sábado, enero 20, 2007

Comentarios a algunas noticias de La Jornada

Sique

Que dice el pelele que no tolerará "desafíos al Estado" y por ello se mantendrá "cercano a las fuerzas armadas". Nada de que no les gusta el alza de precios, nada de que los operativos son una farsa, nada de que le quedó mal el atuendo de militar, aunque sea espurio y lo rechacen, él sabrá responder a todas esas protestas con la ley que ejercen los de la Suprema Corte de Ladrones de la Nación y con la fuerza del Ejército, mientras, vende al país al mejor postor y gratifica a quienes lo pusieron como presidente pelele y usurpador porque esos son los buenos.

Parece que uno de los "desafíos al Estados" son que:

Los industriales de la masa y la tortilla de varios estados advirtieron que no pueden bajar el precio del alimento a 8.50 pesos, como indica el acuerdo firmado el jueves por el pelele y una parte de los productores. Y es que quién va a obedecer los acuerdos de un espurio que a leguas se ve no tiene la menor idea de qué hacer ante las presiones a la que lo sujetan los jefes que le dieron la chamba. Por lo tanto, el dirigente de la Unión de Industriales de la Masa y la Tortilla de Aguascalientes expresó el sentir de unos 150 mil productores en todo el país, diciendo "si Calderón piensa que con el acuerdo que hizo con sus cuates, que dice que son más de 5 mil tortillerías, pues la verdad no nos ha tomado nuestro parecer, porque la mayoría de quienes le entraron a ese acuerdo son supermercados, y no quienes nos dedicamos a esto de toda la vida"; y el de Sinaloa dijo: "Lo que se vio es una ofensa para el pueblo. Ahí estuvieron la cúpula de los poderes de los ricos, de los acaparadores, dándose un abrazo Felipe Calderón con Roberto González (propietario del Grupo Maseca). Millones de ciudadanos estamos viendo la hipocresía. ¿Cómo es posible que quien ha acaparado el producto y no respeta las reglas de operación, esté sentado en la mesa del Presidente?".

También la Unión Nacional de Industriales de Molinos y Tortillerías (UNIMTAC) desconoció ayer el pacto del presidente Felipe Calderón Hinojosa con productores agrícolas, comercializadores y empresarios para "estabilizar" el precio del producto en 8.50 pesos, porque el sector, dijo, no fue tomado en cuenta. En conferencia de prensa, el presidente de la asociación, Lorenzo Mejía Morales, afirmó que "como no fuimos invitados a firmar el acuerdo, desconocemos las bases del mismo y no sabemos si el precio de 8.50 pesos es un costo oficial o sugerido. Nuestro sector no entiende el pacto ni las acciones que el Ejecutivo federal está implementando, y no porque seamos tontos, sino porque no nos lo han explicado".

¿El mantenerse cercano a las fuerzas armadas implica que les va a echar al Ejército a los industriales de la masa y la tortilla? Nomás pregunto.

Y resulta que también los empresarios dicen que el precio de 8.50 pesos por kilo de tortilla, anunciado por el gobierno federal, sólo podrá aplicarse en la zona metropolitana de la ciudad de México, porque resulta "insostenible" en el resto del país, debido al alza de los insumos que han enfrentado los productores del alimento. (Aída Palafox Fuentes, directora general de la Cámara Regional de Tortillas de Tlaxcala, Veracruz y Puebla).

Total que por más comerciales que hagan para convencernos de quien es el presidente de México, parece que su pequeñez no ha permitido que alguien lo considere como tal, en menos de dos meses el gobierno espurio ha convertido al país en un desgarriate. Lo peor de todo es que no sólo el individuo usurpador está inmerso en la mierda de su elección sino que además no tiene neuronas para resolver los conflictos ni siquiera en apariencia y como tiene junto a él a un yuppi, retrasado mental como Camilo Mouriño, la situación es bastante crítica. No se le pueden pedir peras al olmo.

La televisión niega todo problema y de manera superficial intenta tapar el sol con un dedo mientras los comentaristas de radio en su mayoría tampoco entienden nada y nos recetan versiones contradictorias e incoherentes del asunto, son las chachalacas del sexenio, sólo hacen ruido, "cállense cha-cha-la-cas"; lo único que resulta claro es que mantienen una aversión por el Presidente Legítimo quien desde antes de la elección
anunció lo que pasaría con la derecha en el poder. En contraste, la explicación de AMLO respecto al asunto del alza de la tortilla es sencilla y clara: Es un pacto "convenenciero", un pago por el apoyo a la campaña de Calderón a los potentados.

Que el pelele invitó a Evo Morales a visitar México cuando su agenda se lo permita. Eso estaría bueno, el usurpador y Evo Morales compartiendo palestra, el agua y el aceite.

Dice Larios que descarta la incorporación de fox al CEN del PAN, que lo quieren es impulsarlo para que sea Presidente de la Internacional Demócrata Cristiana de la cual fue presidente, José María Aznar, ah, vaya.

En México las matanzas siempre quedan impunes, no importa cuántos muertos, no importa en que sexenio, ahora que dizque van a crear una fiscalía especial para la matanza de Acteal que ocurrió hace diez años, y van a pasar veinte, y treinta, y treinta y nueve como el caso de Tlaltelolco, esa es otra farsa; fiscalías especiales irán y vendrán y el crimen quedará impune. Quiénsabe hasta cuando, ya no lo veremos, y si eso suceda se van a castigar los crímenes de lesa humanidad.

Apremian banqueros españoles a Calderón: "intente las reformas". Inquietos los banqueros con su voracidad acostumbrada instan al pelele a que les responda después de todo lo que invirtieron en ponerlo en la silla presidencial. Los banqueros españoles ya establecieron una agenda de reformas para este sexenio, queda claro que Fecal es sólo su pelele, ahora ellos son los que establecen sus agendas y las reformas. El pobre pelele tan atosigado que anda con tanta protesta y su ineptitud les aseguró que ya dio instrucciones al gabinete para que "desaten las amarras y liberen los obstáculos" inhibidores de la inversión mexicana y extranjera en el país.

En contraste, el Mercosur ya pasó a los hechos y adoptó una serie de medidas entre las que destacan 11 proyectos del Fondo de Convergencia Estructural (Focem), que contarán con recursos de 70 millones de dólares para financiar proyectos relacionados con infraestructura y promoción social, la mayor parte en Paraguay y Uruguay. El Focem dispondrá de 100 millones de dólares aportados en 70 por ciento por Brasil, 27 por ciento por Argentina y el resto por Uruguay y Paraguay. Los recursos financiarán obras de desarrollo social y de infraestructura, así como proyectos de microempresas. El Fondo también dispuso habilitar el proyecto "Mercosur libre de aftosa" con 16.33 millones de dólares para prevenir esa epizootia cuyos brotes causan estragos en la economía regional. Nosotros también hemos estado cuidándonos de los peligros, sí, pero no para México, sino para la política imperial de Estados Unidos.

México, a través del gobierno espurio e inepto está aliado a uno de los gobiernos más criminales y mentirosos que ha tenido los Estados Unidos, como señala Steve Coll en The New Yorker: "es difícil rescatar una guerra construida sobre distorsiones e ilusiones, porque para proteger las falsedades ofrecidas a los votantes en el pasado, un presidente y sus asesores podrían estar tentados de fabricar aun más de ellas". Tampoco ellos podrán hacer nada ante el desastre al que han llevado a su país porque no pueden, no tienen la capacidad intelectual ni la autoridad moral. Y ahora para colmo de sus males no sólo Chávez les quita hegemonía en América Latina, sino que China les mueve el tapete. Entre Irak, Afganistán, el desprestigio de Israel, Líbano, Siria, Irán, China y América del Sur, ellos con un chimplete inmoral al mando, no hay mucho qué hacer, porque el Congreso, hasta ahora, nomás cacarean.

Al paso que vamos, erradicar la desnutrición de los niños y niñas mexicanos (as) tomará setenta años. Un millón 145 mil niños menores de cinco años, 15 por ciento de la población de ese grupo de edad en México, padecen algún grado de desnutrición, y de continuar la actual tendencia de reducción de este indicador, se logrará su erradicación dentro de seis o siete décadas. No obstante, aseguró Abelardo Avila, investigador del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), con voluntad política del gobierno el mismo objetivo se podría lograr en los próximos 15 años. Lástima que no la haya.

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