María Teresa Jardí
Existirá alguien que de buena fe haya dudado, aunque fuera por un segundo, que la resolución del tribunal no iba a ser a favor de Jesús Ortega. Favor, con favor se paga. Y los favores de los “Chuchos”, a la fascista usurpación mexicana, son muchos. ¿Qué acaban con el PRD? ¿Y qué? ¿Cuánto tiempo no mantuvieron al PST para lo mismo? Se trata de minar al Movimiento Ciudadano y buscan acabar con AMLO como opción ciudadana de cambio, matan la esperanza del pueblo de que las cosas pueden cambiar de manera pacífica. No entienden o más bien no les importa el peligro que esto entraña. Les da igual —dado que los traidores a la Patria no se van a quedar a vivir en México— el costo de su abominable desarme ético de todas, absolutamente todas, las instituciones en México.
Una vez legalizado el fraude con el que nos impusieron a un usurpador, la resolución del Poder Judicial es de una lógica atroz.
Sólo falta que dejen a Acosta, para fingir que no es en pago a Chuchito. Agotado, ha sido asesinado, más bien, el PRD, por el Tribunal Federal Electoral, al mismo tiempo que se acaba de suicidar al Poder Judicial mexicano.
Al fin, pensarán, los “Chuchitos”, que “la maestra”, mientras el país estalla, ya se encargará de llevarles los votantes a modo que le hagan falta al PRD para subsistir, en su punto mínimo, eso sí, hasta Jesusito sabe que ella también tiene su partiducho a modo para y por lo mismo y al que necesita también desviarle algunos votos. Y, además, salta a la vista, que la grotesca maestra, sin votos, no es nada, que se acaba, que ya no sirve. Y si ya no sirve como a modo de la usurpadora derecha panista o de las siglas que sean, eso ya es lo de menos. Si ya no le sirve a la derecha mafiosa que se ha apoderado de la clase política del país corre el riesgo de que la dejen abandonada y como sus pecados son tantos y sus delitos tan graves, no se va a exponer a regalar ni un voto de los necesarios para protegerse ella.
Es lo mismo que lo del avionazo en el que perdiera la vida Vasconcelos, el yupi señorito español, eso sí, mexicanizado y otros de menor importancia para los que usurpan el sistema político.
¿Alguien habrá podido creer ni por un momento que los yanquis iban a decir, al igual de los británicos, algo más que le conviniera a la usurpadora derecha mexicana? Favor, con favor se paga. Y si la derecha les entrega, con el voto del bien pagado Chuchito incluido, en charola de plata los bienes propiedad de la nación mexicana, ellos no van a dejar de pagar el favor con nada menos.
La corrupción como regla y la impunidad como garantía, es la única certeza que a los mexicanos dejan. Sin darse cuenta, de manera doblemente grave, en el caso del Poder Judicial, del peligro que entraña el agotar la esperanza del pueblo de que las cosas pueden cambiar por la vía pacífica. La traición a la Patria como regla de vida de la corruptora derecha fascista. Otro dato de la necesidad del nombramiento sin ética de Fernando Gómez Mont para suplir al que deja más de una viuda.
Y sin embargo queda una esperanza. La pelota está en la cancha de AMLO y él puede, si quiere, llamar a los más de dos millones de afiliados a la única Presidencia Legítima, a formar un nuevo partido de izquierda por el que votemos los que verdaderamente somos de izquierda. Pero para eso debe deslindarse ya del PRD.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario