Por Alvaro Cepeda Neri
Los panistas, por lo general, son mexicanos (“los reaccionarios, que al fin son mexicanos”) pertenecientes a la clase media alta; rezan con “la gente bien”: ricos, aristócratas, acomodados. Aspiran a establecer gobiernos del centro a la derecha, guardan su distancia con la clase baja y le hacen fuchi a los pobres por los que sienten convenencieros intereses, como los electorales.
Hay panistas de nuevo cuño, advenedizos y oportunistas, como Demetrio Sodi (ex priísta, ex perredista, etc.). La hija del todavía priísta, Miguel Limón Rojas (ex secretario de la Reforma Agraria y Educación y presidente de la fundación Octavio Paz) es una panista de última hora.
La pregunta pública es si su postulación a asambleísta de la Ciudad de México, se debe a ser amiga de la esposa de Calderón a los que conoció cuando cursaban una maestría. La entrevista a Jorge Pérez (Reforma: 29/V/09) del mismo periódico al que perteneció como consejera, formando parte del órgano ciudadano y externo de ese medio de comunicación creado para intercambiar puntos de vista sobre el matutino, nos informa que iba a ser candidata a delegada de la “Miguel Hidalgo”, la zona territorial del Distrito Federal (con 16 delegaciones) donde se encuentra domiciliado Los Pinos y la Zona Militar defeña.
No le han de haber encontrado posibilidades, ya que el PAN postuló a Demetrio Sodi. Amiga de Margarita Zavala (ésta, sin el protagonismo de la cónyuge de Fox, ha nombrado a no menos de 100 de sus conocidos a cargos de representación para las próximas elecciones), Lía Limón fue esposa de Carlos Ugalde (a quien Calderón y el PAN le deben el “madruguete” para reconocerles la pírrica victoria presidencial).
No tiene, si esos son méritos, ninguno otro para su postulación, aunque sí los derechos de todo ciudadano para buscar, en la democracia indirecta, un cargo con base en los votos.
Y gracias a su papá ha trabajado en las administraciones priístas y con Margarita ha sido la impulsora de las estancias infantiles que se han creado al “ahí se va”, o, mejor dicho, conforme a la frase del cinismo calderonista: “haiga sido como haiga sido” y que es el fundamento de la ilegitimidad que López Obrador constantemente le echa en cara a Calderón.
Así, pues, la candidata neopanista Lía Limón asegura que sus “ídolos” del PAN son el ex amigo de Margarita Zavala, el tal César Nava (expulsado de Los Pinos por su infidelidad conyugal); fue admiradora de Juan Camilo Mouriño, eliminado en misterioso accidente de la sucesión calderonista; también por supuesto, de su amiga y manager Margarita y, de don Luis H. Álvarez.
Para nada mencionó a Gómez Morín, el fundador del PAN (que se iba a llamar partido de Acción Católica). En la capital del país se vislumbra una caída en las preferencias del PRD, sin que vaya a ser marginado, y los ciudadanos se enfilan a rescatar al PRI e impulsar al PAN, por lo cual candidatos como Lía pueden alcanzar triunfos para fortalecer los intereses de Margarita Zavala en el contexto del golpismo de facto militar que pone nubes de prolongar el sexenio calderonista.
cepedaneri@prodigy.net.mx
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario