Repudian al espurio

Mexicanos “reciben” con protestas y manifestaciones al ilegítimo Felipe Calderón. Vallas para evitar que expresen de viva voz a FeCal su inconformidad. “Respeten los derechos de los mexicanos”, “NO a la privatización de PEMEX” y “Mejores servicios de los consulados”, las exigencias. Pancartas con la imagen de Presidente Legítimo de México, Andrés Manuel López Obrador. Su visita a EU, una burla

Sin importarles que estuviera nevando, emigrantes mexicanos recibieron a Felipe Calderón con manifestaciones de rechazo. (AFP)

CHICAGO, EE.UU., 12 de febrero (LA JORNADA/UNIVERSAL).- Migrantes mexicanos recibió a Felipe Calderón con una manifestación en demanda de la renegociación del TLCAN y de que su gobierno tome acciones concretas que ayuden a prevenir los abusos que sufren los trabajadores inmigrantes en Estados Unidos, como las redadas y las deportaciones.
La protesta se realizó en las inmediaciones de la preparatoria en el emblemático barrio La Villita, en el radican miles de mexicanos, donde el michoacano se reunió con un grupo de mexicanos que viven en Chicago.

Hombres y mujeres fueron cercados con vallas, al tiempo que elementos de seguridad de esta ciudad les impidieron el acceso a dicha escuela para que pudieran expresar de viva voz a Calderón su inconformidad.

Durante su estancia en la esquina de las calles Kostner y 31 sostuvieron pancartas en las que se leían frases como las siguientes: “Respeten los derechos de los mexicanos”, “NO a la privatización de PEMEX” y “Mejores servicios de los consulados”, además de otras con la imagen de Presidente Legítimo de México, Andrés Manuel López Obrador.

En una carta dirigida a Calderón Hinojosa señalaron que al desmigratizar la agenda binacional “parece que el gobierno está más interesado en los asuntos de la seguridad nacional eje de la política de George Bush y de los candidatos presidenciales en competencia por la nominación de sus partidos”.

Expusieron que México no ha fijado una postura para negociar un proyecto de política migratoria para ambos países y se quejaron que sólo ha habido “aislados” pronunciamientos del gobierno para pedir se respeten los derechos humanos de los migrantes.

Los manifestantes, quienes se mantuvieron por más de hora y media en la calle, sin importar que en ese momento estaba nevando, también criticaron el incremento en los asesinatos en México como resultado de los ajustes de cuentas entre los narcotraficantes y la militarización acelerada del país.

Salvador Aguilar, asistente al director de la sección siete del United Steel Workers (USW), el sindicato nacional siderúrgico señaló: “queríamos expresarle a... Calderón que sabemos que está aquí para demandar justicia y dignidad para los inmigrantes aquí, lo cual apoyamos, pero queremos también que ponga en practica lo que predica en México y deje de usar al ejército y a la policía para destruir sindicatos, como lo que está intentando con el sindicato minero en México; por eso queremos que retire los soldados de Cananea, Sonora. Lo que Calderón está diciendo aquí debería de hacer en México: dejen de atacar a mineros”, afirmó en entrevista.

Incluso durante la movilización un par de trabajadores sostuvo una manta que decía: “No ataquen a los mineros”.

Los reclamos a Calderón no llegaron de grupos antiinmigrantes, sino de los propios paisanos, quienes le recriminaron malos tratos, largas esperas y la burocracia asfixiante en los propios consulados mexicanos.

Organizaciones de migrantes mexicanos en las ciudades de Sacramento y Los Angeles anunciaron que recibirán con protestas a Felipe Calderón, cuya visita es considerada como una afrenta porque mientras se reúne con “personas muy importantes” en hoteles de lujo, cientos de mexicanos son arrestados en los centros de trabajo locales.

Otros más, ante la falta de empleo en sus lugares de origen, sufren al intentar cruzar la frontera hacia Estados Unidos, señalaron integrantes del Comité Pro Democracia en México, el Frente Indígena de Organizaciones Binacionales y el Frente Amplio Progresista de Los Angeles.