domingo, julio 31, 2011

En defensa de Wirikuta

El fraude de la Isla Holbox


http://youtu.be/H-CvH5FjnX8


http://youtu.be/NcLk38_zjno

Torpe

2012: ¿Elecciones o golpe de Estado?

A casi un año –julio de 2012– para las elecciones presidenciales, “lo que tenemos ante nosotros no es la alborada del estío, sino una noche polar de una dureza y una oscuridad heladas, cualesquiera que sean los grupos que ahora triunfen” (párrafo casi al final de un brillantísimo ensayo de Max Weberqueal estudiarlo, forma un conocimiento de la política y del político como en ninguna otra parte).

Con esto vislumbro, no el futuro (que no tengo una bola de cristal), pero sí el más inmediato presente donde el país, con su sociedad (su pueblo) y Estado van al garete sin gobiernos en municipios ni estados y, sobre todo, que el timón de la nave estatal que nos lleva a bordo está en manos, sin duda alguna, del peor expresidente del montón que ha padecido la Nación. Realmente nos hundimos en la crisis social del dramático empobrecimiento; la dificultad económica del brutal desempleo, la baja del consumo,el alza de precios, crisis política con partidos descreditados ysin mujeres y hombres (adultos, jóvenes, etcétera), capaces de entrar al relevo generacional o cuando menos no están en la escena dando la cara.

Los panistas resultaron ladrones, ineficaces administrativamente y tontos políticamente. Foxistas y calderonistas han sido demasiado mediocres (bravucones como Lozano Alarcón; mosquitas muertas, como Vázquez Mota; servilmente opacos rayando en la imbecilidad, como Ernesto Cordero; sin nada en la cabeza como Creel; temerarios y vanidosos, como Molinar, etcétera). Los perredistas, con un chucho primero (Ortega), y otro chucho (Zambrano) ahora en la dirigencia, absortos en la corrupción y la traición, haciendo a un lado a su única carta (ya no con otros casi 15 millones de votos, pues las oportunidades se dan una vez, y ante el fraude de Calderón no había más que obligar a nuevas elecciones, estratégicamente viables, y otro gallo nos cantaría).

Mientras los priístas (como Obregón que desde Huatabampo vio la Presidencia), ante lo que parece el cumplimiento de la frase aquella “en la historia siempre hay un elemento de sorpresa” (Vladimir Lenin), y ahora sí por votos conquistar lo que obtuvieron por herencia de Alemán a Zedillo, están perdiendo de vista a dónde apunta la brújula, para dizque entregar la candidatura al “Luis Miguel de la política”, el galán Peña Nieto… y sus 500 fans contratadas para gritarle: “¡papacito!”.

La nación sobrevive una de sus peores crisis, porque los del Partido Acción Nacional (PAN) en mala hora recibieron, pírricamente con Fox y sobradamente dudosa, la victoria electoral, demostrando su incapacidad. Y otra vez con juicios de Weber, los panistas eran un grupo económica y políticamente en decadencia; ya que en sus mejores años de oposición gastaron lo mejor que tuvieron. Dejando sólo a un Fox oportunista y un Calderón, al que Carlos Castillo, último ideólogo del PAN, en memorable carta filtrada a la información, le colgó la sentencia de que perdió el gobierno y perdió el partido. Pues bien, además los panistas “no estaban políticamente maduros para la conducción del Estado”.

Y llevaron al país al desastre actual. Ya que no pudieron resolver los problemas que dejaron en el camino, sobre todo, Salinas y Zedillo, ni los que surgieron durante la llamada “década perdida” (2000-2010). En cambio, andan por las calles los soldados y más lo harán cuando se apruebe la ley reglamentaria del artículo 29 constitucional, para suspender garantías y derechos que nos llevará al golpe militar, al golpe de Estado, con todo lo queimplica para la elemental democracia que tenemos.

Incluso Calderón puede quedarse en el cargo (con el beneplácito de Barack Obama y los intereses empresariales y banqueros de aquí y de allá). O puede ser el galardonado García Luna, el sucesor. O Saynes, el de Marina. O Galván, el de la Secretaría de la Defensa Nacional. E, insisto: Calderón mismo, que sabe que el PAN no ganará las elecciones presidenciales. Y no quiere entregarle el poder central del deteriorado sistema-régimen al Partido Revolucionario Institucional (PRI) ni al Partido de la Revolución Democrática (PRD), aún con sus complicidades disfrazadas de alianzas y coaliciones (que le metió en la cabeza Manuel Camacho, el exteórico de Salinas, que ha pasado del centrismo a la ultraderecha para vengarse del PRI).

Estamos, pues, ante una alternativa: 2012: ¿Elecciones o golpe de Estado? Las condiciones de posibilidad, el caldo de cultivo: la militarización del país con la avanzada policiaca de García Luna (tenebroso calderonista dispuesto a todo por su jefe); la desesperación nacional por restablecer el orden y la paz pública; la angustia por parar, a cualquier precio, el baño de sangre nacional; el desempleo, la pobreza y que las instituciones han sido rebasadas por las demandas y el narcotráfico (“narcoinsurgencia”, calificaron los de Washington).Aunado a que las generaciones jóvenes no consiguen lugar en los centros de estudios superiores y después, no encuentran trabajo, todo eso y el perverso manejo del poder presidencial, apuntan en dirección al golpismo, con o sin uniforme.

El Congreso de la Unión, salvo el PAN, no aprobaría la suspensión de las elecciones, con sustento en la casi aprobación de la Ley de Seguridad Nacional que reglamentaría el artículo 29 constitucional. Esto significaría darle a Calderón facultades extraordinarias quien, entonces, puede suspender “en todo el país” las garantías y derechos de los mexicanos. Es posible, políticamente, la reencarnación de Victoriano Huerta. La nación está desprevenida. Entretenida en tratar de resolver sus problemas inmediatos, y creyendo que con protestas callejeras, algo así como ejercer a mediar la democracia directa, puede presionar a una democracia indirecta o representativa que con el PAN ha dejado de funcionar. El Golpe de Estado asoma la cabeza.

*Periodista

Fuente: Contralínea 244 / 31 de julio de 2011

PGR omite investigar lasmuertes de la “guerra”

La purga al interior de la PGR no ha sido suficiente para que su titular, Marisela Morales, corrija una de las negligencias que más preocupa al presidente Calderón Hinojosa: investigar cada uno de los más de 40 mil asesinatos de civiles cometidos en el marco de la “guerra” contra el narcotráfico. En este sexenio, sólo se han abierto 1 mil 778 averiguaciones previas, acepta la Procuraduría. La pifia no sólo le habría costado el puesto a Chávez Chávez, sino que podría derivar en el futuro fincamiento de responsabilidades penales contra él y el propio titular del Poder Ejecutivo. Los delitos del crimen organizado se encontrarían en la misma situación: sólo hay 6 mil 196 indagatorias por delincuencia organizada.

Isabel Argüello

Con la renuncia de Arturo Chávez Chávez al cargo de procurador General de la República, a fines de marzo pasado, se destapó una de las más graves negligencias de esta administración, relacionada con la “guerra” contra el narcotráfico. En los más de cuatro años y medio, el abogado de la nación ha abierto solamente el 4.4 por ciento de las investigaciones que le manda la ConstituciónPolítica de los Estados Unidos Mexicanospor cada uno de los más de 40 mil civiles ejecutados.

A cuatro meses de su nombramientocomo procuradora, Marisela Morales Ibáñez aún no habría corregido esta situación, revelan informes proporcionados a Contralínea por la dependencia. Ello, a pesar de que el presidente Felipe Calderón Hinojosa le habría encomendado hacer todos los esfuerzos para remediar la pifia en el menor tiempo posible.

Por este hecho, a los exprocuradores Eduardo Medina-Mora, Chávez Chávez, a la procuradora Morales Ibáñez y al presidente de la República se les podrían fincar responsabilidades, como lo informó Contralínea (edición 227, 3 de abril de 2011).

De acuerdo con la Constitución y el Código Federal de Procedimientos Penales, ninguno de los asesinatos puede dejar de investigarse, y para ello debe existir cooperación entre las autoridades locales y la Procuraduría General de la República (PGR), como Ministerio Público federal.

Por ello, entre las anomalías que actualmente investiga la Visitaduría General de la PGR se encuentra la “irregular integración de averiguaciones previas”. De acuerdo con elvisitador César Alejandro Chávez Flores, se revisa la actuación de unos 700 servidores públicos de la institución, no sólo por esos casos, también por la presumible comisión de fraude, robo, abuso de autoridad, cohecho, peculado y práctica indebida de cateos. Otros 400 ya fueron cesados, aunque no se ha aclarado cuántos de ellos tendrían responsabilidad por no abrir las investigaciones de los ejecutados.

Y es que de los más de 40 mil civiles asesinados en lo que va de la “guerra” contra el narcotráfico,la PGR sólo ha abierto 1 mil 778 averiguaciones previas, indicala respuesta a la solicitud de información 0001700045511 hecha por este semanario. Se trata, apenas, del 4.4 por ciento del total.

Bajo la tipificacación del delito de homicidio, previsto en el Código Penal Federal,la institución informaque en diciembre de 2006 se iniciaron 19 investigaciones; en 2007, 322; en 2008, 376; en 2009, 436; en 2010, 496; y en enero y febrero de 2011, 79.

En contraste, en la Base de datos de estados y municipios sobre homicidios presuntamente relacionados con la delincuencia organizada del gobierno federal,se indicaque en diciembre de 2006fueron asesinadas 62 personas; en 2007, 2 mil 826; 2008, 6 mil 837; 2009, 9 mil 614; y en 2010, 15 mil 273.

Al responder un punto de acuerdo de la Cámara de Diputados –en el cual se le exhortó a informar la situación de los, entonces, más de 34 mil asesinatos de civiles–, la PGR argumentó que el homicidio es un delito del fuero común y que sólo atrae los casos que, debido a sus características, representan un problema para la integración por parte de las procuradurías generales de Justicia de los estados o a petición expresa de éstas. Agregó que la excepción son los casos en los que están involucrados servidores públicos o empleados federales, indica el boletín 3574.

En enero pasado, la senadora priísta María Elena Orantes López aseguró que la mayor parte de las víctimas (migrantes, transmigrantes, niños, jóvenes y mujeres) han muerto en fuego cruzado por integrantes del crimen organizado y las fuerzas armadas. “Más del 95 por ciento de esas muertes no se han investigado y sólo el 1 por ciento de los crímenes llega a ser procesado penalmente ante un juzgado”, indicó en la iniciativa con punto de acuerdo para exhortar al gobierno a rendir un informe puntual sobre las investigaciones.


Responsabilidades incumplidas

“La Procuraduría tenía el deber de abrir los expedientes de las casi 35 mil muertes[ahora más de 40 mil], si no lo ha hecho evidentemente hay responsabilidad legal. Si la omisión fue de los agentes, alcanza a quien es titular de la PGR porque éste tiene la obligación y la competencia legal de proceder. En el caso delexprocurador [Arturo Chávez Chávez], no hace falta la declaración de procedencia que se establece en el artículo 111 constitucional porque ya no tiene fuero, por lo cual se podría iniciar un juicio político”, explica el doctor Daniel Márquez Gómez, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la Universidad Nacional Autónoma de México.

Un juicio político, así como sanciones administrativas y legales, se inicia cuando los servidores públicos incurren en actos u omisiones que afectan el interés público (artículo 109 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos). Márquez Gómez expone que cualquier ciudadano o funcionario con “evidencia” de la falta de indagaciones en torno a los homicidios en esta “guerra”,podría acudir ante los diputados y senadores para que éstos determinen la destitución o inhabilitación de quienes resulten responsables.

“Se ha venido discutiendo la responsabilidad que tiene el presidente de la República, sobre todo lo que tiene que ver con la muerte de los 35 mil civiles que ellos han llamado víctimas colaterales”, indica Dolores de los Ángeles Nazares Jerónimo, secretaria de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados. Aunque, aclara que no existe un marco jurídico para que Felipe Calderón Hinojosa, a corto plazo, sea objeto de un juicio político, pues él se respalda en el artículo 89 de la Constitución que le permite disponer de las Fuerzas Armadas en caso de que esté en peligro la seguridad nacional.

El panista Felipe González González, presidente de la Comisión de Seguridad Pública del Senado de la República, considera que delitos como el narcotráfico y el secuestro se tienen que perseguir con toda la fuerza del Estado. “La lucha no es porque ya no trafiquen, es porque no acaben con nuestra juventud. ¿Cómo decimos si ha fallado o ha sido buena la estrategia del presidente Calderón si no le han ayudado a ponerla en práctica? La estrategia del Estado mexicano, porque son muchas personas las involucradas, no se ha puesto en práctica”.

En cambio, el senador priísta Ricardo Fidel Pacheco Rodríguez, secretario de la Comisión de Justicia, asegura que el número de muertes se incrementa día a día y el crimen organizado no disminuye. “Nuestro grupo parlamentario ha venido diciendo, desde que comenzó esta lucha, que hay que enfrentar de manera dura y con la fuerza del Estado al crimen organizado; de eso no nos queda duda. Sin embargo, la estrategia no da los resultados que la población necesita y que el gobierno prometía”.

A julio de 2011, los crímenes mortales de la “guerra” contra las drogas rebasan los 40 mil. Según la Base de datos, de diciembre de 2006 a diciembre de 2010, hubo 30 mil 913 ejecuciones, 3 mil 153 fallecidos por enfrentamientos y 546 por agresiones. Los estados con mayor concentración de homicidios son Chihuahua, con 10 mil 135; Sinaloa, 4 mil 387; Guerrero, 2 mil 739; Baja California, 2 mil 19; Durango, 1 mil 892; Michoacán, 1 mil 751; Estado de México, 1 mil 538; Tamaulipas, 1 mil 457; Sonora, 1 mil 258; y Jalisco, 1 mil 73.

“Los homicidios no se dan por la presencia del gobierno federal. La presencia del gobierno federal se da por los homicidios”, dijo Felipe Calderón en su segunda intervención en los “Diálogos por la seguridad, hacia una política del Estado”, el pasado 12 de enero de 2011. Enfatizó en que el mayor número de las muertes en el país deriva de la alta conflictividad entre los criminales que se disputan un territorio.

La Constitución, el Código Federal de Procedimientos Penales y la Ley Orgánica de la PGR fundamentan cuáles son las actividades del Ministerio Público en la averiguación previa ?recibir denuncias o querellas; investigar; solicitar al órgano jurisdiccional las órdenes de cateo, arraigo u otras medidas cautelares; y determinar incompetencia y “remitir” a la autoridad correspondiente?.

La Procuraduría tiene la facultad de “atracción” con la cual daría seguimiento a procesos iniciados en los estados, pero continúa argumentando que el homicidio es competencia del fuero común, salvo en los casos en que se encuentre involucrado un servidor público o empleado federal. No obstante, comunica que está trabajando de forma coordinada y permanente con las procuradurías estatales y con la Procuraduría General de Justicia Militar (boletín 3574 de la Cámara de Diputados).

“Los homicidios son del fuero común, entonces le tocarían a los ministerios locales. Aparte del procurador General de Justicia serían responsables todos los procuradores de justicia de las entidades. Ojalá que el nuevo gobernante en 2012 diera un giro, y una de las cosas fundamentales con las que se va a tener que enfrentar va a ser con estos saldos de la violencia”, comenta la diputada perredista Teresa del Carmen Incháustegui Romero, secretaria de la Comisión de Seguridad Pública.

Para Daniel Márquez no se ve a corto plazo una voluntad de rectificación, a pesar de que existe la necesidad de hacer un alto en esta “guerra”. “Las instituciones se cerraron a un sólo discurso. No se está dando en los posibles precandidatos para la Presidencia de la República el debate de qué hacemos con esta lucha. La única propuesta es reactiva: frente a la violencia, la violencia del Estado”.

En la sesión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, del pasado 30 de junio, Calderón indicó que se deben cambiar los “procesos” para reducir los delitos más comunes como robo, extorsión, secuestro y trata de personas. “También revisaremos la estrategia a fin de proteger a las víctimas, preservar la memoria de los fallecidos y reducir la impunidad”, agregó vía twitter.

Uno de los objetivos plasmados en el Acuerdo Nacional por la Seguridad, la Justicia y la Legalidad ?publicado en el Diario oficial de la federación el 25 de agosto de 2008 y firmado por el presidente, secretarios de Estado, gobernadores y presidentes municipales, medios de comunicación, organizaciones sociales y líderes religiosos? era fortalecer la capacidad institucional del Ministerio Público federal. La PGR se comprometió a formular el protocolo de actuación e investigación, inicio de averiguaciones previas y procedimientos judiciales para la obtención de sentencias condenatorias. Para ello, el lapso de ejecución era de seis meses; al presente no se ha cumplido.

Opacidad, la característica

El Instituto Federal de Acceso a la Información Públicasolicitó a la Procuraduría que proporcione información sobre el número de muertos y desaparecidos a causa de la “guerra” contra la delincuencia. Carlos Alberto Pérez Cuevas, Esthela Damián Peralta y Mario Di Costanzo (diputados del Partido Acción Nacional, de la Revolución Democrática y del Trabajo, respectivamente) coincidieron en que se estreguen los datos de acuerdo con la Ley de Transparencia.

El investigador Márquez comenta que la Secretaría de la Función Pública (SFP) debe abrir un expediente para analizar las irregularidades dentro de la PGR, concretamente la falta de averiguaciones. “No es un tema de agenda, es una competencia legal. Salvador Vega Casillas tiene una responsabilidad asignada en la Ley Federal de Responsabilidades Administrativas de los Servidores Públicos. Si ellos incumplen la ley, ¿ante quién los denunciamos? No es una cuestión política”.

Contralínea solicitó entrevista a la PGR y a la SFP. Rocío Cabrera, vocera de la Procuraduría, informa que la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada, y por ende su titular Patricia Bugarín Gutiérrez, no está ofreciendo declaraciones. Moisés Ciriaco Salvador, director de Análisis de Prensa y Publicidad, dice que la facultad de la Secretaría es “bastante” limitada y que por el momento no es tema al interior.


Delincuencia organizada, en la impunidad

La Procuraduría no sólo habría fallado en investigar los homicidios supuestamente vinculados con la “guerra” contra el narcotráfico; también, en la persecución de los delitos del crimen organizado, que sí son del fuero federal, revelan los informes entregados a este semanario por la dependencia.

De acuerdo con la respuesta a la solicitud 0001700045411, hay sólo 6 mil 196 averiguaciones previas por violaciones previstas en la Ley Federal Contra la Delincuencia Organizada (delitos contra la salud, delincuencia organizada, operación de recursos de procedencia ilícita, privación de la libertad y robo de vehículos, principalmente). En diciembre de 2006, 44 investigaciones; en 2007, 1 mil 217; en 2008, 1 mil 165; en 2009, 1 mil 505; en 2010, 1 mil 950; enero y febrero de 2011, 315.


La ley la imponen los reos

“Aquí la ley la hacemos nosotros…”

Mientras en las calles de Ciudad Juárez las policías Federal y Estatal tienen desencuentros, fricciones y choques con la Municipal, el interior del Cereso local es un campo de batalla de dos cárteles. El lunes 25 fue escenario de una ejecución masiva disfrazada de motín, luego de la cual hubo un homicidio más, el del presunto líder del ataque, quien en junio pasado había dado una prolija entrevista a Proceso. En ella El Nico habló de su pandilla, Los Artistas Asesinos, y de cómo tienen una guerra a muerte con Los Aztecas para, según dijo, limpiar la ciudad con el apoyo del cártel de Sinaloa.

El pasillo de los "artistas" en el Cereso de Juárez.

CIUDAD JUÁREZ, CHIH. –Dentro del penal, ¿quiénes están más armados?
–Aquí todo mundo mete armas…
Habla Nicolás Frías Salas, El Nico, preso en el Centro de Readaptación Social (Cereso) de este municipio. Aquí él era líder de Los Artistas Asesinos (AA) y fue el único de esa pandilla –que opera bajo las órdenes del cártel de Sinaloa– que murió la noche del lunes 25 poco después de un ataque en el que su grupo asesinó a 16 integrantes de Los Aztecas.
Con motivo de una edición especial que se prepara sobre Ciudad Juárez, El Nico había dado una amplia entrevista a Proceso el viernes 17 de junio…

Para ingresar al área de Los AA es necesario pasar por dos corredores y tres puertas custodiadas cada una por un celador. Al final está un interno que conduce a la reportera al lugar de la entrevista. Para llegar avanza por un pasillo entre dos dormitorios. El lugar es sórdido, no apesta pero el olor acumulado de muchos cuerpos hacinados permea el ambiente; es oscuro y pequeño para los cerca de 300 reclusos. De los barrotes de las celdas y de los barandales cuelga ropa. Los muros derruidos ayudan a deprimir el ambiente.
El guía pregunta el objetivo de la visita. Se le explica que se trata de conocer el área, ver cómo viven los reos y recabar sus testimonios, sus historias.
La entrevista tiene lugar en el área de lavandería. Está limpia; la luz del sol da de lleno aquí. El Nico recibe a la reportera; está sonriente, tiene 35 años, camiseta blanca y el pelo muy corto. De cuerpo es “amarrado”, es decir, marcado por el ejercicio. En la lavandería hay dos presos. Ahí viven. El Nico les pide que salgan y ellos se retiran de inmediato.
–¿Algo de tomar? –ofrece sonriente cuando se da cuenta de que la reportera nota un refrigerador con el logo de Modelo hasta el tope de latas de cerveza, pero se interrumpe cuando ve que la grabadora ya está encendida. Al principio protesta, pero finalmente accede a que quede prendida.
“Pero no digan nada de eso, por favor”, pide señalando el refrigerador.
–No es un secreto, igual que las drogas –se le hace notar.
Acepta y ríe: “La sociedad no lo entiende… pero esto es necesario para tener un penal tranquilo y estable, para tener control de los internos”.
Y empieza a narrar la vida en el penal: “Algunos se levantan a las cinco o seis de la mañana, hacen ejercicio, arreglan su celda, limpian su sección. Se alistan para vigilar. Hay vigilancia las 24 horas, interna y externa. La interna consiste en que todos estamos listos”.
–¿Qué temen?
–Que ataquen Los Aztecas –responde e inmediatamente corrige–: ¿Miedo? ¿Temor? No. Pero sí es lo que más esperamos y estamos preparados. Antes esta área era de las más pequeñas, éramos como 50; aun así hicimos correr a 400 bueyes (aztecas). Ahora que somos cerca de 300, los hacemos correr porque somos los más perrones.
–¿Lo que pasa en la calle es reflejo de lo que pasa dentro de un penal?
–No. Hace un año que no hay ningún motín, cuando fuimos reconocidos mundialmente por ser el penal más violento y sangriento en 2005, 2006, 2007 y 2008. En el de 2009 no hubo muertos. El último lo realizamos nosotros; fue cuando sacamos a Los Aztecas de esta área. Eso fue en 2008. Luego dividieron el penal con muros.
–¿Tienen una alianza con Los Mexicles?
–Una alianza no. Sólo que el objetivo que perseguimos es el mismo.
–¿Cuándo nacen Los AA?
–No sé. Los que iniciaron este movimiento ya están muertos. A diferencia de la ganga (pandilla) de Los Aztecas, que es muy grande, nosotros somos muy pequeños. Es más fácil ver una multitud que a un grupito. A esos bueyes por donde caminen los miras.
–¿Cuál es la esencia de AA?
–¿Que por qué peleamos? Por las injusticias, los abusos. Nosotros llegamos cuando ellos (Los Aztecas) tenían el control del penal. A todos nos quitaban el dinero, a mí me golpearon horrible… vivo de milagro. Yo conocí a Los Aztecas en el penal. Llevo aquí seis años y medio, ingresé por homicidio de dos personas y tentativa de homicidio contra otra. No me pregunte cómo murieron. Lo que le puedo decir es que policías municipales intentaron quitarme el dinero y me agarré a balazos con ellos.
Suena su celular.
–¡Hable! –ordena a su interlocutor.
Mientras contesta el teléfono la reportera lo apremia para que reanude la entrevista, porque es poco el tiempo que se le concedió.
–¿Le dijeron que 15 minutos…? No se preocupe, el tiempo lo decidimos nosotros –responde y corta la llamada.
“Desde el momento en que uno llega al penal, si quiere estar con nosotros está hasta donde quiere y hasta cuando quiere. Nosotros necesitamos que nos apoye aquí. Si el día de mañana sale y quiere hacer su vida normal, tener su familia… adelante. Si vuelve a delinquir está faltando a su palabra… y el día de mañana va a aparecer por ahí tirado.”
–¿Salen y continúan con su pandilla allá afuera?
–No. Allá no somos nada; frente a ellos somos pocos.
–Entonces, ¿por qué se habla de asesinatos que se cometen en busca de Los Doble A, como el caso de Villas de Salvárcar?
–Existe un barrio afuera que se llama AA, pero nada que ver con nosotros. Eso es algo que ellos ignoran.
Suena nuevamente el teléfono. Al colgar, a manera de disculpa, aclara que se trata de su novia, de 15 años, que acude a visitarlo. No le preocupa la grabadora encendida.
Reanuda: “El que sale aquí tiene que comprometerse a portarse bien y tiene que cumplirlo, porque si reincide y vuelve a caer aquí, lo castigamos. ¿Cómo? Lo recluimos en un cuarto sin visitas, sin nada…
“Si es un asesinato tenemos que ver las causas, el motivo por el que se cometió. Pero aquí no puede llegar por extorsión, secuestro, abusos de ese tipo. Nosotros no secuestramos ni extorsionamos ni hacemos carjacking (robo de auto con violencia). De dos años a la fecha no ha caído ningún Doble A por esos delitos. Ningún delito del fuero común, porque está prohibido. El que entre nosotros nos estemos matando, a la gente (ciudadanos) le vale madre; lo que le está afectando es que le roben su vehículo, que asalten su tienda, secuestren y extorsionen. Lo que estamos haciendo no nos corresponde a nosotros, es trabajo de la policía.”
–¿Una limpia?
–Sí. La policía lo que tiene que hacer es arrestar a esos delincuentes. Lo que hacemos es quitarlos de en medio. Nosotros trabajamos derecho.
–¿Matando?
–Como sea. El orden de los factores no altera el producto, el fin justifica los medios. Nosotros intencionalmente, aunque la sociedad no lo vea, estamos ayudando a quitar la escoria. Como ordenan los señores.
–¿El cártel de Sinaloa?
–Sí, el cártel de Sinaloa.
–¿En qué momento empieza la descomposición, las extorsiones, los secuestros?
–Empezaron aquellos (Los Aztecas). Nosotros los combatimos desde 2007.
–¿Cómo empiezan a pelear Los Doble A para los de Sinaloa? ¿Los llaman? ¿Les dieron una consigna?
–Los Doble A solos empezaron a pelear contra ellos. Doble A contra Los Aztecas. Cuando la gente (cártel de Sinaloa) que andaba peleando miró que AA combatía sus marranadas, empezaron a darnos su apoyo.
–¿Cuánta gente conforma la pandilla en Juárez?
–No sé. Es la célula más pequeña, sí, pero también la más dañina. Es que cuando uno se mete tiene que ser el más cabrón, el más sanguinario; si no, no tiene caso estar ahí, porque estamos peleando contra una banda de miles de gentes, cuando la nuestra nada más son cientos. Si uno solo no se considera como cinco personas, mejor no se meta.
Otra llamada de su joven novia interrumpe la entrevista: “Ya voy”, responde al tiempo que se pone de pie.
Al despedirse comenta que acaba de ver la película Salvando al soldado Pérez. Lo compara con Guzmán Loera. “Es magnífica”, dice riendo.
La reportera interrumpe su salida:
–Espere, profundice en cómo empiezan a limpiar la zona…
Aclara: “¡No!, ¿cuál zona? ¡El estado! Vea los periódicos, las cifras”.
–¿Su versión? –se le insiste.
–Vamos ganando. De los 10 mil muertos en Juárez, más de la mitad son de ellos.
–Pero el cártel de Juárez se queja de que en esta limpia el Ejército y la Policía Federal ayudan al de Sinaloa…
–Si estuvieran ayudando no caeríamos nosotros presos.
–Tienen que caer algunos…
–No. Si a mí me dicen: ‘Tienes que caer’, ¡caigo madres! Agárrenme. Los rumores, lo que escucha la gente son mentiras. Aquí no nos ayuda ninguna ley. La ley la hacemos nosotros. Aquí no se ve al Ejército ni nada. Si tengo que hacer un trabajo y se me atraviesa un militar o un policía, lo tiro también al buey. Somos autosuficientes.
–¿Dentro del penal quienes están más armados?
–Aquí todo mundo mete armas… 
–contesta prácticamente desde la puerta.
Mes y medio después de la entrevista, El Nico apareció muerto en su propia sección, la de Los AA.

Ejecución

Versiones obtenidas por Proceso indican que el ataque después del cual murió El Nico no fue producto de un intento de fuga ni de una riña entre bandas rivales, sino una ejecución. Dos fuentes consultadas que solicitaron el anonimato se basan en primera instancia en el video de los hechos, transmitido por la Fiscalía General del Estado.
El video muestra cómo dos encapuchados de Los AA, con chamarra blanca y pantalón oscuro, conducen a uno de los custodios hasta la puerta del área de Prisión Preventiva, donde había 16 personas relacionadas con Los Aztecas, entre ellas una mujer. Un segundo celador permanece recargado en algo que parece un mostrador.
Ahí uno de los internos se dirige a un tercer custodio que no es captado por la cámara. Al regresar le entrega unas llaves a su compañero, quien abre la puerta de Prisión Preventiva. Por otra puerta su cómplice facilita la entrada de cuatro encapuchados más que portan armas largas. En ese momento los tres custodios abandonan el lugar.
Al salir los celadores uno de los encapuchados corre a asegurar la puerta. Al abrir Prisión Preventiva los encapuchados entran y empiezan a disparar. El video no alcanza el interior del área atacada, pero sí muestra que los encapuchados regresan unos instantes al pasillo y luego vuelven a ingresar disparando.
Internos consultados aseguran que después de la ejecución, los Doble A regresaron a su área. No intentaron ir a otra parte. Se habla de que tenían francotiradores como refuerzo, quienes –de acuerdo con las versiones oficiales– impidieron que entrara en acción el grupo antimotines del penal.
Horas después fue hallado el cuerpo sin vida de El Nico. No se ha precisado cómo murió ni quién lo asesinó.
Un reo entrevistado por Proceso afirma que la supuesta orgía –El Diario de Juárez habló de ella– tuvo lugar una noche antes de la matanza y que no fue precisamente una fiesta, sino una reunión convocada por Los AA para afinar los detalles de la matanza.
Al cierre de esta edición el fiscal de la Zona Norte, Jorge González Nicolás, sin dar nombres informó que dos de los agresores ya habían sido identificados, que al director del penal no se le ha imputado ningún delito y que dos de seis custodios que rindieron su declaración pueden resultar responsables.
González Nicolás insiste en que el móvil del supuesto motín fue un intento de fuga. Varios mexicles aprovecharon la confusión para introducirse a dos túneles que los habrían llevado al área administrativa del penal, la más cercana a la calle.
Agregó que se pudo determinar que en la matanza primero fueron fusilados 10 reos, luego tres y que otros cuatro probablemente murieron en el posterior fuego que intercambiaron los internos con los agentes federales. Dijo que hasta el momento no se ha determinado qué estaba haciendo la mujer que murió en esa área.

Complicidades

Por las grandes cantidades de droga que circulan ahí, al penal de Juárez se le conoce como “el picadero más grande” de Chihuahua. Durante la primera presidencia municipal de Héctor Murguía (2004-2007) ocurrieron en esa cárcel dos revueltas, dos choques entre Los Aztecas y Los Mexicles.
En la primera, el 17 de diciembre de 2005, murieron seis reos. En la segunda, el 20 de junio de 2007, hubo dos muertos. Dos meses después, el entonces director del reclusorio, Fernando Romero Magaña, ante las acusaciones de los custodios del penal de que recibía dinero de Los Aztecas les gritó: “¿Por qué no dicen que a ustedes también les dan?”. Molestos, los celadores lo insultaron y le lanzaron botellazos.
Como las disputas continuaron en el penal, en enero de 2008 el entonces alcalde José Reyes Ferriz mandó levantar bardas de más de 10 metros de alto para dividir a las bandas. De un lado quedaron las habitaciones 1, 2, 3 y 4, donde se concentró a Los Mexicles; del otro lado quedaron las habitaciones 5, 6, 7, 8, 9 y 10, donde están Los Aztecas.
Luego se redistribuyeron las habitaciones: la 11 y la 12 para reos de baja peligrosidad; la 13 para expolicías y exceladores acusados de proteger a Los Zetas; la 14 y la 15 para no imputados y los llamados “cristianos” (reos de diversos delitos que se agrupan en torno a sus creencias religiosas); la 16 y la 17 para La Doble A.
En el recorrido de Proceso por el penal, el 14 y el 17 de junio, se constató que Los Aztecas, Los Mexicles y los cristianos ocupan las áreas más grandes y Los AA la más pequeña.
Los recintos que alojan a las tres pandillas se caracterizan por sus altares: los tres honran a la Santa Muerte. En el penal hay 17 habitaciones, cada una con 38 dormitorios con cupo para entre seis y ocho reos cada uno. Todas tienen área de lavado, comedores, talleres, escuela y salas de billar.
En el área de Los Aztecas, a la que no se permitió el acceso a este semanario, hay una capilla dedicada a San Judas Tadeo, edificada por los mismos pandilleros.
Los AA administran dos pequeños terrenos. En uno tienen un chapoteadero, dos gallinas y un perro. Antes tenían un caballo, pero por falta de espacio lo cedieron a Los Mexicles.
Para llegar a la zona de Los Mexicles hay que pasar tres puertas custodiadas por celadores y por internos. Ahí cada habitación tiene grandes altares a la Virgen de Guadalupe y banderas de México. Administran un amplio terreno con cancha de futbol y una granja con el caballo que era de Los AA, conejos, gallinas y gallos de pelea. Su chapoteadero tiene una tortuga.
En los techos de las habitaciones de Los Mexicles son visibles las varillas de alambrón. Es fácil desprenderlas para fabricar las puntas que tan frecuentemente se decomisan en los penales.
El área de las mujeres es la más apartada. Ellas no están separadas sin importar si pertenecen o no a alguna pandilla. Ahí hay tres bebés de brazos que nacieron aquí. Cada viernes va un sacerdote a oficiar misa.
Otra zona es la destinada a los cristianos y una más a los no imputados. Son las secciones más tranquilas.
Este Centro de Readaptación Social es dirigido actualmente por el abogado Lucio Cuevas Sánchez, exsubinspector segundo de la Policía Federal (PF) con reconocimiento público de la DEA.
El Cereso tiene ahora casi 2 mil 355 internos. De ellos, unos mil 35 son aztecas, 300 de Los AA, 500 mexicles, 250 mujeres, 20 no imputados y 250 cristianos. El 9 de junio trasladaron a 275 internos a las Islas Marías.

Desencuentros policiacos

La matanza de reos en la cárcel evidenció los desencuentros de la PF y la Policía Estatal con la Municipal. En cartulinas y mantas las dos primeras han sido acusadas por el cártel de Juárez de proteger al de Sinaloa, mientras que la Policía Municipal, encabezada por Julián Leyzaola, es señalada por el de Sinaloa de apoyar a la mafia local.
Los desencuentros se sumaron desde enero de este año, cuando el alcalde Murguía acusó a un agente federal de asesinar a uno de sus escoltas, a pesar de que éste se identificó. La PF negó esta versión. En mayo de este año se suscitó un nuevo altercado entre escoltas del alcalde y federales.
El incidente más grave ocurrió el día de la ejecución en el penal. Leyzaola intentaba llegar al Cereso, pero la PF disparó contra su vehículo a pesar de que –según la versión del jefe de la Policía Municipal– iba escoltado por varias patrullas. Sin embargo, el Canal 56 de la televisión local transmitió un video que mostró cómo el vehículo de Leyzaola ignoraba el retén, iba con las luces apagadas.