Manipulación mediática: erradicar la identidad patriótica

Sique

Parte importante de la infuencia de los medios en la población es erradicar la identidad nacional. La palabra "patria" ha sido casi borrada del lenguaje, a veces se le utiliza en uno que otro discurso en alguna fecha histórica pero prácticamente ya tendemos a escucharla como si perteneciera a un término del pasado. Muchos jóvenes sienten que la frase "amor a la patria" es cursi o fuera de moda.
Evidentemente esta ha sido la tarea de un imperio que da linea a los medios de comunicación mundiales y de las oligarquías locales que comparten sus mismos intereses. Dentro de los intereses globalizadores imperiales ciertamente no está el amor a la tierra natal a la que el ser humano se siente ligado por vínculos jurídicos, históricos y afectivos. Porque este sentimiento impulsa a la lucha por sus recursos y por su cultura que es justamente lo que quieren arrebatarnos.
A la oligarquía apátrida tampoco le conviene que el pueblo conserve su identidad nacional ni una noción de cuidado y amor por el lugar en el que vive. No le interesa que haya espacios en los que mexicanos y mexicanas de toda la República expongan sus experiencias y sus reflexiones históricas para conformar una idea de patria unificadora pero que abarque toda la riqueza de una patria grande y plurinacional.
Esta labor de erradicar la identidad nacional se puede observar a diario en prensa, publicidad, radio, televisión e internet. Ahora que estamos en año bicentenario de las luchas que ha librado nuestro pueblo por su independencia y soberanía resulta todavía más evidente el afán por banalizar ese espíritu combativo.
Algunos ejemplos:
- Los festejos que se han hecho en relación con la independencia y la revolución son de carácter televiso y disneylandesco: promueven un espectáculo audiovisual superficial y frívolo sin llegar al fondo de lo que significaron esas luchas. Se tiende más a la crítica de esas luchas poniendo el énfasis en sus errores y en intereses mezquinos o vandálicos que exaltando los genuinos deseos de emancipación y las distintas visiones revolucionarias.
- Hace unas semanas presentaron un libro en W Radio (Televisa y Grupo Prisa) titulado "Pendejadas célebres en la Historia de México, el libro prohibido del Bicentenario". En esa misma estación se presenta una radionovela titulada "Los zombies del Bicentenario" una especie de comedia en que se hace una burla de los personajes de la Independencia y la Revolución. Así podemos ir observando cómo los medios no sólo impiden que se reflexione respecto al Bicentenario sino que lo aprovechan justamente para banalizar y mofarse de todo aquello que justamente nos impulsaría a continuar con esas luchas que aún no han obtenido la victoria. El poder cupular tiene miedo de que el pueblo inspirado en ello se empodere y se decida a acabar con tanta ignominia.
- En las librerías casi no hay libros del pensamiento revolucionario. La obra de Flores Magón, por ejemplo, prácticamente no existe. Sin embargo están retacadas de libros de Krauze. No hay una biografía de Bolívar pero que tal de Carlos Slim.
- El objeto más importante del Museo de Arte Popular en ocasión del Bicentenario es una cama de Porfirio Díaz. Pareciera que lo que festejamos es la dictadura.
- El oligarca de Larrea no disimula el desprecio que siente por los símbolos patrios. Ha instalado una carpa para que los Federales custodien sus instalaciones, utilizando la bandera para que los cubran del sol. ¿Alguien puede pensar que estos Federales podrían en un momento dado defender a la patria cuando así tratan a uno de sus símbolos?