El PRI perdido en su inmoralidad

Nada más hay que atender a las declaraciones del PRI para comprender como ese partido se perdió en su inmoralidad y no tiene idea de cómo retomar el camino para rescatarse.

El país, en severo riesgo de ingobernabilidad y deterioro institucional: PRI

Aun no se dan cuenta de que el país no está en riesgo, el país cayó en la ingobernabilidad y las instituciones están ya deterioradas y caducas en gran parte por ese partido que ya no tiene con qué enderezarse. Su aportación sustancial a la ingobernabilidad fue la de Ulises Ruiz y para el deterioro de las instituciones basta con revisar las administraciones desde Díaz Ordaz hasta Zedillo. Ahora todavía están peor porque ahora se alían a la escoria del PAN.

La Comisión Política Permanente del Consejo Político Nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) alertó a todos los actores políticos del país que en los momentos actuales, “por las repercusiones de la reciente crisis postelectoral derivada de la intromisión autoritaria del gobierno federal en las elecciones, los vacíos de poder y la polarización promovida desde los extremos de ideologías políticas antagónicas”, el país está sometido a severos riesgos de gobernabilidad y deterioro institucional, de confrontación política y de crecientes conflictos sociales, impunidad y violencia.

"Intromisión autoritaria" del gobierno federal a la cual se aliaron. Ideologías políticas antagónicas, sí, una, pugna por la represión, la injusticia, la pobreza y los privilegios de unos cuantos, y la otra, por mejorar la vida de todos los mexicanos, nada más faltaba que no hubiera antagonismos con la primera. Y los conflictos sociales, la impunidad y la violencia ha sido el pan de cada día de sus ejercicios en el poder y no cabe duda que han sido buenos maestros.

Exhortó hoy a los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) a contribuir para generar un clima de distensión que permita “un cambio de gobierno respetuoso, digno, republicano” y llamó “al gobierno y a los partidos beligerantes” a guardar una actitud sensata, prudente, constructiva, serena, responsable que en el pleno respeto a la voluntad ciudadana.

El PRI no tiene cara con que exhortar a nadie y no se puede permitir “un cambio de gobierno respetuoso, digno, republicano” porque no se puede respetar a un gobierno antidemocrático y espurio, sin dignidad alguna puesto que lo repudian a donde quiera que se presente y a fuerza quiere imponerse, ni republicano en tanto viola la Carta Magna todo el tiempo. Y menos pueden hablar de responsabilidad y respeto a la voluntad ciudadana cuando ellos no se han hecho responsables de nada y no han respetado la voluntad popular.

El PRI está perdido en su inmoralidad y no puede salir de ella aunque quiera porque no sabe, no tiene nociones de ética y repiten hasta la saciedad un discurso falso y vacío sin sustento alguno.