Año 8, número 2491
Lunes 12, enero del año 2009
El encabezado del New York Times del día de hoy: “Rechazó Bush solicitud de Israel para bombardear reactor de Irán”, dice entre líneas más de lo que dice en letras.
Como si la toma de posesión de Obama, fijada para el día 20 de este mes, fuera la fecha clave para que el mundo espera para que se tome otro derrotero, lo que ciertamente no sucederá pues tanto el Presidente Electo, como el Saliente, están sujetos a los caprichos de los capitales internacionales.
La única diferencia es que Bush al parecer la hacía con gusto y Obama tendrá que hacerlo tal vez en contra de su voluntad, pues hasta el momento no ha mostrado entusiasmo alguno por la guerra. De hecho durante su campaña se presentó ante sus conciudadanos como pacifista (lo que al parecer fue la clave que lo llevó al triunfo. (¡Vaya fraude!)
Ante un mundo que se agita y convulsiona en reuniones internacionales, en las que por cierto nada logran, pues al cifra de muertos y heridos continúa abultándose hora tras hora sin que se alcance siquiera un alto al fuego humanitario.
El terror y las matanzas en la Franja de Gaza al parecer continuarán hasta el cambio de administración estadounidense; a pesar de la advertencia del Presidente palestino Abbas, de que si los israelitas continúan con el ataque habrá “una catarata de sangre”; y los avisos del ejército israelita previniendo a los palestinos civiles que se aparten de los guerrilleros y de las armas, pues la ofensiva continuará.
Haciendo claro que al mundo lo manejan los intereses económicos, aunque en el frente de sus desmedidas ambiciones pongan a los Dioses.
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