domingo, agosto 26, 2007

El ramo contribuye con una cuarta parte del PIB, según informes del INEGI

La construcción crecía 7.8% hace un año y ahora lo hace sólo 1.1 por ciento; en las manufacturas se pasó de un repunte de 7.6 a 0.3

Lenta y difícil recuperación de la economía, anticipan analistas
En los pasados 12 meses el ritmo de crecimiento de la actividad industrial, que contribuye en su conjunto con una cuarta parte del producto interno bruto (PIB), se desplomó siete puntos hasta caer a una situación prácticamente de estancamiento, revelaron datos oficiales. Las mayores afectaciones se registran en la construcción y en el sector de manufacturas.
Informes del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) detallan que el conjunto de la actividad industrial, que aglutina a la minería, la industria manufacturera, construcción y generación de electricidad, gas y agua, muestra una importante desaceleración en el último año, debido a que en junio de 2006 registraba un crecimiento de 7.1 por ciento y para junio de 2007 repuntó solamente 0.1 por ciento, una disminución de 7 puntos porcentuales.
El organismo precisó que mientras la construcción, una de las actividades multiplicadoras de diversas ramas de la economía, registró en junio de 2006 un vigoroso crecimiento de 7.8 por ciento, para el mismo mes de este año se desplomó hasta crecer solamente 1.1 por ciento.
Algo similar ocurrió con la industria manufacturera, que observó un aumento de 7.6 en junio de 2006, para posteriormente registrar una tasa negativa de crecimiento, de 0.3 por ciento, en junio de 2007.
Otros indicadores de la actividad industrial, como la generación de electricidad, gas y agua, también mostraron una desaceleración al desplomarse de 5 por ciento, que era el ritmo de crecimiento anual registrado en el primer semestre de 2006, a 2.1 en junio de este año.
Los datos oficiales revelan que la construcción aporta el 5 por ciento del PIB, la manufactura 16.5; electricidad, gas y agua, 1.19 por ciento. El conjunto de la actividad industrial, que además de las anteriores incluye minería, contribuye con 24.16 por ciento del PIB.
Así, la recuperación de la economía mexicana está siendo más lenta y difícil de lo originalmente previsto, además de que todavía persisten presiones inflacionarias acompañadas de una desaceleración en la creación de empleos formales, advirtieron este sábado analistas financieros.
El grupo financiero Ixe, en su análisis semanal, que empezará a difundirse entre sus inversionistas a partir de este lunes, opinó que la recuperación está siendo más lenta y difícil a lo originalmente estimado, pese a que la economía mexicana sigue mostrando ligeras señales de recuperación.
Banamex, subsidiaria del global Citigroup, consideró que el repunte del desempleo en julio por arriba de las expectativas matiza el optimismo en torno a las mejores condiciones del mercado laboral; en un contexto donde se desacelera lentamente la creación de empleos formales.
El INEGI informó que en julio de este año la tasa de desocupación a nivel nacional ascendió a 3.95 por ciento de la población económicamente activa, el nivel más elevado de los últimos cuatro meses. Los informes oficiales indican que en sólo un mes se incorporaron al ejército de desocupados 296 mil 700 personas, para un total de un millón 698 mil 500 personas que hasta julio no encontraron ocupación en la economía formal e informal.
A su vez, el Grupo Financiero Banorte alertó sobre posibles presiones inflacionarias en el futuro y destacó que el Banco de México se enfrenta a un escenario interno donde la inflación general se ubica por encima del límite superior de la meta, y el componente subyacente se ve presionado por los precios de alimentos, sin que se logre definir una tendencia a la baja.

Persistirá volatilidad bursátil

En relación con el reciente comportamiento de los mercados financieros internacionales, especialistas del grupo financiero Invex advirtieron que pese al restablecimiento de la calma en los mercados globales no es suficiente para considerar el abandono del miedo. “Vemos a la recuperación como temporal y pensamos que la volatilidad persistirá”.
En tanto, BBVA Bancomer reconoció que pese a la mejoría en los mercados, experimentada durante la semana pasada, no hay que bajar la guardia, porque aunque se redujo la volatilidad, aún hay riesgos que “no debemos perder de vista”.
Todo lo anterior cobra especial relevancia si se recuerda que apenas el viernes pasado el Banco de México en su informe sobre política monetaria alertó sobre los efectos de la crisis hipotecaria en Estados Unidos y su desaceleración y, por ende, su implicación en la economía mexicana.

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