El consorcio televisivo que preside Emilio Azcárraga Jean vuelve a mover sus piezas para impedir que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes dé el aval para que Telmex se convierta en proveedor de contenidos vía televisión por cable y de servicios convergentes de telefonía e internet –el llamado triple play. Ante el temor de que el dueño del Grupo Carso les coma el mandado, Televisa le echó encima a las empresas de televisión por cable… La batalla por el control del mercado de las telecomunicaciones comienza a cobrar fuerza.En vísperas de que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) anunciara el cambio de título de concesión de Teléfonos de México, en septiembre de 2006, Emilio Azcárraga Jean y varios ejecutivos de Televisa acudieron a la dependencia para exigir airadamente que el gobierno de Vicente Fox evitara que Carlos Slim, exsocio y acreedor del consorcio televisivo, se transformara en su principal competidor.El revire del magnate del Grupo Carso fue inmediato. En privado aseguró que él nunca cabildeó en contra de la Ley Televisa; por el contrario, insistió, Azcárraga Jean sí afectó los intereses de Telmex, al vetar el Acuerdo de Convergencia impulsado desde la SCT.Televisa operó a través del entonces titular de la Secretaría de Hacienda, Francisco Gil Díaz, quien entró en la disputa y ordenó que Telmex pagara una contraprestación para que el título, de 1990, le permitiera al consorcio de la telefonía entrar al mercado del triple play (audio, video e internet).Desde ese momento, la guerra soterrada entre ambos gigantes de las telecomunicaciones y de los medios electrónicos se ha ido transformando en una batalla abierta. En esta confrontación, cada uno de los grupos le apuesta a la debilidad de los organismos reguladores –Cofetel y SCT– y a utilizar a sus principales aliados para “ganar tiempo” y evitar que Telmex se convierta en el nuevo proveedor de contenidos vía televisión por cable y de servicios convergentes de telefonía e internet.El negocio en juego es impresionante. El sector de telecomunicaciones generará inversiones anuales de entre 18 mil y 20 mil millones de dólares y es el único que ha crecido ocho veces más que el Producto Interno Bruto, pero el costo de los servicios de telecomunicaciones en México es uno de los más caros del mundo: cada familia mexicana invierte 45 dólares mensuales, en promedio, en telefonía, televisión restringida o internet, de acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).El último capítulo de esta pugna se registró la semana pasada. La Cámara Nacional de la Industria de Telecomunicaciones por Cable (Canitec), dirigida por Alejandro Puente, publicó un desplegado el lunes 21 en el que acusó a Telmex de dominar el 91% del mercado de telefonía fija local y de bloquear a sus competidores.En su alegato, esta cámara, afín a los intereses de Televisa, acusó abiertamente a Telmex de “incumplir múltiples obligaciones establecidas por el título de concesión que dio forma a su privatización” y de obstaculizar mejores servicios a más bajo precio.“Telmex pretende ahora incursionar en nuevos mercados bajo este esquema viciado… Sabemos de gestiones que Telmex pretende concretar con el gobierno federal para modificar su título de concesión, a fin de eliminar la prohibición de ofrecer sus servicios de televisión, limitación acordada en la compra-venta de la empresa, en 1990”, decía el desplegado.Ante la inminencia del cambio de título de concesión de Telmex, previsto originalmente para el primer trimestre de 2008, la Canitec le solicitó al gobierno de la República que “revisara integralmente” dicho título para evitar vicios y obligar al cumplimiento de sus obligaciones; “emitir las declaraciones de dominancia de Telmex y de Telcel”; “expedir regulación específica sobre bases no discriminatorias”, y “cumplir estrictamente con el marco jurídico aplicable”.Consultado por Proceso, Arturo Elías Ayub, vocero del corporativo, calificó de “ridículos” los términos del desplegado y acusó a la Canitec de querer “mantener su monopolio regional del cable a base de una serie de mentiras”.“Le tienen miedo a la posibilidad de que un jugador grande se incorpore al mercado de triple play. No quieren que los consumidores tengan más opciones, y seguramente cuando Telmex entre a competir le aseguro que los precios van a reducirse en el mercado de video”, afirma Elías Ayub.
–Los cableros acusan a Telmex de incumplir con los acuerdos de interconexión y de realizar prácticas anticompetitivas…
–El costo de la interconexión es de cero. Nosotros hemos firmado acuerdos de interconexión con las 18 empresas más grandes como Megacable, Cablemás y Cablevisión, y hemos cumplido con todos los plazos que nos puso la Comisión Federal de Competencia (CFC).El funcionario de Telmex se refería a las condiciones que la comisión estableció el 31 de octubre de 2005, un año antes de que se diera a conocer el Acuerdo de Convergencia, para evitar prácticas monopólicas por parte del corporativo que domina más de 90% de la telefonía fija y posee la red de cable más extensa del país para avanzar en el triple play.En esa ocasión, Eduardo Pérez Motta, presidente de la CFC, afirmó que debe permitirse el cambio de título de concesión de Telmex, siempre y cuando se cumplan los siguientes requisitos: implementar un programa de portabilidad numérica de telefonía; que la empresa de Slim facilite el acceso de interconexión de otras redes de la competencia; y garantizar la interoperabilidad plena de las redes de telefonía local con todos los competidores.“Se considera necesario establecer un período máximo de espera de dos años”, estableció el organismo responsable de promover la competencia, y también advirtió que era necesario aplicar otras medidas como licitar la banda de frecuencias para el servicio de internet inalámbrico o wimax.
Cableros al ataque
En respuesta a las críticas de Elías Ayub, el presidente de la Canitec, Alejandro Puente, negó que las empresas cableras fueran monopolios regionales y señaló que “Telmex se quiere convertir en autoridad” y no ha permitido una “competencia sana”.“No pedimos que no entren a prestar servicios de televisión, lo que pedimos es que Telmex entre con reglas claras, que se reconozca que son una empresa dominante y que necesita una regulación especial”, afirmó el dirigente de la Canitec, que agrupa a 200 empresas que operan televisión por cable. Según el propio Puente, las ventas de la empresa más grande afiliada a la Canitec representan sólo 1.5% del volumen de ventas de Telmex-Telcel.En rueda de prensa, Puente advirtió que interpondrán ante la CFC una solicitud de investigación para determinar la dominancia de Telmex y consideró que no se le debe cambiar el título de concesión en el primer trimestre de 2008, tal como se había anunciado a principios de este año.Para el doctor Alejandro Ibarra Yunes, especialista en telecomunicaciones de Monterrey, el desplegado de la Canitec busca “ganar tiempo, para abrir la discusión”.“Creo que es positivo que la Canitec ventile su posición, pero lo que no veo realmente es una discusión legislativa ni un verdadero compromiso por parte de las autoridades (SCT y Cofetel) a favor del mercado”, afirmó Ibarra.Entrevistado por Proceso, Ibarra advierte que ni la SCT ni la Cofetel han dicho nada sobre el plazo para cambiar el título de concesión de Telmex, y “no está muy claro si este cambio no derivará en una mayor dominancia”, por parte del gigante de telecomunicaciones, poseedor de 94% de las casi 17 millones de líneas telefónicas fijas en México y de 78% de las 48 millones de líneas de telefonía móvil.“Son cuatro los objetivos que deben buscarse: menor precio, mayor calidad, más volumen de penetración y neutralidad tecnológica”, destaca el especialista.Director del doctorado en administración del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Ibarra insiste que la autoridad reguladora ha sido bastante débil frente a este debate y que para lograr estos cuatro objetivos no se puede tener un mercado concentrado ni en telefonía ni en televisión abierta (donde Televisa es dominante) ni en radio. “Debe existir mayor facilidad para nuevos competidores”, sentencia.Hasta el momento, ni la SCT ni la Cofetel se han pronunciado claramente sobre los dos puntos del debate: la fecha para el cambio de título de concesión y la regulación clara que impida una mayor dominancia y prácticas monopólicas.El titular de la SCT, Luis Téllez, aseguró vagamente el 23 de enero que será la secretaría, junto con la CFC y con la Cofetel, las que “determinarán cuáles son las condiciones que Telmex debe cumplir para el cambio de título de concesión para ofrecer a sus clientes el servicio de video”.A título personal, el comisionado de Cofetel, Eduardo Ruiz Vega, afirmó que no se podrá cambiar el título de Telmex hasta que cumpla con las condiciones del Acuerdo de Convergencia y que falta que la autoridad emita un Plan Técnico de Interconexión, independiente a los 18 acuerdos de interconexión que ha firmado Telmex.A Ruiz Vega se le identifica como uno de los comisionados más cercanos a las posiciones e intereses de Televisa.En contraposición, su colega Gerardo González Abarca, más cercano a Telmex, afirmó que menos de la mitad de los 598 concesionarios de telecomunicaciones en México, incluyendo a las cableras, cumplen totalmente con las condiciones a las que se les obliga en su título de concesión.Le reprochó a la SCT que no presupuestara los recursos necesarios para que en 2008 la Cofetel pudiera inspeccionar y verificar a los concesionarios. González Abarca admitió que existen fallas en la coordinación entre SCT y Cofetel.
El consumidor y los servicios más caros
La idea de que sea el consumidor final el principal beneficiario aún es lejana ante los altos precios de los servicios de telecomunicaciones en México. Según la Profeco, cada familia gasta en promedio 470 pesos mensuales en alguno de los servicios (telefonía fija o móvil, televisión restringida y servicios de internet).La Canitec y las principales empresas que compiten con Telmex (Alestra, Telefónica, Axtel, Iusacell, Nextel, Unefon, Maxcom, Marcatel) le han reprochado a la compañía sus altas tarifas en telefonía. El desplegado de la Canitec mencionó, por ejemplo, que el impacto de las telecomunicaciones en el Índice Nacional de Precios al Consumidor es de 4%, superior al de la electricidad y la gasolina, “consecuencia directa de las altas tarifas de Telmex-Telcel”.Telmex, por su parte, respondió que los precios de los operadores de televisión restringida son de los más caros: un promedio de más de 30 dólares mensuales, frente a un mercado internacional que está en sólo 15 dólares en promedio.De acuerdo con una lista de precios, del 14 al 18 de enero, en plazas como Guadalajara, Megacable ofrece servicios por 350 pesos, frente a 369 pesos de Telecable; en Monterrey, Multimedios tiene un servicio de 330 pesos; en Morelia, Telecable da uno de los servicios más caros: 424 pesos; mientras que en Tijuana, Cablemás ofrece los más baratos con 125 pesos. Esta misma compañía ofrece un servicio por 299 pesos en el Estado de México y 305 pesos en las ciudades de Cuernavaca y de Acapulco.El volumen de consumidores de televisión restringida es de 4.5 millones de personas, que pueden duplicarse con la entrada de un competidor como Telmex. De acuerdo con la SCT, 2.8 millones de estos consumidores tienen televisión por cable, 1 millón 100 mil de televisión vía satélite y apenas 680 mil de televisión microondas.El acceso a internet y a la banda ancha es uno de los servicios con mayores iniquidades. De acuerdo con la Profeco, los costos de conexión a internet fluctúan entre 86.25 a 687 pesos al mes, dependiendo del tipo de conexión. El “Dial up”, de menor costo, es de 86 a 217 pesos, mientras que el de banda ancha varía entre 299 a 687 pesos.La contratación de internet por cable varía entre los 99 y los 352 pesos mensuales, mientras que la conexión inalámbrica tiene un costo menor de entre 286 y 574 pesos.De todos los servicios, el de telefonía celular con tarjetas de prepago es el más caro. El 92% de los usuarios utiliza este sistema y pagan hasta 123%, según un estudio de la Profeco. La compañía más cara es Iusacell. Los usuarios pueden llegar a pagar en prepago 834 pesos, 123% más que una renta mensual. En el caso de Telcel, por prepago el usuario paga 522 pesos, 102% más que el servicio más barato, que es el Virus de 258 pesos. Movistar, de Telefónica, cuesta 463 pesos en prepago frente a 343 pesos de la renta mensual. l