jueves, junio 04, 2009

Estado policíaco

Lilia Arellano

“Como el miedo es el mayor suplicio de los tiranos, el crimen más irremisible a sus ojos es
hacerles sentir miedo”. Jean Baptiste Say

Los golpes propinados a los grupos de narcotraficantes, pero principalmente a las autoridades que supuestamente están ligadas con ellos, no ha detenido, ni siquiera menguado, el número de ejecutados; día a día, hora tras hora, en cualquier punto, en cualquier lugar, en cualquier Entidad, bajo distintas circunstancias, sigue creciendo el número de cadáveres hasta alcanzar, a la fecha, los más de once mil en tan solo dos años y medio de mandato calderonista.
Todo ello está muy lejos de significar una tranquilidad para los ciudadanos y esto, no es mera crítica, existen, por desgracia, demasiadas bases para considerar que tales operativos tienen fines completamente distintos a los que se publicitan a cada momento y que, incluso, le sirven, con la venia de las autoridades electorales, al Partido Acción Nacional para hacer campañas a su gusto, utilizando el membrete del gobierno actual para lograr despuntar.
Más rápido de lo que pensamos se están coartando las libertades; han modificado leyes en los momentos económicos más críticos y en total y absoluto silencio, mismas que permiten el espionaje telefónico a placer, a gusto de quien se encuentre al frente de las policías federales. Ya nos llevaron al toque de queda al obligar a la población a mantenerse encerrada so pena de ser víctimas de una epidemia sólo concebida para conseguir fines que cada vez aparecen con mayor claridad y que nos llevan al autoritarismo y a la dependencia gubernamental del vecino del Norte.
Se violentaron garantías individuales también bajo el pretexto de la influenza y su propagación. Con la bandera de la mentada “guerra contra el narcotráfico” ya no sólo la población vive temerosa sino también las autoridades estatales y no precisamente porque se encuentren inmersos o formen parte de la mafia, sino porque se está comprobando a cada paso que todo lleva un signo electorero y de “amansamiento”.
En ese mismo tenor aparecen los integrantes del Ejército Mexicano quienes al final y aún operando en coordinación con los propios federales son los del desgaste. Ellos, los militares, no salen en los canales de la televisión ni se elogia su labor, todos los aplausos se los lleva el gabinete de seguridad de Felipe Calderón, el que se encuentra totalmente al servicio y disposición de los intereses que los panistas enarbolan y que están orillando a la población a extremos cuyo final es predecible si tomamos en cuenta la presión que se vive en el renglón económico.
Habrá también que incluir el enfrentamiento que provocan de manera casi permanente entre los partidos opositores al PAN. Primero fue intentar golpear a los seguidores de Andrés Manuel López Obrador por la vía de los senadores del Partido del Trabajo y Convergencia, es decir Ricardo Monreal y su fracción. Consiguieron el respaldo de Amalia García quien entró al centro del infierno y ahondó las diferencias entre esos partidos, antes coaligados con el PRD; de paso evidenció la entrega de los “chuchos” a los mandatos blanquiazules.
Le siguió un megaescándalo en Morelos el cual fue detenido, opacado, sacado de las noticias de primera plana con el operativo en Michoacán. Se tendió así toda una red de protección para el gobernador Marco Antonio Adame que incluyó a su antecesor Sergio Estrada Cajigal. Le siguió Nuevo León, el lugar en donde en el pasado reciente se llevaron a cabo manifestaciones populares debidamente manipuladas que exigían la salida del Ejército de la Entidad y particularmente del municipio capital y la zona conurbada.
Y es, con ese mismo Ejército, con el que realizan el operativo que rebasó al realizado en Michoacán, para que sean los verdes quienes carguen con todas las críticas, es decir con el desgaste en pleno. Le ha seguido Veracruz con las mismas intenciones. Así, hasta hoy, los ataques contra el narco se dan en las Entidades gobernadas por los opositores. Nada contra los blanquiazules, como si Jalisco, Querétaro, Morelos, Baja California, fueran auténticos paraísos en donde no reina ni la corrupción y menos aún actúa la mafia.
Ahora que, de los 53 reos que se les fugaron del penal zacatecano ya nadie dice nada. No encuentran a nadie. Se esfumaron. Desaparecieron de la faz del planeta con todo y sus espionajes, sus intervenciones, sus servicios de inteligencia y su sensacionalismo en el golpeteo contra grupos que, como en el caso de los gobernantes de partidos políticos distintos al PAN, pertenecen a la clase privilegiada, es decir a la que comanda el célebre Joaquín El Chapo Guzmán.

Mucho ruido y pocas nueces
En la reunión del Consejo Nacional de Seguridad se escucharon las voces de protesta de los gobernadores amparadas por el incumplimiento del compromiso de actuar conjuntamente Federación, Estados y Municipios. También porque de nueva cuenta se violan artículos constitucionales con la mayor impunidad. Ni qué decir del reclamo de que tales operativos tengan de fondo más acciones electoreras que de real combate al narcotráfico.
Y es que mientras aquí Calderón aprovecha cualquier situación para emplear la política autoritaria, dictatorial, amparado por los discursos de su secretario de Gobernación Fernando Gómez Mont, en los Estados Unidos no se da un solo golpe, no hay ningún compromiso cumplido, sigue aumentado el consumo de estupefacientes, es más ya hasta incrementaron el precio de las drogas con el pretexto de que ahora cuesta más trabajo “pasarlas”. Así las cosas, ¿en qué puede basarse el inquilino provisional de Los Pinos para considerar que los ciudadanos debemos creerle una sola palabra que emita?
Logra el michoacano, o así lo cree, dar varios golpes de jalón: intimidar a los gobernadores de los partidos opositores a fin de que de nueva cuenta, como lo hicieron muchos en la elección del 2006, operen en su favor en los próximos comicios del 5 de julio; hacer fama de que se está aplicando el estado de derecho, cuando al buscarse esa temible Guardia Nacional nos están llevando a la cancelación de todas las garantías individuales; dividir a los partidos; quedar bien a los ojos del mundo dándole publicidad a sus operativos, pero ocultando que lleva más de once mil cadáveres sembrados; distraer a la opinión pública de lo que son problemas realmente medulares, que atañen a todos por igual como son el económico y el laboral; entregar en lo oscurito a PEMEX y concesionar a una empresa española toda una red de operación que la CFE planeó y a la que le invirtió para dar distintos servicios que incluyen hasta telefonía y, por si fuera poco, merced a los daños causados a las Entidades eminentemente turísticas, ocultar el gran fracaso que es Vive México.
Parecería que llegó el momento de que se aliaran todos los opositores y el movimiento fuera en serio y en serie pero… todo se demuestra andando y, por desgracia, es Calderón el único que parece estarlo haciendo.

Contrataca el PRI
Una prueba más de la división que genera Calderón, en donde más allá de los intereses políticos está enfrentando a los mexicanos contra los mexicanos, se encuentra en el hecho de que el PRI y el PAN dejaron de lado las formas políticas e intercambian abiertamente acusaciones y recriminaciones en torno a las ligas de distinguidos militantes de esas organizaciones políticas con el crimen organizado y se imputan mutuamente que sus administraciones estatales y federal son las responsables de la actual inseguridad que vive el país y de la bonanza que registra el crimen organizado en prácticamente todo el territorio nacional.
Ante las declaraciones del inquilino de Los Pinos en el sentido de que administraciones federales y estatales auspiciaron con su descuido y tolerancia el actual auge de la delincuencia organizada, Manlio Fabio Beltrones, coordinador del PRI en el Senado de la República, reviró que el michoacano debería pensar en cambiar al procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, y al secretario de Seguridad Pública federal, Genaro García Luna, toda vez que ellos formaron parte del gobierno de Vicente Fox también como responsables de áreas de seguridad, por lo que fueron “indolentes e incapaces”, en palabras del propio Calderón.
El intercambio de misiles entre los panistas y priístas se registra en varios estados de la República. En Chihuahua, el gobernador José Reyes Baeza Terraza descalificó las críticas que los senadores panistas Gustavo Madero y Teresa Ortuño hicieron en su contra, al ligarlo con el crimen organizado y propiciar que en la entidad continúe la inseguridad. El mandatario priísta exigió a los legisladores del blanquiazul presentar pruebas de sus dichos y lamentó que su discurso esté más conectado con el hígado que con la razón.
En Nuevo León, el coordinador nacional de delegaciones y el delegado general del CEN del PRI, Humberto Lepe y Manuel Ángel Núñez Soto, respectivamente, acusaron al presidente del PAN, Germán Martínez, de ser “estandarte” de una guerra sucia para obtener ganancia electoral de los operativos policiales contra el crimen organizado. También el secretario de Seguridad Pública del estado, Aldo Fasci Zuzua, respondió al dirigente nacional panista y sostuvo que “miente” al asegurar que el gobierno de Natividad González Parás no ha hecho la tarea y que se ha dejado al Ejército solo en su lucha contra el crimen organizado. En esa entidad donde continúan los operativos policíacos, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado confirmó al detención de seis policías más. Se han aplicado 52 órdenes de arraigo hasta por 40 días a los uniformados detenidos entre los dos días anteriores.

Hay que moverlo todo… para que siga igual
La llegada de un general de currículo impecable a la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito de Benito Juárez, Cancún, Quintana Roo, despertó toda una oleada de referencias a su favor. El General Urbano Pérez Bañuelos, seguro que se las merece, sólo que de sus primeras instrucciones y de las acciones que prosiguieron a su llegada se despertaron algunas interrogantes.
Resulta que de un plumazo decidió despedir a un centenar de uniformados. Buena medida, se diría, sobre todo después de que se supone revisó los exámenes que éstos presentaron sobre confianza y quién sabe que tantas otras cosas más que, demostrado ha quedado, no sirven para nada. Pero ¿por qué hacer esos despidos sin que esté de por medio la orden de una investigación a fondo para saber quiénes o cuántos están al servicio de los mafiosos? El dejarlos ir así, de golpe, sólo incrementará las filas de los delincuentes, lo cual se convierte en una amenaza mucho mayor a la que ya existe para los ciudadanos de este municipio.
Luego resulta que doña María Esther Estiubarte, quien sabido es que pertenecía al grupo del Vikingo como encargada de los Asuntos Internos, y quien aseguró una y otra vez que jamás se percató de ninguna acción delictiva de su jefe y de sus compañeros ya presos, y a la que dejaron para asombro de todos al frente de la corporación, lejos de ser removida y de una vez investigada para que su expediente pueda quedar limpio de todas las dudas que sobre su persona existen, la nombran directora de Tránsito, de la dependencia que más aborrecen los benitojuarenses, ya que se han dedicado a extorsionar y “morder” sin ningún miramiento tanto a los lugareños como a los propios turistas.
El rostro del General, a quien no conozco personalmente, denota un recio carácter y, aunque ya está en la edad de jubilarse de acuerdo a los últimos dictados del gobierno federal para todos los trabajadores, se espera que tenga las vísceras en buen estado y que eso le permita cumplir cabalmente con una labor de la que dice llega con todo el aval del General titular de la SEDENA. Seguramente que detendrá ese proceder con tanto “pronto” para analizar una a una las denuncias que se han hecho sobre diversos personajes de la administración municipal comenzando con su hoy jefe, Gregorio Sánchez Martínez.
Al respecto no deja tampoco de ser altamente sospechoso el que se abriera ante notario público la oficina de El Vikingo y que tal hecho se difundiera profusamente, sin evitar señalar que los papeles encontrados se los llevaron a la Contraloría, es decir a otra oficina que maneja el alcalde, por lo que seguramente informarán que no encontraron absolutamente nada. Fue la propia Estiubarte la encargada de que tal documentación se alejara lo antes posible del lugar e incluso declaró que los efectos personales se los entregaron a un hijo de Francisco Velasco Delgado (el Vikingo) y suponemos que habrá sido a uno que esté libre porque al otro lo detuvieron en la playa porque traía consigo una bala (¿se la sembraron?).
No es fácil la labor que tiene enfrente el General Pérez Bañuelos, como tampoco resultará fácil obtener, más allá de la tinta y el papel, la confianza de la ciudadanía, sobre todo con el tipo de acciones emprendidas apenas a unas horas de haber asumido un cargo al que nadie sabe a cuál jefe le responderá: ¿al titular de la SEDENA? ¿a Gregorio Sánchez?. Semejante paquete y con la sombra de Tello Quiñónez, quien falleció apenas cuando iba a asumir el mismo cargo, es sin duda todo un reto que ojalá le llegue a la edad en la que se privilegia ante todo, el honor.

Pese a todo, renace Quintana Roo
El gobernador Félix Arturo González Canto ya dejó bien demostrado que es un ave de tempestades y que logra sortearlas de la magnitud que sea. Le han tocado huracanes, crisis económicas, temblores y el derrumbe de la industria turística, de la principal fuente de ingresos del Estado, de la que sustenta la economía de cientos de miles de familias. Cumple con los ordenamientos y los planes federales pero eso no impide que haga su propia labor y ésta ha resultado más fructífera y económica que la hecha “al trote moche” y con un sentido más de justificación que de real sustento para el despegue.
Vive México, como lo señalamos, se ha convertido en la gran caja de egresos con la que se pagan las giras de artistas de poca monta o de quienes hace años que ni siquiera viven en el país y que hasta su acento, al hablar, lo han cambiado radicalmente. No es lo mismo una figura de talla internacional como Salma Hayek, que intérpretes que brincotean y que sólo entusiasman a una chaviza que no cuenta con los recursos económicos propios para realizar turismo que genere utilidades. Tampoco será igual un actor de foros internacionales como Armendáriz, de los que atraen a quienes abarrotan las taquillas de teatros caros, que los cantantes fuera de moda y a quienes ya ni los viejecitos escuchan y de sus rostros tampoco se acuerdan.
Intelectuales, escritores, bailarines, operistas, quién sabe si lleguen a aparecer, aunque pelean, ruegan porque Thalía les diga que sí y que no cobrará ni un peso para quienes asistan a ver su espectáculo, acciones que se antojan más de beneficencia pública que de un plan serio de rescate turístico. Pero González Canto cumple y a todos los atiende y sigue lo que la Secretaría de Turismo marca, no quiere, no desea, no considera conveniente bajo ninguna circunstancia crear un enfrentamiento del que sólo resulten dañados los empresarios y los trabajadores.
El por su parte va y viene. Logró que los cruceros llegaran a los muelles de Quintana Roo mucho antes de lo esperado. También que se mantuvieran los vuelos de las principales líneas aéreas norteamericanas, una de ellas Air Line con sus 525 vuelos a partir de julio y que provienen de Houston, New York, Estados Unidos, y otros países de manera inmediata y así borró el temible “poco a poco”. No se detiene ni un solo instante. Hace lo suyo, como en los huracanes, para evitarle a todos males mucho mayores. No se le puede escatimar pues ningún mérito porque su trabajo lo demuestra todo.
En contraste están las largas e inútiles giras de otros personajes. Es el caso de un Jesús Almaguer quien llegó con la maleta de los resultados semivacía, aunque su estancia en Europa fue lo suficientemente prolongada como para poder asistir a los sitios que más le agradan. Tal vez, algún día, don Chucho aprenderá a que no es lo mismo ser empleado de alto nivel hotelero que funcionario público, de esos que tienen que entregar resultados y que están para servir y no precisamente a cambio de premios constantes o de propinas. Será entonces cuando el gobernador encuentre realmente quien verdaderamente le ayude en una dependencia tan importante como lo es la OVC.

De los pasillos
Organizaciones sindicales, campesinas y sociales se manifestaron por las calles de la Ciudad de México y en el zócalo capitalino en contra de la política económica que sigue la administración federal y demandaron un cambio en el modelo de desarrollo. La movilización de la llamada Alianza Clasista, integrada por la Unión Nacional de Trabajadores, el Frente Sindical Mexicana, el sindicato minero y organizaciones campesinas, entre otras, rechazaron el aumento de precios, insistieron en la realización de una huelga nacional y se pronunciaron por la defensa del patrimonio nacional y por la no privatización de Petróleos Mexicanos (Pemex). También demandaron un aumento salarial de emergencia, combate al desempleo, no al cierre de empresas ni dependencias, rechazo a la reforma de la Ley Federal del Trabajo, y solidaridad con la huelga de Cananea y el sindicato minero. La movilización fue encabezada por los dirigentes de los telefonistas, Francisco Hernández Juárez; del STUNAM, Agustín Rodríguez; y de la Industria Nuclear, Arturo Delfín, entre otros.
Maribel Villegas, ex diputada perredista y luego candidata del PAN a diputada federal por el Distrito III, fue notificada sobre la cancelación de su registro, la cual fue emitida por el pleno del Poder Judicial de la Federación en donde radicaba una queja presentada por el PRD por actos anticipados de campaña. Ya antes había sido multada con 54 mil pesos por colocar propaganda política en zona urbana. En fin, se dice que con su salida, Gregorio Sánchez Martínez se quita al “coco” de encima, ya que temía que de resultar ganadora se presentaría como candidata a la presidencia municipal y sus huesitos correrían peligro. Es pues don Goyo el primer beneficiado con esta anulación seguido de Carlos Joaquín, candidato del tricolor al mismo Distrito y por quien vino a hacer campaña su hermano Pedro Joaquín Coldwell, quien se ha mantenido, desde su llegada al Senado, tan alejado de esta tierra como pocos ex gobernadores y legisladores.
lilia_arellano@yahoo.com

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