SME: Ley Federal del Trabajo, letra muerta

Contraproducente, la reforma laboral que promueve el gobierno, dice Esparza Flores

Carolina Gómez Mena

“El objetivo de la reforma laboral que promueve el gobierno es legalizar lo ilegal”, señaló Martín Esparza Flores, secretario general del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), quien precisó que lo que se debe hacer es cumplir en todos sus términos la actual Ley Federal del Trabajo (LFT), sobre la cual rechazó cualquier cambio.

En entrevista, el líder del SME sostuvo que lo que quiere el gobierno es “flexibilizar más las condiciones de trabajo”, y apuntó que este tipo de reformas “no deben ser unilaterales, sino discutidas con los actores del tema que son los trabajadores”, lo cual no ha ocurrido, pues hasta el momento sólo las autoridades y el empresariado están dictando las líneas de esta modificación a la LFT. “El SME no ha participado en ninguna reunión ni convocatorias nacionales”, aclaró.

De acuerdo con el líder gremial, lo que busca la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) “es normar el tema de la contratación a través del outsourcing y flexibilizar más las condiciones de los contratos colectivos de trabajo, para darle paso a los contratos de protección”, lo cual “de ninguna manera beneficia a los trabajadores, sino al contrario”.

De esta forma, apuntó, los trabajadores verán mermadas sus condiciones generales de protección, “al disminuir prestaciones y garantías individuales ya establecidas en un marco legal (la LFT)”, por lo que manifestó que el Frente Sindical Mexicano (FSM), encabezado por el SME, está dispuesto a que no se aprueben los cambios propuestos por la STPS a la ley federal ni se dé un albazo legislativo, para lo cual si es necesario se tomaría el Congreso” o incluso se llegaría a “la huelga (por parte) del sindicato”.

Esparza Flores apuntó que presentar esta reforma es un “error”, porque ante lo lesiva que resultaría, sin duda “generará un movimiento importante en los sindicatos y trabajadores, que creemos que en lugar de modificar la ley queremos que se cumpla la actual”.

Tras subrayar que el frente sindical “se opone a cualquier modificación a la actual LFT”, y referir que el SME, por acuerdo general de asamblea, acordó “rechazar cualquier intento de reforma a la ley”, el dirigente dijo que con el fin de evitar estos cambios tratará con otros gremios de organizar foros de difusión en la Cámara de Diputados, para que se “abra el debate”. De igual forma indicó que esta discusión el FSM la llevará a estados, a facultades de la Universidad Nacional Autónoma de México y al Instituto Politécnico Nacional, con la finalidad de que se establezca un “gran debate nacional para evitar que estas reformas avancen”.

El dirigente del SME planteó que la actual ley es buena, pero sólo resta aplicarla, y apuntó que prueba de que no es cumplida por la mayoría de los patrones –ello al amparo de las autoridades–, es la enorme cantidad de juicios establecidos ante las juntas federal y locales de Conciliación y Arbitraje por violaciones a las garantías laborales.

Aunado a esto expuso que la “misma autoridad avala la contratación flexible por outsourcing o por honorarios, figuras que no existen en la ley, al tiempo que en los hechos la seguridad social se vulnera; en suma, la mayor parte de la LFT es letra muerta”.

Consideró que la propuesta a los “únicos que beneficia es a los patrones”, y añadió que lo que se quiere con ella también es “debilitar” a los sindicatos, al legalizar formas de contratación individual.