Teoría conspirativa
Uno de los personeros del establishment norteamericano, Paul Wolfowitz, anteriormente en la élite del Pentágono y luego premiado nada menos que con la jefatura del Banco Mundial ( ya fue "sacrificado a los Dioses" probablemente no por ser corrupto sino por también parecerlo, luego del escándalo en relación con el sueldo de su "amada"), tuvo el cinismo de decir que la guerra contra Irak se hizo porque se podía hacer (era loable). Todas las razones para invadir a Irak están siendo cuestionadas porque se consideran fabricadas y falsas. El contribuyente norteamericano ha sido desangrado por el alto costo de la aventura iraquí pero en algo no hay dudas: ciertos miembros del establishment han hecho un gran negocio, una operación que les ha reportado ganancias por miles de millones de dollares.
Para el analista menos astuto resulta fácil comprender que si Irak era un peligro para alguien debia serlo en primer lugar para sus vecinos inmediatos (Israel, Arabia Saudita, etc). Solo al final del orden de prioridades podría aparecer Estados Unidos entre los amenazados, pero primero era preciso que sucumbiera Israel, Arabia Saudita, etc.
Descartadas la vocación libertaria de Bush y la amenaza a Estados Unidos solo quedan dos posibilidades importantes. Bush lo hizo motivado por los negocios e intereses del establishment al que parece atado, al igual que su padre, o para proveerle carne de cañón a los israelies, kuwaities y sauditas en función de protegerlos, a costas de las vidas de norteamericanos y del dinero de nuestros contribuyentes. Esta tesis se explicaría de acuerdo con el criterio de que el público norteamericano es manipulable y se le puede llevar a respaldar una guerra con facilidad debido al control que tiene el establishment sobre los medios de difusión masiva...
... Desde hace mucho tiempo se habla de la existencia de un plan secreto por medio del cual obscuros intereses pretenden el control total del mundo. Una de las tesis más divulgadas se refiere al gradualismo, también denominado socialismo fabiano. Se dice que el romano Fabio, durante las guerras púnicas, utilizó la táctica de enfrentamiento irregular para vencer a los cartagineses. El socialismo fabiano sería entonces un método de actuar por parte de las oligarquías europea y norteamericana, esta última subsidiaria de la primera de acuerdo con algunos analistas, que pretenden gradualmente y desde arriba el control y esclavización de la sociedad.
Es recomendable ser cuidadosos, frios y racionales en el estudio de estas teorías de modo que podamos lograr un encuentro lo más cercano posible con la realidad y la verdad, y así evitar servirle de tontos útiles a alguna agenda oculta como consecuencia de que nos hayan tomado desprevenidos.
Resulta necesario investigar la tesis del fabianismo y las demás teorías conspirativas con la racionalidad y la profundidad adecuadas para poder descubrir su verdadera naturaleza. Se debe observar y analizar con ojo sumamente crítico las agendas de organizaciones tales como el Consejo de Relaciones Exteriores (CFR por sus siglas en inglés) y la Sociedad John Birch, en apariencia severamente contrapuestas, para sacar de estas friamente los indicios que nos conduzcan al conocimiento más preciso de su verdadera naturaleza.
Al mismo tiempo la Sociedad John Birch, que tiene como meta declarada luchar contra los designios del CFR, ha sido acusada de ser sospechosamente muy poco efectiva para neutralizar al CFR y se le ha cuestionado su legitimidad. Se dice que dicha sociedad es un frente encubierto de los Rockefeller (principales capos del CFR). Algo similar a lo que han hecho con los partidos demócrata y republicano en Estados Unidos para controlar tanto al gobierno como a la oposición.
Quienes cuestionan la legitimidad de la Sociedad John Birch se basan en que supuestamente el creador de la entidad, Robert Welch, un alegado masón grado 32, fue ayudado por los Rockefeller para que fundara la institución, y que en esa perspectiva le compraron su negocio de caramelos a muy buen precio para que este dispusiera de tiempo y recursos suficientes en función de dedicarse por completo a la actividad.
Se dice que la familia Rothchild y empresas privadas semisecretas manejadas por los Rockefeller, Oppenheimer, Schiff, Morgan, Warburg, Lazard, Schroder, etc, controlan la Reserva Federal de Estados Unidos y la emisión de circulante en violación de la constitución. Se alega además que la actuación torcida de los banqueros internacionales llevó al presidente Andrew Jackson a sacarlos del sistema en 1832.
También se dice que los presidentes Abraham Lincoln primero y John F. Kennedy casi cien años después fueron asesinados por oponerse a la actuación de los banqueros internacionales. Se especula además que la muerte de varios miembros del clan Rockefeller se debió a un enfrentamiento con la familia Rothchild por el control del mundo en el cual prevaleció esta útima. De ahí la tesis de que el establishment norteamericano, que según algunos fue financiado originalmente por testaferros de los Rothchild, es subsidiario del europeo.
Se sospecha que Paul Wolfowitz debe reunir características muy especiales y estar conectado a fuerzas muy importantes, para que haya podido insertarse en los círculos de decisión del Pentágono, fuera uno de los principales instigadores de la guerra contra Irak, luego haya saltado a la jefatura nada menos que del Banco Mundial e invitado a participar en la reunión anual del 2005 de los Bilderberg. Resulta curiosa la relación del Pentágono y del Banco Mundial y su intercambio de profesionales.
Se alega que, entre muchos otros, personajes como David Rockefeller, Henry Kissinger, William Clinton, George Herbert Bush, Zbigniew Brzezinki, Dwight D. Eisenhower, Richard Nixon, James Carter, Walter Mondale, Gerald Ford, Nelson Rockefeller, Lord Carrington, etc, han estado conectados con la conspiración para el dominio y control del mundo liderada por la familia Rothchild.
También se habla de una conspiración para copar los más altos grados de las fraternidades masónicas y de los "iluminados" (illuminati) por parte del fundador de la dinastia Rothchild alrededor del año 1770, usando un supuesto testaferro, Adam Weisshaupt, estudiante del filósofo Mendelsohn, con el fin de obtener el control del mundo.
Se sospecha un propósito obscuro en los objetivos reales de organizaciones como la Mesa Redonda (The Round Table) alegadamente creada en 1891 con el respaldo financiero de los Rothchild y los Rockefeller, el Real Instituto de Asuntos Internacionales (RIIA por sus siglas en inglés), el Consejo de Relaciones Exteriores, el Grupo Bilderberg, la Comisión Trilateral, la Sociedad Calavera y Huesos (Skull and Bones) a la que alegadamente pertenecen el presidente George W. Bush y John Kerry, etc.
Se dice que las organizaciones más arriba mencionadas ejercen un control absoluto de los principales medios de difusión masiva, así como también sobre el sistema de educación con prioridad en las más importantes y prestigiosas universidades.
No se puede imaginar algo más infame que sancionar a todo un pueblo por la actuación de su gobierno, pero de quienes manejan el establishment norteamericano se puede esperar cualquier cosa, luego de conocerse las alegaciones de que fueron quienes financiaron la instalación de la dictadura soviética en Rusia y hasta el nazismo en sus comienzos. Se dice que precisamente un error de cálculo de algunos magnates respecto a Hitler produjo muchas bajas en el pobre pueblo llano judio, que no tuvo los recursos de la élite para escapar a tiempo.
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