miércoles, noviembre 25, 2009

Columna Asimetrías. Los Muertos de Calderón

Por Fausto Fernández Ponte





25 noviembre 2009

"Al ver en TV o en los periódicos el rostro abotagado, preocupado, como lloroso, de Felipe Calderón, no se sabe si sentir lástima por él o por nosotros: Es obvio que sobre su conciencia pesan los 16 mil muertos en la narcoguerra".
Feliciano Barballido.

I

Antes de entrar en materia acerca del tema de "Los Muertos de Calderón" --las 16 mil víctimas fatales de la llamada "guerra contra el narco", iniciada hace 35 meses-- consígnese aquí, en ésta entrega, que el tema tratado ayer, intitulado "La Patria Está Encinta.." provocó un alud epistolar, inusitado a nuestro ver, de los caros leyentes .

Uno de esos leyentes, quien se identifica como Francisco Jiménez Rosales, inquiere con aparente jocosidad que disfraza una preocupación subyacente: "¿Quién embarazó a la Patria? ¿El PRI? ¿El PAN? ¿Calderón? ¿El loco Chente (o su otro yo Marta Sahagún)? ¿Zedillín? ¿Salinas El Perverso? ¿O el blandengue promotor del falso nacionalismo revolucionario, De la Madrid?"

Otro leyente, también de nombre Francisco pero apellidado Fonseca Magno, ofrece también una metáfora zumbona: "El que preñó a doña Patria tendrá que responder por ello, pero pienso que la paternidad de la criatura, una vez nacida, será reclamada por millones de mexicanos. Yo ya me incluyo entre los progenitores de una transformación a fondo".

Rosa Mirna Cruz, leyente quien nos dice asimismo con un tropo --"lo atrapo a usted cada noche por Internet"-- que "espero que esa preñez sea de trillizos por lo menos, aunque yo querría que sean muchos más. Necesitamos mexicanos con vocación para cambiar el estado de cosas que nos oprime desde que yo era una joven hace unos 30 años".

El leyente Pedro Portela Hernández, quien, infórma leernos desde Veracruz, apunta: "La Patria lleva en su vientre no el cigoto de la transformación, sino el del descontento, la irritación, la desesperanza (...) y si viene al mundo habría que preguntarnos ¿quièn será la partera? La partera misma lo puede matarlo al salir por el canal vaginal".

Una nota colorida, la de la leyente Gertrudis Monterrubio, quien léenos en San Luis Potosí: "La Patria ha estado encinta muchas veces por violación y lo que ha parido ha sido una caterva de esperpentos, monstruos, individuos deformes intelectual y hasta fìsicamente, enfermos mentales y disfuncionales para servir a México; ahí tiene usted al Salinas, al Fox, al Calderón".

II

Prosigamos con el tema seleccionado para hoy. La cifra de más de 16 mil muertos es la que manejan extraoficialmente las fuerzas militares y policiacas, pues ni el Ejército ni la Armada ni mucho menos la secretaría del despacho de Seguridad Pública o la Procuraduría General de la República daría la cara si hace oficiales estadísticas tan impresionantes.

De esos 16 mil y pico de muertos --en su mayoría "ejecutados" aunque un grueso importante es de víctimas inocentes y de caídos en combetes entre las Fuerzas Armadas y los sicarios del narco--, un número de espeluzno es de menores de edad y mujeres. Asesinados han sido unos 610 niños y unas 4 mil 900 mujeres.

Esa macabra contabilidad --la de los 16 mil y más asesinados-- no incluye otra cifra difundida el 15 de noviembre por la secretaría del despacho de la Defensa Nacional: tres mil 726 mujeres han sido asesinadas desde enero de 2007 a septiembre de 2009 en todo el país, vìctimas no del narco ni del Ejército o la Armada o las policías, sino de la violencia intrafamiliar.

Mas no solamente eso. Tan sólo en el Distrito Federal, el 43 por ciento del total de mujeres mayores de 15 años ha sufrido algùn tipo de violencia por parte de su pareja. En la capital, según estadìsticas gubernamentales, cuatro de cada diez mujeres han vivido violencia emocional y abusos de otro tipo a manos de sus consortes.

Ello tiene varios telones de fondo contrastantes: uno de ellos es la discriminación económica y social. EL Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación afirma que de cada cien niñas que ingresan a la educación primaria, sólo cinco terminan una carrera técnica o profesional. Y de cada cien niños, 11 concluyen. Ello describe una realidad lacerante de opresión de la mujer.

En lo laboral, la realidad es aun más dramática: la mujer percibe salarios hasta un 50 pot ciento más bajos que el varón desempeñando el mismo trabajo. Por añadidura, de cada cien trabajadoras, sólo dos tienen prestaciones e inserción a un règimen de seguridad social. En el varón, 14 de cada cien tienen prestaciones e incorporación al seguro social.

El gobierno del DF incorpora en sus estadísticas un fenómeno otrora desestimado: la violencia económica, la cual define como aquella que ejerce un miembro dominante de una familia o pareja sobre los demás miembros, privando a éstos de medios para la subsistencia; es decir, penándolos incluso con el escamoteo de alimentos y otros satisfactores como dormir, etc.

Más es el número de asesinados el sucedido más espectacular. A los 16 mil y pico de asesinados durante el sexenio del señor Calderón en el entorno de la guerra contra el narco sumaríanse seis mil registrados durante el mandato de Vicente Fox, lo cual arrojarìa un resultado sin precedente: en los ùltimos nueve años han muerto asesinados en México 22 mil mexicanos.

III

Ha sido, pues, una década sangrienta desde cualesquier prismas se vea éste fenómeno. El promedio diario de asesinados durante el sexenio corriente es de 16. Cierto: según la SSP federal, cada día son asesinadas 16 personas vinculadas de alguna manera al tráfico ilícito de estupefacientes y psicotrópicos, cuyo consumo en México es documentadamente creciente.

Y más aun: el señor Calderón ha detenido a unos 61 mil sicarios, la mayoría de los cuales está sin sentencia en la cárcel. Ello sugiere la pregunta que nos plantea el caro leyente Carlos Manuel de la Barra Aguileño, quien nos sigue desde Tijuana, Baja California: "¿Podría usted decirme de dónde salen tantos sicarios, tantos narcos, tantos delincuentes?"

La respuesta aproximada sería la de determinar los correlatos entre la desigualdad y la injusticia social institucionalizadas, que se manifiestan con dolorosa elocuencia en el desempleo, la pobreza, la miseria, la inseguridad en todos sentidos, la incertidumbre, la desesperación. Esa realidad describe otra más abrumadora: la de que vivimos bajo una opresión económica, política y social.

Y quien vive así, bajo esa opresión, ve en el narco una puerta de escape hacia horizontes que, si bien parecen promisorios, son espejismos. De esa opresión es difícil desasirse, por el estilo inicuo del ejercicio de los instrumentos de poder y control social que mellan, si no es que cercenan, todo asomo de desarrollo de conciencia política. Estamos despolitizados.

¿Quién nos oprime? El hampa de la política, definición acuñada por los opositores descendientes de inmigrados irlandeses en Nueva York al control político de los que se identificaban a sí mismos como "verdaderos yanquis" a mediados del siglo XIX. La definiciòn devino, más precisa, en mafia del poder. Hoy la usa Andrés Manuel López Obrador.

Ese nùmero grueso de asesinados en los últimos nueve años y, acusadamente, en los últimos tres, es un indicador inequívoco de que en Mèxico se ha transitado del gobierno al desgobierno y de éste, la actual, a la de la anomia. Hay gobernaciones de cotos de poder, de potestades fácticas. A la Federación la sostiene únicamente un endeble adhesivo de la rebatiña carroñera.

Los muertos de don Felipe son estantiguas que rondan doquiera los cenáculos del poder del dinero y la política, convocados en un eje neural: la conciencia misma de quien se ostenta Presidente. Murieron a hierro por matar a hierro y porque el poder político calderonista del Estado no supo qué hacer con el potencial de ese desperdiciado recurso humano obligado a delinquir para sobrevivir.

ffponte@gmail.com

http://www.faustofernandezponte.com/

Glosario:

Anomia: falta de correspondencia entre las normas (o leyes) y las conductas sociales o de grupos y estratos de la sociedad. Relajamiento del respeto de la sociedad a las reglas morales y jurídicas. Cada grupo, incluyendo los de interés, de presión y/o de poder se rige por sus propias reglas, las cuales son opuestas a las generales o de la comunidad. Cada quien hace lo que quiere. Es la confusión total, la anarquìa y la desintegración por la falta de vigencia de los sistemas normativos del Estado.

De laMadrid, Miguel:Presidente de México de 1982 a 1988. El señor De la Madrid ofreció inspirar su gobierno en en los conceptos "nacionalismo revolucionario" y "renovación moral". Abrió las puertas de la economía mexicana al neoliberalismo y a una dependencia con respcto a Estados Unidos. Hubo escándalos de corrupción.

"El Salinas": alusión a Carlos Salinas de Gortari, Presidente de México de 1988 a 1994. El señor Salinas accedió a la Presidencia tras una sospechosa "caída" del sistema de cómputo de votos que registraba ventaja para el candidato del Frente Democrático Nacional, Cuauhtémoc Cárdenas, seguido por el del PAN, Manuel Clouthier. Historiadores y politólogos describen esa accesión como golpe de Estado técnico. En su sexenio hubo escàndalos de corrupción y represión brutal (casi mil perredistas asesinados).

Sahagún, Marta: esposa del Presidente Fox, percibida popularmente como la mujer que en realidad desempañaba de hecho funciones de la investidura presidencial de su esposo. Hubo escàndalos de corrupción y banalidad.

Zedillín: mote que en 1999 le endilgó burlonamente el entonces candidato del Partido Acción Nacional Vicente Fox a Ernesto Zedillo, a la sazón Presidente de la República (1994-2000). En la administración del señor Zedillo hubo escandalos de corrupciòn, emblematizados en el "rescate" de bancos (Fondo Bancario de Protección al Ahorro, o Fobaproa) que enriqueció aun más a unos opulentos banqueros, empresarios y políticos y convirtió el monto de dicho empeño rescatador en deuda pública, que los mexicanos estamos pagando y pagaremos hata 2050. El señor Fox fue Presidente de 2000 a 2006.


Lecturas recomendadas:
La Jefa: vida pública y privada de Marta Sahagún, de Olga Wornat.
Crónicas Malditas, de Olga Wornat.
1988: el año en que calló el sistema, de Martha Anaya.

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