Alentado por un gobierno dócil el capital se apropia de todos los espacios, alertan
Víctor Ballinas
Es urgente que la ciudadanía y los sectores sociales se organicen, se autogobiernen y demanden solución a los problemas del país, coincidieron los investigadores Gilberto López y Rivas, Ana Esther Ceceña, Magdalena Gómez y el sacerdote Miguel Concha, durante el foro México y el mundo actual, en el que se analizó el llamado a la nación del grupo civil Paz con Democracia difundido el 19 de noviembre del año pasado. Advirtieron que “hay una ocupación silenciosa de la nación, como sucedió, guardadas las proporciones, con las acciones nazis en Europa”.
En el foro, organizado por Casa Lamm y La Jornada, el antropólogo Gilberto López y Rivas dijo que el llamado a la nación mexicana al que convocó Paz con Democracia es producto del trabajo colectivo, no se trata de algo ocasional, sino de hacerle frente a una necesidad impostergable ante “la situación de emergencia nacional” que se vive en el país.
López y Rivas dijo que como ocurrió en la Segunda Guerra Mundial, por la ocupación de las fuerzas neofascistas en Europa, “nuestro país ha venido a ser ocupado”.
Precisó que el concepto de ocupación se refiere a cómo el capital se apropia con ímpetu y con una fuerza expansiva de los espacios libres, de espacios económicos, de la cultura, del trabajo, de los medios, y hay un gobierno colaboracionista.
Por su parte, la investigadora de la Universidad Autónoma de México, Ana Esther Ceceña, dijo que la propuesta del llamamiento a la nación además de ser un documento colectivo, parte de un balance muy cuidadoso que se puede enriquecer, y es que “junto con la ocupación nos encontramos ante una situación de emergencia. El país se nos va de las manos no cada día, sino cada diez minutos. Hay que detener esto, estamos en un país ocupado, hay una ocupación invisible e integral”.
Por su parte, Magdalena Gómez dijo que el documento “Llamamiento a la nación mexicana”, de Paz con Democracia, es una propuesta radical para ir a la raíz de muchos problemas. El documento es casi un recuento, y puede ser un catalizador para la reflexión, hay que detenerse en el camino para mirar de conjunto la situación donde el panorama no es muy alentador”.
Gómez dijo que no fue casual el rechazo del gobierno y del Congreso “al uso y disfrute de los recursos naturales, que demandaron los pueblos indígenas en la reforma en la materia. Desde la lógica de los pueblos indígenas eso les garantiza la sobrevivencia como pueblos, y hoy se ven agravados por los tratados de libre comercio”.
Magdalena Gómez hizo un llamado para que la sociedad apoye y mire a las comunidades indígenas, a Chiapas, porque desde el zapatismo se logró la recuperación de tierras y ahora los están echando, despojándolos; en medio se encuentra la privatización del petróleo, de la energía, y la posesión de los recursos naturales de los indígenas.
El sacerdote Miguel Concha, presidente del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, dijo que ese llamado a la nación mexicana se ubica en el bicentenario de la Independencia y el primer centenario de la Revolución, pero además los objetivos “son construir una nación libre, soberana y pluricultural para garantizar la justicia social porque ha sido traicionada y continúa siendo un pendiente histórico”.
Citó la tesis 12 del llamamiento, en la que se destaca que “la creciente integración a Estados Unidos, la subordinación a los intereses de las potencias y las grandes corporaciones, la aplicación de las políticas neoliberales que destruyen las conquistas sociales históricas y la amenaza de imponernos un Plan México o la Iniciativa Mérida han venido alejando los objetivos de libertad, justicia social, pluriculturalidad, por lo que tantos cientos de miles de mexicanos sacrificaron su vida”.
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