La resistencia. 5. La cultura y el arte

Sique

El rubro de la cultura y el arte tiene también una participación importante en la resistencia.

Cultura.-

Ahora que nuestra cultura y valores están en riesgo tenemos que defenderlos. La globalización atenta contra la cultura de todas las naciones. Nuestra cultura debe ahora ejercerse y difundirse lo más que podamos. Si se trata de comerse una hamburguesa o unos tacos, mejor los tacos; si se trata de tomarse un café, mejor en una cafetería de barrio que en un Starbucks; si se trata de ir al cine, mejor película mexicana que bodrio gringo; si se trata de ropa, mejor la hecha en México; si se trata de decoración, mejor la mexicana...

Hay que asistir nuestros museos, visitar nuestros sitios arqueológicos, celebrar nuestras festividades, para recordar quiénes somos, pues parece que se nos ha olvidado. Conocer la obra de nuestros pintores, escultores y arquitectos. Asistir a nuestros espectáculos de danza y teatro. Los fines de semana visitar nuestros pueblos, tenemos que conocer nuestra república. Leer literatura mexicana, historia, investigar sobre nuestras raíces, tenemos que conocernos para amarnos y defendernos.

No estoy hablando de nacionalismos, estoy refiriéndome a que nadie más que nosotros puede ofrecer al mundo la parte que nos corresponde dentro de la diversidad que debe haber para que la humanidad se enriquezca. Si nosotros perdemos identidad, el mundo se pierde la veta que podríamos aportar y nos perdemos dentro de una cultura standard que tiende a agotarse si no se retroalimenta de otras culturas.

Repito, si no nos conocemos bien ¿cómo podríamos amarnos? ¿cómo podríamos defender lo que no conocemos? ¿cómo podríamos darnos cuenta de que están atacando lo que es nuestro si no sabemos lo que es nuestro? Desgraciadamente esto le ha pasado a una parte del norte de la república, dolorosamente hay muchos que no se sienten mexicanos ni tampoco estadounidenses, su sensación es híbrida, es ambivalente, es disociada y eso los lleva a no amar a México ni percatarse del peligro en el que está, porque no saben qué es eso, la palabra patria no tiene resonancia en su interior. No todos por supuesto, pero he recibido correos del norte de la república en que los luchadores de por allá a veces se sienten muy solos, reciben muchos rechazos porque les cuesta trabajo concientizar a la gente, y claro, es que llevan muchos años perdiendo identidad. La gente del norte que está luchando por su patria es doblemente valiosa porque a pesar de estar prácticamente sumida bajo la bota neoliberal y pro-yanqui, ha sabido reconocerse y respetarse, tanto que no obstante el rechazo sigue en la lucha.

Algunos podrán argumentar que se sienten ciudadanos del mundo, lo cual es una idea humana, pero muy distinta a perder identidad. Ser ciudadano del mundo significa admirar y respetar la diversidad de la raza humana, desear la justicia y el bienestar para todos en la Tierra y no privilegiar unos países sobre otros. Ser ciudadano del mundo significa defender la patria en que se nace y difundir sus valores como un ofrecimiento al mundo de lo que uno es y recibir lo que otros tienen que ofrecernos culturalmente. Pero para ofrecer hay que tener, tener conocimientos y una noción amplia de lo que nuestro país significa históricamente, geográficamente, artísticamente, en fin, culturalmente.

La globalización y el neoliberalismo apuntan a abolir la identidad cultural, todos comen lo mismo, se visten igual, escuchan la misma música,... Qué caso tendría viajar a otro país si vamos a encontrar siempre lo mismo, justamente lo interesante de viajar es conocer otras culturas, eso nos enriquece. Por eso es importante defender el derecho de los pueblos indígenas a establecer sus pautas de vida, respetar sus costumbres, mucho podremos aprender de ellos y su sapiencia, de otras formas de ver la vida. Por eso tenemos que defender lo que nosotros representamos en el mundo para poder ofrecerlo orgullosamente a la humanidad y que cuando viajemos a otros lados podamos apreciar sus diferencias, que realmente pueda haber un intercambio. En otra palabras debemos defender nuestra cultura y la diversidad por el bien de todos los seres humanos, incluidos nosotros.

El arte

Abrir espacios para la expresión artística de los mexicanos y asistir a las exhibiciones es otra de las tareas. Todos tenemos algo de artista, experimentémoslo. Todos somos público, todos somos sensibles y receptores de las emociones y el discurso de nuestros semejantes, disfrutemos de lo que sienten y expresan nuestros artistas. Nadie mejor que nosotros entenderemos de dónde vienen sus trazos, sus movimientos, sus palabras, sus texturas, sus espacios, sus colores, sus imágenes, sus sentimientos, porque compartimos una historia, una tierra, un cielo, un clima, una fauna, una flora, unos sabores, unos rasgos, un idioma, unos ancestros, unos héroes, unos tiranos... El arte es el que perpetúa la cultura y le da al ser humano una de las razones de su existencia, las otras son el amor, el conocimiento y el sexo, y todos ellos juntos constituyen el principio del placer.

Bien, todos estos actos en lo que se refiere a la Información, a la Economía, a la Política y a la Cultura y el Arte son resistencia civil pacífica. ESO ES LA RESISTENCIA. Y todo "lo que resiste, apoya" (AMLO dixit). Si los que estamos en el movimiento los llevamos a cabo realmente, la victoria definitivamente y sin la menor duda, es nuestra.

Tenemos que sistematizarnos en este nuevo estilo de vida. Mucho de lo que aquí se expone puede ser incorporado en nuestra vida cotidiana y no quita el mínimo de tiempo. Este estilo de vida es ya una resistencia, ahora, en lo que respecta a las actividades concretas que toman tiempo, dediquémosle aunque sea media hora diario, unos correos, unas llamadas, unos volantes, etc... Si llevamos este tipo de vida somos parte sustancial de la resistencia.

Recordemos que nuestros adversarios son muy disciplinados y sus prácticas fascistas las cumplen con mucho orden (son anales, no lo olvidemos). Pero si nosotros con la misma disciplina llevamos a cabo todos los actos de resistencia mencionados, más los que a ustedes se les ocurran que pueden ser muchos más, como se refieren a una causa noble tienen mucho más fuerza y como se sustentan en valores universales será un descalabro tal para la derecha que no se vuelve a levantar. Así que vamos adelante, háganse su calendario y cumplan con el compromiso.

¡VIVA LA RESISTENCIA CIVIL PACÍFICA!