Nuevo golpe a la economía de los más desprotegidos

Carlos Fernández-Vega

Por segundo año consecutivo, en 2008 la “continuidad” intenta cancelar los dineros presupuestales destinados al Programa de Adquisición de Leche Nacional a cargo de Liconsa, y con ello asestar un nuevo golpe a la economía de los más desprotegidos, porque de concretarse tal disposición el aumento al precio de este producto sería automático. De hecho, el gobierno calderonista ya hace lo conducente para que tal incremento fluctúe entre 25 y 37.5 por ciento, a partir de enero próximo.

Según avanza la revisión del presupuesto calderonista para el ejercicio 2008, más surgen incongruencias entre el discurso oficial “para que vivamos mejor” y las acciones de gobierno. Una de ellas es, precisamente, en contra del abasto de leche popular subsidiada. De hecho, en días pasados el director de Liconsa, Jesús Galván Muñoz, reconoció que formalizará la petición para incrementar el precio de tal producto y llevarlo de los 4 pesos actuales a no menos de 5 pesos por litro el próximo año (25 por ciento de aumento), aunque la intención es que “si en el mercado el litro de leche cuesta 11 pesos, nosotros estamos pidiendo que el litro que expende Liconsa al menos cueste 50 por ciento del valor comercial” (37.5 por ciento de incremento); “hay que liberar el precio de la leche que expendemos, para apegarse más a los precios de mercado… que el incremento no corresponda a la inflación, sino al precio al que venden las compañías privadas”.

Ya es campaña, porque en la última quincena del “cambio” foxista, la segunda de noviembre de 2006, el gobierno federal (saliente y entrante) aumentó 28.5 por ciento el precio de la leche Liconsa (de 3.5 a 4.5 pesos), pero los diputados “corrigieron” la medida, limitándola a “sólo” 14.3 por ciento (de 3.5 a 4 pesos). En el presupuesto 2007, la partida presupuestal destinada al Programa de Adquisición de Leche Nacional a cargo de Liconsa apareció en ceros, aunque finalmente los legisladores enmendaron la plana y le inyectaron 350 millones. Para el ejercicio 2008, la “continuidad” insiste, y tal partida de nueva cuenta aparece en ceros.

De concretarse tal medida, cerca de 3 millones de familias de escasos recursos corren el riesgo de quedarse sin leche subsidiada, a menos que hagan frente a un aumento de precio de 25 a 37.5 por ciento. Y lo tendrían que hacer en enero próximo, cuando entra en vigor el impuesto “especial” a la gasolina y junto a él la segunda temporada de reetiquetación generalizada de precios, especialmente los de la canasta básica.

Pero no sólo disminuirán los dineros destinados al multicitado programa de adquisición. De acuerdo con un análisis de la Cámara de Diputados, en el proyecto de presupuesto de egresos de la federación 2008 se proponen 38 mil 273 millones de pesos para el Programa Oportunidades, incluyendo para el caso de la Sedeso todos los rubros operados por la Coordinación Nacional del Programa, aún los de carácter administrativo, de tal suerte que la asignación total propuesta para el programa “estrella” registra una diferencia absoluta de 4 mil 813.9 millones de pesos con respecto al año anterior, originando una variación real negativa de 6.6 por ciento.

Si lo anterior fuera poco, la propuesta presupuestal 2008 para la Sedeso resulta poco más de mil millones de pesos inferior a la de 2007, y en este sentido la Cámara de Diputados precisa que dicha propuesta deriva en una variación real negativa de 5.9 por ciento.

El decremento presupuestal de la Sedeso, resalta el análisis legislativo, es inducida básicamente por el comportamiento de los Programas Sujetos a Reglas de Operación sectorizados en el ramo, que significan el 91.7 por ciento del presupuesto de la dependencia y tienen una caída de 5.5 por ciento, derivada del comportamiento negativo de los siguientes programas: Vivienda Rural, 90.5 por ciento; Hábitat, 16.7; Abasto Rural a cargo de Diconsa, 14.5; Ahorro, Subsidio y Crédito para la Vivienda “Tu Casa”, 9.1; Apoyo Alimentario, 7.2; Atención a Adultos Mayores de 70 años y más en Zonas Rurales, 6.2 por ciento, y de Apoyo a las Instancias de Mujeres en las Entidades Federativas para Implementar y Ejecutar Programas de Prevención de la Violencia Contra las Mujeres, 3.4. Además, los programas Opciones Productivas, Jóvenes por México y el citado de Adquisición de Leche Nacional a cargo de Liconsa no tienen asignación presupuestal para 2008.

Por lo que toca a las unidades responsables de la Secretaría de Desarrollo Social (71 en 2007), el análisis legislativo precisa que únicamente 11 reducen su presupuesto con respecto al aprobado para el presente año. Sin embargo, el conjunto de Unidades Responsables que tienen decrementos representan el 78 por ciento del total de la dependencia, destacando la Coordinación Nacional del Programa de Desarrollo Humano Oportunidades que participa con el 46.38 por ciento del presupuesto y tiene un decremento real de 11. 9 por ciento; la Dirección General de Atención a Grupos Prioritarios que significa el 17.63 por ciento del presupuesto y tiene una baja de 20.3 por ciento real, y la Unidad de Programas de Atención de la Pobreza Urbana que aporta el 4.25 por ciento al presupuesto total y tiene una variación negativa de 46.7 por ciento.

Las rebanadas del pastel

Sólo para cándidos: Vicente Fox asegura ser “absolutamente honesto y transparente con mis bienes y mis finanzas; he trabajado y trabajaré siempre con total y absoluta honestidad”. Seis años atrás también aseguró que generaría un millón 350 mil empleos por año, que la economía crecería 7 por ciento anualmente, que acabaría con las tepocatas, que cambiaría las cosas, que “para los grandes corruptos no habrá borrón y cuenta nueva”, que “nunca usaré el cargo público para ganancia personal”, y que, en fin, era un hombre inteligente. Y ya ven...

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