditados
según los sondeos del sentir y el parecer de la ciudadanía realizados
por los propios panistas, y abrumados, con arreglo a esas mismas
encuestas, por preferencias al PRI.

Éstos, por cierto, tampoco gozan de buen crédito, pues al igual
que los panistas, los del Revolucionario Institucional son
abanderados sin propuestas para salirle al paso, desde la Cámara de
Diputados, a las causales y efectos de la crisis económica, la cual
se ha montado sobre el proceso corrosivo de la descomposición del
poder político del Estado mexicano.

Los candidatos de los demás partidos, abúndese en esta digresión,
tampoco tienen propuestas para que la Cámara de Diputados, colegiada
del Senado, actúe legislativamente para eliminar las causas de la
crisis y la descomposición del poder político del Estado mexicano y
revertir sus consecuencias. Muchos ni siquiera saben que vivimos en
una crisis sin precedente.

Por esas razones, la ciudadanía está irritada –muy irritada,
cabría decir con mayor precisión— porque el señor Calderón no sólo no
ha cumplido (ni cumplirá) las promesas de campaña de crear empleos,
eliminar los pagos de tenencias de automóviles, ampliar la seguridad
social y aumentar la seguridad pública, combatir la corrupción
rampante, etcétera.

La ciudadanía está muy irritada también por la zozobra y
crispación a la que la han llevado los cruzados medievales del
Espuriato. Zozobra y crispación son enunciados de terror subyacente
que inhibe incluso la vida societal y política y tiende a incidir en
la cultura. Las patrullas militares en las calles inspiran temor y
sus acciones contra la población civil mueven a terror.

Pero la estrategia y las tácticas del Calderonato contra el H1N1
ponen al descubierto varios hoyos negros del sistema económico y
político prevaleciente: la desatención médica y medicinal: 27
millones, 16 mil 712 trabajadores, más sus familiares --unos 60
millones más— no cuentan con seguridad social. Pero don Felipe quiere
salvarlos, como Carlos Salinas, de este chupacabras.


Glosario:


Cataclísmica: de cataclismo. Trastorno grande del globo terráqueo;
por extensión cualquier otro tipo de trastorno grave. Gran trastorno
en el orden social. Disgusto, contratiempo, suceso que altera la vida
cotidiana.

Societal: relativo a la sociedad.

Plan B. La lección del flu mexicano





27 abril 2009

Parece la escena de una película de suspenso. En aeropuertos se escuchan altavoces con indicaciones para evitar un mayor contagio del virus de Influenza mexicana A/H1N1. En las calles la gente enmascarada camina con miedo de saludarse y mira con recelo a quien tose o estornuda. Los medios y las autoridades nos han dado todas las instrucciones y seguramente, pese a su gravedad, la ciencia y el buen control sanitario detendrán pronto esta pandemia del virus que mutó en México y que ya en el mundo llaman “el flu mexicano”.

El virus de la influenza porcina A/H1N1 mutó en el cuerpo de algún mexicano por primera vez en 2009, al menos eso dicen los científicos. Lo cierto es que la trágica muerte de casi 90 personas en México y el contagio de más de 25 en Estados Unidos nos recuerda la fragilidad humana y que a pesar de la soberbia los humanos tenemos muy poco bajo control. El virus que aterra a la población y que ha forzado al gobierno estadounidense a dar alerta sanitaria por miedo a una pandemia mortal, se gestó en el cuerpo de un cerdo en alguna granja, por eso los controles fitosanitarios nunca deben subestimarse.

Existen por lo menos 39 enfermedades importantes que son contagiadas por los animales a las personas. Se llaman zoonosis. Hay sólo 48 enfermedades humanas que sufren las personas a causa de piquetes o mordidas de insectos. En México el dengue, contagiado por mosquitos, se transformó en dengue hemorrágico que ha matado sobre todo a niños y mujeres en zonas tropicales del país. Hay 42 enfermedades cuyo contagio depende del consumo de agua, vegetales o carne contaminadas por heces animales. Los gatos contagian la toxoplasmosis; la gente con sistemas inmunes débiles no debe acercarse a orina o heces de gatos y las mujeres pueden tener abortos espontáneos a causa de ella.

Las zoonosis la contagian mascotas y ganado, animalitos tiernos y simpáticos o serpientes e insectos que amedrentan. La rabia, la peste bubónica, la fiebre amarilla y las más recientes y sofisticadas que han aterrado al mundo, como la encefalitis del Nilo, la Tuberculosis bovina, el Ébola, la Listeria, el Antrax o la influenza aviar, que generó pánico mundial hace un par de años, todas nos recuerdan la importancia y responsabilidad de los gobiernos para proveer a la sociedad de servicios de salud adecuados, efectivos y accesibles.

El gobierno del DF ha ofrecido 2 millones de pesos a científicos que encuentren cura o vacuna contra el Flu mexicano, y aunque es cierto que las autoridades han actuado bien en la detección y prevención del contagio, esta crisis nos recuerda que el Estado mexicano sigue despreciando la inversión en ciencia. Que se controle la epidemia dependerá de la detección y fácil acceso a antivirales para todos los enfermos. Además de la revaloración de nuestra salud, espero que una de las lecciones para el gobierno de Felipe Calderón sea la inversión efectiva y real en desarrollo científico y tecnológico. No podemos evitar las enfermedades, pero sí estar preparados para ellas.

Editorial. El H1N1, Realidades y Soluciones

Año 6, número 2584
Lunes 27, abril del año 2009


La aparición del virus conocido científicamente como H1N1 –es ¿decir, la llamada influenza porcina— tiene varias consecuencias indudables: una psicosis colectiva rayana en terror histérico que pudiere ser justificada o no, y un inmoral y antiético oportunismo en pos de capital político del Presidente de Facto, Felipe Calderón, jefe del Espuriato.

Otras consecuencias adicionales son, por ejemplo, el descubrimiento de la patética ineptitud política y carencia de liderazgo de José Ángel Córdova, secretario del despacho de Salud del Presidente de Facto; y la confirmación de que el régimen de seguridad social en México es inexistente o, en el mejor de los casos, sumamente deficiente.

Véase, si no: el señor Córdova es –no se dudaría—un gran médico y si se quiere hasta un gran hombre de ciencia, pero el manejo de la crisis de salud pública que nos atañe --representada en la aparición y secuelas alarmantes del H1N1-- ha sido un alarde de ineptitud, si no es que de franca estupidez. El doctor Córdova debería renunciar, por amor propio.

Pero el señor Córdova es sólo un reflejo de otra realidad más apabullante: la ineptitud política del señor Calderón, de quien es secretario de despacho en asuntos de tanta importancia como es la salud pública y, sobre todo, la asistencia amplia e ilimitada que el poder político del Estado mexicano debe proveer al pueblo. Ha habido omisiones por inepcia y ésta es la más dramática.

El pueblo de México no puede darse el lujo de tener funcionarios tan francamente mediocres como el señor Córdova o como su mismísimo jefe, el señor Calderón, quien no parece tener la menor idea de que el elemento constitutivo del Estado que él jefatura espuriamente es el pueblo de México. Don Felipe, por añadidura, carece de fórmulas políticas para salir de esta crisis.

Esa pauperación de fórmulas –pobreza de ideas-- del señor Calderón y sus notoriamente impreparados secretarios de despacho para salirle al paso a la crisis de salud se advierte también en otros ámbitos de las crisis económica, social, política y cultural concurrentes que simultáneamente estrujan brutalmente a los mexicanos.

Para empezar, don Felipe –y sus glorificados secretarios de despacho-- no tienen conciencia de su muy limitada cosmovisión oscurantista de la realidad, los problemas que caracterizan a ésta, y las soluciones verdaderas que la experiencia histórica y un registro historicista de aquélla ofrecen al poder político del Estado mexicano.

Prevalecen el oscurantismo y, espectacularmente, el oportunismo político del señor Calderón. Con un cinismo impúdico, don Felipe anunció que “personalmente” encabezará a las fuerzas armadas de México –en particular el Ejército y la Marina de Guerra o Armada-- en rescatar a la población mexicana de las garras afiladas e implacables de la epidemia.

Sí. Nuestro personaje se apresta a salvar al pueblo de México del monstruo invisible del H1N1. Supercalderón combatirá en persona, en vivo y en directo y tal vez a todo color (el de Televisa y Televisión Azteca), a la terrible bestia viral, de fauces que despiden fogaratas, respiración sulfurosa y ojos que brillan de perversidad.

¿Cómo salvará Supercalderón a los mexicanos? Tal vez repartiendo vacunas que, como lo reconoció ya el ineptísimo (como político, no como médico) el secretario Córdova , no pueden neutralizar al virus en cuestión. O tal vez en actos mediáticos que le abonen réditos o un interés político en pos de la incensante búsqueda de legitimidad ante los mexicanos.

Las acciones del Presidente y su secretario Córdova ignoran que para entender el brote epidémico es necesario discernir y aceptar una realidad insoslayable: que el andamiaje de la seguridad social en México, acusadamente en lo que respecta a atención médica y dispensa de medicinas oportunamente, está cayéndose y que sólo quedan de éste ruinas.

Epidemias como la que nos aqueja eran frecuentes en la Edad Media en Europa. Las plagas medievales conocidas como pestes mataban a millones de seres humanos, a resultas de muchos factores y vectores, entre ellos, la ausencia de un desarrollo de la cultura preventiva y la ignorancia de la existencia de bacterias y virus que proliferaban en hacinamientos sociales.

Los gobernantes de entonces --no olvidemos que prevalecía el absolutismo-- atribuían esas pestes a la voluntad divina y proponían, por lo tanto, orar y pedir soluciones milagrosas o teístas. Hoy sábese que las pestes cesaban al concluir los ciclos de sus vectores y agentes patógenos y al disminuir la población.

Hoy, el señor Calderón y los proveedores comerciales de mascarillas y tapabocas preventivas de contagio. Todos ellos –el mandatario y los comerciantes especuladores sin ética —buscan la ganancia; aquél, la ganancia política; éstos, el lucro inmediato por la producción y venta del adminículo preventivo. ¿Cuánto cobrarán los laboratorios por el diseño de la vacuna?

¿Y quiénes se beneficiarán, en lo crematístico, por la adquisición que haga el gobierno de las vacunas elaboradas, presumiblemente, por laboratorios de empresas trasnacionales extranjeras, seguramente estadunidenses? Dada la laxitud moral y vocación corrupta del Espuriato, la crisis de salud es también oportunidad de ganancia para algunos políticos y burócratas.

Desde la perspectiva de la dialéctica, existen vínculos y concatenaciones entre lo aquí descrito –la epidemia y sus consecuencias, así como las conductas políticas y empresariales-- y la forma de organización económica y política prevaleciente, son la causal del atraso social que a su vez es caldo de cultivo apropiado para el desarrollo de esta crisis de salud.

Los caminos que debiere emprender el poder político (desde el titular de facto del Ejecutivo hasta los miembros del Legislativo, gobernadores, diputados locales, presidentes municipales del PAN, PRI, PRD, etcétera) para hacerle frente a la crisis de salud ocurrente están a la vista: el corto, alertar a la población pero sin alarmarla innecesariamente, como es lo que ocurre..

Y el largo, el más difícil: tomar medidas políticas –incluso legislativas-- orientadas a crear condiciones institucionales económicas, políticas, sociales y culturales que efectivamente garanticen a los mexicanos acceso atención médica preventiva/curativa sin trabas ideológicas, políticas o las propias de la cultura de negación en la práctica de los derechos humanos.

Gripe porcina en el mundo

Principales acontecimientos el domingo en los brotes de gripe porcina:

Muertes: 103, todas en México. De ellas, 22 han sido confirmadas como consecuencia de la influenza porcina, y se sospecha que otras 81 se debieron a esta enfermedad. No ha ocurrido ninguna muerte por esta "epidemia" en otros países. Obama declaró que si bien esto "es algo preocupante, que requiere estar en alerta, pero no es motivo de alarma".

Personas enfermas: Unos 1,614 casos en México, confirmados o de los cuales se sospecha; 20 confirmados en Estados Unidos; seis confirmados en Canadá.

Posibles casos: 13 en Nueva Zelanda; siete en España; uno en Brasil, uno en Francia y uno en Israel.

Localidades afectadas en México: 17 Estados, incluyendo la Ciudad de México, el Estado de México, Veracruz, Oaxaca, Baja California y San Luis Potosí. Algunos, como Oaxaca, la Ciudad de México y Baja California, tienen áreas turísticas, pero las autoridades no han dicho dónde han ocurrido los brotes en esos Estados.

Localidades afectadas en Estados Unidos: California, Kansas, Nueva York, Ohio y Texas.

Medidas de seguridad en México: En la capital se han repartido mascarillas quirúrgicas en el tren subterráneo y en otros lugares, se han cancelado eventos públicos, se cerraron las escuelas y diversos sitios de acceso público y se suspendieron los servicios religiosos. Felipe Calderón asumió nuevos poderes para aislar a las personas infectadas, y el Banco Mundial le está proporcionando a México más de 200 millones de dólares en préstamos para ayudarle a hacer frente al brote.

Medidas de seguridad en Estados Unidos: Se tomaron aproximadamente 12 millones de dosis de la vacuna Tamiflu de una reserva federal para ser repartidas a Estados; a los viajeros en la frontera se les pregunta si viajaron a las zonas afectadas, y la escuela St. Francis en Nueva York, donde fueron confirmados ocho casos, estará cerrada el lunes y el martes. La escuela católica St. Mel en Fair Oaks, California, está cerrada hasta cuando menos el jueves mientras las autoridades investigan la posible infección de un alumno.

Medidas de seguridad en todo el mundo: Los aeropuertos están revisando a viajeros procedentes de México en busca de síntomas; China, Rusia y Taiwán planean colocar bajo cuarentena a cualquier persona que aparentemente tenga la enfermedad; Hong Kong y Corea del Sur recomendaron a sus ciudadanos que no viajen a la Ciudad de México y a tres Estados mexicanos, mientras que Italia, Polonia y Venezuela aconsejaron a sus ciudadanos que aplacen planes de viaje a zonas afectadas en México y Estados Unidos. Algunos países están incrementando su supervisión a las importaciones de cerdos o las están prohibiendo.

(AP)

Balance espeluznante

Decreto violenta la Constitución

Carlos Fernández-Vega

Por demás expedito y generoso ha sido el gobierno federal en atender las urgencias de las grandes empresas altamente endeudadas en dólares o con vencimiento de corto plazo en divisa foránea. Por instrucciones del inquilino de Los Pinos, en línea con lo ordenado por sus antecesores, todo el aparato financiero del sector público ha sido puesto a disposición de tales urgencias. Miles de millones del erario se han puesto al servicio de tal fin; voluminosas cantidades han sido negociadas en calidad de línea de crédito con el FMI o swaps con la Reserva Federal de Estados Unidos. Y como lo dijo el gobernador del Banco de México, por si alguien dudara de tales recursos, el propósito es claro: proveer financiamientos a participantes del sector privado que enfrenten presiones para obtener recursos en dólares a plazo, en el entendido que las necesidades de los mexicanos pueden esperar aún más.

Pues bien, el problema es que al dadivoso cuan veloz gobierno calderonista se le juntó roto con descocido, falta de agua con sequía: a la crisis financiera (aquel idílico catarrito, según versión oficial) se suma una emergencia sanitaria de gran proporción, que tiende a ser nacional, que afecta sanitaria y psicológicamente a la población en su conjunto, que trata de ser atenuada con la misma fallida estrategia utilizada para efectos de la sacudida económica, y para la cual no hay recursos con qué responder, porque todo se lo quemaron en el más reciente rescate de los de siempre.

Más allá de los voluminosos créditos que la banca de desarrollo (del Estado) otorgó a esas selectas empresas para librar las primeras complicaciones, en primera instancia el Banco de México puso a disposición del gran capital 4 mil millones de dólares de la línea swap para satisfacer sus urgencias de dólares, independientemente de apoyos fiscales, facilidades, cortesías y conexos. Todo para las necesidades privadas.

Para las urgencias sociales, las propinas, si bien va. Así, como el gobierno calderonista ya no tiene un peso, porque todo se lo dio a los de siempre, debió negociar un crédito con el Banco Mundial: 25 millones de dólares, de desembolso inmediato, para la compra de medicinas, suministros médicos y equipo epidemiológico para detectar y diagnosticar la influenza porcina en México. Adicionalmente, 180 millones de billetes verdes, que se entregarán a mediano plazo para tratar los aspectos operacionales y capacidad institucional relativas a dicha enfermedad, según detalló en Washington el secretario de Hacienda, Agustín Carstens (además anunció otro por mil 500 millones de dólares para desarrollo social).

El balance resulta espeluznante: alrededor de 54 mil millones de pesos, en un primer tramo, para evitar la quiebra o moratoria de las grandes empresas, y 0.6 por ciento (cerca de 337 millones, en crédito otorgado por institución externa) de esa cantidad para enfrentar la emergencia sanitaria que se extiende por el país. Todo, en medio de un discurso oficial que contradice las razones por las cuales el Banco Mundial otorgó el citado crédito, porque el inquilino de Los Pinos asegura que tenemos en México los medicamentos suficientes para atender los casos que se puedan presentar. Esto es muy importante; la enfermedad es curable y tenemos los medicamentos para ello, mientras Carstens sostiene que el financiamiento del BM será, precisamente, para comprar medicinas, suministros médicos y equipo epidemiológico para detectar y diagnosticar la influenza porcina en nuestro territorio.

Y todo ello se da en el contexto de un alarmante cuan peligroso decreto del inquilino de Los Pinos, publicado el sábado en el Diario Oficial de la Federación, que utiliza la emergencia sanitaria como pretexto para violentar la Constitución y ordenar, sin mayor trámite, el ingreso a todo tipo de local o casa habitación para el cumplimiento de actividades dirigidas al control y combate de la epidemia, no sin antes advertir que evitará congregaciones de personas en cualquier lugar de reunión, incluyendo la clausura temporal de locales o centros de espectáculo.

Tal proceder trae a la memoria aquella película del cine mexicano (El año de la peste, 1978), dirigida por Felipe Cazals, con guión de Gabriel García Márquez y Juan Arturo Brennan, basado en la novela Diario del año de la peste (1722) del inglés Daniel Defoe, y diálogos de José Agustín y los propios García Márquez y Brennan, cuya síntesis más o menos es así: en una ciudad mexicana se presenta un brote epidémico, sin que las autoridades hagan caso de las advertencias de los especialistas. Ante la magnitud de los daños, el gobierno decide controlar la información y organizar brigadas represivas disfrazadas de grupos de fumigación, entre otras medidas para distraer la atención y evitar el pánico entre la población. Por su parte, la sociedad finge que no pasa nada, mientras la ciudad se llena de cadáveres (cinemexicano.mty. itesm.mx/front.html).

No vaya a ser la de malas que, más allá de demostrar que de nueva cuenta lo agarraron con los dedos en la puerta, el gobierno calderonista le tome gusto a ese tipo de prácticas.

Las rebanadas del pastel

Para berrinche de Germán Larrea y pianista que lo acompaña, los mineros sindicalizados informaron ayer que el juez segundo de distrito en materia laboral en el Distrito Federal resolvió conceder suspensión definitiva para el efecto de que no se ejecute el ilegal laudo dictado el 14 de abril, que pretendía terminar la relación de trabajo, colectiva e individual, de los trabajadores con Mexicana de Cananea, como parte de la irracional y empecinada persecución política que el gobierno mantiene hace tres años contra nosotros. Por tanto, las declaraciones de la Secretaría del Trabajo, que auguraban que ello no ocurriría, vuelven a ser desafortunadas, por decir lo menos. La huelga sigue vigente y fue declarada legal. Los mil 200 trabajadores sindicalizados están bien protegidos legalmente, y ninguna fuerza federal o estatal puede desalojarlos, so pena de violar la suspensión otorgada hasta en cinco ocasiones por diversos jueces, en una de ellas de manera definitiva. En esas condiciones, y aun cuando un importante número de elementos de la PFP se retiraron de Cananea, al país le ha costado una fortuna mantenerlos ahí para intentar desalojar a los trabajadores, en vez de dedicarlos a atacar la delincuencia. Es un gasto absurdo cuando el país se encuentra en crisis de seguridad y económica (y epidemiológica).

Estado (médico) de excepción

Epidemia de miedo
Tapabocas social

Julio Hernández López

Todo de un golpe: mediante un simple decreto, sin siquiera tomar la opinión del congreso pripánicamente controlado, el ocupante de Los Pinos se otorgó a sí mismo (a través de su dependiente, el secretario de Salud) facultades discrecionales para aislar individuos, allanar casas y locales, hacer compras cuantiosas sin licitación pública y suspender concentraciones públicas (¡Aguas: llegó la SS!). Además, la crisis provocada por la influenza opacó y desequilibró las campañas electorales en puerta, incrementó la desesperanza cívica, introdujo el virus de la desconfianza y elevó el del conservadurismo en la plaza normalmente liberal del Distrito Federal, colocó en las calles de esta capital del país a soldados en misiones hoy solamente sanitarias, permitió que por televisión abierta de alcance nacional (Televisión Azteca) se transmitieran misas católicas y tendió una cortina de humo viral sobre temas polémicos en curso como las cuentas públicas de Fox, la propuesta felipista del estado militar de emergencia, las amenazas de represión neoporfirista en Cananea y el escándalo de la Lotería Nacional en Campeche (donde Germán alegremente reinstaló como coordinador de la campaña panista a uno de los acusados por el caso de soborno).

El tapabocas político y social tiene como antecedentes los manejos tramposos que los mismos dictaminadores de hoy han hecho en temas como el narcotráfico, la crisis económica y los préstamos recientes (sólo ayer, 205 millones de dólares del Banco Mundial). La suspicacia colectiva va de los diez mil muertos por asuntos de drogas al riesgo de fallecimientos por una epidemia tardíamente detectada y mal manejada; del catarrito de Carstens y la fanfarronería original de Calderón a la influenza porcina que en otras latitudes no ha provocado el estremecimiento que en México; de la buena fe y la evidencia mediática de que el problema es real al temor de que esté siendo utilizado políticamente por los siempre desesperados ocupantes ilegítimos del poder mexicano, deseosos de trastocar los escenarios electorales que en estos momentos les auguraban derrotas sonoras en comicios federales y locales; de la creencia en las intenciones más o menos buenas de los gobernantes a La doctrina del shock, el libro en que Naoime Klein (No logo) demuestra que el capitalismo emplea constantemente la violencia, el terrorismo contra el individuo y la sociedad. Lejos de ser el camino hacia la libertad, se aprovecha de las crisis para introducir impopulares medidas de choque económico, a menudo acompañadas de otras formas de shock no tan metafóricas: el golpe de la porra de los policías, las torturas con electroshocks o la picana en las celdas de las cárceles.

Hechos públicos, intenciones privadas (aunque, ¿cuán comprobable es lo que hasta ahora las autoridades federales y capitalinas han mantenido en el controlado ámbito de las declaraciones a los medios, sin dar datos específicos de los muertos, sin permitir que especialistas independientes analicen los reportes médicos y tengan acceso a evidencias biológicas de la epidemia?). Desgracia pública, negocios privados. Catástrofe de temporada, apocalipsis de fin de semana, adiós momentáneo pero augural a la convivencia táctil (no a los saludos de mano y de beso) y el médico guanajuatense Córdova saliendo al paso, junto con el trastabillante semisecretario de Educación, Alonso Lujambio, que habría reprobado un Enlace de primero de primaria por no saber contar ni el número de días que no habrá clase (tres y pico, dijo el funcionario), y el sargento Javier Lozano, que para compensar los malos tratos a los obreros se desvivió en amabilidad hacia los empresarios para ver si les da su regalada gana atender las circunstancias difíciles del país y no aprovechan la situación para correr o castigar a quienes falten al trabajo o lleguen tarde.

¿1984 con el Big Brother epidémico o los preparativos para filmar una versión local del guión de los hermanos Wachowski que acá se llamaría Con D de Desconfianza o el 666 conmemorativo del segundo año de la legalización del aborto en el Distrito Federal (regreso a clases, el 6 de mayo; dinero disponible para enfrentar el problema, 6 mil millones de pesos; número de tapabocas repartidos en el D.F., 6 millones)? El desamor en los tiempos de la influenza a partir de los tapabocas de azul panista. Ciudadanos sometidos a la dictadura de la miseria institucionalizada, con sistemas de salud abatidos por la corrupción de funcionarios y empresarios y por el pensamiento neoliberal todavía dominante en las élites. Cuerpo social extenuado que de pronto se encuentra con los anuncios de fin de mundo mientras, por ejemplo, en Estados Unidos, los casos son pocos, controlados y sin muertes. En Washington se declaró ayer el estado de emergencia de salud pública, pero ello no es sino un mecanismo usual para destrabar fondos que permitan enfrentar oportunamente determinadas incidencias susceptibles de empeorar. Y ayer mismo, John Brenman, el asistente de la Casa Blanca para asuntos de seguridad interna, negó (y con ello le dio fuerza a la especulación) que lo sucedido en México fuese un bioterrorismo y aseguró que es muy temprano para saber si hubo una acción premeditada para generar el brote de influenza porcina.

Pero, mientras son peras o son porcinos, el panorama político y social cambia en México, con el virus del miedo reproduciéndose aceleradamente y con analistas atentos en las alturas a las reacciones de la sociedad y los opositores al poder ante decisiones que avanzan en la instalación de mecanismos de amedrentamiento colectivo que inhiban participaciones electorales, que ante el peligro real o exagerado fomenten el conservadurismo, que vayan arrinconando incluso la idea de lo electoral y lo democrático y que permitan continuar con formas de control arbitrarias, con prolongados estados de excepción, sea por razones médicas, militares o sociales. ¡Hasta mañana!

La culpa no es de esos cerdos

Gara

Si los marcianos -o cualquier otra especie inteligente- envían sondas a nuestro planeta al igual que de la Tierra se envían naves espaciales para investigar qué ocurre por aquellos remotos mundos, el informe que deben de realizar en estos momentos esos cosmonautas debe de ser catastrófico. Sin lugar a dudas el escenario mundial es apocalíptico por varias razones. No cabe pensar que informes anteriores hayan sido más positivos -al menos si además de inteligentes esas otras especies son mínimamente civilizadas u honestas-, dado que el balance de guerras, desastres naturales, hambrunas y crímenes varios de las historia contemporánea es espeluznante. Pero, volviendo a la época actual, a la crisis sistémica del capitalismo y sus diferentes manifestaciones -crisis financiera, amenaza nuclear, calentamiento global...- hay que sumarle ahora la amenaza de una pandemia causada por una gripe porcina que supuestamente se ha generado en México, donde ya hay decenas de muertes, pero que amenaza con expandirse rápida y globalmente.

Ya han comenzado las primeras especulaciones científicas al respecto y, sin embargo, todavía no se ha escuchado ni una sola crítica sobre las múltiples y profundas causas asociadas a la actividad humana -causas sociopolíticas, por lo tanto-que se esconden tras este tipo de fenómenos. Cabe recordar que antes de los cerdos fueron los pollos, las terneras y las ovejas las especies que afectaron a los humanos. Todas ellas son parte de una industria alimentaria que funciona a escala global. No se trata de una apología animalista. Se trata sobre todo de una constatación, de una denuncia y de una reivindicación de la soberanía, también en el terreno alimentario.

En definitiva, que el debate publico al respecto no está en el terreno de la ciencia, sino en el político. En ese contexto, antes de perderse en estériles debates sobre epidemiología, se debería mirar a la concepción de la alimentación como una industria más. Porque la culpa no es de esos cerdos, sino de otros que han convertido la alimentación en un activo más de mercado, sujeta a sus leyes y ajena a las de la naturaleza y la humanidad. Y no hay que ser ni vegetariano ni marciano para verlo.

Epidemia, crisis, pobreza

Editorial

En la jornada de ayer el brote de influenza porcina que surgió en nuestro país parece haber saltado a diversas naciones: en Canadá, España, Francia, Nueva Zelanda e Israel se reportan casos de personas posiblemente infectadas con el virus de ese padecimiento; se confirman, en Estados Unidos, una veintena de casos, y el gobierno de ese país declara una emergencia de salud pública, en tanto que en diversas naciones centro y sudamericanas se monitorea a pacientes que podrían presentar contagio. En México, el brote de influenza se extiende a Hidalgo y Veracruz; en Jalisco y Nuevo León se estudia la posible presencia de casos de la enfermedad y se informa que el número de muertes confirmadas asciende a 103 en todo el territorio nacional. Asimismo, el gobierno federal anuncia que dos tercios de los enfermos en todo el país han sido dados de alta.

El inevitable contraste entre las muertes registradas en México y los cuadros provocados por el mismo virus en Estados Unidos, que parecieran mucho más benignos, tiene una explicación inevitable: la pobreza.

A lo largo de cinco lustros, cuando menos, sucesivas administraciones federales han porfiado en políticas económicas de adelgazamiento del Estado (incluidos, por supuesto, los servicios de atención sanitaria y educativa a la población), en medidas que favorecen a los capitales especuladores –especialmente los extranjeros–, en detrimento del resto de los sectores económicos, y que propician la concentración de la riqueza nacional en unas cuantas manos y la condena de millones de personas a estadios de insuficiencia en materia de ingreso, vivienda, transporte, alimentación, salud y educación.

Si algo ha impedido que la devastación neoliberal desembocara en una completa desestabilización del país ha sido el flujo migratorio hacia el país vecino del norte. Sin embargo, la perspectiva del éxodo económico parece haber llegado, en el actual contexto de crisis económica global, al límite de sus posibilidades como válvula de escape al maltrato social y económico de sucesivas administraciones a la mayoría de la población.

En el contexto así creado y agravado por los gobiernos neoliberales que van de 1988 al presente, el surgimiento de un brote viral largamente anunciado ha de ser obligadamente desastroso y, a diferencia de lo que ocurre en Estados Unidos y en diversas naciones europeas, mortal para muchos de los infectados.

Ahora, independientemente de las medidas adoptadas por los gobiernos federal y locales para tratar de contener el inicio de epidemia, el primero exhibe de nueva cuenta su falta de interés por el nuevo desastre económico que se cierne sobre los sectores más desprotegidos de la población. Cabe preguntarse cuántos miles de pequeños negocios personales y familiares –que dan sustento a gente que vive con las ganancias del día–, por no hablar de empresas pequeñas y medianas, se han vuelto ya inviables o lo harán en los días próximos; en qué porcentaje se disparará el desempleo ante el cierre de fuentes de trabajo o la imposibilidad de muchos empleados de asistir a sus centros laborales.

Sin ánimo de descalificar las disposiciones oficiales orientadas a minimizar los contagios, es obvio que éstas tendrían que haber ido acompañadas, desde un principio, de medidas de atenuación a éstos y otros impactos económicos devastadores para un amplio sector de la población del valle de México que padece los efectos de tres crisis superpuestas: la crisis en la que la política económica neoliberal lo ha mantenido sumido desde hace dos décadas o más; la crisis mundial que afecta al mundo, y la derivada de la paralización de actividades dictada por la necesidad de enfrentar el brote de influenza porcina.

Como hecho ilustrativo de esa proverbial indiferencia del gobierno ante las penurias de la población, apenas ayer por la tarde el secretario de Hacienda y Crédito Público, Agustín Carstens, admitió que la propagación de la enfermedad puede tener un impacto importante en la economía, pero consideró que era demasiado pronto para dar una opinión más completa.

En la actual circunstancia es urgente que las autoridades, además de empeñar las acciones pertinentes para evitar una mayor difusión del nuevo virus, empiecen de una vez por todas a preocuparse por rescatar a los sectores mayoritarios de la población del desastre causado por décadas de políticas económicas antipopulares; que presenten un plan real y coherente destinado a auxiliar a la ciudadanía, antes que a las grandes empresas, a los contratistas y a los grupos de interés corporativos, y que apliquen, con transparencia y honestidad, una parte suficiente del blindaje financiero recientemente obtenido para financiar acciones concretas de apoyo a asalariados, jubilados y desempleados; a deudores, a consumidores, a usuarios de servicios básicos, a causantes, a inquilinos, a estudiantes sin recursos. A fin de cuentas, las reservas monetarias del país, así como los préstamos contratados con gobiernos y organismos financieros internacionales, son dinero de la sociedad, no de los grandes empresarios ni de los funcionarios.

Convocatoria del Poder Popular

LA COORDINACION NACIONAL DEL PODER POPULAR CONVOCA AL “1er. Taller Continental de la Teoría y Práctica del Poder Popular”

TEMARIO

1. La situación económica y política en América Latina en el marco de la crisis capitalista mundial.
2. La concepción del Poder Popular.
3. Experiencias de construcción del Poder Popular.
4. Formas de coordinación continental del poder popular.

Email: tallercontipp@gmail.com, pagina web: www.tallercontinentalpp.wordpress.com Teléfonos: 5534049252; 5517800827; 5527078446; 5527369801.

BAJAR LA CONVOCATORIA EN WORD: convocatoria-taller-conti-pp-actual1