martes, enero 20, 2009
...Y defiende su proyecto Manzanillo
El secretario de Comunicaciones y Transportes, Luis Téllez, confirmó que entre 2002 y 2006 fungió como consejero independiente de la empresa SSA México, una de las principales compañías en volumen de carga de contenedores e interesada en la ampliación del puerto de Manzanillo, cuya licitación se dio a conocer el martes 13 de enero, como lo anticipó este semanario.
Dos días después de que se publicaran en Proceso 1680 las denuncias sobre el conflicto de intereses que existe en torno a la licitación del puerto de Manzanillo -el proyecto más ambicioso para este año, que requerirá una inversión pública y privada por 10 mil 500 millones de pesos-, Téllez expuso en rueda de prensa que haber sido consejero independiente de SSA México no implica que haya tenido acciones de la misma, y que al entrar al gobierno federal renunció al consejo, de manera que, en relación con esa compañía, "yo no tengo ningún interés en este momento ni lo tuve en aquel momento". El titular de la SCT enfatizó que la Comisión Federal de Competencia es la encargada de autorizar que la empresa dirigida en México por Francisco Kassian intervenga en la licitación del proyecto del puerto de Manzanillo."La participación de SSA en la licitación no depende de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. La autorización depende de la Comisión Federal de Competencia", la cual "decide si efectivamente puede entrar", afirmó a pregunta expresa del reportero.Téllez reconoció que se ha destruido parte de las 100 hectáreas de manglar, pero defendió el proyecto indicando que habrá una "remediación ambiental" y una nueva planta de tratamiento de aguas, además de que "se van a tomar medidas importantes para la reconstrucción de manglares en toda la zona".E insistió: "Efectivamente, se sacó mangle antes de que se cambiara la Ley General de Protección al Ambiente, (...) el artículo 60 (...), y tenemos todos los permisos ambientales. Estamos haciendo toda la remediación ambiental requerida". Sin embargo, especialistas consultados advirtieron que la destrucción del manglar también viola varias leyes y convenios internacionales, como la Convención sobre los Humedales, del 2 de febrero de 1971, al igual que su protocolo modificado, signado por México el 3 de febrero de 1982, y la Convención Interamericana de Protección y Conservación de las Tortugas Marinas, que fue publicada en el Diario Oficial de la Federación el 29 de noviembre de 2000.Esos tratados internacionales para proteger humedales y manglares fueron suscritos por México varios lustros antes de que fuera modificada la Ley General de Protección al Ambiente (2008) y aprobado el proyecto de ampliación de la zona norte del puerto de Manzanillo.A su vez, el director general de Puertos, Alejandro Chacón, aceptó que a la empresa Mexicana de Dragados, filial de la compañía belga Jan de Nul, se le pagaron en 2008 un total de 260 millones de pesos por anticipado, y que aún faltan 240 millones por el contrato para dragar 800 mil metros cúbicos y rellenar 77 hectáreas. La ampliación del puerto de Manzanillo, que mueve 44% de la carga de contenedores de todo el país y es considerado el séptimo en importancia a nivel mundial por su capacidad, absorberá otra serie de inversiones públicas por 5 mil millones de pesos, que incluirán un nuevo ferrocarril y obras de "remediación ambiental" para establecer islas de manglares en una extensión de 14 hectáreas.
"Grupos minoritarios"
Después de que el 9 de enero sostuvo una reunión con las organizaciones sociales que han protestado por dichas obras, Téllez las descalificó el día 13 como "grupos minoritarios", durante la rueda de prensa que sostuvo en las instalaciones de la SCT en la Ciudad de México.El secretario se comprometió allí a realizar una gira por Manzanillo, con un grupo de reporteros, para que "conozcan la posición de los distintos operadores del puerto, de los trabajadores, de los sindicatos, y no únicamente una posición parcial de ciertos grupos minoritarios, inclusive de algunas de las colonias con las cuales colinda el puerto, y que se han tomado medidas como en ningún otro puerto mexicano se habían tomado para reducir el ruido y para poder atenuar los efectos que pudiera tener el puerto sobre sus habitantes".Sin embargo, las críticas al proyecto de Téllez no sólo han provenido de estos grupos que él ahora considera "minoritarios", sino también de senadores, de diputados federales y del propio gobernador de la entidad, el priista Silverio Cavazos.En el curso de la reunión que se realizó en Manzanillo con distintos operadores del puerto, el gobernador de Colima reprochó al director general de Puertos, Alejandro Chacón, y al director de la Administración Portuaria Integral, Julián Dip, no haber entregado los estudios correspondientes sobre impacto urbano y ambiental."Las organizaciones tienen razón -afirmó Silverio Cavazos en esa reunión-: no se les ha dado la atención ni la debida importancia. Ellos no están en contra del desarrollo portuario ni del progreso, sino a favor de que las cosas se hagan bien, que afecten lo menos posible al medio ambiente y a la ciudadanía".El mandatario estatal expresó que, del mismo modo, hubo protestas en contra de las obras de la regasificadora -licitada a favor de la empresa española Repsol- en la laguna de Cuyutlán, que se dialogó con la Comisión Federal de Electricidad y que, finalmente, la regasificadora fue cambiada de lugar para que no atentara contra los pobladores.En el mismo encuentro intervinieron representantes de las organizaciones ACIMAN, Pro Manzanillo, Gran Visión, Manzanillo 2000, Prosanac y Siglo XXI, todas opuestas a la licitación en la zona norte, así como el dirigente de los estibadores, Cecilio Lepe Bautista, uno de los principales promotores de la obra.Allí, el diputado federal panista Nabor Ochoa advirtió a Téllez que un clamor insistente de las agrupaciones ciudadanas ha sido a favor de la interconexión de las lagunas de San Pedrito y el Valle para evitar inundaciones en los barrios IV y V del Valle de las Garzas.Joel Figueroa, dirigente de Gran Visión, mostró en el acto diapositivas de las inundaciones, y el senador priista Rogelio Rueda reclamó al titular de la SCT que no hubieran realizado los estudios adecuados para que el nuevo puerto de Manzanillo se licitara en el Vaso Dos de la Laguna de Cuyutlán, aprovechando "las sinergias de las inversiones en el puerto para los buques de la regasificadora que habrá de iniciar operaciones en febrero de 2011".Según Figueroa, lo más viable es construir el nuevo puerto en Cuyutlán, tal como se estableció en el Programa Nacional de Infraestructura 2006-2012 presentado por el presidente Felipe Calderón."Si ya la Secretaría de Comunicaciones y Transportes va a abrir un canal de navegación de 350 metros de ancho y más de 16 metros de profundidad, con la construcción de dos posiciones de atraque para los buques que transportarán gas natural desde Perú en 2011, pues se facilita construir ya muelles para el puerto comercial, inclusive para los buques de Pemex", afirmó el catedrático de la Universidad de Colima y dirigente del comité ciudadano Gran Visión. l
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