sábado, junio 16, 2007

AMLO: la reforma fiscal sólo beneficiará a la IP

Los grandes corporativos pagan impuestos ínfimos
El gobierno incrementa precios, pero no salarios, señala

HIRAM MORENO

Diversas muestras de respaldo recibió Andrés Manuel López Obrador en su visita a varios municipios del istmo oaxaqueño Foto: Hiran Moreno

Barrio de la Soledad, Oax., 15 de junio. El "presidente legítimo" Andrés Manuel López Obrador afirmó que Felipe Calderón intenta aplicar una reforma fiscal que preserve los privilegios de aquellos empresarios que apoyaron su campaña, que concluyó con un "fraude electoral".

En su segundo día por la región del istmo, esta vez en la zona norte, López Obrador expuso que los contribuyentes cautivos, es decir, los profesionistas, comerciantes y pequeños y medianos empresarios, pagan entre 15 y 28 por ciento de impuesto sobre la renta (ISR).

En cambio, resaltó que Telmex paga por ese mismo concepto sólo 6 por ciento; Petróleos Mexicanos (Pemex) 2 por ciento; Coca-Cola una cifra idéntica; Bimbo, 1.5 por ciento, y Maseca un porcentaje semejante.

"Cuando escuchen que hablan de la reforma fiscal sólo piensen que lo que quieren es aumentar los impuestos, quieren apretar más a la mayoría de nuestro pueblo para mantener los privilegios fiscales de los potentados", expresó.

En ese contexto, explicó que el cambio social, económico y político del país debe darse desde abajo, con la participación de la gente, porque el "gobierno usurpador" sólo autoriza aumentos de precios a los artículos de primera necesidad.

"Subió la tortilla, la leche, el huevo, el pan, la carne, el pollo, el diesel, la gasolina y la luz, pero el salario de los trabajadores no ha aumentado, al contrario, en estos meses el poder de compra del salario ha disminuido", señaló.

Lamentó que el gobierno federal vaya a continuar aumentando los precios de productos básicos, y se pronunció por un nuevo modelo económico, "porque el neoliberalismo solamente ha hecho más pobres a los pobres y más ricos a los ricos".

Defensa de Pemex y CFE

En mítines que encabezó en los municipios de Santo Domingo y Santa María Petapa, recalcó que el cambio tiene que venir de abajo, "porque la clase política está podrida" y "de arriba para abajo nunca va a llegar".

El ex jefe de Gobierno de Distrito Federal insistió en mantener la defensa de la soberanía de Pemex y de la Comisión Federal de Electricidad, y en contra de las reformas a la Ley del ISSSTE, pero, además, en esta ocasión se manifestó también por incrementar los recursos públicos que se destinan a la educación y el campo.

Dijo que existen muchos estudiantes rechazados, "pero no porque sean burros, sino por falta de espacios en las universidades, debido a la ausencia de apoyos a la educación, que es donde debe destinar más recursos la Federación".

Respecto del tema del campo, López Obrador dijo que la desatención de los gobiernos hacia este sector obliga a 600 mil mexicanos a emigrar cada año, sobre todo a Estados Unidos. Así, denunció, México se ha convertido en una de las naciones que más personas expulsan de su territorio a escala mundial.

En el Barrio de la Soledad, expresó que los adultos mayores del país deben recibir una pensión alimentaria, como la que obtienen 400 mil ancianos en el Distrito Federal o en Chiapas, donde el gobernador Juan Sabines está aplicando dicho programa para apoyar a ese sector.

Dijo que los senadores y diputados del Frente Amplio Progresista aprobaron una partida de 6 mil 200 millones de pesos en el presupuesto federal para que se entreguen 500 pesos mensuales a los adultos mayores en poblaciones de menos de 2 mil 500 habitantes.

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