Ecuador pide reunión de cancilleres de OEA para aclarar violación territorial por Colombia
La canciller ecuatoriana dijo que la incursión de Colombia fue una "acción deliberada" y acusó al presidente Uribe de "haber mentido a Ecuador y a todo el mundo".(Foto: TeleSUR)
María Isabel Salvador recordó que la gravedad de los hechos denunciados obligó al Gobierno ecuatoriano a romper relaciones diplomáticas con Colombia, y certificó que “en esta ocasión, no será suficiente una excusa diplomática”.
La ministra de Relaciones Exteriores de Ecuador, María Isabel Salvador, pidió este martes ante el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) que se convoque, a más tardar el 11 de marzo, a una reunión de consulta de los cancilleres de los 34 países miembros de la organización hemisférica.
El propósito de esta cita será abordar el tema de la violación del territorio ecuatoriano por parte del ejército colombiano, en la madrugada del pasado sábado 1 de marzo, en un bombardeo contra un campamento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
En nombre de Ecuador, María Isabel Salvador solicitó además al Consejo Permanente que "a la luz de la Carta de la OEA, se condene la violación al territorio y a la soberanía de un Estado perpetrada por otro Estado".
La canciller ecuatoriana llamó también a que el Consejo Permanente designe "inmediatamente una Comisión de Verificación que investigue y verifique los hechos relacionados con la violación de la soberanía e integridad territorial del Ecuador por parte de Colombia y eleve el correspondiente informe".
Señaló que las nuevas acusaciones contenidas en el comunicado del 3 de marzo 2008 de la Presidencia de Colombia, "que insinúa acuerdos entre las FARC y el Gobierno del Ecuador, así como las aseveraciones temerarias del general Oscar Naranjo, director de la Policía Nacional de Colombia, constituyen un acto inamistoso y un deliberado intento de desviar la atención del hecho central que constituye la violación de la soberanía territorial ecuatoriana".
Enfatizó que la gravedad de los hechos denunciados obligó al gobierno ecuatoriano a romper relaciones diplomáticas con Colombia y certificó que "en esta ocasión, no será suficiente una excusa diplomática".
Ecuador rechaza presencia extranjera
Igualmente, la canciller ecuatoriana reiteró que el Gobierno de su país "rechaza enfáticamente la presencia de efectivos de grupos irregulares en el país, así como de tropas de otras naciones".
Durante su discurso ante la reunión extraordinaria del Consejo Permanente de la OEA, la alta funcionaria recordó que "el Ecuador utilizará todos los recursos de seguridad disponibles para evitar que esta circunstancia se repita. Ninguna fuerza militar, regular o irregular, puede actuar en el territorio del Ecuador".
Argumentó que no ha existido, de parte del Estado ecuatoriano, "provocación, acción o peor aún agresión de ningún tipo que pueda llevar al gobierno colombiano a pretender justificar su incursión en territorio ecuatoriano como un acto de legítima defensa".
Por otra parte, agregó que el Estado ecuatoriano, en el mismo sentido que lo hace la doctrina internacional, "no reconoce la presunta práctica de la persecución en caliente aérea y terrestre".
"Y en este mismo sentido, el propio Estado colombiano se pronunció en el año 1996 cuando su entonces ministro de Relaciones Exteriores, Doctor Rodrigo Pargo, en referencia a la persecución en caliente señaló: 'Lo prohíben las leyes, la Constitución y los tratados internacionales firmados por Colombia'", argumentó.
De igual manera, "el ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, mediante un comunicado de prensa del 7 de mayo de 1996, descalificó dicha práctica al señalar que reitera categóricamente que nada justifica la violación de la frontera en cualquier dirección", recordó María Isabel Salvador.
El Gobierno ecuatoriano renovó sin embargo su llamado a una solución pacífica del conflicto interno colombiano "en el marco de las leyes de ese país y con respecto a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario. Augura que el Estado colombiano y los grupos irregulares encuentren la senda hacia un entendimiento político".
Ecuador "siempre se mantendrá dispuesta a aportar, en cuanto esté a su alcance para la pacificación y los entendimientos humanitarios en Colombia", reiteró. "Alternativa inaceptable" para Colombia
Por su parte el embajador colombiano ante la OEA, Camilo Ospina, aceptó el llamado a una reunión de Cancilleres y pidió la convocatoria de una "comisión de exploración de alternativas políticas", diferente a la propuesta de Ecuador, bajo la dirección del Secretario General.
"Cualquier otra alternativa es inaceptable para Colombia", agregó Ospina.
El embajador colombiano reconoció que su país incursionó en territorio ecuatoriano durante la acción militar que ocasionó la muerte del líder guerrillero Raúl Reyes. Sin embargo, Colombia mantiene que esta acción se llevó a cabo "a mil 800 metros de la línea fronteriza con Colombia", y que el Gobierno ecuatoriano "habla de casi 10 kilómetros".
Ospina negó además que aviones colombianos hayan incursionado en territorio ecuatoriano. "Se disparó desde el norte, desde territorio colombiano, a una distancia aproximada entre 3 y 5 millas dentro de la frontera de Colombia. De haber incursionado en territorio ecuatoriano, el radar militar de ese país, situado en Lago Agrio, lo hubiese detectado", justificó.
Estimó que "no es un argumento válido decir que los aviones colombianos han podido incursionar a baja altura para no ser detectados, puesto que para lanzar bombas necesariamente tendrían que haber subido de altura y por lo tanto, ser detectados por el radar en mención".
Finalmente, Ospina puso a disposición de la OEA las presuntas computadoras halladas en el campamento de las FARC, "para efectos de preservar la prueba y garantizar su fidelidad".
TeleSUR / sb - MC
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