Fracasó el espurio

Los “programas anti-crisis” anunciados por FeCal NO han funcionado / NO se tienen los instrumentos precisos para realizarlos

MEXICO, D.F., 22 de marzo (LA JORNADA).- Los programas anticrisis anunciados por el gobierno no han funcionado porque no se tienen los instrumentos precisos para realizarlos, aseguró Patricia Rodríguez, del Instituto Nacional de Investigaciones Económicas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En entrevista destacó que el problema fundamental es el alto desempleo (cercano a los niveles de 1995) y la caída de la economía, que ya se advierte será superior al 2 por ciento.
Esos son los principales efectos que hay que atacar, pero también hay otros elementos, como los pasivos de las empresas, caída de las manufacturas, de la industria automotriz, de las exportaciones, del precio del petróleo. “Hay demasiados focos rojos como para estar trabajando con esta lentitud, tratando de resolver el problema con declaraciones, cuando lo que se necesita es enfrentar y hacer que fluyan los recursos de manera inmediata. Eso ya se está haciendo en todo el mundo y México se está viendo bastante lento”, dijo la académica.
Señaló que la gravedad de la crisis, cuyos efectos comenzaron a reflejarse a finales de 2008, obligaba a que en estos momentos se realizara la primera evaluación sobre la efectividad del programa anticíclico anunciado el 7 de enero por Felipe Calderón, a fin de modificar el rumbo o corregir los planes en los rubros necesarios.
Sin embargo, dijo, ya pasaron casi tres meses del anuncio y “ni siquiera se han ejecutado la mayor parte de las medidas, porque no se tiene los instrumentos precisos para realizarlos”, mientras día con día aumentan los pronósticos y las perspectivas de que la economía baje cada vez más, dijo la investigadora de la UNAM.
Y el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) no descarta que la caída de la economía para este año sea cercana a 3 por ciento. En su análisis semanal señala que “es evidente que los pronósticos de una caída del producto interno bruto (PIB) cercana a 2.0 por ciento para todo el año comienzan a perder vigencia”, sobre todo ahora que la actividad industrial del país cayó a un ritmo no visto desde mediados de 1995.