El alcalde de Guanajuato, el panista Eduardo Romero Hicks, advirtió que no retirará el bando de policía y buen gobierno aprobado por el cabildo que sanciona con cárcel o multa a las parejas que se hagan “tocamientos obscenos” (que él mismo ejemplificó como “besos olímpicos”, lo que dio pie a una gran confusión), a los que pidan limosna, practiquen el ambulantaje, hagan manifestaciones, profieran groserías, no usen los puentes peatonales, los limpiaparabrisas y a los promotores turísticos.
1) Al calificar de "obscenos" los "tocamientos", estaría diciendo que las familias que tanto pondera la derecha se forman en función de obscenidades pues no vemos cómo sin "tocamientos" se pueden tener hijos, a menos que la relación sexual se lleve a cabo como los gallos. ¿Porqué no habla de los tocamientos de los curas a menores? Esos sí son obscenos, aunque se llevan a cabo en privado y debía castigárseles con cárcel.
2) En vez de llevarse a la cárcel a quienes piden limosna porqué no lleva a cabo un programa social en el que esas personas puedan ganarse la vida dignamente. Le saldría más barato que implementar la cantidad de cárceles que se necesitan para encarcelar a tanta gente que no encuentra forma de sobrevivir más que mediante la mendicidad.
3) A quienes practican el ambulantaje podría designarles un lugar en el que pudieran vender sus mercancías e incorporarlos a una ocupación formal.
4) Anticonstitucional resulta prohibir las manifestaciones a las que se tiene derecho, sobre todo, después del desastre económico que han provocado los gobiernos, ¡ya ni siquiera se puede protestar!
5) Se requiere educación, capacitación y oportunidades de empleo para los limpiaparabrisas, no cárceles.
6) Podría también realizar una campaña para que la gente se acostumbre a utilizar los puentes peatonales, no multarla.
7) En vez de dar empleos, acaba con las fuentes de trabajo de los promotores turísticos.
8) Y después de tanta pendejada ni siquiera lo puede uno mandar a chingar a su madre.
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