También fracasado administrador de la violencia

Para Memo, capaz incluso de morir a tiempo
Por María Teresa Jardí

No entiendo el afán de creer que Fecal iba a presentar un plan ni siquiera con un contenido mínimo de cara a resolver la situación de la mayoría integrante del pueblo mexicano. La derecha lo impuso como usurpador con el aval de todos los partidos políticos —no lo olvidemos, año de elecciones el 2009, lo que nos queda a los ciudadanos es no votar a manera de condena y a modo de lograr la formación de partidos representantes de las diversas ideologías del pueblo mexicano y, sobre todo, verdaderos representantes de los intereses de los gobernados—, la derecha impuso a un espurio como gobernante, por la puerta de atrás y acompañado de la imparable, por lo visto, fuerza castrense en que se ha ido convirtiendo el EMP, también con el aval de los partidos, tampoco lo olvidemos, porque corremos el riesgo de estarnos equivocando y por ende haciéndole el juego a ese ejército al atacar al único legítimo y nacional mexicano.
Soberanes es de derecha y no ha hecho otra cosa desde la CNDH que hacer el juego a la derecha. Sus datos sobre las muchas quejas contra el Ejército nacional quién sabe si no son parte del mismo golpeteo que se le ha venido haciendo desde la cabeza al único Ejército legítimo, que, sí, que ha incurrido en errores que han devenido en la comisión de graves delitos. Pero son los riesgos de sacar un Ejército a la calle. Y bien puede ser que riesgos calculados cuando además se le mezcla con lo más corrupto del sistema ejemplificado en la policía, que no tenemos, desde donde se encabeza y protege a las bandas de secuestradores.
No cualquier indígena convertido en soldado debido a la miseria se convierte en “Zeta”. Para eso se necesita haber sido entrenado como torturador —irrecuperable para la sociedad— en la Escuela de las Américas, gringa, claro, mejor conocida como la Escuela de los Asesinos.
Ya en Chihuahua nos equivocamos. Resulta que tanto en Cosyddhac, como en el PAN, antes de convertirse el PAN en gobierno. Y, por ende, antes de que como declarara Francisco Barrio cuando el primer plantón —levantado por el PAN a bofetadas— del Frente Democrático Campesino, olvidando que los panistas incluso se encadenaron en las puertas de Palacio de Gobierno cuando el fraude “patriótico” de la “izquierda”, que tampoco tenemos como partido, “que como gobierno le tocaba reprimir a los movimientos ciudadanos pacíficos que antes el PAN promovía e incluso encabezaba”, Cosyddhac, el PAN, el PRD y la sociedad, estábamos plenamente convencidos de que todos los delitos que involucraban a la PGR eran cometidos por elementos de la Policía Judicial Federal. Y, no, eran peores todavía los encargados de la erradicación de plantíos, que no se hacía, como bien sabe el impresentable Jorge Tello, integrante del gabinete del usurpador, para ver si él sí puede administrar la violencia que la derecha promueve. Y esto viene al caso porque la derecha, es claro, que ahora pretende y de ahí la necesidad de Tello llegar a acuerdos con narcotraficantes y sicarios.
Fecal tomó por asalto el Poder Ejecutivo con una única encomienda: la de administrar la violencia. Pero, tan inculta que es la derecha, no se percató siquiera de que ni los inteligentes pueden con la violencia.
Fernando Gutiérrez Barrios, a pesar de ser un asesino, era un hombre inteligente. No sabio. Un sabio no elige ser recordado por la historia sólo por su faceta de asesino. Nada justifica la tortura. No hay justificación alguna para la desaparición forzada de una persona. No valen las razones de Estado cuando se causa dolor desde el Estado, que tiene el monopolio legítimo de la fuerza para castigar con la ley en la mano. Y más imperdonable es que ese dolor se cause a quienes simplemente buscan un cambio para beneficio de las mayorías integrantes de un pueblo inerme como el mexicano. Gutiérrez Barrios es imperdonable y su faceta malvada borra la de inteligente negociante aunque haya sido un actor de varias y variadas pistas políticas. Y a Gutiérrez Barrios, mente creadora de la Brigada Blanca, le estalló la violencia incontrolable en las manos y tuvo que deshacerse de algunos de sus integrantes, por manos de otros de los integrantes de esa máquina asesina, que volvimos a heredar los mexicanos por vía de los gobiernos sucesores del de Salinas.