Sique
La derecha no tiene discurso, o mejor dicho el que tiene ya no le funciona. Parece que cada vez un sector más amplio de la población se da cuenta que el discurso de la derecha por lo general se sustenta en la hipocresía, en falsedades trastocadas y en autoritarismo. La generación de empleos que tanto cacaraqueó la derecha a base de sus empresas está haciendo justo lo contrario y no sólo ahora que está en crisis sino desde antes cuando comenzó a reemplazar a los humanos con la tecnología y a abolir las conquistas laborales de los trabajadores. La "mano dura" lejos de controlar las redes delincuenciales lo que ha hecho es retarlas y como resultado nos encontramos en un diario baño de sangre. ¿Qué más?
Ahora ya no les queda más que echar mano del discurso de la izquierda aunque con tal perversión que tanto el internet como yo nos quedamos mudos el pasado viernes cuando dijo que los pobres para ahorrar debían gastar menos luz y menos agua. Ahora menciona a los pobres pero ¡de que manera! No sabemos si tal declaración signifique su completo desconocimiento de la realidad que viven los pobres o su falta absoluta de moral y humanismo. Puede que los dos.
Hoy leo: "Es hora de transformar el país, señala Calderón". Tal declaración, por un lado, es completamente tardía, y por otro, es una imitación de lo que AMLO ha venido diciendo desde su campaña en el 2006. Luego le copia literalmente la frase "por un México más libre y más justo". Se les acaba el discurso y las ideas para marear a la población y no les queda más que copiar lo que dice el adversario. Sin embargo tampoco va a funcionarles pues su frágil estructura ética pervierte cualquier intento de convencernos de que quieren rectificar el rumbo. Nada más falta que diga que "por el bien de todos primero los pobres", en su caso y bajo su estructura ideológica lo que significaría es que los primeros que aventarán al precipicio es a los pobres.
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