Oportunos, oportunismo y oportunistas

Jorge Lara Rivera

El próximo 5 de julio, en todo el país se votará para la renovación de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión, y así tener nuevos ocupantes en las 500 curules -trescientas de mayoría y doscientas de representación proporcional.
Además, a lo largo del 2009 habrá elecciones también en Campeche, Colima, Nuevo León, San Luis Potosí, Querétaro, Sonora, Distrito Federal, Estado de México, Morelos, Jalisco, Guanajuato, Coahuila y Tabasco para elegir -solo o combinadamente- ayuntamientos (en su mayoría), congresos locales (la mitad aproximadamente) y gobernadores (los cinco primeros).
El proselitismo político será enorme y, consecuentemente, abrumadora la presión mediática infestándonos los días con propaganda.
Es posible que en el hartazgo por los lodazales de la corrupción, como exhibe cotidianamente la clase política y por los decepcionantes resultados de su onerosa actividad pública, el votante quiera desentenderse de las elecciones.
Pero la trascendencia de los resultados será crucial para definir el rumbo nacional en medio de la crisis.
Signo de este tiempo aciago, es el paro total de 2 mil barcos de la flota pesquera nacional en puertos del litoral mexicano -en Tamaulipas, Oaxaca, Veracruz, Yucatán, Sonora y Sinaloa- con que abrieron el año los trabajadores de ese sector económico, como protesta contra el encarecimiento de los insumos, los combustibles (diesel, gasolina, gas, etc.) y energía eléctrica (eso sin mencionar las restricciones impuestas por PEMEX a los barcos pesqueros) que tornar incosteable ese ramo productivo. Como en la parodia de saga filmográfica ¿Dónde está la SAGARPA?, clama Humberto Becerra Batista, presidente sinaloense de la Cámara Nacional de la Industria Pesquera, por la ausencia de apoyos -qué pronto enseñó el cobre Alberto Cárdenas Jiménez; mientras, el oaxaqueño Anselmo López Villalobos denuncia las tropelías y estropicios cometidos en ese sector por el miope (ir)responsable de Hacienda y su blindaje balín.
No por nada -y quién podría maliciar algún propósito electorero, sobre todo tras lo maltrecha que ha quedado la economía doméstica de decenas de millones de hogares mexicanos por la voracidad e impunidad de los abusos 'modernizadores' y 'gerenciales' del gobierno panista y su credo neoliberal, y que reflejan encuestas y estadísticas-, poco antes de concluir el año 2008, desde Los Pinos se decretó que no habría aumento en el gas LP, el doméstico, al menos en enero -y quizá en todo el semestre, con tal de enmascarar el fiasco que resultara. Nada oportunista, ¿verdad?
Asimismo, en ese seno políticamente interesado vio luz, el primer día de enero la Ley General del Sistema Nacional de Seguridad Pública, reglamentaria del 21º Constitucional, aprobada en diciembre, durante la última sesión del año por los diputados. Al refrendarla en Los Pinos, el Ejecutivo se sale con la suya y crea para sí un sistema federal que incluye un Consejo -que preside-, un Centro de Control de 'Confianza' (piense en la Secretaría de Seguridad Pública federal de Genaro García Luna y recuerde su involucramiento en los asesinatos de Alejandro Martí y Silvia Vargas Escalera) sobre todas las policías del país, a cuyo personal certificará y da vida a una serie de medidas, entre las cuales figuran algunas que le permitirán ejercer presión directa sobre las entidades federativas (léase sus responsables los gobernadores) y pellizcarles sus presupuestos.
A propósito de fiascos, al sur del país, en Oventic, la representación del EZLN con asistencia de numerosos extranjeros curiosos conmemoró tres lustros del inicio de su movimiento, cuyas resultantes -como la aplicación en Chiapas de los programas de asistencia social y los Acuerdos de San Andrés Larraínzar- siguen siendo, hoy por hoy, ambiguos o pospuestos.
Desde el Caribe, espejo turquesa de Latinoamérica, contra viento y marea, la nave de la Revolución Cubana sigue a flote, erguida con sus cincuenta años de revolución.
En otro orden, más lejos, alrededor de 420 víctimas fatales, la salida controlada de 443 extranjeros estacionados en la Franja de Gaza, la impopularidad de Egipto en el mundo árabe y una exigencia férrea del cese total de los ataques con cohetes de Hammas al Estado Hebreo, son los funestos -pero concretos- resultados que arroja, tras siete días, la operación 'Plomo fundido' emprendida por Israel, contrastables con la nulidad de logros por parte del oportunismo y la vaguedad hipócrita del llamado "Grupo de Los Cuatro (Rusia, China, Estados Unidos y la Unión Europea, los mayores exportadores de armas del mundo) para la 'Paz' en el Oriente Medio". C'est la vie!