El legítimo Presidente de Honduras cruzó la cadena que separa Nicaragua con Honduras, pero regresó a Nicaragua. Hace minutos se encontró con un grupo de hondureños que atravesaron la frontera a través de las montañas. Zelaya se comunicó con un coronel a través del cual solicitó una reunión con el Estado Mayor. Hay francotiradores apostados en las montañas. El pueblo rodea a Mel para protegerlo de cualquier agresión.
Prensa web YVKE / Telesur / ABN
Manuel Zelaya se encuentra en la línea limítrofe entre Nicaragua y Honduras, tras haber cruzado una cadena que separa el territorio de ambos países y ubicarse en el lado hondureño. Luego regresó a tierras nicaragüenses, pero se mantiene a pasos de su país. Hubo un extraño movimiento de lo que se cree podría haber sido un infiltrado militar. El pueblo que rodea a Zelaya enseguida lo protegió con sus cuerpos. Ante esta reacción, la persona no identificada volvió al lado hondureño. Los hondureños que acompañan al mandatario constitucional de Honduras denunciaron la presencia de este infiltrado. Ante esta denuncia, Manuel Zelaya ingresó nuevamente a su vehículo por razones de seguridad, puesto que no porta armas, ni lo acompañan funcionarios de seguridad. Zelaya llegó a Honduras luego de recorrer más de 300 kilómetros, en una caravana que salió desde Nicaragua hasta su país. Desde el paso fronterizo habló telefónicamente con su familia quienes pasaron el primer retén policial hacia la frontera, Zelaya aclaró que deberán pasar 6 retenes más y que aproximadamente en una hora podrán encontrarse con él. Tras cruzar la frontera, Zelaya pidió una reunión privada con el Jefe del Estado Mayor Conjunto, General Romeo Vázquez y miembros de las Fuerzas Armadas para agilizar su retorno al poder del país. "He tenido tres llamadas de miembros asesores cercanos (al Estado Mayor de las Fuerzas Armadas) y están haciendo las comunicaciones con el fin de garantizar la paz", dijo el mandatario a los periodistas que lo acompañan en su regreso a Honduras. El gobernante hondureño explicó que no quiere ir a su país a provocar, para que los militares tengan que dispararle y que después no puedan resolver la crisis, que según dijo, "porque si me hacen daño o me asesinan no se va a poder solucionar y el problema se pondrá más grave". "Yo estoy dispuesto a hacer el esfuerzo, arriesgarme y a ponerme en frente de los militares, no tengo temor, pero también tengo uso de razón y objetividad en mis acciones, vengo desarmado, sin chaleco ni salva vida", dijo Zelaya. En un vehículo rústico, el mandatario se dirigió a una instalación donde mantendrá una conversación con jefes militares, quienes tiene la orden expresa emitida por el gobierno de facto liderado por Roberto Micheletti, de arrestarlo. "Comuníqueme con el alto mando", le pidió Zelaya al coronel al frente de las tropas destacadas en la frontera de "Las Manos". Zelaya contó que le dio "la mano" al militar y le dijo que quería hablar con Romeo Vásquez, el general jefe del Estado Mayor del Ejército que lo depuso. El objetivo es "decirle que yo estoy aquí, que quiero comunicarme con él para decirle que vuelva la paz a la familia hondureña", relató. Según Zelaya, el militar le dijo: "Nosotros no tenemos nada contra usted". Zelaya, desde la frontera, pidió a las fuerzas militares de su nación que "no usen la violencia, ya que tengo el derecho legítimo de regresar a mi país y atender el mandato que el pueblo hondureño me dio". Mientras cruzaba la frontera, el mandatario dijo que sólo está defendiendo sus derechos "y los señores que están en esta actitud deben bajar sus fusiles y dialogar, yo creo que en el mundo está en riesgo el sistema democrático y no debemos ceder en este campo". Sobre la posibilidad de que las autoridades golpistas lo apresen, Zelaya afirmó que la justicia de los "golpistas es una justicia nula", por ello indicó que si lo ponen preso el régimen de facto "cometería un gran error porque esa situación no la aceptaría nadie". "Queremos dar un ejemplo de paz, estoy tratando de establecer una comunicación", dijo el presidente constitucional Manuel Zelaya, luego de ingresar a Honduras. "Nos unimos con América para defender nuestro sistema democrático, nadie va a aceptar que se continúen dando golpes de Estado, destacó Zelaya. "Para los pueblos pobres del mundo la democracia es un arma para luchar por sus recursos, no nos quiten esta arma", agregó el mandatario. Dijo que está tratando de establecer comunicación con los policías y militares golpistas. "Yo quiero hablar con el Estado mayor para que se arregle esto". Agregó que allí en la frontera "no están los políticos, están los militares, son los que utilizan para dar los golpes". "Yo lo que espero es una sabia rectificación, ellos ya entendieron que no pueden gobernar con un pueblo en contra y un presidente expatriado, no pueden y no podrán gobernarlo", sostuvo el mandatario hondureño. Rueda de prensa desde Nicaragua antes de partir a la frontera El presidente legítimo de Honduras, Manuel Zelaya, aseguró que con su retorno programado para este viernes y el recibimiento del pueblo, ese país se "juega su futuro" e hizo un llamado a los militares a respetar el derecho de los ciudadanos de circular tras la declaración de toque de queda por parte del gobierno golpista. "Honduras se juega su futuro, tenemos que mejorar la imagen de la nación (...) con mi regreso la paz retorna a el país", expresó el mandatario desde un empalme en el municipio de Yalagüina (norte de Nicaragua) donde empiezan las vías a dos puntos previstos para cruzar la fronteras. Recordó que su regreso a la nación para retomar el poder, lo podrá hacer por cualquier punto de las fronteras que rodean a Honduras, ya que afirmó tener los medios de trasporte necesario para ello. "Tengo aviones" dijo, "y puedo ubicarme en cualquier parte del territorio nacional", exclamó el mandatario. Respecto a la declaración de toque de queda, que "si hay un estado de sitio, es nulo" porque proviene de una orden de un Gobierno impuesto de manera ilegal. "El Ejército sigue reprimiendo y violentando el derecho" de los Hondureños. En este sentido Zelaya instó a los soldados a que "defiendan su democracia, rechacen este golpe de Estado, salven a las Fuerzas Armadas, salven a Honduras". Dijo que en la comunidad de Yalagüina le "han abierto todas las puertas para mi regreso a Honduras. "El pueblo está apoyándome y no acepta este golpe del Estado. La comunidad internacional lo ha condenado(...) Mercosur fue categórico, enfático, no van a permitir que se consolide" la dictadura. Durante la rueda de prensa, el presidente Zelaya recibió llamadas de sus homólogos de Paraguay y de Brasil, quienes le ofrecieron su total apoyo. Informó que "en estos momentos nos vamos a dirigir a Las Manos", pero dijo que de forma inmediata puede dirigirse a cualquiera de los otros puntos, es decir, a El Espino o a El Guasale. También detalló que tiene la opción de tomar un avión, "se pidió pista para Toncontín", el aeropuerto de Tegucigalpa y en San Pedro Sula. Al finalizar el intercambio con periodistas internacionales, se montó en una caravana que se dirige decidida a la frontera para ingresar en Honduras.
Puedes ver otros en radiomundial.com.ve
No hay comentarios.:
Publicar un comentario