Dpa, Reuters y Afp
Hugo Chávez, presidente venezolano, durante un discurso ante simpatizantes, ayer en Caracas Foto: ReutersSantafé de Bogotá, 26 de noviembre. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, arremetió hoy por segundo día consecutivo contra su par colombiano, Álvaro Uribe, a quien calificó de “vocero de la oligarquía santanderista y antibolivariana”, que “no quiere paz” en su país y maneja el mismo discurso del presidente George W. Bush que, sostuvo, “sale del imperio (y) es repetido por la derecha latinoamericana, desde México hasta Argentina, teniendo como epicentro a Colombia”.
Horas después, Uribe pidió a la comunidad internacional, y especialmente a los países vecinos de Colombia, no creer en la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que, dijo, tienen el “discurso traicionero del terrorismo”.
Mira nomás quién habla de traidores...
Uribe no se refirió a las críticas formuladas contra él por Chávez este lunes, pero su gobierno y el de España dijeron este lunes por la mañana que están a la espera de aclaraciones de parte de Venezuela sobre el alcance del concepto utilizado por el venezolano el domingo, cuando dijo que las relaciones con esos países están por ahora “en el congelador”.
Chávez se refirió hoy personalmente a Uribe para responder declaraciones que el domingo por la tarde hizo el colombiano sobre la cancelación de los buenos oficios del bolivariano en la negociación de un canje de casi medio centenar de políticos, militares y policías secuestrados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por 500 guerrilleros de esta organización.
Uribe, que respondió a las acusaciones personales hechas por Chávez sobre la decisión de finiquitar la mediación del venezolano, dijo el domingo que su gobierno necesita “una mediación y no legitimadores del terrorismo”, y sostuvo que Chávez fomenta “un proyecto expansionista en el continente”, al que pretende “incendiar” hablando “de imperialismos”.
Con alusiones a un pasaje de la historia común de Colombia y Venezuela en el periodo posterior a la independencia de España, en el siglo XIX, el venezolano aludió hoy particularmente a las declaraciones de Uribe sobre los planteamientos “expansionistas” de Chávez en América Latina, durante una reunión con el alto mando de las fuerzas armadas de Venezuela.
“Yo lo que he hecho es poner en su sitio al presidente de Colombia. Llegó el momento de desenmascararlo. El no quiere paz. Es un vocero de la oligarquía santanderista y antibolivariana”, hizo énfasis Chávez.
“El presidente de Colombia dice que yo estoy irrespetando la historia. El que mandó a matar a (Simón) Bolívar se llamó Francisco de Paula Santander y Bolívar le perdonó la vida, le conmutó la pena de muerte por el exilio”, agregó.
La oligarquía colombiana, dijo Chávez ante los jefes militares de su país en un discurso transmitido por la estatal VTV, “no quiere paz y cree que va a jugar con nosotros. No va a jugar con nosotros ni una oligarquía colombiana ni ninguna otra. Venezuela se respeta”.
Más tarde, en una entrevista que fue transmitida por las televisoras venezolanas, Chávez afirmó que cuando Uribe lo acusa de pretender un “expansionismo” bolivariano en América Latina habla como Bush.
“Se le cayó la máscara: es Bush, es Uribe, ese es Uribe”, dijo.
Para Chávez, las relaciones entre Venezuela y Colombia atraviesan una crisis en la que se verán afectadas las relaciones económicas y de cooperación; apenas hace tres meses, los gobernantes de los dos países inauguraron un gasoducto que abastece a consumidores colombianos.
Chávez aprovechó las referencias a las relaciones económicas bilaterales para insistir en que Venezuela no regresará a la Comunidad Andina de Naciones, de la cual se retiró hace un par de años para poder acceder al Mercado Común del Sur, pero cuyo acceso ha sido detenido por el poder Legislativo de Brasil, que todavía este lunes dio a conocer que no está entre sus prioridades y será votado hasta 2008.
“Estamos en una crisis generada por la irresponsabilidad del presidente Uribe, por su mentira, por su falta de asumir un compromiso”, puntualizó el gobernante.
Chávez dijo que Caracas no quiere romper relaciones con Bogotá, pero según la agencia Dpa, el mandatario montó una oficina de crisis en su despacho y aclaró que “estamos preparados para cualquier cosa”.
Venezuela y Colombia comparten una frontera de más de dos mil kilómetros de longitud y se calcula que su intercambio comercial puede sumar este año cinco mil millones de dólares.
El ministro colombiano de Relaciones Exteriores, Fernando Araújo, informó hoy que su gobierno comenzó una ronda de contactos diplomáticos para explicar a la comunidad internacional las razones que tuvo Uribe para cancelar el miércoles pasado la mediación de Chávez.
Uribe atribuyó su decisión a la actitud de Chávez de comunicarse directamente con los altos mandos militares de Colombia, en el contexto de las negociaciones para el canje humanitario. “No vayan a resultar chavistas”, dijo hace dos semanas el colombiano a su par venezolano, a manera de broma, durante una reunión en Chile, en el contexto de la 17 Cumbre Iberoamericana, según el diario El Tiempo de Bogotá.
“Lo que tenemos que esperar es ver qué pasa, porque esto del congelador no es un término técnico en comercio. Entonces no sabemos qué significa el congelador, puede ser mucho y puede ser nada”, dijo a su vez el ministro colombiano de Comercio, Industria y Turismo, Luis Guillermo Plata.
“Nos han engañado 40 años”
Al participar en la 17 Asamblea de la Organización Mundial de Turismo, en Cartagena de Indias, Uribe sostuvo que “el terrorismo ha sido el enemigo de la democracia, el destructor de las familias, fuente de desempleo, pobreza, desplazamiento. El terrorismo nos ha engañado 40 años, por eso nosotros no queremos que el terrorismo engañe a ninguno de los pueblos vecinos de nuestra patria”.
De su lado, el gobierno español pidió explicaciones al embajador venezolano en España, Alfredo Toro, sobre las consecuencias que tendrá el congelamiento de las relaciones bilaterales, informó el corresponsal de La Jornada, Armando G. Tejeda, desde Madrid, donde el diplomático se entrevistó con la secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez.
Desde Washington, el vocero del Departamento de Estado, Sean McCormack, dijo que los problemas entre Colombia y Venezuela son un “asunto soberano” de esos países, pero aclaró que el gobierno de Bush tiene “un continuo nivel de preocupación” por los rehenes estadunidenses en manos de las FARC.
Por lo pronto la Bolsa de Colombia bajó, es tiempo de que el pueblo colombiano se sacuda de un gobierno servil a Washington.
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