Fidel Castro Ruz
Esta reflexión no va dirigida a los gobiernos sino a los pueblos hermanos de América Latina.
Mañana 28 de agosto se iniciará en Argentina la reunión Cumbre de UNASUR cuya trascendencia no puede ignorarse. En ella se debe analizar la concesión de siete bases militares en territorio de Colombia, a la superpotencia norteamericana. Las conversaciones previas de ambos gobiernos se mantenían en riguroso secreto. El acuerdo debía presentarse al mundo como hecho consumado.
En horas de la madrugada del 1º de marzo del 2008, las Fuerzas Armadas de Colombia, entrenadas y armadas por Estados Unidos, habían atacado con bombas de precisión a un grupo de guerrilleros que penetró en una apartada zona del territorio ecuatoriano. Al amanecer, hombres de las tropas élites colombianas transportados en helicópteros ocuparon el pequeño campamento, remataron a los heridos y se apoderaron del cadáver del jefe guerrillero Raúl Reyes, quien al parecer sostenía en esos días un encuentro con jóvenes visitantes de otras nacionalidades, interesados en conocer las experiencias de la guerrilla que desde la muerte del líder liberal Jorge Eliécer Gaitán, hace más de 50 años, sostiene la lucha armada. Entre las víctimas había estudiantes universitarios de México y Ecuador que no portaban armas. El método fue brutal, al estilo yanqui. El gobierno de Ecuador no había recibido advertencia alguna antes del ataque.
El hecho constituyó una acción humillante para el pequeño y heroico país suramericano, envuelto en un proceso político democrático. Se sospechaba fuertemente que la base aérea norteamericana de Manta había ofrecido información y cooperado con los atacantes. El presidente Rafael Correa adoptó la valiente decisión de solicitar la devolución del territorio ocupado de la base militar de Manta, cumpliendo estrictamente los términos establecidos en el convenio militar con Estados Unidos, y retiró su embajador en Bogotá.
La entrega de territorio para el establecimiento de siete bases militares de Estados Unidos en Colombia, amenaza directamente la soberanía y la integridad de los demás pueblos de Sur y Centroamérica con las que nuestros próceres soñaron crear la gran patria latinoamericana.
El imperialismo yanki es cien veces más poderoso que los imperios coloniales de España y Portugal, ajeno por completo al origen, los hábitos y la cultura de nuestros pueblos.
No se trata de estrechos chovinismos. Patria es humanidad, como proclamó Martí, pero jamás bajo el dominio de un imperio que ha impuesto al mundo una tiranía sangrienta. En nuestro propio hemisferio los cientos de miles de compatriotas latinoamericanos asesinados, torturados y desaparecidos en Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Panamá, Chile, Argentina, Paraguay, Uruguay y otros países de Nuestra América, durante las últimas cinco décadas por golpes de estados y acciones que Estados Unidos promovió y apoyó, demuestran de forma irrebatible lo que afirmo.
Cuando analizo los argumentos con que Estados Unidos pretende justificar la concesión de bases militares en territorio de Colombia, no puedo menos que calificar de cínicos tales pretextos. Afirma que necesita esas bases para cooperar en la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo, el tráfico de armas, la emigración ilegal, la posesión de armas de destrucción masiva, los desbordes nacionalistas y los desastres naturales.
Ese poderoso país es el mayor comprador y consumidor de drogas del planeta. Un análisis de los billetes que circulan en Washington, capital de Estados Unidos revela que el 95 por ciento pasaron por manos de personas que consumen drogas; es el mayor mercado y a la vez el mayor suministrador de armas para el crimen organizado en América Latina, con ellas están muriendo decenas de miles de personas cada año al Sur de su frontera; es el mayor estado terrorista que ha existido nunca. No solo lanzó las bombas contra ciudades civiles en Hiroshima y Nagasaki; en sus guerras imperiales como las promovidas en Vietnam, Iraq, Afganistán, Pakistán y otros países ubicados a miles de kilómetros de distancia en las que han muerto millones de personas; es el mayor productor y poseedor de armas de destrucción masiva, incluidas las nucleares, las químicas y las biológicas.
Los paramilitares colombianos, muchos de los cuales proceden de los desmovilizados de las Fuerzas Armadas y constituyen, en parte, sus reservas, son los mejores aliados y protectores de los narcotraficantes.
El llamado personal civil que acompañaría a los soldados en las bases de Colombia son, como norma, ex militares norteamericanos perfectamente entrenados, que son después contratados por empresas privadas como Blackwater, que se hizo famosa por los crímenes cometidos en Iraq y otras partes del mundo.
Un país que se respete a sí mismo no necesita mercenarios, ni soldados, ni bases militares norteamericanas para combatir el narcotráfico, ni proteger la población en los casos de desastres naturales, o brindar cooperación humanitaria a otros pueblos.
Cuba es un país sin problemas de drogas ni altos índices de muertes violentas, cuyo número decrece por año.
El único propósito de Estados Unidos con esas bases, es poner América Latina al alcance de sus tropas en cuestión de horas. La alta jerarquía militar de Brasil recibió con verdadero desagrado la noticia sorpresiva del acuerdo sobre la instalación de bases militares de Estados Unidos en Colombia. La base de Palanquero está muy cerca de la frontera con Brasil. Con esas bases, unidas a las de las Islas Malvinas, Paraguay, Perú, Honduras, Aruba, Curazao y otras, no quedaría un solo punto del territorio de Brasil y del resto de América del Sur fuera del alcance del Comando Sur, donde en cuestión de horas, mediante el empleo de sus más modernos aviones de transporte, puede hacer llegar tropas y otros medios sofisticados de combate. Los mejores especialistas en la materia han suministrado los datos necesarios, para demostrar el alcance militar del acuerdo yanqui-colombiano. Tal programa, que incluyó el restablecimiento de la IV Flota, fue diseñado por Bush y heredado por el actual gobierno de Estados Unidos, a quien algunos líderes suramericanos demandan el debido esclarecimiento de su política militar en América Latina. Los portaaviones nucleares no se necesitan para combatir las drogas.
El objetivo más inmediato de ese plan es liquidar el proceso revolucionario bolivariano y asegurar el control del petróleo y otros recursos naturales de Venezuela. El imperio, por otro lado, no acepta la competencia de las nuevas economías emergentes en su patio trasero, ni países verdaderamente independientes en América Latina. Cuenta con la oligarquía reaccionaria, la derecha fascista y el control de los principales medios de difusión masiva internos y externos. Nada que parezca a verdadera equidad y justicia social tendrá su apoyo.
La emigración de latinoamericanos hacia Estados Unidos es consecuencia del subdesarrollo, y este es consecuencia del saqueo a que hemos sido sometidos por parte de ese país y del intercambio desigual con las naciones industrializadas.
México fue desgajado de América Latina por el Acuerdo de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá. La mayoría de los 12 millones de emigrantes ilegales en el primero de esos países son mexicanos y también la mayor parte de los cientos que mueren cada año en el muro de la frontera con aquel país.
Con una población de 107 millones de habitantes, en medio de la actual crisis económica internacional, el índice de pobreza crítica en México se ha elevado al 18 por ciento y la pobreza general alcanza a más de la mitad de sus habitantes.
Nada perturbó tanto la vida de Martí, el Apóstol de nuestra independencia, como la anexión a Estados Unidos. Desde 1889 venía tomando conciencia de que ese era el mayor peligro para América Latina. Soñó siempre con la Patria Grande, desde el río Bravo hasta la Patagonia; por ella y por Cuba dio su vida.
El 10 de enero de 1891 escribió en La revista ilustrada de Nueva York un ensayo titulado Nuestra América, en el que expresó inolvidables frases: “… ¡los árboles se han de poner en fila para que no pase el gigante de las siete leguas! Es la hora del recuento, y de la marcha unida, y hemos de andar en cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes.”
Cuatro años más tarde, después de su desembarco por Playitas en la provincia oriental de Cuba, cuando ya marchaba por los campos insurrectos, sostuvo un encuentro con el periodista del Herald George E. Bryson, el 2 de mayo de 1895. Este le contó que había entrevistado en la Habana al famoso general Arsenio Martínez Campo. El jefe español le dijo que antes de conceder la independencia a Cuba prefería entregarla a Estados Unidos.
De tal forma impactó la noticia a Martí, que el 18 de mayo escribió a su amigo mexicano Manuel Mercado la famosa carta póstuma en la que habla del “…camino que se ha de cegar, y con nuestra sangre estamos cegando, de la anexión de los pueblos de Nuestra América, al Norte revuelto y brutal que los desprecia…”
Al día siguiente, desoyendo el consejo del General Máximo Gómez, quien le indicó permanecer en la retaguardia, solicitó a su ayudante un revolver, cargó contra una tropa española bien posesionada y murió en el combate.
"Viví en el monstruo, y le conozco las entrañas", sentenció en su última carta.
agosto 27 de 2009
12 y 40 p.m.
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viernes, agosto 28, 2009
lunes, julio 20, 2009
Golpe en Honduras y nueva fase del Plan Colombia
Juan Cendales
Rebelión
Bien se sabe que a los gobiernos norteamericanos poco les importa la calaña de los socios que desde la presidencia de sus países sirven a sus intereses geoestratégicos. Innecesario repetir la historia de sus alianzas con personajes como Bin Laden, Hussein, Manuel Antonio Noriega, Somoza, Pinochet, Videla y un largo y sangriento etcétera.
Álvaro Uribe Vélez hace parte hace rato de este muy selecto grupo de personajes.
Ya hace 20 años, cuando era parlamentario, apareció en de una lista de políticos a quienes las agencias yanquis relacionaban con el mundo del narcotráfico. Aparentemente su nombre fue borrado. O engavetado. También existen acusaciones múltiples por paramilitarismo, violaciones a los derechos humanos y crímenes de lesa humanidad. Nada diferente a lo que presidentes como Reagan o Bush no hayan hecho. Y que Obama empieza a tolerar.
El gobierno de El Ecuador en un gesto de soberanía ha decidido dar por terminada la base militar norteamericana de Manta. Entonces Álvaro Uribe negoció con los yanquis utilizar cinco bases militares en Colombia para supuestas acciones antinarcóticos y para la lucha contrainsurgente. Pero no solo para actuar en Colombia. También en toda Suramérica. Es una nueva fase del Plan Colombia que articulará acciones político-militares con el Plan México, o Mérida, que abarca al país azteca y a otros de Centroamérica, entre ellos Honduras.
Colombia se convierte nuevamente en el Caín de América. Como cuando en la guerra de las Malvinas entre Argentina e Inglaterra el gobierno colombiano apoyó a los ingleses. O de los pocos que apoyó la guerra de Iraq. O de los que envía contingentes a Afganistán. Son las concesiones que se hacen producto del alma cipaya de este tipo de gobernantes. O el pago para que les perdonen inconfesables pecados. Para que les regalen una firmita en una servilleta. O les aprueben un antinacional TLC.
Colombia será gracias a Uribe una inmensa base militar norteamericana. Cabeza de playa contra la hoy rebelde América Latina . Con militares, espías, mercenarios y asesores que gozarán de total impunidad. Hagan lo que hagan.
Esta irracional presencia militar norteamericana debe ser rechazada por todos aquellos que no tienen el alma vendida a los bancos gringos o la rodilla postrada a su bandera. Los candidatos presidenciales deben fijar claramente su posición. Las centrales obreras. Los partidos todos. La iglesia y los empresarios. Y ante todo el movimiento estudiantil de histórica tradición antiimperialista.
Convertir a Colombia toda en una base militar yanqui no es aislado de la ofensiva oligárquica contra los procesos de transformación democrática de la región. No es ajeno al golpe fascista de Honduras. El gobierno de Uribe dio una lacónica declaración de apoyo al orden institucional. Pero no más. Luego de eso los voceros más reaccionarios del uribismo y el régimen han salido en vulgares notas editoriales a defender el golpe fascista al que califican como una acción para defender la democracia.
Por ahí van los tiros.
Honduras, México, Colombia y Perú como plataformas de la contraofensiva del imperio para recuperar su viejo patio trasero. Colombia la gran base militar, eje del proyecto imperial.
El Caín de América.
Rebelión
Bien se sabe que a los gobiernos norteamericanos poco les importa la calaña de los socios que desde la presidencia de sus países sirven a sus intereses geoestratégicos. Innecesario repetir la historia de sus alianzas con personajes como Bin Laden, Hussein, Manuel Antonio Noriega, Somoza, Pinochet, Videla y un largo y sangriento etcétera.
Álvaro Uribe Vélez hace parte hace rato de este muy selecto grupo de personajes.
Ya hace 20 años, cuando era parlamentario, apareció en de una lista de políticos a quienes las agencias yanquis relacionaban con el mundo del narcotráfico. Aparentemente su nombre fue borrado. O engavetado. También existen acusaciones múltiples por paramilitarismo, violaciones a los derechos humanos y crímenes de lesa humanidad. Nada diferente a lo que presidentes como Reagan o Bush no hayan hecho. Y que Obama empieza a tolerar.
El gobierno de El Ecuador en un gesto de soberanía ha decidido dar por terminada la base militar norteamericana de Manta. Entonces Álvaro Uribe negoció con los yanquis utilizar cinco bases militares en Colombia para supuestas acciones antinarcóticos y para la lucha contrainsurgente. Pero no solo para actuar en Colombia. También en toda Suramérica. Es una nueva fase del Plan Colombia que articulará acciones político-militares con el Plan México, o Mérida, que abarca al país azteca y a otros de Centroamérica, entre ellos Honduras.
Colombia se convierte nuevamente en el Caín de América. Como cuando en la guerra de las Malvinas entre Argentina e Inglaterra el gobierno colombiano apoyó a los ingleses. O de los pocos que apoyó la guerra de Iraq. O de los que envía contingentes a Afganistán. Son las concesiones que se hacen producto del alma cipaya de este tipo de gobernantes. O el pago para que les perdonen inconfesables pecados. Para que les regalen una firmita en una servilleta. O les aprueben un antinacional TLC.
Colombia será gracias a Uribe una inmensa base militar norteamericana. Cabeza de playa contra la hoy rebelde América Latina . Con militares, espías, mercenarios y asesores que gozarán de total impunidad. Hagan lo que hagan.
Esta irracional presencia militar norteamericana debe ser rechazada por todos aquellos que no tienen el alma vendida a los bancos gringos o la rodilla postrada a su bandera. Los candidatos presidenciales deben fijar claramente su posición. Las centrales obreras. Los partidos todos. La iglesia y los empresarios. Y ante todo el movimiento estudiantil de histórica tradición antiimperialista.
Convertir a Colombia toda en una base militar yanqui no es aislado de la ofensiva oligárquica contra los procesos de transformación democrática de la región. No es ajeno al golpe fascista de Honduras. El gobierno de Uribe dio una lacónica declaración de apoyo al orden institucional. Pero no más. Luego de eso los voceros más reaccionarios del uribismo y el régimen han salido en vulgares notas editoriales a defender el golpe fascista al que califican como una acción para defender la democracia.
Por ahí van los tiros.
Honduras, México, Colombia y Perú como plataformas de la contraofensiva del imperio para recuperar su viejo patio trasero. Colombia la gran base militar, eje del proyecto imperial.
El Caín de América.
miércoles, junio 11, 2008
América Latina:opciones en danza
José Steinsleger
El futuro mediato de América Latina se debate en cuatro escenarios políticos, a saber:
1. Gobiernos revolucionarios o reformistas que tratan de conseguir mayor poder para la sociedad (Cuba, Venezuela, Ecuador, Nicaragua, Bolivia, y Paraguay cuando asuma el presidente electo).
2. Movimientos sociales que presionan al Estado para que cumpla con sus obligaciones constitucionales (Argentina, Brasil, Uruguay, Chile, Panamá).
3. Agrupaciones y partidos de origen diverso que defienden reivindicaciones puntuales (México, El Salvador, Costa Rica, Perú, República Dominicana)
4. Fuerzas insurgentes que combaten al Estado (Colombia).
Los mexicanos esperamos no formar parte del punto 4 en un futuro. La lucha se hace indispensable.
Cada uno de los escenarios aparece cruzado por distintas modalidades de expresión, a más de fuerzas internas y externas que obligan al incesante reacomodo político. En ninguno existe la situación ideal, y en todos irrumpe con claridad el rechazo al libre comercio y el capitalismo salvaje.
Se trata de asuntos a los que, por su amplitud y complejidad, apenas podemos aproximarnos de modo tangencial. Sin embargo (y con excepción de Cuba), es importante fijar el punto de arranque de la nueva situación en un par de momentos determinantes de la historia reciente: el alzamiento del pueblo de Caracas en 1989, y el de los zapatistas en 1994. Ambos hechos tuvieron lugar cuando el neoliberalismo amenazaba, sin mayor oposición, con devorarse al mundo existente. Surgidos de experiencias intransferibles y trascendentes, el movimiento bolivariano y el zapatista posibilitaron la vertiginosa superación del páramo ideológico en el que se hallaban las izquierdas del continente.
Detengámonos en ellos: el primero, invocando el legado de integración política pendiente, soñado por Bolívar; el segundo, recordándonos el medio milenio de opresión de los pueblos prehispánicos. ¿Cómo conjugar, en ambos, los límites entre pragmatismo y principios?
En poco menos de un decenio, la llamada “revolución conservadora” había conseguido destazar el cúmulo de esperanzas populares forjadas en el siglo pasado, de 1910 a 1980.
En consecuencia, y en el entendido de que lo perfecto siempre será enemigo de lo bueno, las izquierdas de América Latina están en condiciones de dar un salto de calidad. Como nunca, están dadas las condiciones para proceder con flexibilidad y generosidad, superando el enfermizo canibalismo ideológico que crónicamente guardaron entre sí.
Frente al descomunal poderío del enemigo común, sería suicida y perjudicial una interminable disputa por el canon de la revolución. Unidad, en lugar de unitarismo. Amplitud de miras y respeto a la diversidad, en lugar de señalar las limitaciones de cada proceso por el ojo de la cerradura.
Toda lucha política es singular y conlleva su propia lucha de clases porque no es universal, sino particular. Al imperio le tiene sin cuidado si nuestros hábitos, costumbres, formación y cosmovisión del mundo son de origen maya, caribeño o andino, de carácter proletario o de clases medias urbanas.
Desde hace más de 200 años, la ideología burguesa dejó de ser revolucionaria. Desentrañarla, conocer sus límites para negarla y eventualmente superarla hace a la auténtica “revolución permanente”. Frente al enemigo y consigo mismo. Mas para ello hay que entender que sólo ganan batallas los que están en ellas.
Cuidarse, en consecuencia, del teoricismo que hace naufragar la teoría, y de ciertos pragmatismos que acaban en mero oportunismo. Teoricismo y pragmatismo son prácticas reduccionistas, dogmáticas y excluyentes que perjudican a los procesos de emancipación social efectivos.
Con sus grandezas y miserias, la “realidad real” amerita ser tratada con prudencia y sinceridad. ¿Confundirán las izquierdas (¡una vez más!) ideología con política, pureza con firmeza, lo anhelado con lo real? ¿Incurrirán por enésima ocasión en el desdén y terca negación de la singularidad con la que cada una de ellas actúa en su realidad?
A sabiendas de lo que está en juego, el imperio despliega la cuarta Flota por el continente. Sabe que ya no hay espacio para proyectos revolucionarios o reformistas de tipo elitista, tan fáciles de conjurar. Gane Obama o McCain, las oligarquías y el imperialismo planifican un genocidio mucho más eficaz que el de los nazis. Política de exterminio pensada para dar de baja a buena parte de la población mundial, apropiándose del total de los recursos naturales del planeta.
La indiferencia del gran capital por la depredación del medio ambiente y el cambio climático de la Tierra; el hambre planificada como negocio; la diseminación controlada de epidemias, el combate a cualquier pretensión de que la política sea eje de la economía; el terrorismo mediático en todos los ámbitos de la comunicación (educación, formación, información) forman el paquete in situ de la globalización realmente existente.
El futuro mediato de América Latina se debate en cuatro escenarios políticos, a saber:
1. Gobiernos revolucionarios o reformistas que tratan de conseguir mayor poder para la sociedad (Cuba, Venezuela, Ecuador, Nicaragua, Bolivia, y Paraguay cuando asuma el presidente electo).
2. Movimientos sociales que presionan al Estado para que cumpla con sus obligaciones constitucionales (Argentina, Brasil, Uruguay, Chile, Panamá).
3. Agrupaciones y partidos de origen diverso que defienden reivindicaciones puntuales (México, El Salvador, Costa Rica, Perú, República Dominicana)
4. Fuerzas insurgentes que combaten al Estado (Colombia).
Los mexicanos esperamos no formar parte del punto 4 en un futuro. La lucha se hace indispensable.
Cada uno de los escenarios aparece cruzado por distintas modalidades de expresión, a más de fuerzas internas y externas que obligan al incesante reacomodo político. En ninguno existe la situación ideal, y en todos irrumpe con claridad el rechazo al libre comercio y el capitalismo salvaje.
Se trata de asuntos a los que, por su amplitud y complejidad, apenas podemos aproximarnos de modo tangencial. Sin embargo (y con excepción de Cuba), es importante fijar el punto de arranque de la nueva situación en un par de momentos determinantes de la historia reciente: el alzamiento del pueblo de Caracas en 1989, y el de los zapatistas en 1994. Ambos hechos tuvieron lugar cuando el neoliberalismo amenazaba, sin mayor oposición, con devorarse al mundo existente. Surgidos de experiencias intransferibles y trascendentes, el movimiento bolivariano y el zapatista posibilitaron la vertiginosa superación del páramo ideológico en el que se hallaban las izquierdas del continente.
Detengámonos en ellos: el primero, invocando el legado de integración política pendiente, soñado por Bolívar; el segundo, recordándonos el medio milenio de opresión de los pueblos prehispánicos. ¿Cómo conjugar, en ambos, los límites entre pragmatismo y principios?
En poco menos de un decenio, la llamada “revolución conservadora” había conseguido destazar el cúmulo de esperanzas populares forjadas en el siglo pasado, de 1910 a 1980.
En consecuencia, y en el entendido de que lo perfecto siempre será enemigo de lo bueno, las izquierdas de América Latina están en condiciones de dar un salto de calidad. Como nunca, están dadas las condiciones para proceder con flexibilidad y generosidad, superando el enfermizo canibalismo ideológico que crónicamente guardaron entre sí.
Frente al descomunal poderío del enemigo común, sería suicida y perjudicial una interminable disputa por el canon de la revolución. Unidad, en lugar de unitarismo. Amplitud de miras y respeto a la diversidad, en lugar de señalar las limitaciones de cada proceso por el ojo de la cerradura.
Toda lucha política es singular y conlleva su propia lucha de clases porque no es universal, sino particular. Al imperio le tiene sin cuidado si nuestros hábitos, costumbres, formación y cosmovisión del mundo son de origen maya, caribeño o andino, de carácter proletario o de clases medias urbanas.
Desde hace más de 200 años, la ideología burguesa dejó de ser revolucionaria. Desentrañarla, conocer sus límites para negarla y eventualmente superarla hace a la auténtica “revolución permanente”. Frente al enemigo y consigo mismo. Mas para ello hay que entender que sólo ganan batallas los que están en ellas.
Cuidarse, en consecuencia, del teoricismo que hace naufragar la teoría, y de ciertos pragmatismos que acaban en mero oportunismo. Teoricismo y pragmatismo son prácticas reduccionistas, dogmáticas y excluyentes que perjudican a los procesos de emancipación social efectivos.
Con sus grandezas y miserias, la “realidad real” amerita ser tratada con prudencia y sinceridad. ¿Confundirán las izquierdas (¡una vez más!) ideología con política, pureza con firmeza, lo anhelado con lo real? ¿Incurrirán por enésima ocasión en el desdén y terca negación de la singularidad con la que cada una de ellas actúa en su realidad?
A sabiendas de lo que está en juego, el imperio despliega la cuarta Flota por el continente. Sabe que ya no hay espacio para proyectos revolucionarios o reformistas de tipo elitista, tan fáciles de conjurar. Gane Obama o McCain, las oligarquías y el imperialismo planifican un genocidio mucho más eficaz que el de los nazis. Política de exterminio pensada para dar de baja a buena parte de la población mundial, apropiándose del total de los recursos naturales del planeta.
La indiferencia del gran capital por la depredación del medio ambiente y el cambio climático de la Tierra; el hambre planificada como negocio; la diseminación controlada de epidemias, el combate a cualquier pretensión de que la política sea eje de la economía; el terrorismo mediático en todos los ámbitos de la comunicación (educación, formación, información) forman el paquete in situ de la globalización realmente existente.
sábado, noviembre 10, 2007
“Con el dinero de las mil personas más ricas del mundo se pagaría la deuda de todos los países pobres”
Intevención de Bernard Cassen, fundador de ATTAC, en el Simposio Internacional "Pobre Mundo Rico"
Rebelión
Propuso una nueva repartición de la riqueza y denunció a los grandes medios de comunicación como actores de la globalización y vectores de su ideología. “Estamos en una época de consumo ostentoso, de una clase superior de ‘súper ricos’ que dictan el estilo de vida”.
El Director General de Le Monde Diplomatique y Fundador de ATTAC (Asociación por una Taxación de las Transnacionales financieras de Apoyo a la Ciudadanía), Bernard Cassen, abordó en Ferrol la oligarquía y concentración de la riqueza, el despilfarro de la sociedad de consumo y el papel de los medios de comunicación como vehículos de la ideología neoliberal.
Cassen abordó así las características de una clase social de ‘súper ricos’, que son cada vez más ricos y más numerosos”, una riqueza que por otra parte queda concentrada en los países del Norte. Resaltó el patrimonio desorbitado de esa capa superior que aglutina a 9’5 millones de ricos, en el que sólo el de las 1.000 personas más ricas del mundo se corresponde con la deuda pública de todos los países en desarrollo”.
El fundador de Attac quiso indicar que estos ‘súper ricos’ no son otros que los dirigentes de las grandes corporaciones, que ganan 15.000 euros diarios en Francia, y 430 veces el salario promedio de los trabajadores de sus empresas en Estados Unidos. Hoy día, señaló, “el planeta está gobernado por una oligarquía que acumula ingreso con una voracidad digna de los ‘ladrones’ del fin del S.XIX, la época del capitalismo salvaje en Estados Unidos.”
Medidas urgentes: repartición de la riqueza
De esta forma propuso al respecto una nueva repartición de la riqueza: “disminuir los ingresos de la capa superior de la sociedad y repartir el beneficio para causas y problemas urgentes e inmediatos.”
Otro beneficio que se derivaría de esta medida de repartición sería que se limitarían los efectos de la ‘emulación’, explicó. Trajo a colación la definición de los pobres recogida por el Consejo de Europa en 1984, según la cual son “pobres las personas con menos recursos (materiales, económicos, sociales), que son tan débiles que están excluidos de los modos de vida mínimos aceptables de las sociedades”.
Emulación de las capas superiores de la sociedad
“El principio del consumo ostentoso rige nuestra sociedad. Se trata de imitar a los superiores, al que se sitúa inmediatamente por arriba de nuestra capa social, e ignorar a los de abajo”.
Para explicar las claves de la sociedad, Cassen se remitió al sociólogo Thorstein Veblen y a su “Teoría de la clase ociosa” de 1899, donde opera un análisis de la sociedad perfectamente extrapolable a la situación actual, indicó. “La clave para entender la época es la tendencia a competir con los demás, la emulación, la posesión de la riqueza como medio para diferenciarse y exhibir los signos de un estatuto superior”. Citando al sociólogo, Cassen señaló que “las necesidades no son infinitas, son estimuladas por el juego social y el estilo de vida es determinado por los que están arriba en la pirámide”. Señaló también que por el mismo proceso de emulación los ricos de los países pobres imitan a los ricos de los países ricos. Por otra parte, señaló cómo el tiempo de trabajo aumenta a medida que lo hace la desigualdad social, porque la gente quiere adquirir más ingreso para imitar el nivel de vida de la clase superior.
Sin embargo, “la fastuosidad ostentosa de la clase superior no es de ayer, pero la repercusión social (actual) desborda el marco”, dijo citando un artículo de Le Monde Diplomatique. Cassen tuvo así palabras para el presidente francés Sarkoski, que según él representa la caricatura de lo que hay que denunciar, por su relación con las élites francesas. El Director General de Le Monde Diplomatique señaló en definitiva que el despilfarro y el derroche vaticinan un desastre que se producirá si no se toman medidas.
El poder de los medios y su falta de independencia
A este respecto Cassen acusó por una parte la ausencia de crítica de los medios ante el exceso y concentración de riqueza de la clase superior: “Los grandes medios son actores de la globalización y vectores de su ideología”. Y por otra su poder: “El poder mediático no es el cuarto poder, forma parte del poder económico y del político”, apuntó.
Expuso así el caso francés, en el que tres cuartas partes de los medios pertenecen a tres personas (grupos): dos de armamentos y uno de obras públicas. Señaló así la necesidad de la independencia de los medios, de “operar una lucha por los derechos democráticos en una situación en la que el poder está concentrado en tan pocas manos”, y señaló a este respecto medidas anticoncentración que limiten la participación de empresas en el capital de los medios.
A modo de resumen concluyente, Bernard Cassen hizo hincapié en la necesidad de luchar contra las desigualdades para lo cual “tenemos que luchar contra el poder de los medios, enfrentarnos a los gobiernos y ser educados en la crítica”.
Club Internacional de Prensa
www.clubinternacionaldeprensa.org
www.pobremundorico.org
Rebelión
Propuso una nueva repartición de la riqueza y denunció a los grandes medios de comunicación como actores de la globalización y vectores de su ideología. “Estamos en una época de consumo ostentoso, de una clase superior de ‘súper ricos’ que dictan el estilo de vida”.
El Director General de Le Monde Diplomatique y Fundador de ATTAC (Asociación por una Taxación de las Transnacionales financieras de Apoyo a la Ciudadanía), Bernard Cassen, abordó en Ferrol la oligarquía y concentración de la riqueza, el despilfarro de la sociedad de consumo y el papel de los medios de comunicación como vehículos de la ideología neoliberal.
Cassen abordó así las características de una clase social de ‘súper ricos’, que son cada vez más ricos y más numerosos”, una riqueza que por otra parte queda concentrada en los países del Norte. Resaltó el patrimonio desorbitado de esa capa superior que aglutina a 9’5 millones de ricos, en el que sólo el de las 1.000 personas más ricas del mundo se corresponde con la deuda pública de todos los países en desarrollo”.
El fundador de Attac quiso indicar que estos ‘súper ricos’ no son otros que los dirigentes de las grandes corporaciones, que ganan 15.000 euros diarios en Francia, y 430 veces el salario promedio de los trabajadores de sus empresas en Estados Unidos. Hoy día, señaló, “el planeta está gobernado por una oligarquía que acumula ingreso con una voracidad digna de los ‘ladrones’ del fin del S.XIX, la época del capitalismo salvaje en Estados Unidos.”
Medidas urgentes: repartición de la riqueza
De esta forma propuso al respecto una nueva repartición de la riqueza: “disminuir los ingresos de la capa superior de la sociedad y repartir el beneficio para causas y problemas urgentes e inmediatos.”
Otro beneficio que se derivaría de esta medida de repartición sería que se limitarían los efectos de la ‘emulación’, explicó. Trajo a colación la definición de los pobres recogida por el Consejo de Europa en 1984, según la cual son “pobres las personas con menos recursos (materiales, económicos, sociales), que son tan débiles que están excluidos de los modos de vida mínimos aceptables de las sociedades”.
Emulación de las capas superiores de la sociedad
“El principio del consumo ostentoso rige nuestra sociedad. Se trata de imitar a los superiores, al que se sitúa inmediatamente por arriba de nuestra capa social, e ignorar a los de abajo”.
Para explicar las claves de la sociedad, Cassen se remitió al sociólogo Thorstein Veblen y a su “Teoría de la clase ociosa” de 1899, donde opera un análisis de la sociedad perfectamente extrapolable a la situación actual, indicó. “La clave para entender la época es la tendencia a competir con los demás, la emulación, la posesión de la riqueza como medio para diferenciarse y exhibir los signos de un estatuto superior”. Citando al sociólogo, Cassen señaló que “las necesidades no son infinitas, son estimuladas por el juego social y el estilo de vida es determinado por los que están arriba en la pirámide”. Señaló también que por el mismo proceso de emulación los ricos de los países pobres imitan a los ricos de los países ricos. Por otra parte, señaló cómo el tiempo de trabajo aumenta a medida que lo hace la desigualdad social, porque la gente quiere adquirir más ingreso para imitar el nivel de vida de la clase superior.
Sin embargo, “la fastuosidad ostentosa de la clase superior no es de ayer, pero la repercusión social (actual) desborda el marco”, dijo citando un artículo de Le Monde Diplomatique. Cassen tuvo así palabras para el presidente francés Sarkoski, que según él representa la caricatura de lo que hay que denunciar, por su relación con las élites francesas. El Director General de Le Monde Diplomatique señaló en definitiva que el despilfarro y el derroche vaticinan un desastre que se producirá si no se toman medidas.
El poder de los medios y su falta de independencia
A este respecto Cassen acusó por una parte la ausencia de crítica de los medios ante el exceso y concentración de riqueza de la clase superior: “Los grandes medios son actores de la globalización y vectores de su ideología”. Y por otra su poder: “El poder mediático no es el cuarto poder, forma parte del poder económico y del político”, apuntó.
Expuso así el caso francés, en el que tres cuartas partes de los medios pertenecen a tres personas (grupos): dos de armamentos y uno de obras públicas. Señaló así la necesidad de la independencia de los medios, de “operar una lucha por los derechos democráticos en una situación en la que el poder está concentrado en tan pocas manos”, y señaló a este respecto medidas anticoncentración que limiten la participación de empresas en el capital de los medios.
A modo de resumen concluyente, Bernard Cassen hizo hincapié en la necesidad de luchar contra las desigualdades para lo cual “tenemos que luchar contra el poder de los medios, enfrentarnos a los gobiernos y ser educados en la crítica”.
Club Internacional de Prensa
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lunes, noviembre 05, 2007
Está naciendo la Asociación Bolivariana de Economistas Socialistas (ABES)
Manuel Sutherland
abes.org.ve
Compañeros, poco a poco va creciendo la ABES como una asociación abierta para economistas, estudiantes y cualquier compañero que manifieste interés por el estudio y la praxis de la Economía Política desde una perspectiva socialista, para construir una visión liberadora, crítica y alternativa sobre la realidad económica nacional e internacional. ABES nace para trascender las posturas del neoliberalismo más retardatario, concentrando en un amplia plataforma organizativa los esfuerzos de los más comprometidos socialistas, sin sectarismos ni censuras.
Es para la Organización esencial trabajar sobre un sustento teórico-práctico para la izquierda revolucionaria, que sirva de soporte para la construcción de una sociedad que deje atrás como la prehistoria de la humanidad a la barbarie capitalista. Por ello, es menester trabajar por el desarrollo de esa base en la cuál la satisfacción de las todas las necesidades básicas sea la prioridad, y en el cuál el ser humano pueda desarrollar su máxima potencialidad polifacética dentro de un colectivo liberador.
La ABES no nace de un acuerdo entre elites y cúpulas, académicas o burocráticas, no. El gremio se erige con las prácticas de centralismo democrático más avanzadas y consecuentes, es por ello que en el Congreso Constituyente e Ideológico de ABES, que se hará el10 y 11 de noviembre de 2007 en la ciudad de Caracas, en la Universidad Bolivariana de Venezuela se discutirá todos los aspectos fundamentales de la organización y la naturaleza esencial de la organización.
El Congreso estará abierto a todas las personas que tanto en Venezuela como en cualquier parte del mundo deseen trabajar dentro de sus posibilidades en la Organización. La forma de inscripción se remite a llenar una planilla en nuestro sitio Web www.abes.org.ve, en donde aparece el hipervínculo "inscríbete ya". Contamos con la más amplia participación en la construcción de este proyecto, claramente identificado con el internacionalismo proletario.
El Congreso consta de 2 secciones, el sábado 10 se llevará a cabo una serie conferencias alrededor del tema del socialismo científico en el contexto actual, para ello vendrán compañeros de Argentina, Brasil, Canadá, Venezuela y otros países, con quienes se organizarán mesas de trabajo para la construcción de los documentos finales. El domingo 11 varios camaradas darán saludos y breves conferencias relacionadas a la organización y resistencia de organizaciones socialistas como ABES y discutiremos con unos materiales bases (ya disponibles en la página Web) la totalidad de los aspectos organizativos de ABES. Esos aspectos se condensan en la Carta de Principios, Reglamento Interno, Código de Ética, Acta Constitutiva que se discutirán en mesas de Trabajo y allí decidiremos su contenido final.
¿Quien puede negar que en la lucha por subvertir la sociedad Burguesa, tenemos al menos 150 años de retraso?
abes.org.ve
Compañeros, poco a poco va creciendo la ABES como una asociación abierta para economistas, estudiantes y cualquier compañero que manifieste interés por el estudio y la praxis de la Economía Política desde una perspectiva socialista, para construir una visión liberadora, crítica y alternativa sobre la realidad económica nacional e internacional. ABES nace para trascender las posturas del neoliberalismo más retardatario, concentrando en un amplia plataforma organizativa los esfuerzos de los más comprometidos socialistas, sin sectarismos ni censuras.
Es para la Organización esencial trabajar sobre un sustento teórico-práctico para la izquierda revolucionaria, que sirva de soporte para la construcción de una sociedad que deje atrás como la prehistoria de la humanidad a la barbarie capitalista. Por ello, es menester trabajar por el desarrollo de esa base en la cuál la satisfacción de las todas las necesidades básicas sea la prioridad, y en el cuál el ser humano pueda desarrollar su máxima potencialidad polifacética dentro de un colectivo liberador.
La ABES no nace de un acuerdo entre elites y cúpulas, académicas o burocráticas, no. El gremio se erige con las prácticas de centralismo democrático más avanzadas y consecuentes, es por ello que en el Congreso Constituyente e Ideológico de ABES, que se hará el10 y 11 de noviembre de 2007 en la ciudad de Caracas, en la Universidad Bolivariana de Venezuela se discutirá todos los aspectos fundamentales de la organización y la naturaleza esencial de la organización.
El Congreso estará abierto a todas las personas que tanto en Venezuela como en cualquier parte del mundo deseen trabajar dentro de sus posibilidades en la Organización. La forma de inscripción se remite a llenar una planilla en nuestro sitio Web www.abes.org.ve, en donde aparece el hipervínculo "inscríbete ya". Contamos con la más amplia participación en la construcción de este proyecto, claramente identificado con el internacionalismo proletario.
El Congreso consta de 2 secciones, el sábado 10 se llevará a cabo una serie conferencias alrededor del tema del socialismo científico en el contexto actual, para ello vendrán compañeros de Argentina, Brasil, Canadá, Venezuela y otros países, con quienes se organizarán mesas de trabajo para la construcción de los documentos finales. El domingo 11 varios camaradas darán saludos y breves conferencias relacionadas a la organización y resistencia de organizaciones socialistas como ABES y discutiremos con unos materiales bases (ya disponibles en la página Web) la totalidad de los aspectos organizativos de ABES. Esos aspectos se condensan en la Carta de Principios, Reglamento Interno, Código de Ética, Acta Constitutiva que se discutirán en mesas de Trabajo y allí decidiremos su contenido final.
¿Quien puede negar que en la lucha por subvertir la sociedad Burguesa, tenemos al menos 150 años de retraso?
domingo, octubre 21, 2007
La guerra contra la democracia
MUY IMPORTANTE
Hoy domingo, apaga la tele y échate una buena película documental:
http://video.google.com/videoplay?docid=-3739500579629840148&hl=es
Difúndela lo más que puedas.
Hoy domingo, apaga la tele y échate una buena película documental:
http://video.google.com/videoplay?docid=-3739500579629840148&hl=es
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