Seb Tal
De la resolución del TEPJ me llama sobretodo la atención que "fue rechazada la pretensión para que los magistrados tomaran en cuenta la experiencia de recuento de votos en naciones como Costa Rica e Italia, porque no supieron sustentar estos precedentes de otros países en favor del demandante."
Obviamente esto nos habla del carácter estrictamente legalista del proceder del tribunal al evitar aplicar el amplio mandato que le confiere la Constitución ya que no esta ahí para aplicar un exámen de leyes a Horacio Duarte sino para darle certeza, transparencia y legalidad a nuestra elección. Los magistrados tendrían que haber estudiado los casos expuestos para deducir si existía el precedente. "Leguleyadas" diría Muñoz Ledo. Evidencian la ignorancia en el falso refugio de la estricta aplicación de la ley sometida a la lectura abyecta de un fajo de papeles. Les dio güeva leer la experiencia democrática de esos países y extrapolarla al momento que vivimos. Otra vez ignorar la historia y la experiencia mundial. Otra vez la mediocridad.
Mientras ellos sueñan con sus cofipes y felipes, México, en la conciencia, está abandonando ese corrupto sistema que ha sido construído principalmente a espaldas del pueblo y regido por los poderosos fuera de todo elemental sentido común y ética para mantener los privilegios de una minoría ignorante cuyos intereses principales es la acumulación de riqueza impulsada por un complejo de inferioridad sublime que se expresa en la necesidad de tomar decisiones arbitrarias tecnócratas que provienen de la inyección ideológica de las universidades del imperio norteamericano.
Ley sin justicia no es ley. Como diría Kerlow, México requiere de una borradita general, de sus aparatos e instituciones para darle paso a nuevas formas de organización democrática que integren valores que permitan una convivencia alejadas de la confrontación económica intrínseca del capitalismo.
Hoy el movimiento es dinámico. En el mismo momento en que los magistrados rechazaban el Voto por Voto, en el Zócalo se gritaba "SI NO HAY SOLUCIÓN, HABRÁ REVOLUCIÓN". Consigna que expresa plena conciencia política de la consecuencia que puede implicar las decisión impositiva del poder arcano. El "leguyismo"quedó sin efecto instantáneamente. No atiende El Justo Reclamo.
El Tribunal está dejando claro que no tiene la altura que necesitamos para hacernos de la democracia que buscamos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario