Laura Poy Solano
Estudiantes de la normal rural de Tenería, estado de México, afirmaron que tras la negativa de las autoridades educativas estatales para asignar 128 plazas a egresados de ese plantel educativo, tras suscribir un acuerdo en marzo pasado, continuarán con las movilizaciones en rechazo a la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE) y en repudio al proceso de privatización del sector educativo.
En tanto, normalistas de Oaxaca y Aguascalientes denunciaron que las condiciones de los internados y comedores de las normales rurales es “cada vez más precario, debido a que en nuestros estados la propuesta es crear centros regionales de formación docente, por lo que ahora pretenden desaparecer los internados, sin los cuales cientos de estudiantes no podrán permanecer en los planteles”.
A su vez, integrantes de la Federación de Estudiantes Campesinos y Socialistas de México (FECSM) –que agrupa a alumnos de 16 normales rurales del país–, aseguraron que en muchas entidades “nos estamos movilizando no sólo por el derecho a tener una fuente de empleo, también porque con la ACE vislumbramos un futuro desalentador para la escuela pública, y en particular para las comunidades rurales marginadas”.
En tanto, estudiantes de la normal de Cañada Honda, en Aguascalientes, y Tamazulapan, Oaxaca, afirmaron que la beca alimenticia para más de 450 alumnas en cada plantel, “no supera los 45 pesos diarios, y muchas veces ni siquiera llegan los recursos”.
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