No hay excedentes petroleros, justifican Pemex y Hacienda

La tercera parte se destinó para subsidiar consumo de gasolinas

El país importa cuatro de cada 10 litros de ese combustible

Roberto González Amador

En los primeros cuatro meses de este año una tercera parte de los ingresos excedentes por la exportación de crudo ha sido empleada para financiar el subsidio al consumo de gasolina, se desprende de información de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

México, quinto mayor productor de petróleo del mundo, importa cuatro de cada 10 litros de gasolina que consume. Como la fijación del precio al público de este combustible obedece a una decisión política y no a condiciones de mercado, el alza en los tres años recientes en el valor del petróleo ha encarecido el costo del subsidio, mientras la oferta nacional no ha crecido al ritmo de la demanda por falta de infraestructura para refinar crudo.

La Secretaría de Energía informa que la producción de gasolina aumentó en promedio 0.6 por ciento anual de 1993 a 2007, al incrementar su volumen de 417.5 miles de barriles diarios a 456.6 miles en ese periodo. En cambio, la demanda interna de gasolina creció 3.2 por ciento anual, es decir, 4.3 veces más que la oferta, al pasar de 491.1 miles de barriles diarios en 1993 a 761.6 miles en 2007.

El alza en el precio internacional de la gasolina, consecuencia natural del mayor costo del crudo, ha sido esgrimida por la SHCP para asegurar que el gobierno federal no dispone de ingresos excedentes por la exportación de petróleo crudo, aunque datos oficiales matizan la contundencia de esa afirmación.

Información de Pemex indica que durante los primeros cuatro meses de este año el precio promedio de la mezcla de crudo mexicano de exportación fue de 85.4 dólares por barril –el valor de referencia empleado para elaborar el presupuesto fue 49 dólares por barril– con una venta promedio al exterior de 44.4 millones de barriles al mes.

Esto significa un ingreso de 163 mil 147 millones de pesos, 51 mil 509 millones más respecto de la estimación empleada para elaborar el Presupuesto de Egresos de la Federación 2008. Casi 37 de cada 100 pesos de gasto público tiene su origen en la actividad petrolera.

El volumen de exportación en los primeros cuatro meses de este año ha sido menor a los 50.3 millones de barriles mensuales previstos en el presupuesto, como consecuencia de la menor capacidad de producción de Cantarell, el yacimiento más importante del país, ubicado en el sureste, que aporta 80 por ciento de la producción nacional, según la Secretaría de Energía.

Pero el menor volumen ha sido compensado por un precio que prácticamente nadie en el ámbito del Congreso y el Ejecutivo –las dos instancias que participan en la elaboración del PEF– anticipó cuando se elaboró el programa de ingreso y gasto para 2008.

El costo de la gasolina en Estados Unidos es de 3.78 dólares por galón (3.8 litros); esto significa que un barril de gasolina, 159 litros, tiene un valor aproximado de 159 dólares.

“Si asumimos que el costo de importación para México de un barril de gasolina es de 159 dólares y, de acuerdo con Pemex, al mes de abril se habían importado 38 millones 64 mil barriles de ese combustible, el gasto total en importación de gasolina fue de 65 mil 19 millones de pesos. Sin embargo, a ese total se debe descontar el ingreso obtenido por Pemex por la venta de esa gasolina importada, que es colocada en el mercado nacional”, de acuerdo con un reporte emitido ayer por la secretaría de la hacienda pública del “gobierno legítimo”.

El precio promedio de las gasolinas que vende Pemex en el país es de 8 pesos por litro.

La diferencia entre los precios de importación y de venta arroja que cada barril de gasolina requiere de un subsidio neto de unos 43 dólares. De esta manera, y de acuerdo con los datos sobre importación de Pemex, el costo de traer gasolina a precio internacional y venderlo al costo fijado con fines de política económica por el gobierno federal es de 17 mil 500 millones de pesos, cifra que representa 34 por ciento de los excedentes petroleros.