Detallan el programa de restructuración policiaca

ALFREDO MENDEZ , GUSTAVO CASTILLO

El plan de restructuración policiaca que aplicará el gabinete de seguridad del presidente Felipe Calderón Hinojosa implica integración, capacitación, coordinación e incremento a los salarios de policías estatales y municipales, a quienes se otorgarán mayores facultades para investigar y combatir al crimen organizado, revelaron fuentes gubernamentales.

La operación se llevará a cabo de manera conjunta entre los gobiernos federal y estatales, por lo que una de las prioridades de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP) será efectuar reuniones entre los titulares de ambas dependencias y los mandatarios a partir de enero.

Se tiene previsto que en los programas de capacitación e ingeniería de combate a la delincuencia organizada participen el Ejército, la Armada y corporaciones como la Agencia Federal de Investigación (AFI) y la Policía Federal Preventiva (PFP).

Con la nueva estrategia organizacional se desarrollarán manuales homogéneos de combate y persecución de cárteles de la droga, que lo mismo se aplicarán en entidades del sur del país Guerrero, Tabasco, Chiapas y Quintana Roo que en regiones del centro, occidente y norte (Michoacán, Jalisco, Sinaloa, Chihuahua, Baja California, Nuevo León y Tamaulipas), donde células de narcos operan con fuerza.

La prioridad en ese programa de homogeneización de planes estratégicos para combatir el tráfico de estupefacientes no estará enfocada a la detención de capos, sino a limitar los márgenes de maniobra "de que se valen las cadenas delictivas" para operar en varios estados.

Es decir, se buscará romper los vínculos de protección que permiten a los cárteles operar con impunidad; por ejemplo, el apoyo que brindan corporaciones policiacas estatales y municipales a operadores de esos grupos.

De acuerdo con funcionarios consultados, el plan incluye otorgar incentivos a las corporaciones policiacas locales, como aumentar de manera considerable sus salarios y prestaciones, mejorar su desarrollo intelectual mediante cursos de capacitación, modernizar los instrumentos de investigación con la opción de que puedan utilizar equipo sofisticado, como el que poseen la AFI y la PFP y dotarlas de manuales homogéneos, que sirvan como instructivo para enfrentar a los delincuentes.

Actualmente, según las fuentes consultadas, las policías locales operan de manera espontánea, sin plan de acción, contra los grupos de delincuentes, que cada vez están mejor organizados.

Esa falta de preparación, aunada a los bajos salarios y la falta de reconocimiento a la labor de prevención e investigación de los policías, ha permitido que los cárteles de la droga se hayan infiltrado entre los cuerpos de seguridad locales.

"Ahora un policía de cualquier estado no sólo gana más sirviendo al narcotráfico, sino que obtiene mayor reconocimiento a su función cuando está del lado de la delincuencia. Parece mentira, pero un capo consiente más a un agente que un jefe policiaco, alcalde o gobernador", aseveró un alto funcionario de la PGR consultado.

La prioridad presupuestal del gabinete de seguridad pública estará enfocada hacia el fortalecimiento de los cuerpos policiacos federales y estatales. El primer punto será lograr el consenso de los gobernadores, sin importar al partido que pertenezcan.

Al comienzo se buscará ubicar las zonas principales por donde llegan cocaína, mariguana y metanfetaminas, así como las regiones por donde se envían los cargamentos de droga al extranjero, ya sea Estados Unidos o Europa.

Una vez que se tengan detectados esos "nódulos de poder" del narcotráfico, se pondrán en marcha los planes de restructuración policiaca en las entidades más afectadas por ese fenómeno.

Entre las localidades consideradas por la PGR como focos rojos, por la incidencia delictiva y su ubicación geográfica, que es aprovechada como zona para el trasiego de drogas, destacan municipios como Nuevo Laredo, Tamaulipas; Tijuana, Baja California; Acapulco, Guerrero, y el puerto de Veracruz, sólo por mencionar algunos.

El Cuerpo Federal de Policía conformado por la AFI, PFP, Fiscal, Aduanal y agentes de Inspección de Migración será el encargado de coordinar las acciones operativas de las policías municipales y estatales, con el fin de corroborar que los manuales de acción homogénea de combate al crimen organizado se cumplan al pie de la letra.

Habrá además programas de estimulación continua, que consistirán en hacer homenajes, menciones y reconocimientos públicos a la "eficiencia policiaca", un plan de ascensos e incremento salarial a los agentes destacados.

"La idea es tener mejor organización que los grupos delictivos. A mayor preparación policiaca, menor será la espontaneidad del combate a los criminales y mejores los resultados", puntualizó el funcionario consultado.

Si hay una respuesta positiva de los gobiernos estatales, es probable que antes de finalizar el sexenio se tengan resultados positivos, que disminuyan la violencia, la incidencia delictiva provocada por el narcomenudeo y, sobre todo, que se reduzcan la demanda y el consumo de narcóticos.

Prioridad a fiscalías de la PGR que lo requieran

Una de las principales tareas que se propuso el titular de la PGR, Eduardo Medina Mora, es fortalecer las subprocuradurías y fiscalías especializadas que mayores requerimientos tienen, debido a la incidencia delictiva.

Entre las áreas que aumentarán personal destacan la SIEDO, la Subprocuraduría Jurídica y de Asuntos Internacionales; de Delitos Federales y la Regional y Procedimientos Penales y Amparo.

De acuerdo con información oficial, gran parte del personal de las fiscalías, como la Femospp y la Fepade, pasará a las áreas antes mencionadas, con el propósito de fortalecer las subprocuradurías, que son la base de la PGR.

El objetivo principal es que la PGR deje de ser un órgano persecutor que se destacó durante el sexenio foxista, por ser una institución que llenaba las cárceles de personas que al término del proceso judicial ganaban el litigio y recuperaban su libertad , con el fin de sea una instancia real de procuración de justicia, que investigue a delincuentes y éstos terminen en prisión purgando sentencias.