Cambia la legislación o se interpondrá una controversia constitucional, advierten
“Basta de tratarnos como inimputables”; “ya nos chamaquearon”, señalan ediles
Roberto Garduño y Enrique Méndez
La Asociación de Presidentes Municipales de México emplazó a la Cámara de Diputados a modificar de fondo el contenido de la reforma fiscal porque ésta perjudicaría las participaciones federales destinadas a estos órganos de gobierno, y advirtió que de no hacerlo los mil 600 alcaldes aglutinados en esa organización presentarán una controversia constitucional contra la decisión asumida en San Lázaro.
Más de 200 alcaldes de los principales partidos políticos se presentaron en el Palacio Legislativo con objeto de manifestar su rechazo total a la reforma fiscal. José Luis Durán Reveles, del PAN; José Luis Gutiérrez Cureño, del PRD, y Omar Fayad, del PRI, acusaron a los legisladores federales de haber aprobado una “reforma pactada”, que sólo beneficia a los gobernadores y ubica a los alcaldes como inimputables (a quienes no se les puede aplicar la ley)
“Ya nos chamaquearon. Si quieren, desaparezcan el nivel de gobierno municipal. Dan pena ajena, porque ustedes saben que los gobernadores no nos dan los recursos que nos tocan. Estamos en la misma tesitura de Haití, nos tratan con la punta del pie. Con esta última reforma volvemos a la colonia.”
José Luis Durán Reveles, alcalde de Naucalpan y quien encabeza la Asociación de Presidentes Municipales de México, ironizó con la defensa del federalismo a la que recurren los funcionarios de todo tipo.
“Yo no conozco en México nadie que no defienda el federalismo: el presidente de la República, los gobernadores, los senadores, los diputados, todos se dicen federalistas. Qué pasa aquí: el ente mayor se queda con más, y el ente menor, con menos… hace un año venimos aquí a traer las mismas propuestas y no pasó nada. Yo no quiero venir el año próximo con las mismas propuestas. ¡Señores, fortalezcamos el municipio!”, señaló el edil panista.
Si nos dan no nos quiten
Con mesura, el político de extracción panista refirió que en la solución de los grandes temas nacionales el eje central se ubica en el municipio mexicano. “¡Por favor, pasemos de las buenas intenciones a las buenas acciones!”
Elocuente, José Luis Gutiérrez Cureño, presidente municipal de Ecatepec, refirió la clásica del Niño Verde: “Queremos hablar con la burbuja, con la Junta de Coordinación Política. ¡Ya nos chamaquearon, no nos volverán a chamaquear; si no nos dan, no nos quiten. Hay criterios de austeridad en todos los municipios del país y éstos son los más rígidos, nos revisan todo. Dan pena ajena, señores diputados: al municipio más habitado del país (Ecatepec), ¿saben cuánto le tocó del programa de seguridad al municipio?: dos patrullas”.
El alcalde perredista reclamó el corto periodo que gobiernan los presidentes municipales, y se preguntó por qué los gobiernos estatales y el federal duran seis años, cuando el primer órgano de gobierno fue un ayuntamiento: el de la Villa Rica de la Vera Cruz.
“Procuremos que haya compensaciones a los municipios. Quien ha sostenido este país, a pesar del centralismo, son los gobiernos locales; procuremos que esta reforma y estos acuerdos se vayan matizando hacia los municipios. Porque a quién le reclaman los ciudadanos ‘qué pasó con el país del empleo’; pues reclaman a los alcaldes”.
Fue el alcalde priísta de Pachuca, Hidalgo, Omar Fayad, quien destacó el excesivo centralismo en las decisiones de la Cámara de Diputados. “Lo peor de todo es que se sigue pensando en que en este país sólo existen dos órganos de gobierno, el federal y el estatal. ¿Por qué no desaparecen el orden municipal? Mejor que lo desaparezcan porque esto se está convirtiendo en un asunto de gobernabilidad democrática.
Fórmulas gastadas
“Vimos su reforma, yo les aplaudo, es dizque superfederalista, da pena leer el texto, otra vez seguimos con las mismas fórmulas, y es una reforma pactada porque dicen que los gobernadores planchan a sus municipios, a sus diputados; ya estamos cansados de eso, ya estamos cansados. Qué hay que hacer para conseguir los recursos: ir al besamanos, hacer antesala para que el gobernador nos dé los recursos y esperamos que el gobernador sea nuestro cuate. Ya no queremos palabras, queremos hechos, ya no queremos un Congreso fantasma.”
El malestar de los alcaldes redunda en que la reforma aportará uno por ciento del PIB a las autoridades estatales y dos por ciento al gobierno federal. Tal reparto constituye el trasfondo de la probable controversia constitucional.
“Ya nos chamaquearon. Vamos a ir a camellear a los congresos de los estados para conseguir recursos. Sólo se benefician los estados de los diputados que pertenecen a la Comisión de Hacienda, por qué nos tratan peor que Haití, nos tratan con la punta del zapato. Gastamos más en seguridad pública que en ciencia y tecnología, cuando la seguridad se garantizaría con fortalecer los municipios. Ahora vamos a generar nuestras boletas prediales para cobrar el predial a los inmuebles del gobierno federal. Ya no nos traten como inimputables, no somos el patio de atrás de sus casas.”
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