Aquí terrorismo de Estado puro y llano

María Teresa Jardí

Mientras en Cannes, Michael Hanecke, filósofo que además es también cineasta y sociólogo, recibe la Palma de Oro del Festival de Cine más importante del mundo, por considerar que su película, The White Ribbon, donde explora el terror nazi, es la mejor de todas.
La entrega del Oscar, ya se sabe, que es una pasarela para entregar premios a películas gringas, en general, mediocres. Películas con las que invaden, para también deseducar, a la telebasura y a la inmensa mayoría de cines del mundo. Películas con finales hollywoodenses, aún las medio buenas, entre las que ya destaca la medio hindú que cobra la vida de dos de los niños que en ella participaron y que ya han sido asesinados.
Mientras se premia la filosofía en Europa, el continente mucho menos tocado por la influenza, aquí usada por la usurpación panista para encubrir la pulmonía letal que fuera dictaminada como un catarrito cualquiera, por el médico enviado por el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, al estilo de los médicos que utilizaron a los nazis para hacer experimentos, asesinando, aquellos, a pobres que además eran judíos o comunistas, pero a los que hermanaba el ser pobres. Carstens, el de aquí, a mexicanos, indígenas y campesinos y mujeres y niños y ancianas y luchadores sociales… a los que hermana lo mismo: el ser pobres.
Mientras se premia allá al filósofo. Aquí la derecha usurpadora deporta a Miguel Ángel Beltrán Villegas, quien se encontraba realizando estudios de posdoctorado en el Centro de Estudios Latinoamericanos, en la Universidad Nacional Autónoma de México.
La usurpación Fecalista, que hace dos años desapareciera forzadamente a dos militantes del EPR, al doctor Beltrán, un conocido catedrático en el medio académico colombiano y quien ha sido investigador y docente en las principales universidades de ese país, como la de Antioquia, la Nacional de Colombia y la del Cauca, lo deporta, después de habérsele negado su condición migratoria (FM3) durante un año, en que se estuvo presentando de manera sistemática en las oficinas de Instituto Nacional de Migración (INM). Se le acusa de ser integrante de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia. “Lo cual es completamente falso”, aclaran sus compañeros.
Mucho más aberrante es el hecho, digo yo, si lo es. Porque en ese caso se trata de un perseguido político entregado de manera ilegal por la impresentable usurpación fascista del Ejecutivo federal que lleva varios años encabezando el PAN.
Qué tiempos aquellos en los que los gobiernos mexicanos solidariamente abrían las puertas de México a los perseguidos por el fascismo del mundo.
Con una larga trayectoria académica y de investigación que demuestra su labor como maestro preocupado por la historia política y de la violencia en Colombia, los compañeros del doctorado de Estudios Latinoamericanos, exigen al gobierno colombiano que rectifique las acusaciones hechas contra el profesor Miguel Ángel Beltrán y que pare la cadena de persecución y estigmatización política adelantada contra docentes y estudiantes de las universidades públicas, que aportan en la construcción de posturas políticas críticas y que no comparten el proyecto guerrerista del actual gobierno encabezado por otro impresentable gobernante sometido al imperio yanqui.
Allá un premio a la memoria histórica. Aquí terrorismo de Estado puro y llano. Ni siquiera lo pidió Colombia. El panismo usurpador de motu propio lo entregó. Imperdonable es el daño causado por la derecha fecalista usurpadora a los mexicanos.

Muy bien por el premio de Cannes, pero de ahí a pensar que Europa es un continente que "premia" a la memoria histórica es una hipérbole. Es desconocer que Europa es un aliado a los Estados Unidos, al imperialismo, al neoliberalismo, a la política bélica y que ha sido desde hace mucho explotador y colonizador de América Latina y Africa. ¿Por qué irnos al lugar común del terror nazi cuando actualmente vivimos el terror estadounidense? Una cosa es que su manejo mediático sea más discreto y de vez en cuando aviente un pedazo de pastel y otra que en Europa encontremos realmente una fuerza que lucha por la justicia mundial. ¡Por favor! ¿Ya se nos olvidó lo que ese continente hizo y sigue haciendo con quien se deje? ¿No sabemos quién es Sarkozy y qué defiende?