Emir Olivares Alonso
En el concurso de ingreso a la educación media superior en el área metropolitana del Distrito Federal, ocho de cada 10 jóvenes que seleccionaron entre sus primeras opciones alguno de los 14 planteles de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) quedarán fuera de la institución, pues la casa de estudios sólo tiene lugar para 35 mil estudiantes en ese nivel.
En entrevista, el rector de la Universidad, José Narro Robles, manifestó su preocupación ante el problema. Informó que de los 324 mil estudiantes que se inscribieron al llamado examen único, 48 por ciento (155 mil 520) solicitaron como primera opción ingresar al bachillerato de la UNAM; sin embargo, sólo hay cabida para 22 por ciento.
Datos oficiales revelan que en los pasados cinco años la demanda de ingreso como primera opción a alguno de los planteles de bachillerato de la máxima casa de estudios se ha incrementado en 20 por ciento, en tanto que para otras instituciones disminuyó, como para el Colegio de Bachilleres, donde en el mismo periodo el número de aspirantes ha decrecido 30 por ciento.
Narro Robles destacó que el hecho de que uno de cada dos estudiantes recién egresados de la educación básica tenga como objetivo continuar sus estudios en la UNAM es un motivo de orgullo; sin embargo, resaltó que no se puede dar cabida a todos, lo cual resulta preocupante porque refleja la falta de oportunidades que existen en el país para la juventud.
Indicó que en México más de 7 millones de jóvenes en edad de cursar educación media superior o superior no pueden hacerlo por la deficiente cobertura a escala nacional, además de que tampoco se les brindan oportunidades laborales. Esto es muy mala señal para nuestro país.
El 28 y 29 de junio pasado más de 320 mil jóvenes en la zona metropolitana del valle de México participaron en el examen de ingreso a la educación media superior organizado por la Comisión Metropolitana de Instituciones Públicas de Educación Superior (Comipems).
Narro aseveró que del total de solicitantes se tiene que descontar a aquellos que por diversas razones no concluyen sus trámites para continuar sus estudios, como no haber terminado su regularización académica en tiempo y los que por razones personales decidieron no continuar con su vida académica.
La Comipems se conforma por nueve instancias públicas que ofrecen educación media superior en la ciudad de México y su área metropolitana: los colegios de Bachilleres y Nacional de Educación Profesional Técnica; las direcciones generales de Bachillerato, Educación Tecnológica y Agropecuaria y de Educación Tecnológica Industrial; el Instituto Politécnico Nacional; la Universidad Autónoma del Estado de México y por la Secretaría de Educación de esa entidad, y la UNAM.
En conjunto estas instituciones ofrecen 270 mil lugares para este nivel educativo aun cuando hay más de 300 mil aspirantes; sin embargo, muchos de los jóvenes (se calcula que para este año la cifra llegue a 40 mil) no continúan con sus trámites de inscripción. El resultado del examen único se dará a conocer el 31 de julio próximo.
De acuerdo con datos de la Comipems, los bachilleratos de la UNAM y del IPN son los que mayor demanda tienen entre los jóvenes solicitantes. El concurso de selección de 2008 revela que por cada lugar disponible en los 14 planteles de bachillerato de la máxima casa de estudios hay al menos cinco aspirantes en promedio; en tanto que por cada espacio en las escuelas de media superior del Politécnico hay tres solicitantes.
De ese 80% que quedan fuera, cuántos sin posibilidad de estudiar o de empleo serán cooptados por la delincuencia, las drogas y el narcotráfico. Parece que Fecal tiene chamba para rato en su combate. En vez de invertir más en educación y en la creación de empleos, él prefiere la guerra al narcotráfico al mismo tiempo que les incrementa el negocio con consumidores y personal operativo. Resulta irónico que los anuncios del PAN contengan a una mujer que vota por el PAN para que su hijo no sea víctima de las drogas. ¿Cuántos de esos jóvenes que no podrán estudiar serán drogadictos o ejecutados? Claro, también pueden entrar al ejército y correr con la misma suerte. Esa es la respuesta de la derecha ante los problemas sociales: la muerte.
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