Julio Hernández López
En línea de combate al chuchismo, Andrés Manuel López Obrador declaró ayer coyunturalmente cerrados los caminos a la moderación: “No va a haber corrimientos. O sea, vamos a mantener la misma línea. En circunstancias como ésta es fundamental el anclaje. No conviene el zigzagueo. Es fundamental el mantener los principios y los ideales. No estoy de acuerdo, en circunstancias como ésta, en la moderación”, dijo ante miembros del gobierno llamado legítimo, figuras de la administración capitalina y representantes de corrientes coaligadas para enfrentar a Nueva Izquierda.
El tabasqueño repitió lo que ha dicho en otros foros, como la presentación de su libro La mafia nos robó la Presidencia: “Yo soy partidario de lo que decía Ocampo: los moderados no son más que conservadores más despiertos”. El pasaje de la Reforma al que se ha referido López Obrador presentaba a un moderado, Ignacio Comonfort, dispuesto y comprometido a resolver los problemas mediante apretones de manos y a un radical, Melchor Ocampo, deseoso más bien de aplicar apretones de pescuezos. López Obrador ha comentado al respecto: “eran momentos de definiciones los que ellos vivieron; no había lugar para las medias tintas; era un momento como el de ahora”.
Las palabras del ex candidato presidencial, y de Alejandro Encinas, quien se manifestó contra “una izquierda dócil, legitimadora, modosita”, se produjeron nueve días después de que la Nueva Izquierda Moderada (N.I. Moder) realizara una reunión nacional de cuadros que permitió al candidato a presidir el PRD, Jesús Ortega, manifestarse en contra de que el sol azteca sea “un partido pendenciero” y proyecte “la imagen de un partido de conflicto” y “dividido”. Ortega alertó contra “la visión más conservadora del pensamiento de derecha, que hace a un lado y margina la acción social y la acción colectiva” porque “alienta el individualismo, el personalismo y el culto a la personalidad”. Las transformaciones profundas de la sociedad no son mérito “de un individuo, por más carismático y por más liderazgo que tenga”, asentó el jefe Chucho.
Sin medias tintas, López Obrador ha puesto abiertamente el peso de su figura en favor de la candidatura de Encinas. Aun cuando socialmente es mucho lo que ello significa para quien sustituyó a AMLO en la jefatura de Gobierno de la capital del país, estructuralmente la Nueva Izquierda Moderada (Ni Modo) tiene el control del aparato organizador y calificador de los comicios internos en puerta. La apuesta de la dupla AMLO-Encinas va por la recomposición de un partido “cuya dirección y dirigentes de otras corrientes en muchas ocasiones caminan en la acera de enfrente, en sentido contrario” a las bases, según dijo ayer el economista egresado de la UNAM y nacido en la ciudad de México en 1954. Encinas puntualizó que su proyecto implica confrontación política en cuanto los cambios que promoverá “afectarán intereses y privilegios, y ello llevará a la confrontación, y la confrontación implica lucha política”. Radicales o moderados, Ocampo o Comonfort, Megafrente o Nueva Izquierda, resistencia civil o colaboracionismo, denuncia del fraude electoral o acomodos pragmáticos. Momentos (nada moderados) de definición.
Astillas
Temporada de lenguas sangrantes: si la sacerdotisa sindical Elba Esther Gordillo se atreve a acusar a otros de perversión, el secretario general del sindicato de curas mexicanos, Beto River, se lanza (con lenguaje foxista de género) contra prostitutas y prostitutos de los medios de comunicación, según nota de Bertha Teresa Ramírez publicada ayer en La Jornada. Ante reclusas del penal femenil de Santa Martha, adonde acudió a dar una misa nocturna, el acusado de proteger a sacerdotes pederastas dijo que el “verdadero” putaísmo periodístico deshace “la fama de los demás: no mata el cuerpo del otro, pero es una víbora que mata la fama de los demás”. El muy llevado y traído arzobispo primado de México descargó su espada verbal de fuego contra quienes desde los medios de comunicación actúan en condición de rameras, meretrices, cortesanas, busconas o furcias: “con su sentencia, ellos juzgan, ellos sentencian, ellos condenan y para ellos no hay justicia que la que ellos dictan”. Por desgracia, las valientes palabras del prelado duranguense no alcanzaron la gracia mínima de la individualización, pues el profesor –sindicalizado– Rivera se negó a precisar a qué personajes y a qué medios se refería. Una columna de la vida alegre, como es la presente, se queda taconeando nocturnamente en alguna esquina de la ciudad porque no sabe, en todo caso, cómo ha de calificarse el hecho de que, según la Red de Sobrevivientes de Abuso Sexual por Sacerdotes, la arquidiócesis que encabeza el santo varón Norberto haya entregado 500 millones de dólares a la Corte de Los Ángeles, California, para nutrir un fondo de indemnizaciones a personas que denuncian haber sido atacadas sexualmente por sacerdotes. Con esos pagos se pretende cerrar expedientes relacionados con México y con Norberto Rivera, como los de las presuntas violaciones cometidas por el cura Nicolás Aguilar Rivera, que luego habría sido protegido por quien ahora acusa a otros de prostitutos y prostitutas… El dizque consejero presidente del Instituto Federal Ugaldista (Ifuga), Andrés Oscuro, ha declarado con toda solemnidad que no habrá sorpresas en el breve plazo que estará a cargo del changarro (aunque él hará lo posible por estirar ese periodo)… Un grupo de paisanos residentes en Nueva York realizará hoy, a las 10.30 horas, una protesta, enfrente del consulado mexicano en aquella ciudad, “por la apertura comercial de los mercados del maíz y el frijol que se dará en dos semanas”…Y, mientras Felipe Calderón se echa porras al asegurar que el suyo es un gobierno austero, ¡hasta mañana, en esta columna que acusa recibo de las muchas cartas por Internet que manifiestan viva indignación por la resolución de la Corte que pretende salvar al poblano Mario Marín y sus aliados pederastas y dejar sin castigo la evidente confabulación grosera de poderes que se dio contra la periodista Lydia Cacho!
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