Razones de la protesta

Escrito por Samuel Schmidt
24-08-2006

Una familiar me envía irritada un correo electrónico quejándose por el desastre en la calle Reforma en el DF, dudo que conozca la calle, el DF ha crecido tanto que mucha gente no necesita salir de sus áreas para realizar todas sus actividades. Otra persona hace lo propio desde Toluca. Es obvio que para su existencia el plantón en el Distrito Federal no tiene la menor consecuencia, entonces ¿por qué están tan molestos?
La respuesta no es difícil, son los que compraron el discurso panista que López Obrador era un peligro para México, son de los que creen que el Peje es un "naco" y no debería tener el poder de levantarse y convertirse en un líder político capaz de movilizar al país: claro y puro odio de clase social. También son los beneficiarios de un modelo económico que ha generado una gran pobreza y ha reconcentrado escandalosamente la riqueza, ampliando los contrastes; no debe ser fácil arriesgarse a perder las ventajas frente a quién sostiene que es imperativo cerrar la brecha y eliminar el sistema de privilegios.

Hay quién esta de acuerdo con la lucha pero censura sus métodos y es una postura honesta; aceptan que hubo fraude y aplauden que el lo enfrente pero les gustaría que sea con menos radicalización. En un país de cínicos al que no golpea la mesa con fuerza no le hacen caso, así que a juzgar por el desfalco debe ser el nivel del golpe. Pero puede haber varias razones que explican el tono de las acciones que estamos viendo, exploremos algunas:
El recuento ha mostrado irregularidades en una elevada cantidad de casillas, no queda duda sobre el operativo realizado el 2 de julio para defraudar la elección con la aparente complicidad del Instituto Federal Electoral. Para evitar que los magistrados del tribunal se vendan -cosa no poco usual en México- uno de ellos quiere pasar a la Suprema Corte de Justicia, parece esencial presionar políticamente para que haya un recuento honesto. La limpieza electoral no es una garantía y los magistrados no están por encima de la condición corrupta del poder judicial mexicano.
López Obrador está construyendo su liderazgo político. En 1988 Cuauhtémoc Cárdenas -hoy ausente del debate- aceptó el fraude dejando desabrigados a sus seguidores permitiendo que se golpeara a la izquierda, el Peje no cometerá el mismo error y confía en que la movilización posicione a la izquierda, por lo pronto vienen elecciones en Chiapas y Tabasco.
Recomposición política. Frente a la alianza de las derechas -PRIAN, iglesia, empresarios y el Yunque- López Obrador trata de recomponer a las izquierdas y darles viabilidad política. Para establecer una presencia nacional el PRD debe eliminar la lucha entre tribus y crear una organización política sólida con objetivos bien definidos: la lucha por puestos políticos que ha infectado al PRD afecta ese esfuerzo de construcción, mientras que la lucha contra el fraude ayuda a crear una congruencia política.
Articulación de un discurso. La gente no protesta cuando la derecha manipula el valor de la moneda y la bolsa de valores pero lo hace cuando la izquierda toma las calles, Las derechas usualmente manejan cliches para ocultar sus intereses, las izquierdas deben limpiar sus propuestas. El Peje debe evidenciar las posiciones en pugna y hacer obvia y aparente la fractura ideológica para hacer avanzar agendas progresistas.
Hubo trampa en la elección. El operativo de chapuza electoral se acompaña ahora con un esfuerzo mediático que trata de minimizar el fraude hablando de discrepancia de uno a dos votos en una casilla. López Obrador tiene que llevar la lucha hasta el fin para mostrar que lo suyo no fue un capricho o un acto de desesperación. El busca el reconocimiento de haber luchado por limpiar el sistema electoral. El PAN, se viste como gran paladín de la democracia pero condujo una elección de Estado y ejerció un menú de trampas que creíamos se habían ido junto con el PRI. El resultado de esta disputa marcara con fuego al sistema político mexicano.
Hay voces que tratan de reducir este movimiento como si fuera mesianismo, pero al ser parte de la postura anti-izquierdista no merecen mayor análisis.
¿De donde viene el gran temor a la construcción de un liderazgo carismático y de la politización de las mayorías? Es más cómodo tener a la gente desmovilizada y sin conciencia para que sea manipulada y engañada. Mantener el modelo económico pasa por la eliminación de las alternativas y contrapesos políticos, ¿es esa la opción que representa López Obrador?