México será el país con el menor crecimiento este año en AL

JUAN ANTONIO ZUÑIGA

Con una expansión ligeramente superior a 3 por ciento en su producto interno bruto (PIB), México es el país de la región latinoamericana y del Caribe que registrará el menor crecimiento económico en 2007, indican las proyecciones divulgadas ayer por la Comisión Económica para América Latina (Cepal).

En este contexto de ''promedios que esconden heterogeneidades importantes'', se estima que el crecimiento económico de la región será de 5 por ciento, informó el secretario ejecutivo del organismo, José Luis Machinea. De las 20 economías consideradas, 11 llevan una tendencia a alcanzar tasas de crecimiento superiores al promedio de la región, y nueve se encuentran por debajo de esa media.

Cuba, con un incremento de 10 por ciento en su PIB -según proyectan las autoridades de la isla-, y Panamá, con una expansión de 8.5 por ciento, de acuerdo con las estimaciones de la Cepal, encabezan la lista de los países latinoamericanos y caribeños con mayor tasa de crecimiento esperada para este año. En el lado de las economías de más bajo desempeño figuran Haití y Ecuador, con 3.5 por ciento de aumento cada uno, y México, con 3.2 por ciento.

En teleconferencia de prensa desde Santiago, Chile, en la que el secretario ejecutivo de la Cepal presentó el Estudio económico de América Latina y el Caribe 2006-2007, Machinea señaló que el organismo estima un crecimiento de 4.6 por ciento en la economía de la región para 2008, con lo cual el producto por habitante aumentará a una tasa anual superior a 3 por ciento por quinto año consecutivo, el periodo de mayor incremento desde la década de los 80.

De entre los cinco factores de preocupación para el desenvolvimiento económico de los países de la región, Machinea destacó el riesgo potencial que representa ''la mayor volatilidad de los mercados financieros internacionales''. Los otros cuatro son la apreciación reciente del tipo de cambio real, la sostenibilidad de los equilibrios fiscales, el bajo nivel de la tasa de inversión y la aceleración inflacionaria en algunos países.

Entre las características sobresalientes de esta fase de expansión económica, Machinea explicó que en ''un hecho inédito'' se presenta la conjunción de crecimiento y superávit en la cuenta corriente de la balanza de pagos regional, particularmente en economías de los países sudamericanos, como la argentina, que este año crecerá 7.5 por ciento; la peruana, con 7.3 por ciento de aumento; la venezolana con 6.8 por ciento de expansión, y la de Colombia, con una tasa de elevación de 6.8 por ciento también.

Machinea, quien insistió en que ''los promedios esconden heterogeneidades importantes'', apuntó que otra característica relevante de la fase actual de expansión radica en que ''el motor de crecimiento de la demanda es la inversión, y en menor medida las exportaciones'', por lo que consideró que ''el principal desafío es seguir aumentando la inversión para asegurar la sostenibilidad del crecimiento a mediano plazo''.

Subrayó que ''a pesar de la recuperación, la inversión todavía no alcanza los niveles de la década del setenta'', y se mantiene en una dimensión relativamente baja.

En materia de ocupación señaló que la tasa de desempleo en América Latina y el Caribe, de 8.3 por ciento, se ubica en niveles similares a los de la primera mitad de las década de los 90, y aseguró que ahora se generan empleos de mayor calidad y se observa un aumento de la productividad del trabajo.

El balance de la Cepal revela también que ''impulsada por la mejora de las cuentas fiscales, cae la deuda pública'', debido a que el excedente de la balanza básica (cuenta corriente) se ha destinado a cancelar deuda y a aumentar las reservas. Entre mayo de 2006 y el mismo mes de 2007, especificó, Brasil acumuló unos 74 mil millones de dólares en su reserva de divisas.

Pero esto también ha traído aparejado un problema: ''se observa una tendencia a la apreciación cambiaria'', a pesar de la intervención de algunos bancos centrales en los mercados, y esto dificulta el manejo de la política monetaria. Hay una fuerte apreciación en el tipo de cambio en Brasil y Colombia, ejemplificó.

También preocupa, agregó, ''la sostenibilidad de los equilibrios fiscales'', debido a que el aumento de los ingresos públicos está fuertemente asociado a la evolución de los precios de las exportaciones y, además, en los últimos años el gasto público ha comenzado a aumentar.