Bajo el calderonismo peligran las libertades de prensa

Alvaro Cepeda Neri

Conjeturas

En casi dos años del sexenio calderonista se han cometido homicidios y desapariciones de reporteros, y la Fiscalía de Delitos contra Periodistas ha sido un invitado de palo ya que todas las denuncias permanecen en abultados expedientes y no se consignan ante los tribunales penales, pues los presuntos responsables son funcionarios a los que la PGR protege para que la impunidad siga reinando.Así que esa Fiscalía debe suprimirse y echar a la calle a sus empleados, a los que no estaría mal que se les fincara responsabilidades por las complicidades al no ejercer la acción penal con la cantaleta de pedir y pedir y pedir más pruebas, mientras la obligación de investigar del Ministerio Público Federal permanece inédita.Entre otros medios a los que ministerios públicos del fuero común y federal sí han recurrido ante los jueces, para darles rápido trámite cuando los demandantes son hombres de poder económico, está el caso de la revista de circulación nacional Contralínea, que dirige Miguel Badillo, y que cuenta con publicaciones mensuales de Contralínea-Sonora, de Veracruz, Oaxaca, Baja California, Puebla, Zacatecas, Tamaulipas, etc.Con su periodismo de investigación ha puesto a disposición de la opinión pública del país informaciones sobre los contratos de políticos calderonistas con PEMEX y contratistas de esta paraestatal con el Grupo Zeta. Con documentación, entrevistas y datos obtenidos con veracidad y contrastados, Contralínea ha publicado las gestiones de Oceanografía por medio del tráfico de influencias.Una detallada queja ante la CNDH (ya que es por demás hacer denuncias ante la PGR que está al servicio del abuso del poder, encubriendo a gobernadores, como Bours y Ulises Ruiz, por ejemplo) pone el acento en cómo los funcionarios judiciales, de la PGR a los tribunales, se han empeñado en ponerse a tono con la conducta calderonista de atacar a las libertades de información y de crítica.En un desplegado suscrito por los sindicatos de La Jornada, Radio Educación, NOTIMEX y de Redactores de prensa (publicado en La Jornada: 3/XI/08) aparecen los apoyos para Contralínea ante el ataque judicial al ejercicio de las libertades de prensa, con lo que se busca implantar inquisiciones judiciales para poner en marcha la censura.Durante el foxismo esas libertades de prensa, cons-ti-tu-cio-na-les, sufrieron toda clase de embestidas y baños de sangre con represiones. Y ahora bajo el calderonismo están en mayor peligro. Es una campaña desde la Fiscalía de la PGR, ya que en lugar de atender las denuncias, se la han pasado en la negligencia para no proceder contra los presuntos responsables.Ahora está en la mira Contralínea por ejercer la máxima libertad de información. El calderonismo de la PGR y la interpretación de abuso del poder de los funcionarios judiciales, han puesto en peligro las libertades constitucionales de libre expresión y de publicar escritos sobre cualquier materia.
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