jueves, septiembre 04, 2008

Yucatán El horror

Rosa Santana

La escalada de violencia en el país alcanza grados indecibles. Impulsada por las organizaciones criminales, llegó a su clímax en Yucatán, donde el hallazgo de 12 cuerpos decapitados le recuerda al gobierno de Felipe Calderón su fracaso en materia de seguridad. Ahora los cárteles extienden su campo de batalla a la península yucateca, y al parecer nadie puede frenarlos…


MÉRIDA, YUC.- La tarde del jueves 28 fueron localizados 12 cadáveres decapitados en esta ciudad, de los cuales 11 estaban en el ejido Chichí Suárez de la capital meridense y uno más en el municipio ganadero de Buctzotz.En este último, el único cuya cabeza estaba junto al cuerpo, se encontró un mensaje dirigido al secretario de Seguridad Pública: “Por no respetar los tratos, tú eres el culpable de lo que pase, Luis Felipe Saidén Ojeda”, señalaba el texto.Aunque al principio las autoridades intentaron negar el hallazgo, terminaron por reconocer los hechos luego de que las fotografías fueron difundidas por los medios de comunicación, incluida la del cadáver que tenía la cartulina dirigida a Saidén.De acuerdo con fuentes policiacas, algunos de los cuerpos decapitados también tenían recados; en uno de éstos, por ejemplo, el mensaje decía: “Rafael, tú sigues”, al parecer en alusión al subprocurador de Averiguaciones Previas, Rafael Acosta Solís; otro más tenía como destinatario al propio secretario de Seguridad Pública: “Saidén, este es tu espejo”.Dos días antes del hallazgo, el martes 26, en las inmediaciones del aeropuerto de Cancún fue colocado un par de mantas de 7.00 x 1.20 metros con la siguiente leyenda: “Para todo el gobierno federal, estatal y municipal. Si quieren que la violencia acabe, dejen de encubrir y de apoyar al Chapo Guzmán, al Mayo Zambada, a Nacho Coronel y a Óscar Valencia. PD: Di no al Chapo Guzmán y a todos los traidores”.Ese mismo martes aparecieron mantas con mensajes similares en Nuevo Laredo, Tamaulipas; Monterrey, Nuevo León; San Luis Potosí; Saltillo y Piedras Negras, Coahuila, y en Poza Rica, Veracruz.El comisionado interino de la policía municipal de Cancún, Francisco Velasco Delgado, El Vikingo, restó importancia al mensaje aparecido en este destino turístico; incluso dijo que puede tratarse de una broma, pues en las mantas se aludió a un grupo que no tiene presencia en el sureste. Según él, Nacho Coronel opera sólo en el norte del país.La madrugada del viernes 29 la policía de Cancún detuvo a tres de los presuntos verdugos de los yucatecos decapitados. Fueron identificados como Manuel Jesús Poot Ku, de 28 años, originario de Tizimín, Yucatán; el regiomontano Jan Camacho Coronado, de 25, y el veracruzano Víctor López García, de 22, quienes viajaban en una camioneta Ford Escalade blindada. La captura se realizó luego de una persecución que comenzó cuando intentaron evadir un retén federal situado a la entrada de esta ciudad portuaria.En el vehículo fueron encontradas dos armas largas tipo M-16 con 23 cargadores, una pistola escuadra calibre 9 milímetros con dos cargadores y más de mil cartuchos útiles de diferentes calibres. También había una espoleta de granada, un par de hachas y dos palas.El gobernador de Quintana Roo, Félix González Canto, manifestó su temor de que en su entidad ocurra el desenlace de la historia que tiene expectantes a las autoridades en toda la península, acerca del sitio donde podrían aparecer las cabezas de los 11 ejecutados.Hasta el cierre de esta edición aún no se localizaban las 11 cabezas de los cuerpos hallados en Chichí Suárez, aunque mediante pruebas dactiloscópicas fue posible establecer a quiénes pertenecían los cadáveres. Todos tenían antecedentes penales por ataques en pandilla, robos, homicidio e incluso delitos contra la salud. Uno de ellos llevaba un récord de más de 20 ingresos al penal. Otro más, el de Buctzotz, era menor de edad, según los estudios forenses.En torno a los decapitados, la gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega Pacheco, dijo: “Seguramente tratarán de que sea algo espectacular porque quieren espantar a la sociedad yucateca para que presione a las autoridades”. También reveló que desde hace tres meses su gobierno comenzó a recibir intimidaciones del crimen organizado, las cuales arreciaron durante los últimos 12 días, con la exigencia de que se relajara la vigilancia. Admitió que las amenazas fueron cumplidas y enfatizó que su gobierno no dará “ni un paso atrás en la lucha contra la delincuencia”.También refrendó su apoyo a Saidén, y con respecto al narcomensaje dirigido a éste sostuvo: “Son intentos para desprestigiar a nuestro director de Seguridad Pública”. Sin embargo, no es la primera ocasión en que se relaciona a Saidén con narcoejecuciones.Su nombre se mencionó en 2004 en el denominado Caso Cancún, por el que fueron procesados varios exfuncionarios de la Procuraduría General de la República, así como policías estatales y municipales.En esa época, Saidén era director de la policía municipal de Cancún y fue implicado, según el expediente PGR/SIEDO/UEICDCS/329/04, en las narcoejecuciones de 13 personas, entre éstas tres elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI). En aquel momento se dijo que los asesinatos ocurrieron por un ajuste de cuentas entre los cárteles de Sinaloa y del Golfo. Al funcionario se le procesó por delitos contra la salud, delincuencia organizada y como presunto responsable de brindar protección a narcomenudistas. La orden de aprehensión en contra de Saidén fue librada por el Juzgado Tercero de Distrito de esa ciudad.Las imputaciones contra Luis Felipe Saidén Ojeda –quien estuvo al frente de la Secretaría de Seguridad Pública por primera vez durante el sexenio de Víctor Cervera Pacheco– las hizo el entonces director de la policía de Cancún, Felipe de Jesús Argüelles Mandujano, El Rayo, quien a su vez fue procesado como presunto implicado en los asesinatos de los tres afis. El Rayo fue detenido por elementos al mando de Saidén.El nombre de Saidén salió a la luz durante una diligencia que se practicaba en el Juzgado Tercero de Distrito con sede en Mérida, cuando la juez que llevaba el caso leyó los delitos a los primeros 26 detenidos, quienes estuvieron arraigados durante 90 días.En mayo de 2007, Saidén fue absuelto por el Juzgado Colegiado de Circuito en Cancún.El procurador estatal José Carlos Guzmán también dio su espaldarazo a Saidén en esta ocasión: “No comprendo el sentido del mensaje, porque nuestro único compromiso es con la seguridad de la ciudadanía”.

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