Jorge Lara Rivera
Incapaces para notar la viga en el ojo propio, están prestos a localizar cualquier paja en el ajeno ocular. Medran más que lucrativamente llenándose la boca de tanto hablar sobre 'ética', 'valores', 'decencia', 'honestidad' y, últimamente, 'heroísmo', conceptos que transcurren ajenos a sus vidas, como en otra galaxia, pero arrogándoselos convenientemente, como en exclusividad, sólo para, un poco luego, dar de bruces con su feble humanidad en el lodazal de sus contradicciones, imágenes vivas de la incongruencia.
Son los falsarios; esos moralistas de banqueta agrupados en los círculos de la derecha que pretende dirigir la vida personal de todo mundo con sus 'creencias' -más declarativas que practicadas.
Forman, ellos, una subespecie peculiar en la fauna política que pulula en los pasillos del poder y los mentideros del 'bisness' público. Y en el nadir de su descenso a la bajeza, a falta de razones inventan.
Qué otra cosa se puede decir de la diputada local Patricia Gamboa Wong, panista para más señas, quien se llenó la boca para decir que este fue un año perdido, de pobre trabajo de la Legislatura de la cual forma parte, sólo para quedar exhibida como habladora unas pocas horas después y, peor, pillada con los dedos en la puerta, en su propia acusación, ya que la Comisión que preside y por la que recibió emolumentos adicionales (considerados en el bono de aguinaldo) fue la que menos trabajó, hasta el punto de haber sesionado ¡sólo una vez en todo el año! De veras que como viven juzgan.
Allí está, para ejemplo, el cocodrilo vegetariano Alberto Cárdenas Jiménez, panista titular de la SAGARPA, con su repentino 'compromiso' con el campo mexicano. ¡Sí, cómo no!, precisamente él quien sigue como suya la ideología de un régimen que ha "desmantelado todo el sistema productivo (desapareciendo el Banrural, la Conasupo, a Fertimex, la Productora Nacional de Semillas, y a otras dependencias importantes y vitales para dar apoyos en insumos y comercialización, así como coberturas de seguros y financiamientos al campesinado)", según refirió Rubén Calderón Cecilio recientemente, fundado en la experiencia y en datos reportados por la revista 'Examen'.
Y es que si de años perdidos se trata, claridosos como suelen ser los hijos del campo, el presidente de la Asociación Ganadera Local de Sucilá, Wilmer Monforte Marfil, ha recordado el triste destino de los 3 millones 400 mil pesos destinados a Yucatán a principios del 2008 para la compra de vaquillas, los cuales terminaron por ser devueltos sin usar a esa Secretaría debido "a las inoperantes reglas de operación de la SAGARPA". Y no les ahorró a los panistas ni el pudor del olvido al recordar cómo, en la administración estatal anterior, se anunciara un proyecto lechero de 100 millones de pesos, asesorado por extranjeros, cuyo resultado es hoy un 'esqueleto' abandonado, un elefante blanco en Baca.
A su vez, Alberto Rosado Cáceres, de Tropical Forest Honey Company, representante no gubernamental del Comité Sistema Producto Apícola en Yucatán, pone en evidencia el mezquino manejo electorero, politizado y sectario que se da a los apoyos en esa dependencia federal; ya que para el año entrante Yucatán, el principal productor mielero de la península y líder nacional en producción y exportación del dulce, recibirá muchísimo menos del Programa Especial Concurrente que estados de nula vocación apícola.
Por su parte Enrique Carrillo, integrante de la Unión de Criadores de Abejas Reina, denuncia que el funcionario federal ni siquiera se ha dado cuenta de que la delegación local de la SAGARPA es inoperante y está a cargo de funcionarios ignorantes que no salen de sus oficinas y desconocen la realidad del campo.
Pero la plaga admite también a tiburones de la talla voluntariado moralista, como don Jorge Serrano Limón, ese amante de las tangas, de las mont blanc y de la buena vida, sobre todo si son costeadas con recursos públicos; quien desde Provida ha probado que defiende los nacimientos pero no le importa lo que sigue; o sea, que las personas nazcan y se hundan en la miseria, allá ellas.
Ni hablar de sus socios mentores, esos comediantes de la legua que forman el clero, entre quienes se habla mucho de humildad pero se las gastan con gran prepotencia, como el caso del obispo acusado de ¡fraude procesal! por la friolera suma de ¡130 millones de dólares! y quien, simplemente, no asistió a la primera cita del Ministerio Público, y cuando lo hizo, en la segunda, no declaró nada y se hizo acompañar de un abogado. Habrá que esperar hasta el 20 de enero, para conocer su fabulosa inocencia expresada por escrito.
Menos mal que no hubo recurso semejante para demorar la respuesta, ante la exhortación del 22 de diciembre, que la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión formulara al Instituto Nacional de Antropología e Historia el cual pretendía, valiéndose de un truco para salirse con la suya, ya que no lo consiguió en 1988, desfigurar y malbaratar el patrimonio cultural de la humanidad que constituye Teotihuacan, para armar su tinglado de Luz y Sonido que amenizara el 'show' gerencial sin importar que se vinieran abajo las estructuras pre americanas.
Truco que, al parecer, intentará usar de nuevo en 2009 el gobierno federal panista para seguir privatizando PEMEX, pasándose por el arco del triunfo la voluntad popular registrada y votada por los representantes en el Congreso en un dictamen que, se aseguró, no requería ser modificado como pedía "el peligroso" Andrés M. López O. y sus activistas cívicos para salvaguardar la soberanía nacional en los hidrocarburos. Ya veremos.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario