miércoles, noviembre 21, 2012

Israel, Estado terrorista


Octavo día de ofensiva militar israelí eleva a 141 la cifra de fallecidos

El embajador palestino ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Riyad Mansour, denunció este miércoles que la cifra de fallecidos, a causa de la ofensiva aérea israelí sobre la sitiada Franja de Gaza, se incrementó a 141 personas, además de al menos 950 heridos.

El diplomático realizó el anunció a través de una carta enviada al Consejo de Seguridad de la ONU, en la cual también instó a los 15 países miembros a “condenar la operación israelí denominada Pilar de Defensa”, que durante los últimos siete días ha sembrado el pánico en la población palestina que habita en Gaza.

Mansour señaló en la misiva que “el Consejo de Seguridad debe asumir sus responsabilidades autónomas (dentro la ONU) y actuar para detener esta embestida contra el pueblo palestino".

En el texto, el funcionario palestino lamentó la existencia "muchos niños" entre las víctimas, así como también la gran mayoría son civiles, aún cuando Israel alega que sus ataques son selectivos contra objetivos militares.

Mientras esta carta era enviada, intensificó sus ataques por octavo día consecutivo, a pesar de las peticiones de tregua y cese al fuego elevadas por el presidente egipcio, Mohamed Morsi, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, el Gobierno de Rusia, la Liga Árabe y la comunidad internacional en general.

En ese sentido, el jefe del Estado Mayor de Israel, teniente general Benny Gantz, expresó este miércoles que “Tel Aviv continuará sus ataques contra Gaza, a pesar de las conversaciones que actualmente se desarrollan para lograr establecer una tregua.

Dentro de la violenta ofensiva militar israelí emprendida este miércoles, destacan los ataques aéreos dirigidos al campo de refugiados de Nuseirat, en Jabaliya (norte), en los que al menos un palestino perdió la vida, siendo la víctima número 141.

El Consejo de Seguridad se reunió este martes, a petición de la Liga Árabe, para analizar la solicitud de una sesión especial sobre la crisis en Gaza.

Durante el encuentro, Estados Unidos se opuso a una declaración de condena contra Israel, por considerarla "contraproducente" y argumentar que "no aportaría ninguna contribución a los esfuerzos diplomáticos en curso".

Finalmente, los 15 miembros del Consejo aprobaron celebrar una reunión pública este miércoles a las 20H00 GMT.

Más leña al fuego

Román Munguía Huato
Rebelión

Finalmente la farsa del tinglado parlamentario sobre la nueva Ley Federal del Trabajo (LFT) aconteció como debía acontecer, es decir, de manera grotesca. Dejemos de lado las “Roqueseñales” y las caritas sonrientes de festejo de diputados y senadores, “representantes populares” que en realidad representan, sin mascaras, los intereses empresariales, especialmente aquellos de los grandes empresarios de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX). Es esta Confederación la que en verdad está de plácemes echando las campanas al vuelo por la aprobación de una legislación que les permitirá, hasta donde sea posible, una mayor explotación de los trabajadores con base a los cambios sobre las condiciones de trabajo de los asalariados al introducir la flexibilidad, los pagos por hora, la inestabilidad en el empleo y la facilidad en los despidos, entre otros.

Hay quienes se congratulan a sí mismos, como es el caso de uno que otro analista disfrazado con ropaje democrático, por haber tenido un gobierno derechista y confesional al hacer de este sexenio terminal “un gran avance democrático”. Apologías mercenarias a Calderón, al igual que hace décadas algunos lo hicieron abyectamente con Díaz Ordaz o con Salinas de Gortari.

El Senado turnó al Ejecutivo una reforma laboral incompleta, pues aquellos artículos que supuestamente protegerían al trabajador y serían un avance democrático relativo a la elección de los dirigentes sindicales y a la rendición de cuentas financieras no fueron incluidos en el documento que Calderón Hinojosa promulgará “fast track”.

Todo fue una ópera bufa bien montada por los histriones políticos, digna de una escenografía farsesca. El guión ya estaba escrito en lo oscurito cuando se reunieron Calderón Hinojosa y Peña Nieto. Un acuerdo de terciopelo: la legislación que viene a resguardar el nuevo trato despótico en el mundo laboral nacional. La alianza pripanista continua incólume desde muchos años. PRI y PAN impusieron su mayoría y aprobaron el nuevo marco jurídico ominoso en que ambas cámaras estuvieron de acuerdo fuera enviado para su promulgación. El papel del PRD fue patético al haber confiado en una alianza con el PAN. Un diputado de ese partido lamentó que los diputados de Acción Nacional no hayan cumplido su palabra. "Nos dimos cuenta que el coordinador del PRI (Manlio Fabio Beltrones) pastorea un rebaño que va más allá de su bancada". En otras palabras, los perredistas ingenuamente jugando como niños chamaqueados a quienes les dieron “atole con el dedo”. Pero ¿qué se puede esperar de un partido comparsa sistémico?

La mayoría de diputados y senadores hablan de una “un gran logro” y de una decisión “histórica”. Sin duda, pasaran a la historia como una “troupe” de actores muy bien pagados por su comedia política. El PAN, a través de Raúl Gracia, declaró que el país está “ante un gran logro” y el PRI en voz de Raúl Cervantes, descalificó las críticas de la oposición “de derecha y de izquierda”. La senadora de Nueva Alianza, Mónica Arriola, hija de Elba Esther Gordillo, votó a favor de esa reforma, que, dijo, es histórica. La commedia è finita después de 71 días de aparente trabajo y discusiones. Uno se pregunta, ¿Para qué sirve el Senado si sus propuestas fueron echadas al bote de la basura por los diputados? ¿Para qué tanta danza de ires y venires –la reforma pasó dos veces por ambas cámaras– si a final de cuentas son los diputados quienes tienen la “decisión última”?

El nuevo gobierno de Peña Nieto de entrada quiere dejar muy claro su posición de franco compromiso servil con la oligarquía local y extranjera, beneficiadas por la nueva legislación y las reformas por venir. Pero mientras había festejo en el Senado y con los diputados, Calderón Hinojosa cuando recibía un premio en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), más de 200 jóvenes manifestaron su rechazo a tal reconocimiento. El premio “Carrera al Universo” se le otorgaba por su destacada trayectoria y aportaciones al desarrollo económico. Todo podría pasar como un mal chiste de farándula o de cantina, pero cuando la realidad es de una absoluta crisis económica, social y política, el drama nacional no da para este tipo de cinismos: "¡Genocida!", "Ningún triunfo se legitima en la violencia de 60 mil muertos", "Itamita consciente no celebra la muerte", dicen algunos de los cartelones que portaban los estudiantes, quienes colocaron un altar con veladoras y símbolos en homenaje a los más de 60 mil muertos por la violencia, impunidad e injusticia que marcaron este sexenio, y en el que recuerdan hechos como el incendio en la Guardería ABC, que acabó con la vida de 49 bebés.

A estos muertos habría que agregar las decenas de muertes de trabajadores, especialmente de los mineros. Muertes cuyos causas tienen que ver con la negligencia criminal de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), la cual de ahora en adelante se hará más de la vista gorda con el incremento de “accidentes laborales” al entrar en vigencia la nueva LFT. El capital seguirá chorreando “sangre y lodo” en el escenario de un capitalismo salvaje donde el trabajador es totalmente prescindible fuera del proceso de producción inmediato.

Ricardo Flores Magón, a 90 años de su muerte

Gerardo Peláez Ramos
Rebelión

El 21 de noviembre de 2012 se cumplen 90 años de la muerte de uno de los pensadores y organizadores del movimiento obrero y la izquierda mexicanos: Ricardo Flores Magón. Con este motivo, puede ser que sea de cierta utilidad hacer un breve recuento de quien elaboró en gran parte el programa constructivo de la Revolución mexicana, que quedó plasmado en la Constitución de 1917 y en las realizaciones que van del caudillismo revolucionario al periodo de reformas estructurales entre 1920 y 1940: el Programa y Manifiesto del Partido Liberal Mexicano, del 1 de julio de 1906. Con esta propuesta programática, Ricardo Flores Magón y sus camaradas dotaron de objetivos y tareas a la Revolución mexicana para los cuales México y sus clases progresivas estaban maduros. De esta manera, no fueron sólo Francisco I. Madero y Venustiano Carranza quienes elaborarían el programa constructivo de la Revolución mexicana, sino asimismo el ala plebeya, campesina y jacobina que encabezaban Ricardo Flores Magón, Emiliano Zapata y los nacional-revolucionarios.

Ricardo Flores Magón, independientemente de que el régimen posrevolucionario lo considerara un “precursor” de la Revolución mexicana, para el movimiento obrero, campesino y popular de nuestro país es uno de sus héroes predilectos. Esta conclusión se desprende de los siguientes hechos: la reproducción de sus textos por sindicatos, secciones sindicales, organizaciones campesinas, estudiantiles y populares, editoriales comerciales, universidades y escuelas; la denominación con su nombre de auditorios, grupos de obreros, campesinos, colonos (pobladores), estudiantes e intelectuales, corrientes político-sindicales, ejidos, coaliciones de taxistas y otras asociaciones de diverso tipo. Ricardo es un verdadero héroe popular y nacional.

La izquierda mexicana, tanto la electoral como la social y extraparlamentaria, reconoce en Ricardo Flores Magón a uno de sus personajes principales, aunque la comprensión de su rol histórico es dispareja y contradictoria. Así, hay quienes lo caracterizan como “anarcosindicalista”, “demócrata revolucionario”, “influido por el anarquismo” y otras definiciones imprecisas. Para mejor ubicarlo es posible que facilite la tarea el análisis de su pensamiento y acción que hace el Ensayo sobre un proletariado sin cabeza, de José Revueltas. De este libro, entonces, es útil transcribir amplios párrafos sobre el destacado anarcocomunista oaxaqueño.

Leer más...