En voz alta .UNA MUJER DESPECHADA

Por Flor Berenguer

18 febrero 2009
En voz alta

El más reciente escándalo político vivido en México es una bizarra mezcla de novela rosa, mala telenovela y folletín cursi, todo musicalizado como los temitas setenteros que cantaba Luisito Rey, papá de Luis Miguel, cuando melosamente afirmaba que todos sus males provenían del amor de una mujer.

El protagonista masculino es el candidato menos lógico, alguien que más parece la pomada contra la lujuria que el galanazo enciende pasiones tipo Peña Nieto y se trata de Luis Téllez, tecnócrata cejón y semicalvo, de pequeña estatura y modales tímidos, alejado totalmente del modelo clásico de quien busca aventuras extramaritales.

La dama herida y agraviada es Diana Isabel Pando, una periodista que firma como Fosca March y que vive desde hace tiempo en Estados Unidos, según su página de Face Book en Chicago, pero existe otra version que habla de San Diego o mejor aún en Tijuana, donde no es periodista sino niñera.

Tan borrosa y opaca como su ubicación es su biografía, confusa, profusa y difusa.

Ella se dice nacida en Madrid, aunque realmente lo hizo en la Ciudad de México y hay quien la ubica como hija adoptiva de Antonio Cosio Ariño, importante hombre de negocios, accionista de Bancomer y Telmex entre otros grupos financieros y al parecer nieta del éste sí español, Elías Pando, quien hizo una cuantiosa fortuna mediante la industrialización y enlatado de alimentos podría tener relación con de Ramona Pando Mundet, quien entre otras cosas, es fundadora de Mexfam, organismo dedicado a la educación sexual, todos estos datos entre la anécdota y el rumor que explicarían en parte el porque de su inmediato acceso personajes clave de la política y su picaporte para escribir columnas de corte social sobre los ricos y famosos que dice frecuentar o podría ser tan sólo una vivales timadora que se ha autoemparentado con los Cosío, los Pando y los Mundet para apantallar tarugos.

Digo esto por ser la génesis del escándalo Téllez-Pando. En el 2006, cuando el político aún estaba en la iniciativa privada, específicamente como parte de grupo Carlyle, ella lo llamó para masajearle el ego con el cuento de un libro sobre política.
Diana, quien firma en el diario Reforma y otras publicaciones como Fosca March o Marzo oscuro en catalán, ya había intentado colarse en Televisa con un guión sobre la vida de su supuesto pariente Elías Pando, misma que fue rechazada, ahora quería incursionar en el periodismo politico vía Luis Téllez y sus memorias.

Éste, por algún azar extraño inició con ella en el 2005 una relación cibernética por correos electrónicos, mensajes de Blackberry y de teléfono celular. Aparentemente esta parafilia creció y se convirtió en un romance virtual a larga distancia, a tal punto que a fines del 2006, cuando Téllez vacacionaba en Cancún y a punto de integrarse al gabinete de Felipe Calderón en la cartera de comunicaciones, llamó a Diana durante una comida de amigos y ya pasado de copas sin encontrarla grabó un mensaje que no cortó del todo y continuó en su reunión hablando pestes de su mentor Carlos Salinas de Gortari, quien lo catapultó políticamente y al que sirvió desde la subsecretaría de Agricultura para pasar después a servir con Zedillo como secretario de Energía entre otros puestos, comentario que quedó grabado en el celular de Pando.

Esa conversación hablaba de algo que no es nuevo ni extraño: que Salinas de Gortari habia utilizado para su beneficio una partida secreta discrecional que hasta el sexenio de Zedillo sirvió de caja chica para los caprichos presidenciales y que todos sus antecesores utilizaron para hacer negocios, mantener amantes, acallar conciencias , etc,

Esa grabación de 16 minutos reales, fue entregada en versión editada por Diana Pando a Luis Mandoki y Federico Arreola en septiembre del 2007 tras haberla ofrecido durante año y medio a Joaquin López Doriga, Julio Hernandez y Guadalupe Loaeza entre otros periodistas que vieron en ella un pleito personal de sábanas sin valor eticamente periodístico.

Pero encontró su canal cuando en ese mes, en las instalaciones de CNN en la Ciudad de México estos personajes afines a Andres Manuel López Obrador, entregaron la grabación a Carmen Aristegui quien la guardó hasta que el momento fuese el correcto para sus intereses, lo cual ocurrió 15 meses después cuando se reincorporaba a la radio a través de MVS, empresa de la familia Vargas cuyo hermano mayor , Joaquín , es compadre por partida doble de Luis Téllez.

Asi las cosas, un problema entre dos personas que mantenían una relación personal que podría juzgarse hasta enfermiza, se volvió material político a criterio de Carmen Aristegui quien pensó que sería noticia descubrir que Carlos Salinas de Gortari fue un pillo, algo así como si nos descubriera el agua caliente y el hilo negro.

Para completar la comedia de errores, alguien muy tonto y muy inocente recomendó a Luis Téllez que negara conocer a Diana Pando y que afirmara ser la víctima de un chantaje, cosa que lo exhibió aún más ya que la despechada mujer cantó de su ronco pecho y afirmó tener 8 grabaciones más, todas ellas realizadas en la oficina y teléfono oficial del ahora Secretario de Comunicaciones Luis Téllez y donde se hablaba de asuntos gubernamentales en términos poco correctos, utilizando a sus espaldas el nombre del presidente Calderón para ciertos negocios y mencionando que al encargado del Consejo Federal de Telecomunicaciones, Cofetel, rector de la normatividad de las mismas, el panista Héctor Osuna, el presidente se lo podía meter por el culo.

Lo extraño es que estas cintas estén en manos de Diana Pando y ahora surge la idea de un akelarre de brujas en que Aristegui y Pando unieron fuerzas con la recién depuesta subsecretaria del ramo, Purificación Carpinteyro, única capaz de tener acceso a una grabación así, teoría no confirmada.

Para echarle más leña a su fuego, Diana Pando mostró recibos de depósitos en dólares que le hacia Luis Téllez para pagarle la renta y afirmó que tenía de él correos electrónicos de corte erótico y hasta sus calzones, olvidados tras una noche de pasión en San Diego y afirmó que hacía esto porque sólo quería el amor del político quien la uso y desechó como kleenex sucio.

De pronto, contra todo pronóstico este asunto cobró carácter personal, el presidente Calderón le dió el espaldarazo de apoyo a Téllez al llevarlo a la gira por Sinaloa y al recomendarle limpiara su cochinero solo mediante una denuncia en la PGR, la mayor parte de los medios minimizo el evento y ahora dejaron colgadas del tendedero a Aristegui y a Pando, la primera que pasó de periodista de fondo e investigación a chismosa de lavadero y a Pando como estafadora, mitómana y vividora, que aparentemente habia ya intentado un numerito así hace años pero contra Esteban Moctezuma Barragán, quien fue más cauto o más listo,convertida ahora en la peor pesadilla de Luis Téllez quien tuvo que explicar esto a su esposa e hijas.

En el impasse en que nos encontramos hay muchas piezas perdidas: el origen de las otras grabaciones hechas desde la oficina de Téllez ¿quién y cómo las grabó y quien se las entregó a la dupla Aristegui-Pando?, las consecuencias de este escándalo en la relación profesional y personal de Luis Téllez y Joaquín Vargas, patrón en MVS de Aristegui, el curso de la demanda penal presentada por el secretario de comunicaciones, las consecuencias políticas de este galimatías y como se piensa cobrar Salinas de Gortari el balconeo, sobre todo con el antecedente de su violento carácter poco amigo de la crítica.

Si usted cree que ya vimos, escuchamos o supimos lo último de este lavadero, se equivoca, recuerde que ya lo decía William Congreve en su obra "La novia doliente" El infierno no conoce furia peor que el de una mujer despechada y Diana Isabel Pando va por todas contra el minúsculo pero poderoso Téllez.

Al tiempo....

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